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Las pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida
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Autor: MSc. Julia Rengifo
Publicado: 28/01/2010
 

El presente estudio está enmarcado en la línea de investigación, Estilos de Vida y Control de Riesgo para la Salud, de la Maestría en Enfermería Gerontológica y Geriátrica tomando en cuenta la estructura social que condiciona la salud del adulto mayor en la comunidad. El mismo tiene como objetivo determinar la Relación que existe entre las Pérdidas den el Adulto Mayor y su Calidad de Vida. El diseño de la investigación es de tipo descriptivo, de corte, correlacional, con una población de 90 adultos mayores de 65 años y más que se encuentran en la Casa del Abuelo, ubicado en la comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña, Municipio Valencia.


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Las pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida.

 

MSc. Julia Rengifo, Prof. Elda Henríquez

 

Julia Rengifo, Licenciada en Enfermería, Magíster en Enfermería en Gerontología y Gerontología. Docente Agregada. Adscrita al Departamento de Salud Integral del Adulto de la Universidad de Carabobo, Venezuela

 

Elda Henríquez, Licenciada en Enfermería, Magister en Enfermería en Gerontología y Gerontología. Docente Asociado. Adscrita al Departamento de Salud Integral del Adulto de la Universidad de Carabobo, Venezuela

 

Resumen

 

El presente estudio está enmarcado en la línea de investigación, Estilos de Vida y Control de Riesgo para la Salud, de la Maestría en Enfermería Gerontológica y Geriátrica tomando en cuenta la estructura social que condiciona la salud del adulto mayor en la comunidad. El mismo tiene como objetivo determinar la Relación que existe entre las Pérdidas den el Adulto Mayor y su Calidad de Vida. El diseño de la investigación es de tipo descriptivo, de corte, correlacional, con una población de 90 adultos mayores de 65 años y más que se encuentran en la Casa del Abuelo, ubicado en la comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña, Municipio Valencia.

 

La muestra estuvo conformada por 45 adultos mayores que representó el 50 % de la población en estudio, la información se recopiló por medio de un instrumento tipo cuestionario estimado en tres partes; la primera referente a los datos demográficos del Adulto Mayor, la segunda parte contiene un cuestionario con 18 ítems, según la variables perdidas en el Adulto Mayor, y la tercera parte consta de 15 ítems referido a la variable calidad de vida, aplicando la escala de medición tipo lickert. La confiabilidad del instrumento se obtuvo mediante la revisión del asesor estadístico y metodológico, se aplicó prueba piloto a un grupo de Adultos Mayores que poseían las mismas característica de los elementos muéstrales. El análisis estadístico arrojó una confiabilidad de 0.84 para la variable 1 y 0.82. para la variable II, El análisis estadístico de los datos se hizo mediante la aplicación de porcentajes y el coeficiente de correlación de Pearson. La Hipótesis General correspondiente a las variables Perdidas del Adulto Mayor  y la Calidad de Vida  del adulto mayor, de acuerdo con los resultados obtenidos muestran que no existe una relación estadísticamente significativa entre las variables con un valor de -0,027, de acuerdo a las respuestas dadas por los Adultos Mayores  encuestados en la Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo

 

Palabras Clave: Adulto mayor, calidad de vida, perdidas físicas y sociales.

 

Losses in the elderly and the quality of life

 

Julia Msc Rengifo, Prof. Elda Henriquez

 

Julia Rengifo, BA in Nursing, Masters in Gerontology and Gerontological Nursing. Teaching Aggregate. Attached to the Department of Integrated Adult Health at the University of Carabobo, Venezuela

 

Elda Henriquez, BA in Nursing, Master of Gerontology and Gerontological Nursing. Associate Professor. Attached to the Department of Integrated Adult Health at the University of Carabobo, Venezuela.

 

Abstract

 

This study is framed in the line of research, Lifestyle and Risk Management for Health, the Master of Gerontological Nursing and Geriatric taking into account the social structure that affects the health of the elderly in the community. The same is to determine the relationship between the loss den the Aged and Quality of Life. The research design is descriptive, cutting, correlational, with a population of 90 adults age 65 and older who are at Casa del Abuelo, located in the community José Gregorio Hernández, Miguel Peña, County Valencia. The sample consisted of 45 older adults who represented 50% of the population under study, information was collected through a questionnaire type instrument estimated in three parts: the first regarding the demographics of the Elderly, the second part contains a questionnaire with 18 items, depending on the variables lost in the Elderly, and the third part consists of 15 items referring to the variable quality of life, measuring the scale of Lickert. The reliability of the instrument was obtained by reviewing the statistical and methodological consultant, pilot test was applied to a group of older adults with the same characteristics of the sample elements. Statistical analysis yielded a reliability of 0.84 for the variable I and 0.82. for variable II, Statistical analysis of data using percentages and applying the Pearson correlation coefficient. The general hypothesis for the missing variable for the Elderly and the quality of life of older people, according to the results show that there is no statistically significant relationship between variables with a value of -0.027, according to the responses Aging by respondents in the house of his grandfather. Community José Gregorio Hernández. Valencia. Carabobo State

 

Keywords: Elderly, quality of life, physical and social losses.

 

Introducción

 

Todo ser humano al venir al mundo, ya es partícipe de afrontar el reto de la vida, muchos logran afrontarla con éxitos otros no, algunos llegan a los días dorados de la vida: la vejez, otros no, y así ha sido y será el devenir de todos los seres humanos.

 

De esta manera envejecer debería ser considerada una de las etapas más importantes del ser humano, pero cuanto ella resume la experiencia acumulada del individuo y su formación integral de ser humano, la parte de significar un hecho memorable, la vejez juega un rol importante dentro de la sociedad, y allí es justo mencionar la importancia de la gerontología social, la cual trata todos y cada uno de los fenómenos humanos asociados al hecho de envejecer, proceso inherente a todo ser humano, que cumple con normalidad su ciclo de vida, el cual conlleva muchos cambios en el funcionamiento psicosocial, duelo, depresión, ansiedad, cambios de conducta, pérdida de movilidad, pérdida de intimidad e incluso suicidio son con frecuencia el resultado de estos cambios. Aunque la vejez, es el resultado del desarrollo propio del individuo, en el mundo y muy especialmente América Latina; se contempla como una realidad que afecta solo a una parte minoritaria de la población, de hecho, los adultos mayores se configuran como una categoría independiente del resto de la sociedad, separados como grupo con características propias; aunque resulta obvio que éstos compartan características comunes, lo que supone curiosamente, que esta diferenciación promueva una separación del resto de la sociedad que la experimentada por otros grupos sociales: niños, adultos, trabajadores de la industria o servicios, entre otros.

 

Por consiguiente, es fundamental abordar cuidadosamente todas aquellas teorías relacionadas al aspecto gerontológico, que permitan de manera inmediata y futura atender la calidad de vida y los problemas de salud de los adultos mayores, para alcanzar mejores resultados, en este aspecto tan relevante de la vida misma. En esta dirección ha de considerarse que calidad de vida es interdependiente a diversos eventos personales y sociales.

 

Teniendo muy en cuenta, que el envejecimiento individual es un proceso de cambio permanente que equivale a vivir cada día más tiempo e implica la presencia ininterrumpida de ganancias y de pérdidas y es esta experiencia humana una de las dimensiones más observadas durante la vejez y como tal puede guardar relación estrecha con la calidad de vida, entendida como percepción personal de bienestar.

 

De allí pues que esta calidad de vida, incluye obviamente la salud, la cual como es sabido por el paso del tiempo, disminuye la capacidad integral del individuo y produce cambios importantes en el estilo de vida del mismo, y por ende de quienes lo rodean, provocando muchas veces el abandono de sus familiares o una ubicación familiar muy distante de lo que antes era, siendo esto muy visible en los momentos donde el adulto mayor se ve aquejado por alguna deficiencia, malestar o enfermedad.

De esta manera la vejez es la fase final de este proceso que depende de múltiples condiciones genéticas y ambientales y está relacionado con el contexto histórico, político, económico y socioculturales así como aspectos personales y familiares, al respecto, el Centro de Psicología Gerontológica CEPSIGER (2004), refiere: La población mundial alcanzará los 9.100 millones de habitantes en el año 2050, cifra que comparada con las actuales 6.500 millones de habitantes lo que representa un crecimiento más alto de lo previsto,(pág. 18) Así lo informa un estudio elaborado por la división de Población del Departamento de Asuntos Sociales y Económicos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU-DESA) (2006). Así mismo indica que el envejecimiento es otra causa del crecimiento de la población mundial. La esperanza de vida aumentará, será de 77 años, once años más que actualmente.


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En los países en desarrollo, el número de personas de más de 61 años pasará a representar el 33 por ciento de la población, en contraste con el 20 por ciento actual. De acuerdo a estos indicadores, en los años venideros se producirá un incremento sostenido de la población mayor, como consecuencias del progreso de la medicina, los avances científicos y la tecnología.

 

Cabe destacar, que el envejecimiento de la población se determina por la edad mediana y la esperanza de vida que rodea a todo individuo que nace; y este proceso va en aumento cada vez mayor dentro de las distintas sociedades mundiales, en primer lugar por las tasas de fecundidad y en segundo lugar por las tasas de mortalidad.

 

Así mismo, es importante señalar que en América Latina, incluyendo el Caribe, esa población específica, y de acuerdo a la Población del Departamento de Asuntos Sociales y Económicos para la América Latina, perteneciente a la Organización de las Naciones Unidas (ONU-DESA) (2006), pasará de 42,4 millones (7,9%) en el 2000; a 96,9 millones (12,8%) para el año 2025, notándose, de este modo, un incremento en el número de pobladores mayores de 60 años o más.

 

En Venezuela, para el año 2006, y de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) (2006), “existe una población estimada de 1.390.239 adultos mayores”. (p. 262-263). Mientras que en el estado Carabobo según datos ofrecidos por la Guía del Estado Carabobo (2006), tenemos una población estimada de 116.644 adultos mayores, y en el Municipio Miguel Peña se tiene una población aproximada de 28.300 adultos mayores. Es importante destacar que se conoce que entre las primeras cuatro causas de muerte de los adultos mayores se encuentran: enfermedades del corazón, cáncer, diabetes, y enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, según informe de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud, (DEMS) (2006).

 

Tenemos pues que este perfil de mortalidad visto anteriormente, refleja que en cuanto a la salud los adultos mayores se enfrentan a períodos crónicos que implican éstas enfermedades. Aún así, en el adulto mayor la salud se valora, tanto en ausencia o presencia de enfermedad, al respecto expresan Morrison y otros (2004), que el término salud se valora, por la “capacidad del individuo de vivir en la comunidad manteniendo un adecuado nivel de funcionalidad y autovalía que le permita relacionarse con sus pares de forma adecuada”. (p. 17)

 

En otro orden de ideas, Heikkinen (1997), refiere que la esperanza de vida sin discapacidad varía entre los distintos países y culturas. La salud de las personas de edad avanzada no debería, y no puede, examinarse simplemente desde el punto de vista de la frecuencia de enfermedades o de la ausencia de las mismas. Incluso cuando sí tienen enfermedades, muchas personas mayores se sienten perfectamente sanas porque estas enfermedades no tienen efectos negativos sobre su vida diaria. (p. 15)

 

Es por ello que durante la vejez puede resultar cuesta arriba mantener la percepción de salud favorable luego de una jubilación, o de hacer frente al mantenimiento de un hogar, aún con hijos (as) o nietos (as) dependientes, con una pensión, o cómo percibirse con salud al enfrentarse a las limitaciones físicas ó a enfermedades crónicas y a la dependencia económica.

 

Visto de esta forma, la calidad de vida es un concepto multidimensional que incluye una diversidad de factores, de entre los cuales el estilo de vida, morada, satisfacción con el trabajo, la situación económica, el acceso a los servicios públicos, las comunicaciones, la urbanización, la criminalidad, entre otros, que componen el contexto social y que influencian el desarrollo humano de una comunidad.

 

De ahí que, la calidad de vida, tanto enfermo como sano, es un enfoque primordial que ha de ser incluido en los programas de salud, en tanto que la calidad de vida es entendida por Melchiors y otros (2004), como “la suma de sensaciones subjetivas y personales de sentirse bien”, (p. 3); refiriendo también que la calidad de vida “es considerada como una opinión subjetiva del adulto mayor acerca de su condición física, psicológica y social”. (p. 3)

 

Por otra parte y ya entrando en el ámbito de la pérdida, independientemente de la edad, es una situación real o potencial en el cual un objeto o sujeto de la persona se hace inaccesible a cambiar de manera que no se percibe o pierde su valor. Para, Babb, P. (1998), la vejez es “una experiencia humana donde las pérdidas parecen tener un significado particular, ya que se hacen más evidentes, particularmente las físicas y las sociales”. (p. 30-31).

 

Es por ello que pérdidas físicas y sociales pueden ser, tomando en cuenta a Morrison y otros (2004), manifestaciones que limitan la calidad de vida de los adultos mayores por disminuir la autonomía y afectar sus actividades de auto-cuidado. (p. 17). Es así como pérdidas físicas, pérdidas sociales y calidad de vida guardan una estrecha relación en la estimación de la condición de salud del adulto mayor.

 

Desde el contexto descrito, cabe destacar que en la comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña. Municipio Valencia, Estado Carabobo, funciona “La Casa del Abuelo”, la cual está adscrita al CEMIUC, (Centro de Medicina Integral de la Universidad de Carabobo), contando con una población de 465 adultos mayores inscritos y de este grupo asisten 90 adultos mayores de lunes a sábado. Los mismos son llevados por sus familiares, en trasporte público, o acuden solos por la cercanía de sus hogares; observándose que algunos adultos mayores presentan limitaciones en sus movimientos para su independencia y otros usan medios de apoyo para su movilización, lo que repercute en su aspecto físico y funcional, así mismo; se evidenció disminución en la capacidad visual y auditiva, lo cual afecta al adulto mayor en su convivencia habitual, conllevando al mismo a aislarse del resto del grupo.

 

De allí pues que en esta comunidad, durante las prácticas clínicas de los estudiantes de la Maestría en Enfermería Gerontológica y Geriátrica a través del contacto personal con los adultos mayores, se observó que éstos  refieren pérdidas familiares y sociales evidenciadas por facies de tristeza, voz melancólica y algunos se mantienen silenciosos y con la mirada fija, lo cual puede ser expresión de soledad y ser un indicador de las pérdidas sociales y familiares sufridas y por ende disminución en su calidad de vida en esta etapa de la vida.

 

Por otra parte, expresan que se sienten solos por ausencia  de la pareja, hijos, amigos, el hecho de mayor impacto emocional que puedan sufrir los adultos mayores, el sentimiento de soledad, es un componente del estado de pena, la fatiga aunque se considera una sensación física, se incluye como parte de los sentimientos en las reacciones de duelo del adulto mayor, porque frecuentemente se observa acompañada de un sentido de apatía o de estar sin rumbo.

 

Entre otras pérdidas sociales observadas son los cambios en la estructura familiar tales como: muerte del cónyuge, la separación de los hijos del hogar, ya sea para establecer su propia familia, para estudiar o para independizarse económicamente, teniendo el adulto mayor que volver a organizar su vida y hacer ajustes ante este cambio, lo cual representa una situación crítica para ellos. Durante esta etapa se evidencia en algunos padres ancianos, sentimientos de tristeza y un sentido de pérdida vinculado con el crecimiento de sus hijos y la eventual salida de estos del hogar, mientras que otros expresan un nuevo sentido de libertad y buscan invertir su tiempo para cosas que antes no habían tenido tiempo de hacer.

 

En este sentido, también se pudo evidenciar como el retiro, o pérdida del trabajo, marca el final de lo que se concibe como una relación estrecha entre la clase de empleo que la persona mantiene y el estilo de vida que disfruta. En una comunidad que mide a las personas en términos de lo que hace para ganarse la vida, esta pérdida podría representar un descenso en su posición social, es por esto que sin la oportunidad de trabajar, algunas personas podrían sentir vacías, inútiles, y sin propósitos en la vida, la jubilación empobrece a la mayoría de los adultos mayores, si ocurre que la persona está desprovista de un sistema de pensión. Aún contando con las pensiones, su ingreso no será el mismo.

 

Así mismo, estas pérdidas sociales se caracterizan por los efectos siguientes: una afiliación o duelo, soledad, pérdida de compañía, cambios en el estilo de vida. Los adultos mayores que viven estas pérdidas, confrontan una variedad de problemas personales, actitudinales y familiares como alteraciones en las relaciones con su entorno, en el sueño y descanso, en el concepto de si mismo; también acelerar el proceso degenerativo de la orientación y la memoria produciéndose cambios devastadores, lo cual puede estar afectando la calidad de vida de este grupo de adultos mayores.

 

Es por ello que indagar la calidad de vida de una sociedad, significa analizar las experiencias subjetivas de los individuos que la integran y la percepción que tienen de su existencia dentro de ella. Exige en consecuencia, conocer cómo viven los sujetos, cuáles son sus condiciones objetivas de existencia y que expectativas de transformación de estas condiciones tienen, y evaluar el grado de satisfacción que consiguen.


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De allí pues, que la mayoría de autores conciben la calidad de vida como una construcción compleja y multifactorial sobre la que pueden desarrollarse algunas formas de medidas objetivas a través de una serie de indicadores, pero donde tiene un importante peso específico la vivencia que el sujeto pueda tener de sí mismo.

 

Para Castro M, (2000), citando a Levi y Anderson; expresa que: “por encima de un nivel de vida mínimo, el determinante de la calidad de vida individual es el ajuste o la coincidencia entre las características de la situación de existencia y las oportunidades, expectativas, capacidades y necesidades del individuo, tal y como el mismo las percibe”. (p. 55)

 

En este sentido los autores expresan que “la noción de calidad se podría conceptuar como una adaptación entre las características de la situación de la realidad y las expectativas, capacidades y necesidades del individuo tal como las percibe el mismo y el grupo social”. (p. 55)

 

Es por ello que es importante destacar que la mayoría de los autores conciben la calidad de vida como una construcción compleja y multifactorial sobre la que pueden desarrollarse algunas formas de medidas objetivas a través de una serie de indicadores tales como: educación, salud, ambiente, aspectos socioculturales, satisfacción, estilos de vidas y aspectos económicos; como puede evidenciarse las pérdidas físicas, sociales en el adulto mayor pueden influir en su calidad de vida.

 

Lo antes señalado; es la motivación central del presente estudio, porque indudablemente en estos momentos de la vida del adulto mayor, se observa con más frecuencia, la participación de la enfermera (o), lo que constituye una herramienta esencial para su valoración integral, requiriendo la atención del mismo y conocimientos de múltiples habilidades para su atención integral, especializada, orientada hacia una evolución satisfactoria ofreciéndole una atención tanto espiritual como física, en base al cumplimiento de los deberes primordiales de enfermería, para que de esta forma, se le permita al adulto mayor mantener una calidad de vida saludable, obviamente dentro de las características propias de la vejez.

 

Sin duda que esta ayuda profesional también incluye un trabajo muy relevante en el aspecto psicológico, por cuanto el adulto mayor, debe enfrentar pérdidas físicas de cónyuge, amigos, y al mismo tiempo, en la mayoría de las oportunidades, pierde el rol protagónico que llevaba a cabo dentro del seno familiar, por el pasar de los años, y por la separación a que es sometido por parte del resto del grupo familiar, lo cual incide de forma precisa en el entorno de calidad total de vida del mismo y el modo de observar su futuro mediato.

 

Materiales y Métodos

 

El presente estudio está enmarcado en el diseño no experimental de campo, de tipo descriptivo y correlacional de corte transversal; ya que los datos se tomaron directamente de la realidad donde su contexto fue “La Casa del Abuelo” en la comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña, del Municipio Valencia, Estado Carabobo, donde se aplicó un instrumento a la población en estudio para recolectar la información directamente de la realidad, la misma estuvo constituida por 45 personas de los 90 adultos mayores que asisten a la Casa del Abuelo. La selección de los elementos muéstrales se realizó mediante un muestreo probabilístico aleatorio simple, ya que los elementos que conformaran el universo, tuvieron las mismas posibilidades de ser seleccionados, inscritos en la Casa del Abuelo de la comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña, del Municipio Valencia, Estado Carabobo, que asistieron a la misma durante los meses Abril y Mayo del 2007. Entre los Criterios de selección de los elementos muéstrales estaban saber leer y escribir, dispuestos participar voluntariamente en esta investigación, que acudieran a la Casa del Abuelo, dominio  del idioma español, orientados en tiempo, lugar y persona, edades comprendidas entre 65 y más años

 

Para validar el instrumento fue remitido a expertos en el área, quienes realizaron la validez del contenido, la construcción de los ítems y la coherencia de los mismos con los objetivos planteados, para demostrar su adecuación a la medición que se realizó. Para determinar la confiabilidad del instrumento,  se aplicó una prueba piloto a 10 adultos mayores que asisten a la Fundación Familia Integral, Servicio, Adiestramiento y Capacitación Andragógica y Pedagógica (FISAC) de la comunidad de San Diego Alcalá, sector la Cumaca Estado Carabobo.  Los criterios de selección de estos adultos mayores fueron los establecidos en la población El análisis estadístico se efectuó mediante la prueba de Alfa de Cronbach, cuyo análisis arrojo una confiabilidad de 0,84 para la variable 1 y 0,82 para la variable 2.

 

Resultados:

 

A continuación se dan a conocer los resultados de la investigación. Para comenzar se presentan, en cuadros de distribución de frecuencias, las características de tipo demográfico y educativo del grupo investigado. Luego se realizó el procesamiento de la información comenzando por establecer la tendencia media de las ocurrencias de los factores y variables en estudio, según las tres categorías de ocurrencia, para responder a las preguntas del instrumento de recolección de datos.

 

Cuadro N° 1. Pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida distribución de los adultos mayores investigados según edad. Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo. Marzo 2008

 

perdidas_adulto_mayor/perdida_adulto_calidad

 

Fuente: instrumento aplicado (Rengifo, 2008)

 

La edad más representada en el grupo de adultos mayores que fueron investigados, fue la comprendida entre 65 a 69 años con un 48,9%, seguida por el grupo de 70 a 74 años que representa un 33,3%, luego de 75 a 79 años con 22,2% y, por último, los de 80 o más con sólo un 69.

 

Gráfico N° 1. Pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida distribución de los adultos mayores investigados según edad. Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo. Marzo 2008.

 

perdidas_adulto_mayor/perdida_adulto_edad

 

Fuente: instrumento aplicado (Rengifo, 2008)

 

 

Cuadro N° 4. Pérdidas en el adulto mayor y su  calidad de vida. Distribución de los adultos mayores investigados según ocurrencia de los factores pérdidas físicas y salud física. Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo. Marzo 2008.

 

perdidas_adulto_mayor/adulto_perdida_salud

 

* Porcentajes internos en relación a subtotales horizontales.

Coeficiente de correlación (Pearson) = - 0,134 (p > 0,05) no significativo

Fuente: instrumento aplicado (Rengifo, 2008)


Las perdidas en el adulto mayor y su calidad de vida .4

Se puede observar que hay una alta concentración en la categoría de algunas veces factor perdidas físicas de los adultos mayores con porcentajes de 50,0%, 51,2% y 100,0% coincidente con algunas veces del factor salud física, lo que implica que hay no una relación de correspondencia entre las distintas ocurrencias interrogadas y presentadas de manera resumida a través de los promedios. En concordancia con la lectura anterior, el  coeficiente de correlación de Pearson fue de - 0,134, que fue calculado partiendo de los valores medios de ocurrencia de los factores. Pérdidas físicas y salud física. El valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (P > 0,05)  entre los factores aquí señalados. El signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las pérdidas físicas y salud física pues al aumentar la ocurrencia de las perdidas físicas disminuye la ocurrencia de la salud física o viceversa. En consecuencia, no puede confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación. De acuerdo a los resultados anteriormente ilustrados, se rechaza la hipótesis específica Nº 1. Existe relación estadísticamente significativa entre las pérdidas físicas y la calidad de vida en el adulto mayor en su factor percepción de la salud física.

 

perdidas_adulto_mayor/ocurrencia_perdida_salud

 

Cuadro Nº 7 pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida. Distribución de los adultos mayores investigados según ocurrencia de los factores pérdidas sociales y salud social. Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo. Marzo 2008

 

perdidas_adulto_mayor/perdidas_sociales_salud

 

* Porcentajes internos en relación a subtotales horizontales.

 

Coeficiente de correlación (Pearson) = - 0,176 (p > 0,05) no significativo

 

Fuente: instrumento aplicado (Rengifo, 2008)

 

 

Se puede observar que hay una alta concentración en la categoría de algunas veces  del factor perdidas sociales de los adultos mayores con porcentajes de 73,3%, y 66,7% coincidente con algunas veces del factor salud social, pero  además que no hubo en siempre del factor perdidas sociales representación alguna del factor salud social. Esto implica que hay no una relación de correspondencia entre las distintas ocurrencias interrogadas y presentadas de manera resumida a través de los promedios, lo que implica un rechazo de la hipótesis especifica Nº 4 que refiere: existe relación estadísticamente significativa entre las perdidas sociales y la calidad de vida en el adulto mayor en su factor percepción de la salud social. En concordancia con la lectura anterior, el  coeficiente de correlación de Pearson fue de 0,176, que fue calculado partiendo de los valores medios de ocurrencia de los factores perdidas sociales. El valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (P > 0,05)  entre los factores aquí señalados. El signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las perdidas sociales y salud social, pues al aumentar la ocurrencia de las perdidas sociales disminuye la ocurrencia de la salud social o viceversa. En consecuencia, no puede confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación.

 

perdidas_adulto_mayor/perdidas_salud_social

 

Cuadro N° 8. Pérdidas en el adulto mayor y su calidad de vida. Distribución de los adultos mayores investigados según ocurrencia de las variables en estudio. Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo. Marzo 2008

 

perdidas_adulto_mayor/calidad_adulto_mayor

 

* Porcentajes internos en relación a subtotales horizontales.

Coeficiente de correlación (Pearson) = - 0,027 (p > 0,05) no significativo

Fuente: instrumento aplicado (Rengifo, 2008)

 

 


Las perdidas en el adulto mayor y su calidad de vida .5

Se puede observar que hay una alta concentración de la ocurrencia ALGUNAS VECES de la variable calidad de vida en el adulto mayor calidad de vida en el adulto mayor en las categorías nunca y algunas veces en las categorías de en la variable perdidas en el adulto mayor,  con porcentaje de 50,0% y 62,8%. Además, se puede constatar que no hubo nadie para SIEMPRE de las variables perdidas en el adulto mayor. Esto implica que hay no una relación de correspondencia entre las distintas ocurrencias interrogadas y presentadas de manera resumida a través de los promedios.

 

En concordancia con la lectura anterior, el  coeficiente de correlación de Pearson fue de - 0,027, que fue calculado partiendo de los valores medios de ocurrencia de las variables perdidas en el adulto mayor y su calidad de vida. El valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (P > 0,05)  entre las variables aquí señalados.

El signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las perdidas en el adulto mayor y la calidad de vida del adulto mayor pues al aumentar la ocurrencia de las perdidas en el adulto mayor, disminuye la ocurrencia de la variable calidad de vida del adulto mayor o viceversa. En consecuencia, no puede confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación. Los planteamientos antes expresados conducen al rechazo de la hipótesis general la cual menciona: existe relación estadísticamente significativa entre las pérdidas que tiene el adulto mayor en sus factores: Pérdidas Físicas y Pérdidas Sociales y la calidad de vida en el adulto mayor en su factor percepción de la salud física y social. Los resultados anteriores difieren de lo planteado por Babb, P (1998), quien refiere que “a medida que las personas avanzan en edad, los cambios ambientales y las amenazas a la salud siguen ocurriendo paulatinamente durante toda su existencia, y la diferencia más notable es la reducción de la capacidad de adaptación para enfrentar los cambios físicos y sociales.

 

perdidas_adulto_mayor/perdidas_adulto_mayor

 

Conclusiones

 

Entre las conclusiones se encuentra, conformada por la relación estadísticamente significativa entre las pérdidas físicas y la Calidad de Vida en el Adulto Mayor en su factor percepción de la salud física, de acuerdo con los resultados obtenidos el valor del coeficiente da la base asegura que no existe una relación significativa (P > 0,05)  entre los factores aquí señalados. El signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las pérdidas físicas y salud física, pues al aumentar la ocurrencia de las pérdidas físicas disminuye la ocurrencia de la salud física o al disminuir las pérdidas físicas, dicha salud no disminuye, lo que confirma la no comprobación de la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación.

 

En cuanto a la Hipótesis especifica N° 2, conformada por la relación estadísticamente significativa entre las pérdidas físicas y la calidad de vida en el adulto mayor en su factor percepción de la salud social; de acuerdo con los resultados obtenido, el valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (p > 0,05) entre los factores aquí señalados; el signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las pérdidas físicas y salud social, pues al aumentar la ocurrencia de las pérdidas físicas disminuye la ocurrencia de la salud social o al existir disminución sucede lo contrario, en consecuencia, no puede confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación.

 

En tal sentido la hipótesis N° 3, conformada por la relación estadísticamente significativa entre las pérdidas sociales y la calidad de vida  en el adulto mayor en su factor percepción de la salud física, de acuerdo con los resultados obtenidos, el valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (P > 0,05) entre los factores aquí señalados. El signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las pérdidas sociales y salud física, pues al aumentar la ocurrencia de las pérdidas sociales disminuye la ocurrencia de la salud física o viceversa; en consecuencia, no puede confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación.

 

En la hipótesis especifica Nº 4 conformada por la relación estadísticamente significativa entre las pérdidas sociales y la calidad de vida en el adulto mayor en su factor percepción de la salud social; el coeficiente de correlación de Pearson fue de - 0,176, que fue calculado partiendo de los valores medios de ocurrencia de los factores: pérdidas sociales y salud social, el valor del coeficiente da la base para asegurar que no existe una relación significativa (p > 0,05), entre los factores aquí señalados, el signo negativo del coeficiente expresa la dirección de la relación entre las pérdidas sociales y salud social, pues al aumentar la ocurrencia de las pérdidas sociales disminuye la ocurrencia de la salud social o al decrecer estos sucesos se produce una sensible disminución de la salud social, por consiguiente, no logra confirmarse la hipótesis respectiva a estos factores en el grupo de adultos mayores objeto de esta investigación.

En la Hipótesis General correspondiente a las variables Pérdidas del Adulto Mayor  y la Calidad de Vida del adulto mayor, de acuerdo con los resultados obtenidos muestran que no existe una relación estadísticamente significativa entre las variables con un valor de -0,027, de acuerdo a las respuestas dadas por los adultos mayores encuestados en la Casa del abuelo. Comunidad José Gregorio Hernández. Valencia. Estado Carabobo.

 

Recomendaciones

 

Divulgar los resultados de la investigación en la Casa del Abuelo Comunidad José Gregorio Hernández, Parroquia Miguel Peña del Municipio Valencia Estado Carabobo y la población en general a través de un artículo de publicación.

 

Presentar a las autoridades universitarias en especial a la Escuela de Enfermería los resultados del estudio con el fin de motivarlos a que fomenten y mejoren la calidad de vida de los adultos mayores bajo su dirección.

 

Motivar a los estudiantes de pregrado de la Escuela de Enfermería de la Universidad de Carabobo a ejecutar los programas que ya están elaborados, relacionados estrechamente con la temática investigada.

 

Sugerir al coordinador de la Casa del Abuelo propiciar un espacio de recreación y esparcimiento que brinde distracción, tranquilidad, confort, no solo entre adultos mayores sino que éstos también puedan compartir con sus amigos, familiares y comunidad, diferentes actividades, como por ejemplo: Gincanas, donde los capitanes de los grupos sean los adultos mayores. Torneos de dominó o barajas donde los equipos sean de parejas, padre e hijo o abuelo y nieto. Juegos donde se valore el conocimiento que tiene el adulto mayor en su equipo y viceversa. Establecer como prioridad la comunicación y orientación necesaria a fin de ofrecer bienestar al adulto mayor con su familia, amigos y comunidad. Presentar en eventos locales los resultados de la investigación para  difundir los resultados obtenidos. Ofrecer el informe de la Investigación a los colegios y escuelas universitarias en Enfermería, de tal forma que sirva de insumo teórico, para el desarrollo de futuros estudios en el área.

 


Las perdidas en el adulto mayor y su calidad de vida .6

Es pertinente recomendar a la colectividad en general que le brinden la satisfacción que necesitan y merecen nuestros adultos mayores, manteniendo un equilibrio en los cuidados, respetando la autonomía de estos y aceptando sus capacidades para realizar sus actividades, pues cuando no se les permite realizar actividades los adultos mayores se deprimen ya que se sienten inútiles y comienzan a somatizar enfermedades.

 

Realizar investigaciones sucesivas con el mismo objetivo de esta pero con una población mayor y de clase media alta para poder establecer comparaciones ya que como investigadores creemos que este es un factor influyente en la satisfacción de los adultos mayores.

 

 

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