Revista Electronica de PortalesMedicos.com - https://www.portalesmedicos.com/publicaciones
La intoxicacion etilica aguda. Una urgencia a la orden del dia
https://www.portalesmedicos.com/publicaciones/articles/1624/1/La-intoxicacion-etilica-aguda-Una-urgencia-a-la-orden-del-dia.html
Autor: Montserrat Prado Rodríguez-Barbero
Publicado: 17/08/2009
 

En la actualidad no sólo el consumo de alcohol, sino que también su abuso, es una práctica que cada vez está siendo más utilizada en la sociedad. Esto provoca que sus efectos se dejen notar no sólo en el individuo, sino también en los casos que son atendidos en urgencias. Por ello, mediante este artículo quiero dar a entender la importancia del saber cómo actuar ante una situación de intoxicación etílica, ya que aunque a simple vista el paciente solo puede tener una “borrachera” en ocasiones puede desencadenarse en algo mucho más grave ante lo cual hay que saber cómo actuar.


La intoxicacion etilica aguda. Una urgencia a la orden del dia.1

La intoxicación etílica aguda: una urgencia a la orden del día.

 

Montserrat Prado Rodríguez-Barbero. D.U.E. del servicio de Cirugía Vascular y Neurocirugía del Hospital General de Ciudad Real.

 

 

Resumen

 

En la actualidad no sólo el consumo de alcohol, sino que también su abuso, es una práctica que cada vez está siendo más utilizada en la sociedad. Esto provoca que sus efectos se dejen notar no sólo en el individuo, sino también en los casos que son atendidos en urgencias. Por ello, mediante este artículo quiero dar a entender la importancia del saber cómo actuar ante una situación de intoxicación etílica, ya que aunque a simple vista el paciente solo puede tener una “borrachera” en ocasiones puede desencadenarse en algo mucho más grave ante lo cual hay que saber cómo actuar.

 

Summary

 

At present not only the consumption of alcohol, but also his abuse, it is a practice that every time is being more used in the society. This provokes that his effects leave themselves to notice not only in the individual, but also in the cases that they are attended in urgencies. For it, by means of this article I want to give to understand the importance of to be able act like before a situation of poisoning etílica, since though to simple sight the alone patient can have a "drunkenness" in occasions it can free in something much more seriously before which it is necessary to be able act like.

           

Palabras clave: Alcohol, intoxicación, urgencia, efectos, tratamiento.

 

Key words: Alcohol, poisoning, urgency, effects, treatment.

 

 

Introducción.

 

En la actualidad el alcohol es un problema patente en la sociedad, pero a veces es dejado en un segundo plano a la hora de enfrentarse al uso de las drogas ilegales, ya que el consumo de alcohol es un consumo que está regulado por las autoridades y que en principio no debería de causar ningún problema siempre que se sea consciente de la forma y cantidades en las que se realiza este consumo evitando así a encontrarnos con verdaderas urgencias y emergencias sanitarias ocasionadas por los efectos que el alcohol puede causar en el organismo como es el caso de la intoxicaciones etílicas agudas.

 

Epidemiologia

 

El consumo de bebidas alcohólicas es un problema de cierta relevancia en España, ya que según estudios recientes, los individuos que ya son alcohólicos lo siguen siendo y aquellos que no lo son se inician cada vez con una edad más temprana oscilando entre los 13-14 años a pesar de que la ley les prohíba dicho consumo. Esto hace que España se encuentre dentro del grupo de cabeza de los países con mayor consumo de alcohol.

 

Todas estas cifras no afectan únicamente a nivel social, sino que también influyen a nivel sanitario, ya que diferentes estudios, corroboran que cerca del 37% de las urgencias generales atendidas están relacionadas con la ingesta excesiva de alcohol etílico, constituyendo así la primera causa de urgencia toxicológica.

 

Fisiopatología

 

El alcohol etílico o etanol, es una molécula pequeña que atraviesa con facilidad las membranas biológicas, como la hematoencefálica y la placentaria. Esta capacidad le permite ser absorbida sobre todo a nivel intestinal y hepático, siendo este último lugar, el lugar donde se metaboliza.

 

A dosis bajas y de manera esporádica, sus efectos se revierten con facilidad y rapidez. Ahora bien, el problema surge cuando su consumo es excesivo en cantidad y corto en el tiempo, lo cual ocasiona graves alteraciones como: en el tubo digestivo provoca alteraciones en su movilidad originando gastritis, diarreas, etc.., a nivel cardiovascular da lugar a la aparición de arritmias cardiacas, el sistema nervioso central (SNC) se encuentra deprimido por sus efectos, el hígado también se puede encontrar afectado ya que es lugar importante de paso provocando cirrosis hepáticas que puede provocar entre otros la aparición de varices esofágicas.

 

Clínica.

 

En primer lugar debemos asegurarnos de que el paciente ha sufrido una intoxicación etílica la cual le produce una serie de síntomas, ya que existen ciertas señales que son comunes a otras enfermedades, como puede ser la aparición de somnolencia por el exceso de alcohol, por hipoglucemias o por algún traumatismo cráneo-encefálico (TCE).

 

Las manifestaciones clínicas cambiarán dependiendo de dos variantes: el nivel de alcohol en sangre y la asiduidad del paciente a ingerir alcohol, así nos podremos encontrar con dos tipos de bebedores, los esporádicos y los crónicos:

 

Bebedor esporádico:

 

Tasa de alcohol en sangre mg/dl – Síntomas

 

50 / 100            Incoordinación, euforia, verborrea

100 / 200          Disartria, ataxia, visión doble, somnolencia

200 / 300          Letargia, agresividad, lenguaje incoherente

300 / 400          Coma (Glasgow < 8)

> 500               Depresión respiratoria, muerte.

 

Bebedor crónico:

 

Tasa de alcohol en sangre mg/dl - Síntomas

 

50 / 100            Poco efecto

100 / 200          Incoordinación, euforia

200 / 300          Alteraciones motoras y emocionales

300 / 400          Somnolencia

> 500               Letargia, estupor, coma

 

Además de estos síntomas debemos tener en cuenta que pueden aparecer complicaciones derivadas del exceso de alcohol en sangre que tenga el paciente, para las cuales debemos estar preparados como pueden ser: hipoglucemias, arritmias cardiacas, aspiración broncopulmonar debido al bajo nivel de conciencia, convulsiones derivadas de la intoxicación aguda o debidas a otra enfermedad cuyos fármacos hayan interaccionado con el alcohol, etc.


La intoxicacion etilica aguda. Una urgencia a la orden del dia.2

Exploraciones a realizar

           

Si la intoxicación ha sido leve, no es necesaria efectuar ninguna medida terapéutica ni prueba diagnóstica concreta, pero si es conveniente vigilar al paciente hasta que los niveles de alcohol en sangre disminuyan y así poder comprobar que su evolución es correcta.

 

Si la intoxicación es moderada o severa realizaremos las siguientes pruebas:

 

  • Glucemia capilar, para descartar la existencia de hipoglucemia, ya que al metabolizarse el alcohol en el organismo se consume la glucosa en él existente llegando a niveles por debajo del normal.

  • Extracción de una analítica completa: hemograma (detectar alteraciones de algún órgano), coagulación (ver la existencia de infección y afectación hepática), bioquímica (comprobar la glucosa, los iones y la función renal)
  • Niveles de alcohol en sangre, si nos los puede proporcionar el laboratorio o remitir una muestra a toxicología si se sospecha del consumo de cualquier otra droga.
  • Gasometría arterial basal: para comprobar la función respiratoria y el equilibrio ácido-base.
  • ECG, para tener controladas las posibles arritmias que puedan aparecer.
  • Radiografía de tórax, lo cual nos permitirá ver si existe algún tipo de infección o alguna aspiración.
  • TAC craneal, suele estar indicado cuando hay signos de traumatismo cráneo-encefálico y los síntomas difieren del cuadro que se suele dar de manera habitual.

 

Tratamiento

 

La intoxicación aguda constituye una urgencia médica que hay que atender con rapidez ya que puede desencadenarse en un final fatal. Por ello para acelerar su tratamiento se deberán de aplicar una serie de medidas terapéuticas previas al mismo tiempo que se va realizando el diagnóstico y así a posteriori realizar las pruebas diagnósticas pertinentes.

 

Al considerarse esta patología, una patología de urgencias, se aplicarán las medidas estandarizadas para cualquier urgencia que nos podamos encontrar: evaluar el A,B,C, D del paciente.

 

  1. Apertura de la vía aérea. Si el paciente está consciente aumentaremos el aporte de oxigeno, si está semiconsciente debemos asegurarnos de que la vía aérea está siempre abierta con un Guedel y aportando oxigeno y si el paciente está inconsciente (Glasgow < 8), con alteraciones del patrón respiratorio o con acumulo de secreciones, se procederá a su intubación.
  2. Ventilación. Se vigilará como se produce el intercambio gaseoso. Si el paciente está semiconsciente se podrá realizar un aporte con presión positiva no mecánico, pero si está inconsciente, se hará mecánico (el respirador). Es muy importante que el paciente esté colocado en la posición de seguridad (decúbito lateral derecho) ya que esto evita las posibles aspiraciones que pueda tener con su vomito.
  3. Circulación. Valorar la frecuencia cardiaca (FC), tensión arterial (TA) y si fuese posible presión venosa central (PVC). Se canalizarán dos vías periféricas de amplio calibre nº 18 (si no fuese posible, mínimo una). Se realizará la monitorización cardiaca y respiratoria del paciente y se controlará su nivel de conciencia (escala de Glasgow) cada cinco minutos aproximadamente. Si el paciente entrase en parada, se procedería a realizar las maniobras de reanimación cardio-pulmonar (RCP).
  4. Drogas. Por norma general el vaciado gástrico sólo se utilizará en aquellos casos en los que se sospeche que el alcohol haya sido mezclado con otras drogas ingeridas por vía oral o bien cuando la ingesta de alcohol haya sido muy reciente y se intente disminuir su absorción. Si durante su realización el paciente está estuporoso o comatoso, se deberá de intubar para proteger la vía aérea del paciente y evitar aspiraciones. Dicho vaciado se podrá realizar:

 

  • Provocando la emesis forzada con jarabe de ipecacuana
  • Mediante la colocación de una sonda nasogástrica adecuada, a través de la cual se realizará el lavado gástrico.
  • Administración de carbón activado, de 60-100 gramos, que se disolverá en un cuarto de litro de agua y será ingerido por el paciente.

 

Se administran una ampolla (100 mg) de Tiamina (vitamina B1, Benerva ®) por vía intravenosa o intramuscular y otra de 300 mg de Piridoxina (vitamina B6, Benadon ®) por vía intravenosa.

 

Si sospechamos de la mezcla por parte del paciente del alcohol con otras sustancias como: benzodiacepinas u opiáceos se administrará su antídoto correspondiente, Flumacenil (Anexate ©) y Naloxona respectivamente.

Al paciente durante el proceso se le administrarán sueros glucosados al 5% para evitar las posibles hipoglucemias que puedan aparecer y se alternarán con algún suero fisiológico para evitar el desequilibrio electrolítico.

 

El paciente estará ubicado siempre en un ambiente tranquilo pero vigilado y si fuera necesario debido a que su estado de agitación fuese elevado, se le puede administrar de manera intravenosa o intramuscular una ampolla de Haloperidol (5mg),aunque otros autores prefieren la Tiaprida (Tiaprizal ©) o alguna benzodiacepina (siempre que el paciente no haya tomado alguna) como el Diacepan © que provocarán su relajación.

 

 

Bibliografía.

 

  1. Schucit M, Segal D.S. Alcohol y alcoholismo. En: Fauci AS, Braunwald E, Isselbacher KJ, Wilson JD, Martin JB, Kasper DL, Hauser SL, Longo DL, editores. Harrison. Principios de Medicina Interna. 14ª Ed. Madrid. Mac Graw Hill-Interamericana; 1998. p. 2853-56.
  2. Martos R. Urgencias por intoxicaciones: atención sanitaria. Editorial Alcalá; 2001. p. 106-114.
  3. Aranza J.R. Guía práctica de psicofármacos, opiáceos y drogas de abuso. 2ª edición. Madrid. Ed. Roche. 1995.
  4. Garrido J.M. Urgencias y emergencia para personal sanitario. Editorial Logoss; 2000. p 627-659
  5. Jiménez- Murillo L, Montero F J. Compendio de medicina de urgencias: guía terapéutica. 2ª edición. 2005 p 456-458.