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Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor
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Autor: Lic. Michel Caballero Pernas
Publicado: 11/02/2010
 

Se realizó un estudio longitudinal-analítico de tipo intencional para determinar la influencia del ejercicio físico-terapéutico en la población geriátrica incorporada al programa de ejercicios físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral del Área de Salud Integral Comunitaria. La Chamarreta, Parroquia Francisco Eugenio Bustamante, en el período desde septiembre del 2008 hasta agosto del 2009. La muestra estuvo constituida por 37 pacientes de 60 años y más incorporados al programa. A los mismos se les aplicó un cuestionario que permitió (junto a los datos obtenidos de la historia clínica familiar y test psicológicos) describir variables demográficas, grado de salud geriátrico e identificar la presencia de depresión así como el grado de satisfacción del adulto mayor.


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Influencia del ejercicio físico-terapéutico sobre la depresión del Anciano Mayor.

 

Servicio Rehabilitación Integral. La Chamarreta .Septiembre. 2008- Agosto del 2009.

República Bolivariana de Venezuela. Misión Barrio Adentro. Estado Zulia.

 

Autor: Lic. Michel Caballero Pernas. Licenciado en Tecnología de la salud, especializado en Rehabilitación. Coordinación Docente. Zulia.

 

Tutor: Dra. Carmen Elena Ferrer Magadan. Médico. Especialista en MGI y Anatomía Patológica. ASIC. La Chamarreta. Maracaibo. Zulia.

 

Asesora. Dra. María de los Ángeles Pérez Proenza. Médico. Especialista en MGI y Medicina Física y Rehabilitación. Coordinación de Medicina Física y Rehabilitación. Estado. Zulia.

 

Trabajo optar por la Categoría de Master en Longevidad Satisfactoria.

 

Maracaibo. Zulia. 2008-2009.

 

PENSAMIENTO.

 

La ancianidad “.nos aparta del trabajo activo, nos debilita el cuerpo, nos priva prácticamente de todos los placeres físicos, nos arrugan el rostro; pero perder el entusiasmo arruga el alma…”

Cicerón

 

AGRADECIMIENTOS.

 

A FIDEL Y LA REVOLUCIÓN…. por ser la única forma posible de desarrollar mi formación profesional, por educarnos y darnos la posibilidad de cumplir con la ayuda internacionalista a pueblos hermanos, contribuir a saldar la deuda social históricamente existente en estos países del mundo, y por hacerme participe de su proyecto de que un mundo mejor es posible.

 

A MIS PROFESORES DE LA MAESTRÍA…. por su gran apoyo y dedicación; gracias por compartir con nosotros su tiempo y experiencias, mi mayor agradecimiento por la calidad con que fueron impartidos todos los módulos.

 

A MI TUTORA Y ASESORA….Ambas por ayudarme a encontrarme y confiar en mí, por estar siempre conmigo y apoyarme en todo, por haber constituidos un libro abierto, de los cuáles aprendí constantemente, por sus recomendaciones, por la asesoría y el apoyo, la dedicación y el empeño puestos en la terminación de este trabajo, por sus ejemplos e insistencias y preocupación con respecto a la superación científica de todos sus compañeros de trabajo, incluyéndome.

 

A TODOS…. los que han contribuido al desarrollo de esta investigación y siempre me estimularon, a los que han colaborado de una manera u otra e hicieron posible la realización y culminación exitosa de este trabajo.

GRACIAS.

 

DEDICATORIA.

 

A LA MEMORIA DE MI MADRE….Porque a pesar de ya no estar físicamente conmigo fuiste y serás mi luz que ilumina siempre el camino correcto y me das fuerza para seguir hacia delante, sin ti no sería quien soy, ni sería posible este sueño. El recuerdo de sentirte cerca de mí me da fuerzas para continuar. Vivo por ti y estoy profundamente agradecido de haber nacido de ti. Te admiro y te respeto.

 

A LA MEMORIA DE MI PADRE….Porque a pesar de ya no estar físicamente tú recuerdo de sentirte cerca de mí también me da fuerzas también para continuar, igual te admiro y respeto mucho, orgulloso y agradecido de ser tu hijo.

 

A LA MEMORIA DE MI HERMANO JIMAGUA….MICHAEL. Estoy profundamente orgulloso y agradecido de ser tu hermano, gracias por contagiarme con tú alegría y por tu entrega sin límites durante 23 años, siempre has estado dentro de mí.

 

A MIS GRANDES AMORES….MI ESPOSA E HIJO BELLO MICHAEL por su paciencia y compresión, por contagiarme con sus alegrías y espíritus de “sí se puede”, por su incansable consagración, alegrías y entregas sin límites.

 

Resumen.

 

Se realizó un estudio longitudinal-analítico de tipo intencional para determinar la influencia del ejercicio físico-terapéutico en la población geriátrica incorporada al programa de ejercicios físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral del Área de Salud Integral Comunitaria. La Chamarreta, Parroquia Francisco Eugenio Bustamante, en el período desde septiembre del 2008 hasta agosto del 2009. La muestra estuvo constituida por 37 pacientes de 60 años y más incorporados al programa. A los mismos se les aplicó un cuestionario que permitió (junto a los datos obtenidos de la historia clínica familiar y test psicológicos) describir variables demográficas, grado de salud geriátrico e identificar la presencia de depresión así como el grado de satisfacción del adulto mayor.

 

La información fue procesada y resumida en frecuencias absolutas y porcentajes, reflejada en tablas; los resultados mostraron que la mayor incorporación al programa de ejercicios físicos-terapéuticos fue de 60 a 64 años de edad (40,5%), del sexo femenino (62,2%), de escolaridad primaria (86,5%) y con el 78,4% ubicado en el grado I de salud geriátrica. Sobre la influencia del ejercicio físico en la esfera psicológica se obtuvo que de un 27% de ancianos con depresión menor al inicio del estudio, se quedaron en esta condición el 10,8% al final del mismo; de ellos se deprimen más los del sexo femenino (21,6%) y los solteros. Luego de 6 meses de incorporación a los ejercicios físicos-terapéuticos, el 62,2% estaban satisfechos con su condición y entorno. En conclusión, la práctica del ejercicio físico-terapéutico influye positivamente en la esfera psicológica de los adultos mayores incorporados al programa de ejercicios.

 

Índice.

 

Introducción

Marco teórico

Objetivos

Material y Método

Resultados y discusión

Conclusiones

Recomendaciones

Referencias Bibliográficas

 

Anexos.


Ver: ejercicios abdominales inferiores

 

Introducción.

 

La vejez desde tiempos remotos ha impresionado al hombre de forma importante tanto desde el punto de vista biológico como sociocultural. El envejecimiento individual no es un fenómeno exclusivo de las sociedades modernas, ha estado presente en todas las etapas del desarrollo social y ha sido siempre de interés para la filosofía, el arte y la medicina. Para Cicerón la ancianidad era contemplada como un tiempo infeliz porque “.nos aparta del trabajo activo, nos debilita el cuerpo, nos priva prácticamente de todos los placeres físicos y porque no está lejos de la muerte…” y agregaba “…los años arrugan el rostro; pero perder el entusiasmo arruga el alma…” (1,2).


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El envejecimiento de la población que en un inicio afectó en un mayor grado a los países más desarrollados se ha venido presentando en la actualidad en países en desarrollo y se considera persistirá y continuará, de manera que, la importancia que reviste este sector poblacional, demanda un interés mayor de parte de los profesionales de la salud. Estamos asistiendo al incremento de la longevidad del hombre en todos los países del mundo y por tanto cada día habrá una población de ancianos más numerosa; estadísticas demográficas de la ONU pronostican que el número de personas mayores de 60 años se elevó y aproximó a los mil cien millones en el año 2005 (3, 4, 5,6)

 

Se estima que el porcentaje de personas de 60 años o más en todo el mundo pasará de 10% a 22% entre el año 2000 y 2050, tiempo en que se prevé que la proporción de ancianos igualará la de niños de 0 a 14 años, por primera vez, los jóvenes y los viejos representarán la misma proporción demográfica. Se plantea que en 2030, un cuarto de los habitantes de Hong Kong tendrán más de 60 años de vida. El límite superior del envejecimiento está dado por la cantidad de años que logre vivir una persona, aceptándose para muchos autores los 80 años como el inicio de la longevidad. España es el país de Europa de más alta longevidad, esto es, mayor esperanza de vida de sus ciudadanos: los hombres 77 años y las mujeres 83 años de promedio de vida. De acuerdo con datos del último censo de población y vivienda en Cuba, residen en esta nación más de mil 800 centenarios y otras 46 mil personas que rebasan los 90 años de edad, mientras superan los 60 años un millón 772 mil cubanos (7, 8,9).

 

En Venezuela la tasa de crecimiento poblacional fue de 1,44 % en el año 2004 y la esperanza de vida se estimó en 74,1 años, siendo mayor para las mujeres con un estimado de 77,3 años respecto a los hombres con 71 años. Sin embargo el aumento de los años no conduce de por sí a padecer enfermedades; pero lleva inexorablemente a la vejez y esto ni la medicina preventiva puede evitarlo, por lo tanto la longevidad debe asumirse como un fenómeno más de la vida que hay que afrontar con optimismo. Hoy día conocemos que contrario a la creencia popular, la depresión no es una parte natural del envejecimiento aunque es frecuente en la edad mayor, afectando a más del 15% de los adultos mayores, se estima que más del 43% de los gerontes que reciben atención aguda y los que residen en hogares de ancianos o casa de reposo padecen de depresión. La detección precoz y tratamiento adecuado de la depresión en el adulto mayor tiene un efecto demostrado en la disminución de los indicadores de suicidio en estas personas (10, 11, 12, 13,14)

 

En la población anciana, la depresión con frecuencia se diagnostica mal, bien porque no se reconoce, o queda enmascarada debido a los síntomas somáticos o por el deterioro cognitivo. La depresión no tratada puede tener consecuencias dramáticas, como la institucionalización, enfermedades físicas, deterioro psicosocial o el suicidio, este último constituye la consecuencia negativa más grave de la depresión. El riesgo de suicidio aumenta con la edad, especialmente en varones. Las tasas de suicido en mujeres alcanzan un máximo hacia los 50-60 años, para disminuir más tarde. Así mismo vemos, la prevalencia de depresión es mucho mayor entre los ancianos institucionalizados. Aproximadamente, entre el 10-20% de los individuos de edad igual o superior a 60 años ingresados en camas hospitalarias sin deterioro cognitivo tienen una depresión mayor. Los síntomas de la depresión en los ancianos pueden ser diferentes de los que aparecen en adultos más jóvenes, lo que acarrea dificultades para el diagnóstico, y conduce a que un elevado porcentaje de depresiones en el anciano carezca del tratamiento apropiado (15, 16, 17).

 

El hecho de que la depresión en el anciano sea considerada erróneamente como una consecuencia natural del proceso de envejecimiento o de otras enfermedades concomitantes conduce a no emplear los tratamientos antidepresivos, que alcanzan actualmente un alto grado de eficacia, de cerca del 70%. La depresión en la tercera edad por su relevancia social y la afectación tan importante de la calidad de vida de los que la sufren, debería trascender en una sensibilidad hacia el problema en todos los niveles asistenciales y especialmente en la atención primaria, donde se produce con más frecuencia la solicitud de ayuda médica por parte de los ancianos con depresión. La mejor manera de determinar el papel de una sustancia específica en la etiología de la depresión es llevar a cabo una historia cuidadosa, a fin de constatar si existe una relación temporal entre el empleo del fármaco y la aparición de los síntomas depresivos. Igualmente se conoce que el consumo de alcohol es una causa frecuente de depresión. El hecho de que los ancianos requieren normalmente menor tiempo de sueño que las personas más jóvenes pueden confundirse con el despertar precoz propio de la depresión. De nuevo, la historia clínica es fundamental para aclarar este punto, ya que si los trastornos del sueño son posteriores a la aparición de los síntomas depresivos y es muy posible que sean secundarios a la depresión (18 ,19.20.21, 22, 23,24).

 

Las estrategias para el tratamiento de la depresión deben tener en cuenta la respuesta en episodios previos, la posible presencia de efectos adversos y las características clínicas del cuadro como elementos básicos de decisión (25,26). Usualmente se considera que las intervenciones de tipo psicológico, como la psicoterapia individual, familiar y grupal tienen un efecto sumatorio sobre las terapias somáticas y farmacológicas, que se mantienen como el tratamiento de elección para la depresión del anciano, especialmente en caso de presencia de síntomas vegetativos y sicóticos, de deterioro cognitivo o de trastornos de personalidad. El envejecimiento se acompaña de un conjunto de efectos que disminuyen la aptitud y el rendimiento físico - mental, muchos de los cuales resultan de la declinación de la actividad motora (27, 28, 29, 30,31).

 

Las investigaciones han demostrado que en condiciones de campo, la práctica sistemática del ejercicio por los adultos mayores puede aportar, de manera percibida, beneficios que van desde los vinculados a la salud y el mejoramiento de la aptitud física, hasta los vinculados con el bienestar emocional y social del practicante. Se considera que los sujetos que poseen conocimientos y creencias positivas respecto a las bondades del ejercicio, tienden a promover la actividad física dentro de su estilo de vida, pero ello no conduce necesariamente a la incorporación regular al ejercicio (32, 33, 34,35).

 

Sin dudas en la tercera edad es necesario la práctica sistemática de ejercicios físicos porque estos conducen al incremento del tono, la masa muscular y por tanto la fuerza; la mejoría de las condiciones hemodinámicas y de la mecánica ventilatoria y su eficiencia; la disminución de la tensión arterial; la prevención de la arteriosclerosis, la hiperlipidemia y la osteoporosis; la ayuda en el control de la diabetes; así como la mejoría en la flexibilidad, el equilibrio y la movilidad articular. En el aspecto socio psicológico, el ejercicio mejora el estado de ánimo, disminuye la depresión y la ansiedad, eleva el vigor, eleva la autoestima y la imagen corporal, ofrece oportunidades de distracción e interacción social y ayuda a mejorar el enfrentamiento al estrés de la vida cotidiana, disminuyendo también los niveles de depresión y por ende el riesgo suicida. También se ha encontrado que el ejercicio es benéfico para la salud mental en la tercera edad. Dawe y Curran-Smith, Blair y otros Bouchard, (36) encontraron que el ejercicio mejora la auto-estima, el autocontrol, el funcionamiento autónomo, los hábitos de sueño, las funciones intelectuales y las relaciones sociales (37,38). En una revisión de proyectos realizada por el Departamento de psicología de la Universidad Nacional de Australia, se demostró que el ejercicio es un antidepresivo, un antiestrés y mejora los estados de ánimos de las personas que participan en un programa de entrenamiento (36, 37,38, 39).

 

Durante la celebración de la Asamblea Mundial de Envejecimiento en Viena, en 1982, se aprobó el Plan de acción sobre el Envejecimiento, el cual dictó estrategias y programas internacionales con metas y objetivos específicos que permitan fortalecer la capacidad de los países de abordar de manera efectiva el envejecimiento de su población. El 14 de diciembre de 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 1 de octubre Día Internacional de las Personas de Edad. En el 2002, se realizó en Madrid, España, la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento y concluyó con la adopción, por parte de los representantes de cerca de 160 países, del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento y la Declaración Política; los Gobiernos se comprometieron a emprender iniciativas en tres direcciones prioritarias: desarrollo, salud y bienestar de los adultos mayores, y creación de un entorno favorable al desarrollo de una sociedad para todas las edades (40).


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A partir del año 1982 se comienza en Cuba a trabajar sobre el Envejecimiento de la población, surgiendo así en el año 1985 la Sociedad Cubana de Geriatría y Gerontología. Inicialmente, esta sociedad fue nutrida con 8 especialistas de Medicina Interna y algunos Médicos generales, que trabajaban de manera especial con los adultos mayores, ya que no existía todavía la especialidad concretada. No es hasta 1987 que surge la especialización médica en Gerontología y Geriatría, dando comienzo a un desarrollo progresivo de esta especialidad en el país, ya no sólo con el personal médico especializado en la materia, sino además con la capacitación de enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales y personal paramédico entrenado en la atención especializada a este grupo, logrando una relación muy directa con la Dirección Nacional de Atención al Adulto Mayor y Asistencia Social del Ministerio de Salud Pública, así aparece como forma de manifestación el desarrollo de la educación física para el adulto mayor, la promoción de salud en la comunidad y la ocupación del tiempo libre a través de la práctica de diferentes deportes y actividades recreativas (41).

 

En Venezuela existe el Instituto Nacional de Geriatría (INAGER) creado hace más de treinta años con el fin de elaborar y aplicar políticas dirigidas a la atención de los ancianos. En la actualidad sus servicios son de atención en Unidades geriátricas en casi todos los Estados que albergan entre 60 y 100 ancianos cada uno, el de Caracas es el más grande y el único que tiene algunos servicios médicos de consulta externa y hospitalización. Sin embargo, se estima que menos del 20% del millón seiscientos mil ancianos reciben algunos de estos servicios quedando excluido el resto, o sea un millón trescientos mil aproximadamente. Es importante mencionar que el 80% de los ancianos del país están en pobreza crítica, que el analfabetismo afecta casi al 60% y que el acceso tanto a los servicios médicos como sociales es limitado por inexistencia o por falta de información adecuada (42, 43).

 

La Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, aprobó el 01 de Junio de 2005, en su primera discusión el anteproyecto de Ley de Servicios Sociales. El 14 de Julio del mismo año, el anteproyecto se aprobó en segunda discusión, con lo cual este instrumento legal pasó a ser Ley de Servicios Sociales para todas las venezolanas y venezolanos del país. El 12 de septiembre de 2005, fue publicado en Gaceta Oficial Nº 38.270 el constituido mediante el Decreto de la Ley de los Servicios Sociales, con el objetivo de atender un amplio sector de la sociedad, que hasta los momentos había estado fuera de toda protección y seguridad social (44).

 

El desarrollo de las ciencias, y de la medicina en particular, ha demostrado que lo más importante no es que haya un aumento de la expectativa de vida, sino que es posible envejecer con vitalidad. Las discapacidades físicas, mentales y sociales, íntimamente relacionadas con el incremento de la expectativa de vida, se consideran entre los problemas más graves que debemos enfrentar. De ahí que, mejorar la prevención, el tratamiento, el pronóstico, así como la calidad de vida de estos pacientes, se haya convertido en un reto para la comunidad científica internacional, cuyo cumplimiento depende, en gran medida, de los aportes que haga la investigación en este campo que permitan introducir estrategias de promoción y prevención para un envejecimiento saludable y nuevos métodos y técnicas de intervención para brindar una atención de alta calidad al adulto mayor y a su vez garantizar la formación de los recursos humanos con un alto nivel de calificación en el campo de la Gerontología y la Geriatría (45,46).

 

De todo lo anterior se concluye que existe una tendencia al envejecimiento poblacional manifiesto en nuestros días y se estima continuará en la primera mitad del presente siglo, por ende aumentará el número de personas con afectaciones biopsicosociales asociadas a la senectud y consecuentemente el número de ancianos con depresión; problemas que en gran medida pudieran resolverse si tenemos en cuenta el uso de terapéuticas científicamente establecidas como la práctica del ejercicio físico en la tercera edad y si se cuenta con el recurso humano y con la voluntad política de los gobiernos. En el Estado Zulia y en el municipio de Maracaibo funcionan diversos centros de atención para la tercera edad pero igualmente resultan insuficientes.

 

Desde la llegada de la misión Barrio Adentro a la República Bolivariana de Venezuela y con esta a la ASIC La Chamarreta, de la Parroquia “Francisco Eugenio Bustamante”, se ha conjugado el trabajo de los Rehabilitadores, Licenciados en Cultura Física y médicos en el SRI del área de salud, logrando que la población geriátrica tenga derecho a la práctica de ejercicios físicos .Dado el incremento del número de pacientes de la tercera edad con afecciones depresivas y alteraciones en su status psicológico es que se formula el siguiente problema científico. En el estado Zulia, municipio Maracaibo no se cuenta con una base científicamente fundamentada para determinar la influencia sobre la depresión en la población geriátrica en el Área de Salud Integral Comunitaria. La Chamarreta.

 

Con la incorporación de la población geriátrica diagnosticada con afecciones depresivas y alteraciones psicológicas a la práctica del ejercicio físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral se determinará de forma positiva el mejoramiento del nivel de vida biopsicosocial de los gerentes de nuestra comunidad.

 

Marco teórico.

 

En la edad adulta se comienza a sufrir el deterioro orgánico de la evolución. En éste momento de la vida se detiene la madurez de las funciones orgánicas, pero a partir de ahí comienza un período involuntario del que nadie puede escapar. El Envejecimiento del organismo humano además de constituir una etapa normal e irreversible de la vida, es una forma muy especial del movimiento de la materia. Es un complejo y variado proceso que depende no solamente de causas biológicas, sino también de condiciones socioeconómicas en las cuales se desarrolla el individuo como ser social (47).

 

Diversas ciencias se han dedicado al estudio del envejecimiento pero sin lugar a dudas han sido la Gerontología y la Geriatría las más importantes. La Gerontología: - Estudia el envejecimiento y los factores que influyen en él. La Geriatría: - Se ocupa de la atención del anciano y las enfermedades que se ven en ellos con mayor frecuencia (48).

 

Para abordar esta etapa del ciclo vital del hombre es necesario hacer referencia a determinados conceptos:

 

Envejecimiento: Proceso de cambio gradual y espontáneo que conlleva la maduración a lo largo de la vida, desde la infancia hasta la edad adulta, seguida por un declive durante las edades media y avanzada de la vida. Es universal, afectando a todos los individuos, progresivo, intrínseco, conducido, deletéreo y genéticamente determinado.

 

Senectud: Proceso temporal que implica la pérdida de la capacidad celular de división, crecimiento y función, y que en último término resulta incompatible con la vida; es decir, termina con la muerte.

 

Envejecimiento normal: Se refiere al complejo habitual de enfermedades y alteraciones que caracterizan a muchos ancianos. Sin embargo las personas envejecen de formas muy distintas: algunas sufren enfermedades y alteraciones, mientras que otras parecen escapar a las enfermedades concretas y se dice que mueren debido a su avanzada edad, estas últimas pueden mantener una vida sana y activa hasta su muerte.

 

Envejecimiento satisfactorio (sano): Es un proceso con mínimos efectos perjudiciales, en el que la persona conserva sus funciones hasta que la senectud impide que la vida continúe; este significa que el proceso no va acompañado necesariamente de enfermedad debilitante o de discapacidad.

 

Vitalidad: Es la capacidad individual de hacer frente a los requerimientos biológicos de la vida diaria; se caracteriza porque disminuye con los años, alcanza su máxima cota entre los 20 y 30 años de edad, estrechando el margen de seguridad de la capacidad de reserva ante las distintas agresiones del medio.


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Geronto-geriatría comunitaria: La podemos definir como el conjunto interdisciplinario de elementos, conocimientos y estrategias, que promueven acciones comunales de educación para la salud así como la prevención y atención de problemas de salud en general, y de enfermedades crónico-degenerativas en particular, considerando riesgos y recursos ambientales para las personas ancianas promoviendo tanto la participación directa de ellas como la de los integrantes de su comunidad favoreciendo una mejor calidad de vida en los participantes (49).

 

Durante el envejecimiento se producen pérdidas relacionadas con el proceso fisiológico que se pueden dividir en físicas, sociales y psicológicas (50):

 

Entre las Pérdidas físicas sufridas por el anciano podemos mencionar:

 

  • La pérdida o disminución en la capacidad del funcionamiento en general.
  • La pérdida o disminución en la movilidad.
  • La pérdida o disminución en el estado de salud.
  • La pérdida o disminución en la capacidad sexual.

 

Pérdidas sociales que ocurren con el envejecimiento.

 

  • Pérdida del trabajo por la jubilación.
  • Pérdida de status.
  • Pérdida de amigos.
  • Pérdida de ingresos económicos.
  • Pérdida de roles (amigos, compañeros, rol laboral, etcétera).
  • Pérdida del conyugue por muerte.
  • Pérdida de posesiones.

 

Los problemas más frecuentes que llevan a dichas pérdidas son: la soledad, el aislamiento, la depresión y las limitaciones de tipo económico los cuales de forma general originan frustraciones y sensación de malestar en los adultos mayores.

 

Pérdidas psicológicas que afectan al adulto mayor son:

 

  • Pérdida o disminución de la autoestima.
  • Pérdida o cambio de la Independencia a la Dependencia.
  • Pérdida o disminución en la sensación de bienestar con uno mismo.
  • Pérdida en el manejo decisiones o control sobre su vida.
  • Pérdida o disminución en la capacidad mental.

 

Los cambios morfofuncionales que ocurren en el Sistema Nervioso Central producto del envejecimiento pueden ser macroscópicos, microscópicos, neuroquímicos y neurofisiológicos (51):

 

  • Morfológicos macroscópicos: pérdida del peso y disminución del tamaño del cerebro (disminución del grosor y agrandamiento de los ventrículos) y del volumen (de 1329 cm3 a los 20 años hasta 1100 cm3 a los 80 años de edad).

 

  • Morfológicos microscópicos: en los organelos neuronales, acumulación de lipofuscina y lipocromo en los nervios y las células gliales, degeneración granovacuolar, cambios neurofibrilares de Alzheimer, aparecen placas seniles, y de sustancia amiloide extravascular y angiopatías congofílicas.

 

  • Neuroquímicos:

 

-          Disminuyen los niveles de algunos neurotransmisores (Dopamina, Acetilcolina, GABA, Serotonina y sus receptores).

-          Disminuyen los niveles de aminoácidos y enzimas.

 

  • Neurofisiológicos:

 

-          Reducción de los potenciales evocados visuales.

-          Disminución de la velocidad de conducción de los nervios sensitivos.

-          Disminución de los reflejos protectores de la laringe.

-          Disminución del flujo sanguíneo cerebral.

 

La Depresión.

 

Un aforismo de Hipócrates sintetiza la postura griega y que hoy podemos traducir como: Si el miedo y la tristeza se prolongan, es melancolía. Lo negro, lo agrio, lo pesado, lo triste, encerrado en un término, melancolía.

 

Stanley Jackson anota que en el Renacimiento, al rescatar los textos de Aristóteles también reflotaron el criterio expresado en el legendario Problema por el cual el estagirita observa que la gran mayoría de hombres de genio son melancólicos, lo cual da un toque de distinción a este temperamento y lo separa de la enfermedad llamada melancolía: ¿Por qué todos aquellos que han sido eminentes en la filosofía, en la política, la poesía o las artes son claramente temperamentos melancólicos, y algunos de ellos hasta tal punto que llegaron a padecer enfermedades producidas por la bilis negra? Por ese entonces ya el término había ampliado mucho su base y, así, se lo usaba para nombrar cualquier estado de tristeza, aflicción, desesperación o un carácter sombrío (52).

 

La palabra depresión deriva del latín de y premere (apretar, oprimir) y deprimere (empujar hacia abajo), se usó en Inglaterra en el siglo XVII. Así Richard Blackmore, en 1725, habla de estar deprimido en profunda tristeza y melancolía. Robert Whytt, 1764, relaciona depresión mental con espíritu bajo, hipocondría y melancolía. En 1808 J. Haslam habla de aquellos que están bajo la influencia de pasiones depresivas. Para ese entonces el término depresión gana terreno y se usa junto al de melancolía para designar a la enfermedad, mientras melancolía siguió conservando su uso popular y literario.

 

Wilhem Griesinger introdujo el término estados de depresión mental como sinónimo de melancolía. Y Emil Kraepelin usa locura depresiva en una de sus clasificaciones nosológicas, sin desprenderse del término melancolía para designar la enfermedad, y deja depresión para nominar un estado de ánimo, y consideraba que las melancolías eran formas de depresión mental, expresión que le pertenece. Pero en 1899 usó como categoría diagnóstica a locura maniaco depresiva. Adolf Meyer propuso eliminar totalmente el término melancolía y reemplazarlo por el de depresión. Así, en esta puja semántica se llegó a la redundancia de nominar depresión con melancolía cuando los síntomas eran suficientemente graves como para nominarlos simplemente como depresión. El término ciclotimia fue usado por Kahlbaum en 1863 para designar las variaciones de las fases depresiva y maníaca, remedando los ciclos.

 

Uno de los más conocidos estudiosos modernos de la melancolía fue Robert Burton (1577-1640), quien dedicó casi toda una vida a redactar su Anatomía de la Melancolía (publicada en 1621), en la que resume todos los conocimientos habidos hasta esa fecha sobre el tema. En sus tres tomos se ofrece una concepción multifactorial de la depresión, según la cual la enfermedad no tiene una única causa, sino que puede tener varias: desde el amor a la religión, pasando por la política o el simple aburrimiento. Y si varias pueden ser las causas, varios pueden ser los remedios, que van desde la música a la compañía (53).


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Thomas Willis (1621-1675) desdeña la teoría de los humores como etiología de la melancolía y atribuye a las alteraciones químicas producidas en el cerebro y el corazón las causas de esta enfermedad. Menciona cuatro tipos de melancolías, de acuerdo a su origen:

 

  • Por desorden inicial del cerebro.
  • Derivada de los hipocondrios (bazo).
  • La que comprende todo el cuerpo.
  • Originada en el útero.

 

No debemos ignorar la importancia de la confirmación hecha por William Harvey (1578-1657) de las ideas adelantadas de Miguel Servet, acerca de la circulación de la sangre (54). Esto introdujo una revolución en el pensamiento médico, junto a las teorías corpusculares y los principios hidrodinámicos, generando una serie de teorías mecanicistas y bioquímicas sobre la génesis de las enfermedades y, como suele ocurrir, cada vez que se realiza un descubrimiento particular, se lo extrapola expandiéndolo a la generalidad.

 

A. Pitcairn al inicio del siglo XVIII explicaba que el desorden de la hidrodinámica de la sangre afectaba el flujo de los espíritus animales (Descartes) de los nervios produciendo pensamientos desordenados y delirios en la melancolía. Hacía la mitad del mismo siglo, los experimentos con la electricidad, generaron otras ideas sobre la fisiología desplazando las tendencias mecanicistas, para dar lugar a los conceptos de sensibilidad e irritabilidad, atracción, repulsión y transmisión. Así, Newton en su Principia (1713) decía: . y los miembros de los cuerpos animales se mueven por orden de la voluntad, es decir, por las vibraciones de este fluido [el éter], propagado a lo largo de los filamentos sólidos de los nervios, desde los órganos exteriores de los sentidos al cerebro, y del cerebro a los músculos.

 

William Cullen (1710-1790), asoció el concepto de carga y descarga en los cuerpos sometidos a electricidad y lo aplicó al cerebro en el sentido de mayor o menor energía (excitación y agotamiento) cerebral. Y se relacionó a la melancolía con un estado de menor energía cerebral. Lo que hoy llamamos hipoergia o, más radicalmente, anergia. Si bien las teorías etiopatogénicas sobre la depresión continúan girando en espiral a lo largo de la historia pasando de la magia a lo religioso, de la química a la mecánica, del animismo a lo orgánico, del humor a la electricidad, de lo ambiental a lo genético, de lo espiritual a lo vital, de los espíritu animal a los neurotransmisores, el cuadro clínico, lo descriptivo, permanece estable: Si el miedo y la tristeza se prolongan, es melancolía (55).

 

Se entiende por depresión el trastorno psíquico, usualmente recurrente que cursa con una alteración del humor básico de tipo depresivo (tristeza) a menudo acompañada de ansiedad y en los que pueden darse, además, otros síntomas psíquicos como inhibición, sensación de vacío, desinterés general, disminución de la comunicación y del contacto social, alteraciones del apetito (más frecuente la anorexia), del sueño (insomnio tardío), agitación o enlentecimiento psicomotor, sentimientos de culpa y de incapacidad, ideas de muerte e incluso intentos de suicidio, así como síntomas somáticos diversos (56).

 

Como resultado del proyecto destinado a mejorar el diagnóstico y la clasificación de los trastornos mentales La Organización Mundial de la Salud publicó en el año 1992 el libro “The ICD -10 Classification of Mental and Behavioural Disorders: Clinical descriptions and diagnostic guidelines,” en la versión española de la misma “CIE 10 Trastornos mentales y del comportamiento. Descripciones clínicas y pautas para el diagnóstico” centra la clasificación de las depresiones en leve, moderada y grave para los episodios depresivos aislados y los otros episodios depresivos y los episodios depresivos sin especificación pasan a clasificarse dentro de las subdivisiones del trastorno depresivo recurrente. La clasificación en leve, moderada y grave se basa en una complicada valoración clínica que incluye el número, el tipo y la gravedad de los síntomas presentes (57).

 

La presencia de demencia o de retraso mental no excluyen el diagnóstico de un episodio depresible tratable aunque las dificultades de comunicación hacen que sea necesario para hacer el diagnóstico confiar más de lo habitual en los síntomas somáticos objetivos observados como la inhibición psicomotriz, la pérdida del apetito y de peso y los trastornos del sueño.

 

Técnicamente la depresión puede ser clasificada como:

 

  • Un tipo de humor
  • Un síndrome
  • Una enfermedad

 

Un tipo de humor: lo referimos a la falta de placer y alegría, lo que se conoce también como anhedonia. Falta la resonancia de agrado frente a las cosas que antes la provocaban. Y un predominio de lo displacentero, del pesimismo (donde lo afectivo encuentra un argumento en lo intelectual y lo proyecta al futuro), un disvalor del sentido de la vida, una vivencia de inferioridad en relación a los demás, sobre todo en lo referente a su rendimiento, y la sensación de enfermedad. Además de todo esto, muestra poco interés hacia todo, nada le interesa y se siente insignificante frente a los demás.

 

Un síndrome: consideramos un síndrome, cuando al tipo de humor anterior se le agrega:

 

  • La hipoergia
  • El cambio en la interacción personal
  • El ritmo y la alternancia en los síntomas

 

Una enfermedad: dolencia caracterizada por tristeza persistente, desmotivación y pérdida de la autoestima. Estos sentimientos están acompañados de disminución de la energía y la concentración, trastornos del sueño, disminución del apetito y pérdida de peso. En las personas de edad avanzada, la depresión está frecuentemente caracterizada por una preocupación excesiva por los dolores y achaques corporales (58).

 

Según sus causas, vemos como la literatura ha clasificado a la depresión en (59):

 

  • Depresión sintomática: debida a causas orgánicas (aspecto anatomofisiológico).
  • Depresión de situación o por agotamiento: debida a una situación —jubilación, mudanza, duelo, etcétera — (aspecto social).
  • Depresión neurótica: según la teoría psicoanalítica, debida a una reactualización de conflictos de depresión neurótica.
  • Depresión endógena: debida a algo que viene del interior', sin motivo aparente.
  • Depresión enmascarada: depresión sin depresión, (una depresión que juega a las escondidas).

 

Otras formas de clasificarla planteada por los estudiosos del área son (60):

 

  • Según el tono psicomotor: depresión inhibida o depresión agitada.
  • Según el supuesto etimológico: depresión reactiva o depresión endógena
  • Según su patogenia: depresión primaria o depresión secundaria.
  • Según su psicopatología: depresión neurótica o depresión psicótica.
  • Según su forma clínica: depresión unipolar o depresión bipolar.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .6

La depresión en la vejez.

 

Es erróneo creer que es normal que los ancianos se depriman. Por el contrario, la mayoría de las personas de edad se sienten satisfechas con sus vidas. En estudio de Franco y colaboradores, publicado por la Revista Psicogeriatría de Madrid se concluye que la edad y el envejecimiento modifican la afectividad en el sentido de vivenciar menos los afectos positivos asociados con el arousal pero no con otras áreas. El hecho de envejecer no parece, en función de los resultados obtenidos, modificar los afectos en el sentido de acercarse a lo depresivo y las modificaciones que se producen por la edad no son superponibles a las depresivas.

 

Cuando un anciano se deprime, a veces su depresión se considera erróneamente un aspecto normal de la vejez. La depresión en los ancianos, si no se diagnostica ni se trata, causa un sufrimiento innecesario para el adulto mayor y para su familia. Con un tratamiento adecuado, el anciano tendría una vida placentera. Cuando la persona de edad va al médico, puede solo describir síntomas físicos; esto pasa por que el anciano puede ser reacio a hablar de su desesperanza y tristeza; la persona mayor puede no querer hablar de su falta de interés en las actividades normalmente placenteras, o de su pena después de la muerte de un ser querido, incluso cuando el duelo se prolonga por mucho tiempo. Los síntomas somáticos suelen ser prominentes en la depresión geriátrica; los más comúnmente reportados son: astenia, cefalea, palpitaciones, dolor generalizado, mareo, disnea, trastornos funcionales digestivos. Las alteraciones cognoscitivas suelen ser más obvias en el adulto mayor, en particular si hay deterioro asociado. La pseudodemencia depresiva debe ser cuidadosamente diferenciada de los pródromos de la demencia en donde el paciente carece manifiestamente de introspección (61).

 

Las depresiones subyacentes en los ancianos son cada vez más identificadas y tratadas por los profesionales de salud mental. Los profesionales van reconociendo que los síntomas depresivos en los ancianos se pueden pasar por alto fácilmente. También los profesionales detectan mejor los síntomas depresivos que se deben a efectos secundarios de medicamentos que el anciano está tomando, o debidos a una enfermedad física concomitante. Si se hace el diagnóstico de depresión, el tratamiento con medicamentos o psicoterapia ayuda a que la persona deprimida recupere su capacidad para tener una vida feliz y satisfactoria. La investigación científica reciente indica que la psicoterapia breve (terapia a través de pláticas que ayudan a la persona en sus relaciones cotidianas, y ayudan a aprender a combatir los pensamientos distorsionados negativamente que generalmente acompañan a la depresión), es efectiva para reducir a corto plazo los síntomas de la depresión en personas mayores. La psicoterapia también es útil cuando los pacientes ancianos no pueden o no quieren tomar medicamentos (62).

 

Se acepta generalmente que las intervenciones de tipo psicológico, como la psicoterapia individual, familiar y grupal tienen un efecto sumatorio sobre las terapias somáticas y farmacológicas, que se mantienen como el tratamiento de elección para la depresión del anciano, especialmente en caso de presencia de síntomas vegetativos y psicóticos, de deterioro cognitivo o de trastornos de personalidad. Sin embargo hay que tener presente que: Las aminas terciarias como la amitriptilina, imipramina y clorimipramina tienen un riego mucho mayor de producir hipotensión ortostática y sedación que las aminas secundarias, como la desipramina y la nortriptilina, debido a su acción sobre receptores noradrenérgicos e histaminérgicos. La maprotilina es un fármaco tetracíclico, pero su perfil farmacológico y de efectos secundarios es similar al de las aminas secundarias. Los IMAO (inhibidores de la monoaminooxidasa) han desaparecido prácticamente del mercado español; son fármacos efectivos, especialmente en depresiones atípicas y resistentes. Es necesario tener precaución con la reacción hipertensiva ante el consumo simultáneo de productos ricos en tiramina, el denominado "efecto queso".

 

Los efectos secundarios de tipo anticolinérgico son también problemáticos en pacientes ancianos. Los síntomas de tipo anticolinérgico pueden ser graves, tanto los de tipo central como: delirium, deterioro cognitivo y los de tipo periférico (taquicardia, retención de orina, estreñimiento, visión borrosa, y boca seca). La amitriptilina tiene características especialmente indeseables en ancianos, ya que puede producir taquicardia intensa, y cardiotoxicidad directa, junto con un alto riesgo de hipotensión ortostática. Dado que el sistema colinérgico se encuentra afectado en pacientes con demencia, el empleo de fármacos con efecto anticolinérgico puede afectar en gran manera el funcionamiento cognoscitivo de este tipo de pacientes. Debido a estas características, los ATCs (antidepresivos tricíclicos) son fármacos poco seguros en caso de sobredosis, lo que debe tenerse en cuenta si existe riesgo de suicidio.

 

Entre los nuevos agentes antidepresivos podemos destacar la venlafaxina, la reboxetina, la mirtazapina y el nefazodone. Son fármacos introducidos en el mercado recientemente, y se carece de experiencia de su empleo en ancianos. Sus acciones a nivel farmacológico también son muy diferentes, lo que propicia que cada vez se imponga una clasificación farmacológica de los antidepresivos.

 

En general, su perfil de efectos secundarios es más favorable que el de los fármacos clásicos, similar al de los ISRS (inhibidores de la recaptación de serotonina) Hay que monitorizar la presencia de alteraciones de la tensión arterial con venlafaxina y reboxetina (hiper e hipotensión, respectivamente). El nefazodone aporta la ventaja de su carencia de efectos sobre la función sexual, pero puede producir un síndrome de inestabilidad especialmente mal tolerado en ancianos.

 

Cuando los fármacos no son efectivos (como en las depresiones psicóticas), o cuando la depresión supone un riesgo para la vida (ejemplo: riesgo alto de suicidio, malnutrición, formas estuporosas de depresión), la terapia electroconvulsiva (TEC) puede ser la mejor forma de tratamiento. La terapia electroconvulsiva (TEC) es una modalidad de tratamiento segura, rápida y efectiva. Con los métodos actuales, los efectos adversos y el deterioro cognitivo se han reducido de forma considerable.

 

De cualquier manera no es la depresión grave la que frecuentemente afecta a nuestros ancianos. El uso de alternativas no farmacológicas para este tipo de depresión continúa siendo motivo de investigación (63).

 

En un trabajo publicado por la Comisión Norteamericana de Certificación de la Atención Médica en el 2005 se señala que la prevención de la depresión está relacionada con los factores que contribuyen a la aparición de este trastorno. El apoyo social es muy útil en el manejo de las pérdidas de seres queridos, en los cambios en la movilidad, etcétera. En muchos casos, no existe prevención efectiva (64).

 

En el adulto mayor hay numerosos factores precipitantes o etiológicos relacionados con la depresión porque:

 

  • Al envejecer se reducen en el cerebro las concentraciones de serotonina y noradrenalina.
  • La actividad de la monoamino oxidasa B aumenta con la edad.
  • Además, los niveles hipotalámicos de ácido 5 hidroxindolacético disminuyen al envejecer y esto es indicativo de una reducción en la acción hipotalámica del sistema serotoninérgico.

 

Numerosos estudios epidemiológicos han revelado la alta prevalencia de desórdenes depresivos, a pesar de la disponibilidad de varias opciones de tratamiento que han probado ser eficaces y seguras. La persistencia de la depresión, en una época en que las opciones de tratamiento se han incrementado, sugiere que hay necesidades insatisfechas en el manejo clínico de la depresión. Además de mejorar las vías de tratamiento, el papel de los médicos de la atención primaria debe redefinirse para garantizar que los desórdenes depresivos sean más frecuentemente reconocidos, diagnosticados y apropiadamente tratados y manejados, o bien por estos primeros eslabones clínicos, o a través de referencias a especialistas de salud mental. Con esta estrategia de tratamiento, el acceso a la atención puede ampliarse en el sentido de no incluir solo a los severamente enfermos, sino también a pacientes en estadios tempranos de sus procesos de enfermedad depresiva, los cuales pudieran beneficiarse al máximo con los modernos métodos de tratamiento.


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El solapamiento de algunas manifestaciones psicopatológicas con el envejecimiento normal, la comorbilidad con trastornos somáticos, y la importancia de los factores psicosociales. Estas características aconsejan no llevar a cabo en el campo de la psiquiatría geriátrica una definición diagnóstica tan precisa como en resto de la población. En cambio, podemos beneficiarnos de un cambio paradigmático desarrollado por los geriatras para estructurar las estrategias terapéuticas en los pacientes ancianos. De esta manera, los geriatras desenfatizan los diagnósticos específicos y se concentran en denominaciones más genéricas como por ejemplo "anciano inestable", "con incontinencia", etcétera que definen mejor la realidad clínica del paciente y permiten realizar un abordaje terapéutico más integrador, más atentos a la recuperación funcional que al diagnóstico (65).

 

Si bien no se ha logrado el manejo terapéutico farmacológico a los deprimidos en la atención primaria de salud, el uso del ejercicio físico a través de la incorporación del adulto mayor puede ser una alternativa ante las insatisfacciones producidas por los largos períodos de tratamiento y los efectos adversos de los mismos, entre otros factores. Además, es el mejor reconocimiento y tratamiento de la depresión en la vejez hará que este periodo de la vida sea más placentero para el anciano deprimido, para su familia y para quienes le cuidan.

 

Escalas para la clasificación de la Depresión en la vejez.

 

El hecho de que los principales sistemas clasificatorios no incluyen criterios diagnósticos de depresión específicos para la tercera edad, ya que fueron establecidos usando a la población media adulta como referencia y por lo cual podrían presentar lagunas para su aplicación en población gerontológico hacen difícil y escasos los instrumentos válidos para detectar las peculiaridades de la depresión en adultos mayores.

 

La Escala Autoaplicada de Depresión de Zung (Self-Rating Depression Scale, SDS), desarrollada por Zung en 1965, es una escala de cuantificación de síntomas de base empírica y derivada en cierto modo de la escala de depresión de Hamilton, ya que al igual que ella da mayor peso al componente somático-conductual del trastorno depresivo. Fue probablemente una de las primeras en validarse en España (Conde y cols. 1970) y ha tenido una amplia difusión.

 

Es una escala autoaplicada formada por 20 frases relacionadas con la depresión, formuladas la mitad en términos positivos y la otra mitad en términos negativos. Tienen gran peso los síntomas somáticos y los cognitivos, con 8 ítems para cada grupo, completándose la escala con dos ítems referentes al estado de ánimo y otros dos a síntomas psicomotores.

 

El paciente cuantifica no la intensidad sino solamente la frecuencia de los síntomas, utilizando una escala de Likert de 4 puntos, desde 1 (raramente o nunca) hasta 4 (casi todo el tiempo o siempre). El marco temporal no está claramente establecido y así en unas versiones se le pide al paciente que evalúe la frecuencia de los síntomas de modo indeterminado o con una expresión tal como “recientemente”1, en otras se hace referencia a “su situación actual” 2, o a la semana previa 3.

 

De la interpretación se dice que la escala de Likert de cada ítem puntúa de 1 a 4 para los de sentido negativo, o de 4 a 1 para los de sentido positivo; el rango de puntuación es de 20 – 80 puntos. El resultado puede presentarse como la sumatoria de estas puntuaciones, o como puntuación normalizada (suma de las puntuaciones de cada ítem expresada como porcentaje de la máxima puntuación posible), oscilando en este caso el rango de valores entre 20 y 100.

 

En la bibliografía anglosajona se utiliza la puntuación normalizada, con los siguientes puntos de corte:

 

  • No depresión ≥ 50 (≥ 40 puntos)
  • Depresión leve 51-59 (41-47 puntos)
  • Depresión moderada 60-69 (48-55 puntos)
  • Depresión grave > 69 (> 55 puntos)

 

En nuestro medio se utilizan de forma indistinta ambos sistemas, el de puntuación normalizada y el de puntuación total con diferentes propuestas en lo que respecta a los puntos de corte. Conde y colaboradores proponen los siguientes puntos de corte:

 

  • No depresión < 35 (< 28 puntos)
  • Depresión leve 36-51 (28-41 puntos)
  • Depresión moderada 52-67 (42-53 puntos)
  • Depresión grave > 68 (> 53 puntos)

 

Otros autores han utilizado categorizaciones distintas. Así, Seva-Diaz A. (1982) propone la siguiente categorización:

 

  • No depresión < 40 (< 32 puntos)
  • Depresión leve 41-59 (33-47 puntos)
  • Depresión moderada-severa 60 (> 47 puntos)

 

Se ha cuestionado su validez de contenido, por el escaso peso que en la puntuación total tienen los síntomas psicológicos indicativos de alteración del estado de ánimo, por la inespecificidad y el elevado peso relativo de los ítems de contenido somático. Se ha señalado también su escasa sensibilidad al cambio en relación al tratamiento instaurado, así como su inadecuación para valorar cuadros depresivos cuando la intensidad de los síntomas es alta, ya que sólo tiene en cuenta la frecuencia y no la intensidad de los mismos. No se considera una escala adecuada para detección de casos en población geriátrica.

 

El elevado peso que tienen los síntomas somáticos en su puntuación total puede disminuir su capacidad discriminante en pacientes con enfermedad física. Tampoco valora adecuadamente algunos síntomas presentes en depresiones atípicas, como la hiperfagia o la hipersomnia.

 

La existencia de un doble sistema de puntuación, que se refleja en la bibliografía de forma indistinta y sobre todo, la falta de estandarización de los puntos de corte dificulta la comparabilidad de resultados y limita su utilidad tanto en la tipificación de intensidad / gravedad, como para la detección de casos.

 

En relación a las propiedades psicométricas tenemos que los índices de fiabilidad son buenos (índices de 0,70-0,80 en la fiabilidad dos mitades, índice de Cronbach entre 0,79 y 0,92) 6,20. En tanto su validez dado por los índices de correlación con otras escalas (escala de depresión de Hamilton, inventario de depresión de Beck) y con el juicio clínico global oscilan entre 0.50 y 0.80 lo cual informa sobre la presencia y severidad de la sintomatología depresiva, y es sensible a los cambios en el estado clínico; sin embargo la puntuación total no correlaciona significativamente con edad, sexo, estado civil, nivel educacional, económico, ni inteligencia.

 

Si bien esta escala no fue diseñada para cribaje, si muestra unos aceptables índices de sensibilidad (85 %) y especificidad (75%) cuando se aplica para detección de casos en población clínica o en población general 1, y ha sido ampliamente utilizada con esta finalidad.

 

En población geriátrica disminuye su validez, tanto para cuantificar la intensidad / gravedad de la depresión, como a efectos de cribado o detección de casos, debido al elevado peso relativo que tienen los síntomas somáticos en el puntaje total. Orientadas más hacia el paciente geriátrico, se han desarrollado versiones abreviadas, con menor peso de los síntomas somáticos, que han tenido una difusión muy limitada (66).


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La Escala de Depresión Geriátrica de Yesavage es un instrumento útil para el tamizaje del estado de depresión y sirve para guiar al clínico en la valoración del estado de salud mental del individuo. Es una herramienta que la puede aplicar el médico, el enfermero o el trabajador social y no sustituye una evaluación clínica profesional pero ofrece mejores índices psicométricos. Esta escala de depresión ha sido probada y utilizada puede utilizarse con las personas saludables y se recomienda específicamente cuando hay alguna indicación de alteración afectiva. Se ha utilizado extensamente en entornos comunitarios y de atención aguda y de largo plazo, también y con bastante frecuencia en la población de personas mayores.

 

Es un cuestionario breve en el cual se le pide al individuo responder a 15 preguntas, contestando sí o no respecto a cómo se sintió durante la última semana de la fecha en que se administró dicho cuestionario. Una puntuación entre 0 a 5 se considera normal, 6 a 10 indica depresión leve y 11 a 15 indica depresión severa.

 

En estudios realizados en los Estados Unidos, se ha encontrado que la Escala de Yesavage tiene una sensibilidad del 92% y una especificidad del 89% cuando se evalúa contra criterios diagnósticos. La validez y confiabilidad de la herramienta han sido apoyadas, tanto mediante la práctica como la investigación clínica (67).

 

Actividad física-terapéutica en la tercera edad.

 

Un factor que ha influido de forma relevante en el aumento de la expectativa de vida y su calidad en la población es la actividad física sistemática y bien dirigida, educando y desarrollando así la voluntad y las capacidades físicas y ejerciendo un importante papel en la personalidad y el mejoramiento del organismo. Es notable destacar el avance de la Rehabilitación con la Cultura Física-Terapéutica con el fin de desarrollar la salud de los ciudadanos.

 

La respuesta al ejercicio en los adultos mayores ha sido ampliamente evidenciada y su práctica regular contribuye al mejoramiento de la calidad de vida. Por otra parte, la valoración de la condición física constituye un paso necesario en el proceso de prescripción de ejercicio físico en los adultos mayores, así como la evaluación del adulto mayor antes de iniciar el programa de ejercicio. Un programa equilibrado debe incluir actividades encaminadas a conseguir cada uno de los tres objetivos de una buena coordinación física: aumentar la flexibilidad, incrementar la fuerza y elevar la resistencia cardiovascular sobre los tres componentes de cada sesión de ejercicios: el calentamiento, el ejercicio o entrenamiento y el enfriamiento, y se diseña para adaptarse al estado, necesidades de salud y problemas médicos de un paciente en concreto. Está demostrado que el ejercicio físico y el deporte, imprimen al que lo practica un aspecto más saludable y estético; permiten conservar mayor fuerza vital y física; ayudan a mantener y recuperar el equilibrio físico y psíquico; atrasan la involución del músculo esquelético, facilitan la actividad articular y previenen la osteoporosis y las fracturas óseas; intervienen en el envejecimiento cardiovascular previniendo la arteriosclerosis, mejorando la función endocrina, fundamentalmente de la suprarrenal (resistencia y adaptación al estrés), favoreciendo el equilibrio neurovegetativo y la actividad psicointelectual (68).

 

El cuerpo humano está hecho para ser usado de lo contrario se deteriora de ahí que el ejercicio físico sea una necesidad corporal básica; si se renuncia al ejercicio el organismo funciona por debajo de sus posibilidades físicas, por tanto, se abandona la vida. Un cuerpo que no se ejercita utiliza sólo alrededor del 27% de la energía posible de que dispone, pero este bajo nivel de rendimiento puede incrementarse hasta 56% con la práctica regular de ejercicio, este aumento de crecimiento orgánico podrá ser apreciado en todos los ámbitos de la vida. El trabajo y el tiempo libre se volverán menos agotadores y se disfrutará más las actividades a medida que la capacidad de desempeño aumente. Los cambios funcionales que se producen en el organismo humano en las edades avanzadas es decir la ancianidad, precisan de una diferenciación en cuanto a la selección de los ejercicios físicos, así como en la metodología de su ejecución (70). De igual forma el conocimiento de las características y particularidades anatómo-fisiológicas de las personas comprendidas entre estas edades, resultan imprescindibles para el equipo de Rehabilitadores del Servicio de Rehabilitación Integral (SRI). La Chamarreta, en la propia Área de Salud Integral Comunitaria (ASIC). (69).

 

El criterio médico es fundamental para poder desarrollar un plan de ejercitación con bases científicas. El médico a su vez tendrá en el trabajo de los rehabilitadores, una vía eficaz y económica para combatir las enfermedades crónicas no transmisibles y propiciar un estilo de vida más sano (70,71).

 

 

Reviste también gran importancia, como información, el conocimiento por parte del los Técnicos y/o Licenciados en Tecnología de la Salud, especializados en Rehabilitación, los Licenciados en cultura física y del médico especialista en Fisiatría el nivel de clasificación físico- terapéutica que presentan las personas de edad avanzada, (72) las que pueden estar en los siguientes grupos:

 

  1. Las que a lo largo de toda su vida han venido realizando ejercicios físicos con cierta intensidad.
  2. Las que desde siempre han mantenido una actividad constante, pero moderada.
  3. Las que en alguna etapa de su vida participaron en actividades vigorosas, que fueron abandonadas y esporádicamente retomadas.
  4. Las que nunca realizaron ejercicios físicos.

 

Al iniciarse el trabajo de ejercitación física con grupos de salud, además de la edad, se han de considerar los siguientes factores (73):

 

  • Estado general de salud de cada participante.
  • Sexo.
  • Tipos de enfermedades o padecimientos anteriores.
  • Interrogar sobre antecedentes médicos.
  • Descartar contraindicaciones absolutas.
  • Conocer la medicación que puede estar tomando.
  • Conocer la motivación por la que decide realizar el ejercicio.
  • Control sanitario adecuado.
  • Enseñar la actividad a realizar y fomentar la adquisición de hábitos positivos.
  • Hacer amena la actividad. Entorno adecuado.
  • Posibilitar la interrelación social.
  • Calentamiento suficiente previo al ejercicio y recuperación total al finalizar.
  • Actividad diaria o en días alternos.
  • Intensidad en torno a 50-65% de la frecuencia cardiaca máxima.
  • Evaluaciones periódicas.
  • Individualizar la planificación.
  • Nivel de preparación Física.
  • Condiciones Laborales y/o domésticas.

 

Es difícil hablar de un programa recreativo moderno, adecuado para las personas después del retiro, sin embargo se hace necesario el establecimiento de estas programaciones. En la actualidad se tiene en consideración la importancia de este grupo y la expectativa de vida de la población se valora altamente así como el nivel de vida, por eso las personas en edad de jubilación irán en aumento y la preocupación por este grupo ha de ser mayor. El programa para las personas en edad avanzada se debe realizar en lugares especiales para ellos, preferentemente al aire libre como por ejemplo en centros recreativos y deportivos, parques, plazas, asilos, centros de jubilados, etcétera (74).


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El creciente interés de las organizaciones e instituciones recreativas por este grupo de edades se observa en todo el mundo y la causa de esto es en primer lugar el aumento de esta población, así como el cambio del estilo de vida al jubilarse; este estilo de vida se caracteriza por un aumento considerable del tiempo libre, lo que da al grupo particularidades especiales (75).

 

Este tiempo libre debe ser utilizado para conservar la salud y las capacidades para la diversión y lograr realizar actividades independientes. Es conocido que médicos, biólogos y educadores físicos aseguran que un sistema racional y planificado con relación al ejercicio físico, lucha y se opone el proceso involutivo de la edad. En múltiples trabajos científicos se plantea que el mejor efecto desde el punto de vista de la salud lo contienen ejercitaciones regulares y ejercitaciones sistemáticas del gimnasio. Para las personas de la tercera edad el programa debe ser flexible y poco intenso, esto significa que debe ser extendido en el tiempo e incluir las actividades recreativo físicas para esa edad, muchas veces en coordinación con el médico. Las ocupaciones activas deben ser interrelacionadas con otras formas, las cuales se requiere que no exijan esfuerzo físico (76).

 

Una agradable experiencia en Cuba ha resultado la introducción de la práctica del ejercicio físico-terapéuticos en las Salas de Rehabilitación Integrales y los grupos de salud con vista al incremento del régimen motor y la capacidad de trabajo físico e intelectual de las personas de avanzada edad. Pero no hay que olvidar que el control médico y el autocontrol, unidos a la dosificación estrictamente individual de los ejercicios físicos-terapéuticos, constituyen los puntos de partidas más importante e insoslayables de este tipo de actividad. El chequeo médico en los policlínicos designados, según el lugar de residencia debe llevarse a efecto no menos de una vez cada seis meses (77).

Según los grupos médicos se planificaron las clases de cultura física para el adulto mayor en tres grupos de personas (78):

 

Grupo I: Personas mayores que han practicado ejercicio físico o deporte en toda su vida anterior y que son conscientes de sus posibilidades y siguen practicando ejercicio físico sin que se ponga peligro para la salud, con una buena capacidad física expresada en consumo de O2 / Kg. /minuto de aproximadamente 9 veces su consumo en reposo, o sea 9 Mets., y que puede realizar actividad física, ejercicio físico y deporte de carácter competitivo relativamente adaptado a su edad y condición física.

 

Grupo II: Personas mayores que han practicado deportes, entrenados pero inconscientes, que creen que su capacidad física no ha sufrido merma con la edad y pueden estar expuestos a accidentes y peligros para la salud. Estas personas suelen tener una capacidad de unos 6 Mets, y no deben participar en eventos deportivos competitivos, sino en juegos deportivos.

 

Grupo III: Personas mayores que nunca han realizados, ejercicio físico, ni participado en deporte alguno y su vida ha sido sedentaria, pero que al percatarse del envejecimiento pretenden conservarse jóvenes y activos, sin comprender que sus posibilidades físico-fisiológicas son muy limitadas y del orden de 2 o 3 Mets. En estas personas la actividad física debe orientarse con fines preventivos y de mantenimiento de la salud.

 

Los dos últimos grupos de adultos mayores son los que deben ser más vigilados y sometidos a pruebas funcionales para evitar accidentes, sobre todo cardiacos. Si en la evaluación no se hallan datos preocupantes sobre la capacidad para el ejercicio físico-terapéutico, debe recomendarse un entrenamiento físico que mejore sus capacidades físicas sobre todo la resistencia aeróbica, la fuerza general, la flexibilidad, y la coordinación, siempre debe tenerse como regla de oro evitar los esfuerzos máximos.

 

La duración de las diferentes etapas de clases, así como la permanencia de los alumnos en cada una de éstas depende única y exclusivamente del estado general de salud, y del nivel de preparación física alcanzado por los mismos (79).

 

Es necesario cumplir con las siguientes normas en la ejecución de los ejercicios físicos-terapéuticos, así contribuiremos a evitar complicaciones desde el punto de vista físico como las Fatigas Musculares, por lo que debemos comenzar por los ejercicios más sencillos y fácil ejecución, luego pasar a lo más complejos aumentando gradualmente su intensidad e ir incorporando sucesivamente al trabajo los principales grupos musculares de los brazos, piernas, espalda y abdomen.

 

Deben evitarse los estados de tensión excesiva, retención de la respiración y los esfuerzos estáticos. Al ejecutarse ejercicios complejos se recomienda hace, entre repeticiones, pausas de descanso de 30 y hasta 60 segundos. Al concluirse la sesión de ejercicios físicos, la intensidad de los mismos deberá disminuirse progresivamente, favoreciendo de esta forma el proceso de recuperación del organismo hacia los niveles de índices adecuados (80).

 

Las actividades recreativas bien dirigidas y organizadas, constituyen una actividad sana, alegre y educativa que contribuye positivamente al desarrollo psico-físico y social de los abuelos. Para una mejor utilización del tiempo libre, orientar una variada gama de actividades adecuadas a las características de las personas con edades avanzadas las cuales podrán participar en compañía de sus amigos familiares, ya que las mismas se vienen a todas (81).

 

Entre ellos están:

 

  • Juegos pasivos: También llamados juegos de mesas, son de la preferencia de los abuelos, como el Dominó, Parchís, Damas y Ajedrez, se pueden organizar campeonatos de corta y larga duración como actividades en la comunidad.
  • Las excursiones, festivales recreativos, los Campismos, cine debate y participación al concurso nacional de turismo deportivo, son actividades que deben formar parte del programa recreativo para las actividades comunitarias.
  • Las sesiones de ejercicio: Se estructurara sobre la base de las 3 partes definiéndose los métodos y procedimientos más empleados en las clases de Cultura Física.

 

No es tarea sencilla empezar un entrenamiento, toda vez que en muchas ocasiones nos encontramos con situaciones de origen psíquico y/o psiquiátrico que lentifican aun más todo proceso tendiente a la recuperación física. Por tal motivo es sumamente importante encarar el ejercicio físico en forma interdisciplinaria de acuerdo al tipo de patología o no que pueda presentar el geronte (82).

 

Los movimientos se pueden realizar en forma recreativa y lúdica existiendo una gran variedad de los mismos que posibilitan acceder a un entrenamiento acorde a las necesidades psico-físicas y económicas del entrenado; Los ejercicios pueden efectuarse en una camilla silla de ruedas o en el mismo lecho de reposo, al aire libre, en una plaza, parque o gimnasio de acuerdo a la necesidad y posibilidades de cada individuo, siendo importante en todos los casos "explotar" al máximo la imaginación con el objetivo de lograr un optimo y adecuado movimiento dentro de los rangos articulares y musculares que permita la anatomía de la persona sin perjuicio de que todo trabajo que se realice apunte a ampliar dichos rangos, mejorar la tonicidad muscular, coordinación, etc., alcanzando con ello una mayor auto validez y por ende confianza y autoestima (83,84).

 

Un estudio que examinó los hábitos de ejercicios de 28 personas de la tercera edad con problemas pulmonares crónicos durante más de un año halló que los ancianos que se ejercitan regularmente tienen mayor probabilidad de mantener las funciones cerebrales necesarias para cumplir tareas cotidianas como cumplir las instrucciones médicas y tomar sus remedios.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .10

Durante 10 semanas, los participantes se reunieron en un centro de salud en la Universidad de Duke en Durham, Carolina del Norte, para participar en un ejercicio aeróbico de una hora que incluyó caminatas, bicicleta fija, aerobismo en piscina y pesas. Durante las cinco primeras semanas se ejercitaron diariamente y después lo redujeron a tres por semana. Al comienzo y al final del período de 10 semanas, los investigadores sometieron a los participantes a una serie de pruebas emocionales, físicas y cognitivas. Algunos de los "tests" sirvieron para medir la función pulmonar, indagar por su estado de ánimo, asociar números a símbolos y controlar su capacidad para seguir instrucciones.

 

Tal como pronosticaron los investigadores, los resultados mejoraron después del ejercicio. Pero fueron las pruebas de seguimiento un año después las que los sorprendieron. Los investigadores dieron instrucciones a los participantes para mantener la rutina del ejercicio en sus hogares. Un año después les suministraron la misma batería de pruebas. Los expertos anticiparon que quienes mantenían los ejercicios revelarían continua mejoría en las pruebas. En cambio, los resultados indicaron que se necesitaban los ejercicios meramente para mantener los mismos niveles de desempeño (85).

 

Beneficios de la actividad física en el Área psíquica:

 

  • conserva ágiles y atentos los sentidos.
  • aumenta la ilusión de vivir.
  • aumenta la alegría y el optimismo.
  • refuerza la actividad intelectual.
  • mejora la interrelación social.
  • combate la soledad y el aislamiento.
  • mejora la imagen personal.
  • contribuye al equilibrio psicoafectivo.
  • mejora y facilita el sueño.

 

El ejercicio aeróbico está relacionado con un aumento del vigor mental, incluyendo el tiempo de reacción, la agudeza, y las habilidades mentales para las matemáticas.

 

El ejercicio puede incluso potenciar la creatividad y la imaginación. De acuerdo con un estudio, las personas mayores que están en forma responden a los retos mentales tan rápidamente como los adultos jóvenes sin forma física. (El estiramiento y el entrenamiento con pesas parecen no ejercer este efecto) (84, 85,86).

 

Tanto el ejercicio aeróbico como anaeróbico han mostrado reducir la depresión. De acuerdo con un estudio, el ejercicio fue tan eficaz para mejorar el estado de ánimo en las personas con depresión clínica como algunas formas frecuentes de psicoterapia. Los periodos breves de entrenamiento intenso o los ejercicios aeróbicos prolongados pueden aumentar las concentraciones de sustancias químicas importantes del cerebro, como las endorfinas, la adrenalina, la serotonina, y la dopamina, que producen sentimientos de placer, causando el llamado "bienestar del corredor" .

 

Por otra parte existen evidencias que señalan como los ejercicios aeróbicos rítmicos y el yoga pueden ser particularmente eficaces para combatir el estrés, la depresión y el insomnio en el adulto mayor.

 

La Cultura Física: es la parte de la cultura de la humanidad que expresa valores individuales de la cultura, su contenido especifico se fundamenta en el uso racional que da el hombre a su actividad motora con el fin de contribuir a la optimización de su desarrollo y rendimiento motor para enfrentar con éxito las tareas individuales y sociales, lo que repercute directamente en la calidad de vida.

 

El sistema de Cultura Física-Terapéutica: es el conjunto de elementos de la cultura física y los deportes que con integridad y unidad a los Servicios de Rehabilitación contribuyen, mediante sus relaciones, conexiones e interdependencia en forma organizada y debidamente estructurada, al bienestar físico y moral, la prevención y promoción de salud, la elevación de la maestría deportiva, el aprovechamiento del tiempo libre y en correspondencia con estos objetivos elevar la calidad de vida de toda la población (86).

 

El autor considera que la depresión es una patología frecuente del anciano pero que no se diagnostica o se diagnostica mal, ya sea porque no se reconoce sus síntomas, o que estos quedan encubiertos bajo los síntomas somáticos del deterioro cognitivo. La depresión no tratada puede tener consecuencias graves, como enfermedades físicas, deterioro psicosocial o el suicidio, esta enfermedad muchas veces se presenta conjuntamente con otras patologías propias de la vejez las cuales son mas visibles y mas atendidas, el anciano es relegado en todas sus actividades haciéndolo sentir inútil y generando en el sentimientos de frustración; no realiza actividades recreativas acorde a sus edad y mucho menos ejercicio físico, el cual aportaría considerables beneficios al paciente, tanto cardiovasculares, osteoarticulares y sobre todo a evitar o disminuir la depresión. El autor considera que en el aspecto socio psicológico, el ejercicio físico-terapéutico en el SRI dónde acuden estos ancianos mejoraría el estado de ánimo, disminuiría la depresión y la ansiedad, elevaría el vigor, la autoestima y la imagen corporal, ofrecería oportunidades de distracción e interacción social, que ayuda a mejorar el enfrentamiento al estrés de la vida cotidiana, disminuyendo así los niveles de depresión y mejoraría la calidad de vida.

 

Control semántico.

 

  • Relaciones armoniosas: relaciones interpersonales basadas en respeto, amistad y buena correspondencia, con alta compatibilidad con los que los rodean.
  • Relaciones inestables: relaciones interpersonales que varían rápidamente entre los sentimientos y los estados emotivos, con el grupo de personas con las cuales habita, así como, altibajos del ánimo, sin motivo o por causas insignificantes.
  • Relaciones conflictivas: relaciones interpersonales enmarcadas en altos niveles de violencia, desequilibrio de las responsabilidades, irresponsabilidad en el desempeño de roles.

 

Objetivos.

 

Objetivo General:

 

Determinar la influencia del ejercicio físico sobre la depresión en la población geriátrica incorporada al Servicio de Rehabilitación Integral. La Chamarreta. Septiembre 2008 a agosto 2009.

 

Objetivos Específicos:

 

  • Distribuir variables demográficas tales como edad, sexo, escolaridad, estado civil, de los pacientes con 60 años o más incorporados al ejercicio físico en el Servicio de Rehabilitación Integral. La Chamarreta.
  • Evaluar el grado de salud geriátrica a los pacientes incorporados al ejercicio físico en el Servicio de Rehabilitación Integral del Área de Salud Integral Comunitaria.
  • Identificar la presencia de depresión en los pacientes geriátricos incorporados al ejercicio físico-terapéutico en la Sala de Rehabilitación.
  • Determinar el comportamiento de la depresión antes y después de estar incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .11

Diseño metodológico.

 

Material y método.

 

Diseño de la investigación.

 

Se realizó un estudio de tipo intencional y de acuerdo, con el número de mediciones de las variables longitudinal-analítico, de corte epidemiológico y de enfoque cuantitativo para determinar la influencia del ejercicio físico-terapéutico en la población geriátrica sobre la depresión de los ancianos mayores incorporados al SRI del área de salud integral comunitaria. (87.88)

 

Delimitación de la investigación.

 

Delimitación Temporal: La investigación se realizó entre los meses de Septiembre del 2008 y agosto de 2009.

 

Delimitación Espacial: Se realizó en la comunidad de la ASIC La Chamarreta de la Parroquia Francisco Eugenio Bustamante, del municipio Maracaibo, estado Zulia.

 

Delimitación de Persona: Participaron en la investigación los adultos mayores de 60 años y más, que tributan al Servicio de Rehabilitación Integral de área de Salud.

 

Población y muestra del estudio.

 

El universo estuvo conformado por 272 pacientes de 60 años y más que asiste al SRI de la ASIC y la muestra fue de tipo intencional por reunir características comunes en afecciones depresivas y alteraciones en su estatus psicológico, siendo de 37 pacientes, que representaron el total de ancianos incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI para un 13,6%, que lleven 6 meses o más participando en el mismo.

 

Criterios de inclusión.

 

  • Deseo y consentimiento manifiesto de participar en la investigación.
  • Adultos mayores de 60 años o más.
  • Que posean algún nivel de depresión manifiesto.
  • Que participen de manera continua y periódica en las sesiones de rehabilitación del SRI de la ASIC La Chamarreta.

 

Criterios de exclusión.

 

  • Negativa de participar en la investigación.
  • Menos de 6 meses de participación en las sesiones de ejercicio.
  • Que no cumplan con los criterios de inclusión.

 

Criterios de salida.

 

  • Inasistentes en más de 6 ocasiones en el transcurso de los 6 meses.
  • Enfermedades que invaliden las prácticas de los ejercicios.

 

Recolección de la información.

 

Para medir las variables de estudio a todos los pacientes seleccionados se les aplicó un cuestionario por el investigador denominado: Cuestionario de Ejercicio y Depresión (ver anexo N° 2), el cual consta de varias secciones, una primera sección, la del título del cuestionario y datos de identificación donde sólo se colocaron, las iniciales del participante en la investigación, edad, sexo, grado de instrucción y una segunda sección, donde se evalúa el grado o no de depresión que posee la persona. Este cuestionario se aplicó al inicio del estudio y a los 06 meses con el fin de conocer y comparar la influencia del ejercicio desde el punto de vista biopsicosocial, así como para comparar nuestros resultados con otros estudios similares.

 

Los ejercicios se realizaron al aire libre, en el patio del SRI, con una frecuencia de tres veces por semana, orientados por un Licenciado en Tecnología de la Salud especializado en Rehabilitación, una enfermera que nos apoya en el control de los signos vitales antes, durante y después de cada una de las tandas de ejercicio, así como un médico para la atención ante cualquier emergencia médica y siguiendo las indicaciones de Ceballo Díaz según el Programa de actividades físicas para los grupos de abuelos, y que ha sido validado en Cuba precisamente en adultos mayores (ver anexo Nº 3).

 

Definición de las variables.

 

Edad: (cuantitativa continúa) Medida en años, se consideró la que tenían los pacientes en el momento de la recolección de los últimos datos, se tuvieron en cuenta los grupos etarios agrupándolos en una escala abierta con intervalos de igual amplitud:

 

  • De 60 a 64 años.
  • De 65 a 69 años.
  • De 70 a 74 años.
  • De 75 y más

 

El sexo: (Cualitativa Nominal Dicotómica) se definió por sí mismo: masculino y femenino.

 

El Estado civil: (Cualitativa Nominal) Quedó establecido de la siguiente forma:

 

  • Casado: Cuando existía una relación de pareja legalizada ante la ley.
  • Acompañado: Cuando existió una relación de pareja no legalizada ante la ley.
  • Soltero: Nunca se ha casado o era divorciado.
  • Viudo: Permanecía sin pareja luego de que ésta había fallecido.

 

Escolaridad: (Cualitativa Ordinal) Nivel intelectual alcanzado mediante el aprendizaje.

 

  • Iletrado: No ha alcanzado grado alguno.
  • Primaria: Sexto grado culminado.
  • Secundaria: Haber terminado el noveno grado.
  • PRE-Universitario: Doce grado terminado.
  • Universitario: Universidad terminada.

 

Grado de Salud: (Cualitativa Ordinal) Se medió la capacidad funcional del anciano de atenderse a sí mismo y además en el seno familiar y la sociedad. Clasificación avalada por la Asociación Mexicana de Gerontología y Geriatría. (89).

 

  • Grado I: El anciano puede desempeñarse en el macro mundo social, en el micro mundo familiar y es capaz de atenderse a sí mismo.
  • Grado II: El anciano puede desempeñarse en el micro mundo familiar y es capaz de atenderse a sí mismo.
  • Grado III: El anciano sólo puede atenderse a sí mismo.
  • Grado IV: El anciano no es capaz de atenderse a sí mismo.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .12

Esfera Psicológica: (Cualitativa Ordinal) Nos apoyaremos en la escala de depresión geriátrica de Yesavage (anexo 2) que evalúa con treinta, de sí ó no, el nivel de depresión del paciente. Considerando según el número de respuestas subrayadas:

 

  • 0-10 normal
  • 11-14 depresiones menores
  • 15 ó más depresión mayor

 

Para evaluar el grado de satisfacción del anciano (cualitativa ordinal) respecto a sus necesidades básicas y entorno familiar antes y después de su incorporación al círculo del adulto mayor se tendrán en cuenta: el número de familiares que residen con el anciano y la participación del mismo en las actividades del hogar, opiniones, decisiones y relaciones personales. De acuerdo con los parámetros señalados se establecerán tres condiciones determinadas por el autor como sigue:

 

Satisfecho:

 

  • Sano o al menos con una enfermedad crónica, que no haya requerido ingreso hospitalario.
  • Satisfecho con las necesidades básicas.
  • Relaciones armoniosas con el núcleo familiar.
  • Satisfecho con su hogar.

 

Poco Satisfecho:

 

  • Con dos enfermedades crónicas y que una de ellas haya requerido ingreso hospitalario.
  • Conforme con las necesidades básicas.
  • Relaciones inestables con el núcleo familiar.
  • Satisfecho con su hogar.

 

Insatisfecho:

 

  • Con más de dos enfermedades crónicas que ha requerido ingresos hospitalarios frecuentes por descompensación.
  • Insatisfecho con las necesidades básicas.
  • Relaciones conflictivas con el núcleo familiar.
  • Insatisfecho con su hogar.

 

Consentimiento informado.

 

A todos los pacientes que sean objetos de esta investigación se les pidió la disposición por escrito para participar en la misma, habiéndoles informado previamente en qué consiste y su importancia. Una vez recogidos y procesados los datos de este estudio permanecerán en el anonimato los nombres de las personas que intervinieron cuando demos a conocer los resultados. (Anexo 1)

 

Métodos empleados.

 

Como en toda investigación de salud, desempeñan un papel fundamental los métodos empíricos, estadísticos y teóricos, en la presente investigación los mismos fueron aplicados como a continuación se exponen:

 

Métodos Empíricos: Permitieron la obtención y elaboración de los datos y fueron: análisis documental, observación y la aplicación de la encuesta en los pacientes, que posibilitaron el diagnóstico, sobre el punto de partida de la investigación.

 

o    Revisión de documentos. La misma fue exhaustiva, referente a la importancia, repercusión, magnitud de la situación a nivel mundial de la enfermedad e interés que representa para lograr una mejor calidad de vida.

o    Observación. Este método se aplicó en la investigación, ya que al observarse la presencia de gerontes que manifestaban grados variables de depresión, motivó al autor para la realización de este estudio.

o    Entrevista. Es el registro primario donde se recolectaron los datos de cada uno de los pacientes, que permitieron realizar posteriormente un análisis de los mismos.

 

Métodos Estadísticos: Cumplieron una función relevante en la investigación ya que contribuyeron a la tabulación, procesamiento y generalizaciones apropiadas a partir de los mismos.

En esta investigación, se aplicaron los métodos descriptivos, lo que permitieron tabular los distintos datos del tema objeto de esta investigación, se expresaron en por cientos y frecuencia, utilizando los datos provenientes de los pacientes, permitiéndole al consultor de la tesis, extraer sus propias conclusiones y recomendaciones.

 

Métodos Teóricos: los mismos permitieron la construcción y desarrollo de la teoría científica y el enfoque general para abordar el problema científico.

 

En este trabajo de investigación, el proceso investigativo desarrollado, está sustentado en el Método Filosófico General Dialéctico Materialista, como soporte principal de la misma.

 

Los métodos teóricos de la ciencia, utilizados fueron: el analítico - sintético, el inductivo - deductivo, el método de tránsito de lo abstracto a lo concreto, el histórico – lógico, el hipotético – deductivo, la modelación y el enfoque sistémico, estos permitieron el camino para alcanzar los resultados y fueron aplicados los siguientes:

 

  Analítico – sintético: Este método está a lo largo de la investigación, permitiendo diagnosticar y sintetizar el objeto de estudio, utilizándose desde la revisión bibliográfica, documental, hasta la formación de los aspectos teóricos fundamentales sobre el tema abordado.

 

  Inductivo – deductivo: Al generalizar los resultados de los estudios bibliográficos y documentales, que se efectuó en el desarrollo de la investigación, con lo cual se fue conformando los aspectos fundamentales de cuerpo de la misma, se materializa las propuestas para determinar la influencia del ejercicio de estos pacientes en el SRI de la ASIC .

 

  Método del tránsito de lo abstracto a lo concreto: es el único camino que puede seguir el conocimiento humano para reproducir de manera teórica adecuada el conocimiento, lo primero se refiere al conocimiento racional y lo segundo al conocimiento empírico. La unión de lo uno y lo otro conduce a la práctica más acabada, la cual está sustentada en el vínculo adecuado y lógico de la teoría con la práctica, llevado a cabo en todo este proceso investigativo.

 

  Histórico – lógico: se cumple debido a que se inicia de una revisión exhaustiva de toda la evolución que ha tenido el ejercicio físico-terapéutico y la ancianidad en el desarrollo de la humanidad.

 

  Modelación: Como método teórico se justifica porque se realizan propuestas que sirven de base para emprender nuevas acciones que pueden contribuir al mejor diagnostico de la entidad motivo de estudio.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .13

  Enfoque en sistema: Este enfoque está a lo largo de la investigación, siendo su esencia fundamental la relación lógica y armónica de todos los elementos considerados en el desarrollo de la investigación.

 

La estrategia investigativa que se aplicó, responde al paradigma critico-social, para poder llegar a las dificultades que se presentan en la actividad de diagnostico, control y seguimiento de pacientes de la tercera edad con niveles variados de depresión y sus actividades relacionadas con el ejercicio físico.

 

Procesamiento de la investigación.

 

Para la recogida de toda la información se utilizó un modelo de recolección de datos (anexo2) redactado por el autor y que se les aplicó antes de incorporarse al programa de ejercicios físicos-terapéuticos y después de 6 meses de participar en el mismo. Se usó como instrumento de recolección del dato primario la observación documental a través de las historias clínicas y del test psicológico, además de la observación del paciente. Los datos fueron recolectados (por el médico). Para el procesamiento de la información se utilizó una microcomputadora Celeron en un ambiente de Windows Xp, los textos se procesaron en Word Xp y los datos quedaron resumidos en frecuencias absolutas y porcentajes y representados en forma de tablas y gráficos usando el Excel Xp. El procesador estadístico utilizado fue el SPSS en su versión 8 dónde se utilizó la prueba de Chi-cuadrado para determinar si existe dependencia entre algunas variables considerando la existencia de una diferencia significativa si p< 0,05.

 

Resultados y discusión.

 

La salud mental implica la capacidad de un individuo para establecer relaciones armónicas con otros y para participar en modificaciones de su ambiente físico y social. Los resultados obtenidos en la presente investigación corresponden a la práctica del ejercicio físico-terapéutico, mediante un programa de carácter grupal destinado a una población de adultos mayores.

 

TABLA 1. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/terapia_depresion_actividad

 

La tabla 1 nos muestra como de un total de 272 personas mayores de 60 años, sólo 37 se incorporaron y permanecieron por más de 6 meses realizando ejercicios lo cual representó el 13,6% del universo; en tanto 235 gerontes para el 86,4 % no se incorporaron a la práctica de ejercicios físicos hecho que a nuestro criterio obedeció a la influencia de factores de tipo socio históricos, pues esta población, de manera general, no obtuvo en su infancia/juventud posibilidades educativas adecuadas, y el ejercicio no poseía para ellos importancia en relación al mantenimiento de la salud, la presencia del Médico Especialista en Fisiatría, el Licenciado en Tecnología de la Salud, especializado en Rehabilitación, una enfermera para el control de los signos vitales antes, durante y después de cada una de las fases del programa de ejercicio físico-terapéutico aplicado y la asesoría del Licenciado en Cultura Física de la comunidad .

 

TABLA 2. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI de la ASIC La Chamarreta según grupos de edades y sexo. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/distribucion_edad_sexo

 

En la tabla 2,se muestra la distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico según grupos de edades mostró la mayor frecuencia para el grupo de edades comprendidas entre los 60 y 64 años de edad con 15 gerontes que representaron el 40,5% del total, seguido del grupo de 65 a 69 años con 12 incorporados para un 32,4%, en tercera posición se ubicó el grupo de gerentes de 70 a 74 años con 7 para el 18,9% y el menor número de casos se presentó en el grupo de 75 años y más con 3 ancianos incorporados representando el 8,1% de la muestra en estudio.

 

Existió una relación inversamente proporcional entre la edad y la incorporación al ejercicio físico en el SRI lo cual viene dado a nuestro criterio porque en primer lugar disminuyen las capacidades funcionales de los ancianos, fundamentalmente cardiovasculares a medida que aumenta la edad, lo cual limita el ingreso de ancianos al Círculo del Adulto Mayor y por otro lado se vive menos después de los 75 años con lo cual menor número de personas se ubican en las edades mayores, lo que haría que el por ciento para ese grupo, fuera mayor. Obviamente lo anterior bien puede explicarse a través de las teorías del envejecimiento físico presentadas y comparadas en el Congreso de la American Asociación for the Advancement of Sciencecelebrado en 1974 y que incluyen: el disfuncionamiento del sistema inmunológico, los mecanismos de envejecimiento inherentes a las células, las alteraciones del sistema endocrino, los desencadenantes genéticos, la teoría del desgaste y la teoría de los desechos (87). Todas ellas continúan siendo los principales modelos actuales del envejecimiento físico. Similares resultados obtienen otros autores en sus investigaciones en adultos mayores. En la tabla 2 además podemos observar como el sexo predominante en nuestro estudio fue el femenino con 23 casos para un 62,2 % de la muestra estudiada y de ella la mayor frecuencia de mujeres se ubicó en el grupo de 60 a 64 años con 9 incorporadas para un 24,3%, en segundo lugar se ubicaron 7 féminas en el grupo de 65 a 69 años para el 18,9%, seguido del grupo de 70 a 74 años con 5 incorporadas representando el 13,5 % y por último 2 ancianas del grupo de 75 años y más, para el 5,4 % (88,89).

 

Obviamente la mujer vive más que el hombre y ello está avalado por los indicadores del año 2005 de la Organización Panamericana de la Salud donde se publica que la esperanza de vida en Venezuela es de 76,4 años para las mujeres y 70,5 años para los hombres(93). Nuestros resultados coinciden también con otros estudios de género relacionados con la tercera edad, como los de Aguirre de la Universidad del Zulia (90).

 

Es criterio del autor de esta investigación que para ambos sexos el número de incorporados al programa de ejercicios físicos-terapéuticos disminuyó a medida que la edad en años avanzó debido obviamente a que con los años se acorta el tiempo de vida y por ende hay menor número de personas a medida que se envejece, es decir como resultado de la mortalidad; pero también influyó la presencia creciente de las enfermedades invalidantes y de la poca significación que ha tenido la práctica del ejercicio para la salud en esta población.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .14

TABLA 3. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI. La Chamarreta según estado civil. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/ancianos_estado_civil

 

En la tabla 3, relacionada con el estado civil de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico encontramos que el 72,9 % de ellos mantenían algún tipo de unión, el 40,5% de los mismos (15 casos) la condición de acompañado y el 32,4 % (12 casos) estaban casados; en tanto 8 eran solteros para un 21,6 % y el 5,4% restante lo integraron 2 viudos.

 

Fue favorable que la mayoría de los adultos mayores incluidos en nuestro estudio vivieran en unión y hay que estar atentos con los que no tenían pareja y se sentían solos porque la soledad forma parte de la condición humana, se puede presentar en algún momento y se acompaña habitualmente de la tristeza; pero debe ser abordada para saber cómo prevenirla antes de que sea demasiado tarde y enfrentarse a ella si se torna insoportable para dominarla y trascenderla. Coinciden con este criterio otros autores (91,92).

 

Resultados similares encontramos en un estudio publicado con motivo del Día Internacional de las Personas de Edad, que reportó como en México en el año 2000 en la población de 60 años y más, 54 de cada 100 personas eran casadas y alrededor de 29 viudas(93).

 

TABLA 4. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI. La Chamarreta según grado de escolaridad. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/ancianos_grado_escolaridad

 

La tabla 4 nos muestra el grado de escolaridad de los adultos mayores incorporados al programa de ejercicios físicos-terapéuticos Círculo de Abuelosia, donde el 86,5% correspondió a 32 ancianos con un grado de instrucción primario, seguido de 3 gerontes iletrados (8,1%) y solo 2 con nivel secundario para un 5,4%, no hubo un solo caso con escolaridad preuniversitaria ni universitario en la muestra estudiada. El bajo grado de instrucción presente en esta investigación estuvo asociada a la carencia de recursos económicos necesarios para poder acceder a estudios superiores antes de la Constitución Bolivariana (94).

 

Coincide esta valoración con los resultados reportados por el Censo General de Población y Vivienda efectuado en México, dónde se destaca que de cada 100 personas de 60 años y más, 36 no tienen instrucción formal, 35 tienen la primaria incompleta, 16 cuentan con la primaria terminada, seis tienen algún grado aprobado de secundaria y siete estudios posbásicos. El promedio de escolaridad de este grupo de población es de 3.6 años para los hombres y 3.1 años las mujeres, es decir, en promedio, tres años de primaria (95).

 

TABLA 5. Distribución de los adultos mayores según grado de salud geriátrica antes de incorporarse al ejercicio físico-terapéutico en el SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/ancianos_grado_salud

 

En la tabla 5 se muestra el grado de salud de los adultos mayores antes de ser incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el SRI, el 78,4% correspondió al grado I con 29 ancianos capaces de desempeñarse en el macro mundo social, el micro mundo familiar y de atenderse a sí mismos en orden decreciente se ubicaron 7 ancianos para un 18,9% en el grado II pues no eran capaces de desempeñarse en el macro mundo social y en el grado III se ubicó un adulto mayor que representó el 2,7% de la muestra cuya marginación (no se tiene en cuenta su participación en el hogar) le impedía desenvolverse en el macro mundo social y el micro mundo familiar. Los resultados obtenidos se explicaron por la angustia a la enfermedad que suele experimentar la persona de la tercera edad relacionada muy frecuentemente con el miedo a la pérdida de la validez física o psíquica, lo que significa indefectiblemente convertirse en una carga para los «otros», un peso en dinero o trabajo para su entorno familiar. Esta valoración se corresponde con la bibliografía revisada en la que varios autores manifiestan como la presencia de alteraciones de la salud biológica, psicológica y entorno social en los adultos mayores les provocan limitaciones para realizar actividades de la vida cotidiana, afectando la autonomía de los ancianos y su capacidad funcional de atenderse a sí mismo, de desarrollarse en el seno familiar y de relacionarse con la comunidad (96, 97).

 

TABLA 6. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico según esfera psicológica al inicio y al final de la investigación. SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/psicologia_depresion_mayor

 

 X2, p= entre 0.05 – 0.01.

 

La tabla 6 se muestra la distribución de los ancianos al inicio y luego de los seis meses de incorporados al ejercicio físico-terapéutico según la valoración de la esfera psicológica en que se encontraban, en la misma al inicio el 70,3% dado por 26 gerontes fueron evaluados como psicológicamente normal, lo cual aumentó a 33 adultos mayores con evaluación de normal al pasar apenas 6 meses de estar practicando ejercicios lo que representó el 89,2% del total de incorporados. De forma similar se ubicó en segundo lugar la depresión menor con 10 casos para un 27% al inicio y apenas 4 casos que representaron el 10,8% luego de seis meses; existió un solo caso de depresión mayor al inicio que dejó de estar en esta clasificación luego de seis meses de práctica de ejercicios físicos.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .15

En los resultados de la tabla 6 el cálculo del Chi cuadrado fue igual a 4.1, con lo que podemos afirmar que hay una probabilidad entre el 95 % y el 99 % de que exista asociación entre la práctica del ejercicio físico y los niveles de depresión. Con una p = entre 0.05 – 0.01.

 

En opinión del autor estos resultados se deben al efecto de la socialización y la práctica sistemática del ejercicio físico sobre la salud psicológica del anciano. Lo cual ha sido objeto de varios y profundos estudios no sólo de fisiólogos y científicos del entrenamiento sino incluso de sociólogos debido al tratamiento que a los ancianos se les debe dar como sujetos válidos.

 

González Ravé y Vaquero en sus indicaciones sobre el entrenamiento de fuerza y resistencia en ancianos manifiestan que la sociedad ha desahuciado ciertos dogmas que sedentarizan a los individuos mayores, por eso mismo, por ser mayores. Esta evolución genera alternativas de ocio a ese grupo de edad llevándoles a la depresión no resultando fácil empezar un entrenamiento con situaciones de origen psíquico, de ahí la importancia de la práctica sistemática de ejercicios físicos desde etapas tempranas de la vida. Para Orriols, luego de analizar el resultado de encuestas dirigidas a ancianos en el año 2002, plantea que parte de la depresión en los gerontes se debe al hecho de que los ancianos aislados aprovechan poco las ocasiones que les brinda la sociedad para relacionarse: más de la mitad no participan en ninguna actividad cultural, recreativa, religiosa o social; en estas condiciones, la televisión es su único medio de escapar de la realidad (98,99).

 

López Masó y Rodríguez Hernández (99) en un estudio de intervención a un grupo de ancianos previamente identificados como deprimidos (en dos consultorios del médico de la familia pertenecientes al policlínico "Dr. Gustavo Aldereguía Lima" de la provincia Las Tunas, en Cuba) y con el objetivo de mejorar o eliminar este estado de ánimo negativo; en un universo constituido por 48 seniles deprimidos, de los cuales 21 son el grupo de estudio y 27 el grupo control encuentran , un predominio de la depresión grave muy contrario a nuestros resultados y al resto de la bibliografía revisada y si coinciden en que la totalidad de los deprimidos leves mejoran posterior al programa psicoterapéutico. Estas investigadoras atribuyen este resultado a que el estado emocional leve provoca la instalación de síntomas más fácilmente modificables y por ende susceptibles de tratamiento psicoterapéutico.

 

TABLA 7. Distribución de los adultos mayores al inicio de la incorporación al ejercicio físico –terapéutico según sexo y esfera psicológica. SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/depresion_mayor_menor

 

La tabla 7 nos muestra la distribución de los adultos mayores según sexo y esfera psicológica al inicio de integrarse al programa de ejercicios físicos-terapéuticos mostró que el 40,5% dado por 15 mujeres no mostraron depresión seguido por 11 hombres para el 29,7%. Las alteraciones de la esfera psíquica presentó la mayor frecuencia de depresión en el sexo femenino con 7 ancianas con depresión menor para un 18,9% y una con depresión mayor para un 2,7%. En el sexo masculino se presentaron solo 3 casos de depresión menor que representaron el 8,1% del total de ancianos incorporados al programa de ejercicios físicos-terapéuticos. Respecto al sexo, el hecho de que la mujer estuvo más afectada por la depresión pudiera deberse a la connotación del género en el efecto sobre los datos de morbi-mortalidad de la conducta de enfermar de las féminas, entendiéndose por ésta la percepción y preocupación por los síntomas y la disposición de hablar de ellos al médico. De lo anterior se dedujo que es importante lograr que el hombre deprimido entienda y acepte la idea de que la depresión es una enfermedad real que requiere tratamiento.

 

En estudio preliminar realizado por la Dra. Silberman y colaboradores (99) en la ciudad de Sao Paulo en Brasil, el 67% de la población geriátrica estudiada pertenece al sexo femenino lo cual consideran se debe a que las mujeres son las que acuden en mayor medida por depresión a las consultas, pues les es más fácil reconocer la necesidad de ayuda médica, por otro lado asumen que en esta investigación hay más féminas porque viven más años que los hombres. Algunos autores (100) manifiestan que la depresión se da en la mujer con una frecuencia casi el doble de la del hombre y que en ello influyen factores hormonales, además plantean que muchas mujeres tienen más estrés por las responsabilidades del cuidado de niños y ancianos, el mantenimiento del hogar y un empleo. Otros (100,101)señalan que las drogas (inclusive el alcohol) enmascaran la depresión en el hombre más comúnmente que en la mujer e igualmente, el hábito socialmente aceptable de trabajar en exceso; no es raro que la depresión se exprese con irritabilidad, ira y desaliento en el hombre, en lugar de sentimientos de desesperanza o desamparo manifiestos en la mujer; incluso cuando el hombre se da cuenta de que está deprimido, comparado con la mujer, tiende menos a buscar ayuda.

 

Tabla 8. Distribución de los adultos mayores según estado civil y esfera psicológica al inicio y final de la investigación. SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/modificacion_estado_civil

 

La tabla 8 nos muestra la distribución de los adultos mayores según el estado civil y la esfera psicológica al inicio y final de la investigación, en ella se observó que en el estado civil acompañado el 35,1% (13 ancianos) fueron evaluados como psicológicamente normal al inicio de la investigación y a los 6 meses ya todos es decir 15 para un 40,5% del total estaban ubicados en esta condición de salud psíquica. En orden le sigue el grupo de los gerontes casados, de ellos 11 para el 29,7% del total mostraron un estado de salud psicológica normal al inicio y el único caso con depresión menor representado por el 2,7 % del total logró pasar al estado normal a los seis meses de incorporados a los ejercicios. De los 6 ancianos solteros con depresión menor (16,2%) solo la mitad es decir 3 gerontes recuperaron el estado de salud mental normal.

 

El efecto de la incorporación al programa de ejercicios físicos-terapéuticos en el SRI manifestó mejores resultados en el hecho de estar casado o acompañado pues en primer lugar en estos grupos se presentó el menor número de depresiones, todas leves y todas resolvieron a seis meses de participar en el programa. En contraposición el no tener pareja se representó en la depresión menor en 7 ancianos (el 18,9%), de ellos 3 (el 8,1%) recuperaron el estado psicológico normal y el adulto mayor viudo con depresión mayor pasó a ser valorado como depresión menor al término de la investigación ello significa que el fallecimiento de su pareja resultó una experiencia vital traumática para este anciano.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .16

Existen ancianos para quienes la soledad es una fuente de sufrimiento y puede dar lugar a una verdadera desaferentación afectiva con riesgo de depresión y de suicidio. De ahí que algunos autores (111, 112) señalen que la aptitud para la soledad se halla relacionada con la «capacidad de estar solo», capacidad que se basa en una buena elaboración personal de la angustia por separación o pérdida. Está demostrado que el matrimonio, hasta cierto punto, protege de la depresión, a ambos sexos y que la tasa de depresión aumenta tras la pérdida del cónyuge, ello pudiera estar en relación a que para el anciano el mundo interior adquiere dimensiones y el mundo exterior deja de ser, en la misma medida, interesante y valioso a las puertas de la depresión (101).

 

TABLA 9. Distribución de los adultos mayores incorporados al ejercicio físico-terapéutico según grados de satisfacción al inicio y final de la investigación. SRI. ASIC La Chamarreta. Septiembre 2008 – Agosto 2009.

 

ejercicio_fisico_depresion/grado_de_satisfaccion

 

X2, p= entre 0.05 – 0.01.

 

En la tabla 9 se nos muestra el grado de satisfacción de los adultos mayores, al inicio predomina la valoración de poco satisfechos en el 45,9% de los ancianos representado por 17 casos, seguido de los satisfechos con 13 gerontes para un 35,1% y 7 adultos de la tercera edad (el 18,9%) estaban insatisfechos.

 

Al final de la investigación mostró que estaban satisfechos 23 ancianos correspondiéndose con el 62,2% del total, en orden decreciente se ubicaron 12 gerontes para un 32,4% en la valoración de poco satisfechos y se mantuvieron 2 adultos mayores en la categoría de insatisfechos para el 5,4% del total de la muestra estudiada. Luego de seis meses de incorporación a la práctica de ejercicios físicos-terapéuticos 12 ancianos se mantuvieron poco satisfechos lo cual estuvo dado por la condición de 3 de ellos padecer 2 enfermedades crónicas y de los cuáles uno requirió ingreso hospitalario, los 9 gerontes restantes se manifestaron inconformes con las necesidades básicas y con su hogar. Los 2 ancianos insatisfechos aún al final de la investigación presentaron menos de 80 mil bolívares percápita, Insatisfacción con las necesidades básicas, relaciones conflictivas con el núcleo familiar y no estuvieron de acuerdo con su hogar.

 

En los resultados de la tabla 9 el cálculo del Chi cuadrado fue de 5.41, con lo que podemos afirmar que hay una probabilidad entre el 95 % y el 99 % de que exista asociación entre el grado de satisfacción y la práctica del ejercicio físico-terapéutico. Con una p= entre 0.05 – 0.01.

 

De lo anterior pudimos establecer que los problemas de salud familiar ejercieron su influencia sobre la salud individual, determinándola a través de las prácticas saludables, o patógenas seguidas por el grupo familiar. Un modo de vida familiar saludable promueve la salud de sus miembros y por ende la de los ancianos, mientras que un modo de vida familiar no saludable puede llegar a enfermar a los integrantes de la familia. Un ambiente familiar con problemas constituye una fuente de tensión emocional para sus integrantes que no les permite sentirse satisfechos con su hogar. Nuestros resultados se debieron a que en aquellas depresiones en las que predominan factores psicosociales las expectativas farmacológicas son menores y la utilización de técnicas psicológicas o de un abordaje psicosocial, así como la práctica del ejercicio físico-terapéutico fueron fundamentales para el control de la crisis y la profilaxis de nuevos episodios. Sin embargo, a opinión de otros autores (104,105) no pueden establecerse, siempre, cortes dicotómicos estrictos, ya que en algunas depresiones endógenas la personalidad de base neurótica, la conflictiva familiar generada por la enfermedad o las secuelas socio-ambientales y laborales del propio trastorno pueden aconsejar complementar el tratamiento biológico con un abordaje psicoterápico.

 

Algunas investigaciones señalan que en las depresiones neuróticas los antidepresivos reducen síntomas y evitan recaídas, mientras que la psicoterapia es fundamental para incidir sobre la personalidad y reajustar las relaciones interpersonales (106,107). Márquez y Meléndez (102), de la Universidad de los Andes, basan su investigación en la promoción humana en la tercera edad como una experiencia en la orientación gerontológica encaminada a elevar la calidad de vida del anciano y la adaptación de éste al su ciclo vital y medio externo.

 

Para Ballus(102) en la depresión cabe utilizar distintos tipos de recursos como los psicológicos, los higiénico ambientales, los farmacológicos, los llamados biológicos y los ergoterápicos; algunos de los cuales señala conciernen su empleo sólo al psiquiatra, mientras otras modalidades son perfectamente utilizables por el médico general. El equipo de salud representado por el médico especialista en Fisiatría, el Licenciado en Tecnología de la Salud, especializado en Rehabilitación y/o Técnico en Rehabilitación, la enfermera, así como el Licenciado en Cultura física, utiliza estrategias que han demostrado mejorar el estado de salud física, psíquica y social del adulto mayor contribuyendo de hecho a la rehabilitación en el SRI, en la ASIC de los gerontes deprimidos.

 

Los resultados obtenidos en esta investigación no tuvieron un carácter multidimensional pues no abarcaron todos los beneficios que resultan importantes tanto los referidos a salud y aptitud, como los psicológicos y sociales. No podemos afirmar que todos los beneficios sobre el estado de salud mental fueron consecuencia del ejercicio en sí mismo, pues la investigación no fue realizada en condiciones experimentales (otros factores pudieron estar incidiendo como el fenómeno grupal, el ambiente ecológico, la socialización) pero todos ellos contribuyeron a través de la incorporación de las actividades físicas-terapéuticas realizadas a dar cumplimiento a los objetivos propuestos.

 

Conclusiones.

 

La mayor frecuencia de incorporación a la práctica de ejercicios físicos-terapéuticos en el Servicio de Rehabilitación Integral lo tuvieron los gerontes de 60 a 64 años de edad, del sexo femenino, acompañadas, con nivel de instrucción primaria y del grado I de salud geriátrica.

 

El grado de salud de los adultos mayores correspondió al grado I antes de ser incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral, estos son ancianos capaces de desempeñarse en el macro mundo social, el micro mundo familiar y de atenderse a sí mismos.

 

La depresión menor fue la de mayor frecuencia en los pacientes geriátricos incorporados al ejercicio físico-terapéutico en el Servicio de Rehabilitación Integral.

 

La práctica del ejercicio físico-terapéutico influye positivamente en la esfera psicológica de los adultos mayores incorporados al Servicio de Rehabilitación Integral.

 

Recomendaciones.

 

Al confirmar la utilidad e importancia del ejercicio físico-terapéutico en los SRI como tratamiento alternativo de las depresiones se ofrecen razones para continuar promoviéndolo entre la población geriátrica de nuestras comunidades.

 

Que se realice la exploración sistemática de las funciones psicocognitivas, utilizando estos sencillos instrumentos que facilitan el diagnóstico temprano de la depresión de estos ancianos que acuden a nuestros SRI.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .17

ANEXO Nº 1: CONSENTIMIENTO INFORMADO.

 

He sido informado por parte del Lic: del porqué, para qué y cómo se realizará esta investigación, así como de los beneficios que la misma puede traer para mí y para el resto de las personas de la tercera edad.

 

Comprendo que mi participación es voluntaria y que puedo retirarme de la misma cuando quiera sin que ello repercuta en mis cuidados médicos.

 

Por todo lo anterior doy libremente mi conformidad de participar.

 

 

________________________ Firma del paciente.

 

 

_________________________ Firma del Licenciado.

 

Fecha ____ / ____ / ______ .

 

 

ANEXO Nº 2. Modelo de recolección de datos.

 

CUESTIONARIO DE EJERCICIO Y DEPRESIÓN.

 

1. Edad. □ 60-65 □ 66-70 □ 71-75 □ 76-80 □ 81 y más.


2. Sexo. □ Masculino □ Femenino.


3. Qué grado escolar tiene usted (una sola opción).

□ Ninguna □ Primaria □ Secundaria

□ Preuniversitario □ Técnico medio □ Universitario.


4. Estado civil: □ Soltero □ Casado □ Acompañado □Viudo.


5. Grado de salud Geriátrico. □ I □ II □ III □ IV


6. Está incorporado al Círculo del adulto mayor.

□ Si □ No


7. Tiempo que lleva incorporado al Círculo del adulto mayor.

□ 6 meses □1 año □ más de 1 año


8. En caso de presentar enfermedades o problemas de salud especifíquela. Marque con una X la respuesta que considere necesaria.

□ Diabetes Mellitus

□ Hipertensión Arterial

□ Cardiopatía Arteriosclerótica

□ Accidente Vascular Encefálico

□ EPOC

□ Neoplasias

□ Ulcera Péptica

□ Depresión

□ Demencia

□ Alteración de la visión.

□ Alteración de la audición

□ Enfermedades del SOMA

□ Enfermedades del tiroides

□ Gastroduodenitis

□ Incontinencia

□ Inmovilización

□ Otras.

Si otras ¿Cuáles? _________________________


9. En la actualidad su situación económica le permite satisfacer las necesidades básicas de vivienda, salud, alimentos, ropa, transporte, recreación, otras.

 □ Si □ No □ No refiere


10. A continuación se alistan algunas fuentes de ingreso monetarios, indique las fuentes de las cuales provienen sus ingresos.

□ Remuneraciones (salarios, honorarios, trabajo por cuenta propia)

□ Jubilación o pensiones

□ Dinero del cónyuge o convivientes

□ Dinero de hijos

□ Dinero de otros familiares

□ Dinero de otras personas

□ Asistencia social

□ Ninguna opción


11. Cuántas personas incluyéndolo a usted viven en su núcleo familiar o su hogar.

□ El encuestado

□ Dos personas

□ De dos a cinco personas

□ Más de cinco personas

□ No coopera


12. Cómo usted califica las relaciones de las personas que conviven en su hogar.

□ Armoniosas

□ Inestables

□ Conflictivas

□ No sabe


13. En su hogar toman en cuenta sus opiniones, es escuchado, participa en la solución de sus problemas y juega su rol o papel rector.

□ Siempre

□ A veces

□ Nunca

□ No refiere


14. Participa usted o ayuda en las labores del hogar.

□ Si □ No □ A veces □ No refiere


15. Le satisface seguir viviendo en su núcleo familiar

□ Si □ No


16. Se queda usted solo en la casa regularmente

□ Si □ No


17. De las siguientes actividades cuales realiza habitualmente:

□ Escuchar radio

□ Ver TV.

□ Leer periódicos, novelas y/o libros

□ Comer en restaurante

□ Asistir a eventos deportivos

□ Visitar a familiares y/o amigos

□ Otras

□ Ninguna


18. En el último año cuántas veces ha ingresado en el hospital.

□ Ninguna vez

□ Una vez

□ De dos a cinco veces

□ Más de cinco veces


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .18

ANEXO Nº 3. Escala de depresión geriátrica de Yesavage

 

Pregunta: SI NO

 

1. Está básicamente satisfecho con su vida.

2. Ha renunciado a muchas de sus actividades o intereses.

3. Siente que su vida está vacía.

4. Se encuentra a menudo aburrido

5. Tiene mucha fe en el futuro.

6. Tiene molestias por pensamientos que no puede sacarse de la cabeza.

7. Tiene a menudo muy buen ánimo.

8. Tiene miedo de que algo malo le esté pasando.

9. Se siente feliz muchas veces.

10. Se siente a menudo abandonado.

11. Está a menudo intranquilo o inquieto.

12. Prefiere quedarse en casa que salir y hacer cosas nuevas.

13. Frecuentemente está abandonada por el destino.

14. Encuentra que tiene problemas de memoria.

15. Piensa que es maravilloso vivir.

16. Se siente a menudo desanimado y melancólico.

17. Se siente muy bien en el medio que está.

18. Está muy preocupado por el pasado.

19. Encuentra la vida muy estimulada.

20. Es difícil para usted poner en marcha nuevos proyectos.

21. Se siente lleno de energías.

22. Siente que su situación es desesperada.

23. Cree que mucha gente está mejor que usted.

24. Frecuentemente está preocupado por algunas cosas.

25. Frecuentemente tiene ganas de llorar.

26. Tiene problemas para concentrarse.

27. Se siente mejor por la mañana al levantarse.

28. Prefiere evitar reuniones sociales.

29. Es fácil para usted tomar decisiones.

30. Su mente está tan clara como lo acostumbra a hacer.

 

VALORACIÓN:

 

0-10 (Normal)

11-14: (Depresión menor)

15 y más (Depresión mayor)

 

ANEXO Nº 4. PROGRAMA DE ACTIVIDADES FÍSICAS PARA LOS GRUPOS DE ABUELOS.

 

El presente programa pretende hacer llegar a la población de la Tercera edad una vía eficaz y fácil que permita encontrar el sendero más favorable para llegar a una vejez sana y vigorosa.

 

El programa en cuestión contará con ejercicios de actividades físicas para tres grupos de ancianos los que se determinarán de acorde a las posibilidades que éstos tengan.

 

Los componentes del programa serán caminatas, dosificadas, ejercicios generales, excursiones a pie y tablas gimnásticas. Las frecuencias de estas actividades se dosificarán en el propio desarrollo de programas al igual que los ejercicios y en atención a las características del grupo que recibirá los ejercicios que acogerán a una de las tres variantes con que cuanta el programa, I nivel, II nivel, III nivel.

 

La participación en estos grupos de salud con la utilización del programa estará autorizada por el médico del sector o el médico d la familia que atiende el área: debiendo éste recomendar en que grupo deberá comenzar.

 

El programa tendrá una utilización de dos años, tiempo en el cual se podrán hacer valoraciones en cuanto a los resultados alcanzados, aceptación y mejoría desde el punto de vista técnico, en el caso del trote y marcha (caminata) la dosificación está prevista para un años y medio manteniéndose la carga máxima hasta culminar el programa.

 

Objetivos.

 

  1. Dar respuesta a una necesidad social mediante la utilización sistemática y dosificada de actividades físicas.
  2. Utilizar el ejercicio físico con medidas profiláctica ante un grupo de afecciones propias de la vejez.
  3. Que los ancianos tengan objetivamente una forma agradable y beneficiosa de utilizar el tiempo libre.

 

Desarrollo del programa.

 

El presente programa de actividades físicas para los grupos de salud cuenta con:

 

  • Caminata.
  • Ejercicios generales.
  • Composiciones gimnástica.

 

Caminata.

 

Estas actividades se desarrollan en atención a las tablas de dosificación quincenal que aparecen en el programa, sin violar en ningún momento los tiempos establecidos y se practicará la caminata en atención a la autorización del médico.

 

Ejercicios generales.

 

Estos estarán dosificados para los 3 niveles con que cuenta el programa y cada participante realizará la repeticiones o el tiempo que establece su nivel, entre un ejercicio y otro se realizarán ejercicios respiratorios, en las tablas de dosificación de ejercicios de cuellos, de brazos, dos para el tronco, uno para los abdominales, uno para las piernas y el respiratorio que como señalamos anteriormente se intercala entre ejercicios, estos hace un total de 14 ejercicios cada día, más la caminata según corresponda.

 

Composiciones gimnásticas.

 

Estas actividades se realizará para algún tipo de celebración o actividad festiva donde el grupo o varios grupos participen, bien sea para festivales gimnásticos, celebración del Día de la Cultura Física u otros. Su montaje puede hacerse a manos libres o con implementos muy sencillos.

 

Se debe buscar una música que tenga un ritmo acorde a estas edades en correspondencia con lo expuesto en el capítulo de la utilización de diferentes materiales y la música como recurso en un programa de actividades físicas.

 

Entre las actividades que el presente programa pone al alcance de los participantes, encontramos la caminata, actividad que se realizará previa autorización del facultativo, recomendando no caer en violaciones sin la autorización del médico o profesor que atiende el grupo, ya que ello podría traer consecuencias desfavorables para el propio practicante.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .19

EJERCICIOS GENERALES:

 

DOSIFICACIÓN CUELLO

 

I Nivel II Nivel III Nivel

 

  1. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, manos en la cintura, realizar flexión al frente de cabeza y cuello y extensión a ambos lados. 8 Rep. 10 Rep. 12 Rep.
  2. P.I. Parados piernas separadas, manos en la cintura, realizar torsión del cuello a ambos lados. 5-7 Rep. 8-9 Rep. 10 Rep.
  3. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, manos en la cintura realizar flexión de cabeza a ambos lados. 6-7 Rep 8-9 Rep. 10-12 Rep.
  4. P.I. Parados piernas separadas manos en la cintura, realizar círculos completos de cabeza y cuello a cada lado. 6-7 Rep. 8-9 Rep. 10-12 Rep.

 

BRAZOS

 

  1. P.I. Parados brazos extendidos al frente, piernas ligeramente separadas, realizar (1) brazos arriba (2) laterales (3) abajo(4) .P.I. Este movimiento en 4 tiempos se realizará abriendo y cerrando las manos de forma continua. 4-5 Rep. 6-8 Rep. 10 Rep.
  2. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, brazos flexionados por los codos a la altura del pecho, realizar codos atrás y alternar con extensión de brazos atrás. 6-8 Rep. 8-10 Rep. 10-12 Rep.
  3. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, brazo izquierdo arriba, derecho abajo, realizar alternando la posición de los brazos. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  4. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, brazos laterales, realizar círculos de brazos al frente y atrás de forma alternada. 10-12 Rep. 12-15 Rep. 15-20 Rep.
  5. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, realizar (1) Manos a los hombros (2) brazos arriba (3) brazos laterales (4) regresar a la P.I. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  6. P.I. parados piernas ligeramente separadas, brazos arriba, realizar, brazos atrás y abajo atrás. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  7. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, brazos al frente con las palmas de las manos hacia abajo alternar la posición de las palmas de forma contínua. 6-8 Rep. 8-10 Rep. 10-15 Rep.
  8. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, manos a los hombros, realizar círculos de codos al frente y atrás alternadamente. 6-8 Rep. 8-10 Rep. 10-15 Rep.
  9. P.I. parados piernas ligeramente separadas, brazos flexionados por los codos, dedos entrelazados, realizar empuje fuerte hacia adentro. 4 Rep. 4-8 Rep. 8-10 Rep.

 

TRONCO.

 

  1. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, manos en la cintura, realizar, torsión del tronco a ambos lados. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  2. P.I. Parados piernas separadas, flexión del tronco al frente, sin flexionar las rodillas y regresar a extensión del tronco atrás. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  3. P.I. Parados piernas ligeramente separadas, manos en la cintura, realizar rotación de caderas a ambos lados de forma alterna. 2-4 Rep. 4-6 Rep. 6-8 Rep.
  4. P.I. Parados piernas separadas, manos a la cintura, realizar flexión lateral del tronco a ambos lados alternadamente. 3-4 Rep. 4-6 Rep. 6-8 Rep.
  5. P.I. Parados piernas separadas, manos en la cintura realizar flexión del tronco frente tratando de tocar con la mano izquierda el pie derecho y viceversa. 4-6 Rep. 6-3 Rep. 8-10 Rep.
  6. P.I. Parados piernas separadas, brazos laterales, realizar movimiento de torsión con ayuda de los brazos a ambos lados de forma continua. 6-8 Rep. 8-10 Rep. 10-12 Rep.
  7. P.I. Parados piernas separadas, manos en la cintura, realizar (1) flexión del tronco al frente. (2) flexión lateral derecha (3) extensión atrás (4) flexión lateral izquierda. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8 Rep.
  8. P.I. Parados piernas separadas, brazos a los lados, realizar (1-2) flexión lateral derecha del tronco, deslizando una mano por la pierna derecha (3-4) P.I. alternar el movimiento. 6-8 Rep. 10-12 Rep. 15 Rep.
  9. P.I. Parados piernas separadas brazos flexionados al frente, y abajo, realizar (1-2) torsión del tronco a ambos lados. 4 Rep. 6 Rep. 8 Rep.
  10. P.I. Parados piernas separadas, brazo derecho arriba, izquierdo, abajo realizar flexión del tronco al lateral izquierdo, alternar el movimiento. 4 Rep. 6 Rep. 8 Rep.
  11. P.I. Parados con las manos en la cintura, realizar (1-2) torsión del tronco a la derecha con extensión atrás, alternar el movimiento. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 rep.


PIERNAS.

 

  1. P.I. Parado, manos en la cintura, realizar semiflexión de las piernas y extensión de las mismas. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  2. P.I. Parado, manos en la cintura (8-10) realizar elevaciones de los talones. 8-10 Rep. 8-10 Rep. 10-12 Rep.
  3. P.I. Parados en parejas, uno frente al otro sujetándonos por los brazos, realizar flexión y extensión de piernas (cuclillas) hasta donde sea posible la flexión. 4 Rep. 6 Rep. 8 Rep.
  4. P.I. Parados en parejas sujetándonos por los hombros, realizar de forma alterna balanceo de una pierna a los laterales. 4-6 Rep. 6-8 Rep. 8-10 Rep.
  5. P.I. Parados con manos en la cintura, realizar alternadamente elevación de rodillas. 6-8 Rep. 8-10 Rep. 10-12 Rep.

 

RESPIRATORIOS

 

  1. Camina suave en círculo tomando fuerte el aire por la nariz y expulsándolo por la boca con movimientos de brazos de los laterales arriba y abajo. 6-8 Rep. 6-8 Rep. 6-8 Rep.
  2. Parados realizamos ejercicios respiratorios estacionarios tomando fuerte el aire por la nariz y expulsándolo lentamente por la boca. 4-6 Rep. 4-6 Rep. 4-6 Rep.

 

Los ejercicios respiratorios se realizarán en los momentos necesarios; por la característica de estos grupos en atención a la edad, es recomendable que éstos se intercalen entre uno y otro ejercicios general lo cual sin dudas, beneficiará toda la ejercitación.

 

Para la planificación de las clases se programan un conjunto de complejos lo cuales tendrán como mínimo 15 días de aplicación cada uno, esto beneficiará la propia actividad en lo relacionado a la motivación ya que existirá una variabilidad de actividades que mantendrá a los participantes, más motivados.

 

NOTA: La dosificación que aparece en los ejercicios está fundamentada para los tres niveles, adecuándose cada participante a sus posibilidades.


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .20

Juegos:

 

Los Juegos, representan una actividad de iniciativa y libertades propias, dirigida a conseguir vivencias alegres que facilitan las relaciones personales entre el grupo de abuelos.

 

Las actividades lúbricas para personas con edades avanzadas posibilitan la revitalización de habilidades y hábitos motrices además de proporcionar un buen estado de ánimo y combatir el estrés.

Es un medio de motivación en las clases y por ello debe ser utilizado por el profesor de Cultura Física en correspondencia con los características de los Adultos y los objetivos de la Actividad.

 


Ejemplos:

 

1. ¿Quién lanza más?

 

Se trazan tres líneas en el terreno a 1m. de distancia entre ellos.

Los abuelos formados en filas se situarán detrás de la primera línea, lanzaran un objeto tratando de alcanzar la mayor distancia. Ganará el equipo que mayor cantidad de lanzamiento haya sobre pasado la última línea.

 

Objetivos: estimular a alcanzar la meta mediante el movimiento natural de lanzar.


Regla: cada lanzamiento debe seguir la dirección hacia la meta.

 


2. “La Papa Caliente”.

 

Se forman equipos en hileras detrás de la línea a una distancia de 3mts. Aproximadamente se sitúa un abuelo frente a cada equipo. El primero de cada hilera sostendrá en una mano una cuchara con una papa. A la señal del profesor saldrá caminando con pasos rápido al llegar al compañero entregará la cuchara con la papa y regresará a su equipo dándole una palmada en la mano al jugador siguiente, este saldrá caminando a buscar el objeto y al regresar le entregará al siguiente. Ganará el equipo que primero termine y esté organizado.

 

Regla: No se puede caer el objeto de la cuchara. Cada jugador al terminar el recorrido se colocará al final de su hilera.


Objetivo: Desarrollar el equilibrio.

 


3. “Que no se caiga”

 

Se forma equipos con hileras se trazan líneas paralelas de 2mts. aproximadamente como equipos hayan. A la señal, saldrán caminando los primeros jugadores sosteniendo sobre la cabeza un objeto plano y de poco peso. De regreso pasarán el objeto al jugador que lo sigue. Ganará el equipo que lo logre sostener mayor número de veces el objeto sobre la cabeza.

 

Regla: No puede caerse el objeto. Cada jugador al regreso deberá ocupar su lugar al final de su hilera.

 


4. “El Túnel”

 

Se forman hileras donde todos los jugadores tengan las piernas separadas, el primer jugador de cada hilera sostendrá el objeto, a la señal del profesor lo pasarán por entre las piernas, cuando llegue el último jugador éste lo pasará por encima de la cabeza hasta llagar al primero. Ganará el equipo que primero termine y se organice. Este juego tiene variantes en cuanto al paso del objeto; ya que el mismo se podrá pasar por ambos laterales.


Regla: No se puede caer el objeto al suelo.

 


- Juegos Calmantes.

 

Se utilizaran al final de la clase, logrando la recuperación del organismo de las actividades realizadas de forma amena.

 


1. ¿Quién tiene la Prenda?

 

Los jugadores forman un círculo (también apretado entre sí) todos con las manos en la espalda, uno de los jugadores esconde entre las manos su objeto. Otro jugador se coloca en el centro del circulo se permiten hacer movimientos engañosos como imitando el pase del objeto.

 

El guía jugador que está en el centro del círculo procura adivinar quién tiene el objeto y parándose frente a uno de los jugadores le pide que le enseñe las manos. Si resulta que ese jugador tiene en realidad el objeto, Entonces éste pasará al centro. Si no lo tiene en realidad el objeto. Si no lo tiene continuará el guía tratando de adivinar quién la tiene.

 

Regla: el que resulte adivinado debe pasar a ser guía.

 


2. “No te muevas”.

 

A la seña del profesor los alumnos se desplazarán caminando por el área. A la señal del profesor se deben parar inmediatamente, tratando de moverse manteniendo en esa postura hasta oír la señal. Cada vez que un jugador se mueva saldrá del juego. Al final del mismo se verá que cantidad de jugadores lograron no moverse.

 

Regla: Los jugadores deben desplazarse caminando por el área, todos deben moverse.

 


3. “Quién se cambia”.

 

El jugador está formado. Un jugador quedará fuera de la formación (%) el guía). El profesor le propone a éste recordar el orden de los jugadores en la formación. Después volviéndolo de espalda de forma que no pueda ver la formación se hará un cambio a la formación a ocupar el lugar del jugador y éste a su vez pasará a ser guía.

 

Regla: Si no acierta en tres veces seguidas, Entonces se elige otro guía.

 

Fuente: Ceballo Díaz JL. Programa de actividades físicas para los grupos de abuelos. El adulto Mayor y la Actividad Física. Instituto Superior de Cultura Física Manuel Fajardo. C. Habana


Influencia del ejercicio físico-terapeutico sobre la depresion del Anciano Mayor .21

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4.     Schaedle DSW, McGrew JH, Bond GR, Epstein I. A comparison of expert’s perspectives on assertive community treatment and intensive case management. Psychiatric Set Res 2003; 53:207-10.

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