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Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa
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Autor: Dra. María Isabel Duran Cala
Publicado: 26/11/2010
 

Se realizó una Intervención Educativa con el propósito de incrementar el nivel de información y conocimiento sobre sexualidad en adolescentes pertenecientes al Consultorio # 42 del Policlínico “Hermanos Martínez Tamayo”, Baracoa-Guantánamo, desde enero a noviembre del 2006. El universo estuvo constituido por 191 adolescentes, de los cuales se seleccionaron 40, a través de un muestreo aleatorio simple. Fueron caracterizados según edad, sexo y ocupación. Se realizó una evaluación inicial del nivel de información y conocimiento sobre relaciones sexuales, embarazo, infecciones de transmisión sexual y anticonceptivos. Según necesidades de aprendizaje se aplicó la intervención. El dato primario se obtuvo aplicando un cuestionario validado por un estudio piloto. Los datos fueron procesados utilizando el Sistema Epinfo 2002, calculándose el porcentaje como medida de resumen y el porcentaje de variación como medida de comparación.


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Sexualidad en la adolescencia. Intervención educativa. Policlínico Universitario. Hermanos Martínez Tamayo. Baracoa-Guantánamo. 2006.

Dra. María Isabel Durán Cala. Especialista de 1er Grado en Medicina General Integral. Msc. Atención Integral a la Mujer.

Dr. Luis Felipe Hernández Hernández. Especialista de 1er Grado en Medicina Interna y Terapia Intensiva. Msc. Urgencias Médicas.

Dr. Leandro Guzmán Domínguez. Especialista de 1er Grado en Medicina General Integral. Msc. Urgencias Médicas.

Dr. Leandro Guzmán Domínguez. The Gambia.

Resumen

Se realizó una Intervención Educativa con el propósito de incrementar el nivel de información y conocimiento sobre sexualidad en adolescentes pertenecientes al Consultorio # 42 del Policlínico “Hermanos Martínez Tamayo”, Baracoa-Guantánamo, desde enero a noviembre del 2006. El universo estuvo constituido por 191 adolescentes, de los cuales se seleccionaron 40, a través de un muestreo aleatorio simple. Fueron caracterizados según edad, sexo y ocupación. Se realizó una evaluación inicial del nivel de información y conocimiento sobre relaciones sexuales, embarazo, infecciones de transmisión sexual y anticonceptivos. Según necesidades de aprendizaje se aplicó la intervención. El dato primario se obtuvo aplicando un cuestionario validado por un estudio piloto. Los datos fueron procesados utilizando el Sistema Epinfo 2002, calculándose el porcentaje como medida de resumen y el porcentaje de variación como medida de comparación.

Los resultados fueron expuestos en tablas estadísticas. Los adolescentes entre 15-17 años, el sexo femenino y los estudiantes predominaron en la serie. Mostraron previo a la intervención bajo nivel de conocimiento acerca de los aspectos tratados. Enfermedades de Transmisión Sexual/ VIH-SIDA y Métodos Anticonceptivos fueron los temas de mayores dificultades. La Intervención Educativa incrementó el nivel de información y conocimiento sobre Educación Sexual.

Introducción

La adolescencia se considera como un grupo de mayor vulnerabilidad tanto para las infecciones de transmisión sexual, como para la práctica de conductas sexuales inadecuadas, además de un estilo de enfrentamiento desacertado ante situaciones estresantes como la primera relación sexual, el uso de métodos anticonceptivos o el embarazo en esta etapa de la vida. Dentro de esta serie de condicionantes que lo convierten en un grupo de riesgo podemos señalar que el inicio de las relaciones sexuales en edades precoces significa que pueden tener un mayor número de parejas, y por lo tanto una mayor exposición a infecciones, que los individuos que retrasan el inicio de la actividad sexual hasta la adolescencia tardía o adultez joven. (1, 2, 3)

Otro hecho relevante es que se enfrentan a una nueva dinámica de su sexualidad, carecen de experiencias, de conocimientos, sienten una imperiosa necesidad de experimentación, en la búsqueda de su identidad. Esto les permite adoptar conductas promotoras de riesgo. (4, 5, 6)

La educación sexual consiste en preparar a las nuevas generaciones para el amor, el matrimonio y la familia. Es una educación para la sexualidad, entendida ésta como las expresiones afectivas, ideológicas, éticas y filosóficas, vinculadas y derivadas del hecho biológico del sexo. Precisamente una eficaz educación sexual en este grupo de riesgo permitirá que muchos de los conflictos o situaciones que lo llevan a esta condición de riesgo desaparezca o disminuyan. (7,8)

De ahí la importancia de una adecuada formación del adolescente, de forma tal que madure su personalidad en el terreno ideológico, social, ocupacional y sexual. Según la forma en que el individuo acepte y viva su sexualidad, ésta será fuente de grandes dichas y satisfacciones o de angustias, conflictos y frustraciones. Educar para la salud siempre tiene el propósito de llevar un mensaje, pero hay que señalar que aún cuando se han hecho avances importantes en algunos países, la mayoría de ellos carecen de programas adecuados de educación sexual, sobre todo porque continúan apareciendo en una proporción importante embarazos en los adolescentes, las infecciones de transmisión se mantienen con elevada incidencia en dicho grupo así como el incorrecto uso de los métodos anticonceptivos. (9, 10,11)

Se debe considerar que casi la mitad de la población mundial es menor de 25 años; aproximadamente, el 10% de los nacimientos en el mundo entero son de madres adolescentes, teniendo éstas el doble de posibilidades de morir durante el parto; el 11% de las jóvenes de 15 a 19 años tiene una necesidad anticonceptiva insatisfecha, casi la mitad de las infecciones por VIH de todo el mundo ocurren en las personas menores de 25 años; 7 de cada 10 casos nuevos de infección de transmisión sexual (ITS) ocurren entre las personas de 15 a 24 años de edad. (12, 13)

Las infecciones de transmisión sexual presentan un panorama mundial muy desalentador ya que el número de casos asciende a pesar de todos los programas y estrategias de prevención. Cálculos recientes señalan que cada año se reportan en todo el mundo más de 340 millones de casos de infección de transmisión sexual (ITS) curables (que incluyen sólo aquellas infecciones bacterianas, fúngicas y parasitarias susceptibles de tratamientos efectivos) y que por lo menos un millón de contagios ocurren cada día. Solamente para Latinoamérica y el Caribe se estimaron entre 35 y 40 millones de casos de este grupo de infecciones de transmisión sexual (ITS) con más de 100 mil infecciones promedio por día. (14-17).

En el mundo los estudios de sexualidad realizados están basados en el inicio precoz de las relaciones sexuales, embarazo en la adolescencia, anticoncepción y adolescencia, y el incremento de las infecciones de transmisión sexual, que aunque todas las enfermedades cuya vía fundamental de transmisión sea la sexual son preocupantes, el VIH/SIDA por su condición de incurable, es la más inquietante y una de las más estudiadas. (18,19)

La experiencia común de todos los países muestra, que sólo mediante una frecuente y variada repetición de nueva información, desde todos los ángulos sociales y durante numerosos años se puede conseguir que la mayoría de los adolescentes acceda a los nuevos conocimientos (20, 21).

Aun cuando en el escenario nacional se aprecian transformaciones favorables en varios aspectos de la vida sexual y reproductiva de adolescentes y jóvenes, se siguen identificando factores de riesgo y vulnerabilidad susceptibles de cambio en esas edades. (22,23)

En nuestro país el embarazo en la adolescencia aumenta considerablemente, los abortos provocados y las infecciones de transmisión sexual son cada día más frecuentes, lo cual demuestra el desconocimiento de métodos anticonceptivos, los riesgos del embarazo y el aborto en la adolescencia y de las infecciones de transmisión sexual. (24)

En nuestro municipio, toda la situación anteriormente mencionada se palpa día a día en nuestra labor, con frecuencia las necesidades de servicios de salud se mal interpretan, no se reconocen o se subestiman, y aunque se desarrollan programas como el de VIH/SIDA, consultas de planificación familiar y riesgo preconcepcional, servicio de consejería y otros, esto todavía resulta insuficiente pues aún existe desconocimiento sobre educación sexual en nuestros adolescentes.

La educación persigue cambios en la conducta, y para ello debe seguir una metodología que fomente la creatividad, el sentido crítico, la capacidad de pensar, que permita identificar y resolver los problemas y promueva la participación social.

Motivados por todo lo anteriormente planteado se consideró necesario y oportuno desarrollar una intervención educativa sobre sexualidad en los adolescentes, con el propósito de incrementar el nivel de información y conocimientos con respecto al tema y de esta forma estimularlos para que en un futuro mediato sean capaces de mantener una sexualidad responsable llevándolos a mejorar su desarrollo de manera integral como futuros hombres y mujeres.

Se plantean las siguientes preguntas científicas:

¿Es insuficiente el nivel de información y conocimiento de los adolescentes sobre relaciones sexuales precoces, embarazo en la adolescencia, infecciones de transmisión sexual y métodos anticonceptivos?

¿Es posible a través de la puesta en práctica de un programa educativo incrementar el nivel de información y conocimiento de los adolescentes sobre sexualidad?


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Hipótesis científica

La intervención educativa sobre sexualidad incrementa el grado de información y conocimiento en adolescentes.

Objetivos

Objetivo General:

Incrementar el nivel de información y conocimiento sobre algunos aspectos de la sexualidad en adolescentes pertenecientes al Consultorio Médico # 42 del Policlínico Universitario “Hermanos Martínez Tamayo, del municipio Baracoa, provincia Guantánamo, en el período comprendido desde enero a noviembre del 2006.

Objetivos Específicos:

Caracterizar a los adolescentes según: edad, sexo y ocupación.

Determinar el nivel de información y conocimiento de los adolescentes sobre aspectos de la sexualidad antes de la intervención.

Aplicar una intervención educativa de acuerdo a las necesidades de aprendizaje identificadas.

Evaluar el nivel de información y conocimiento alcanzado por los adolescentes después de la intervención educativa.

Fundamentación Teórica

Sexualidad humana.

El término sexualidad, es uno de los términos que casi todos consideran que conocen, o que tienen idea del mismo, pero no siempre son capaces de definir; y es que la palabra sexualidad es de las que se incorpora al vocabulario envuelta en un manto de mitos, temores, signos de interrogación, expectativas.

Han sido varios los estudiosos que desde su disciplinas científicas y las respectivas posiciones filosóficas que sustentan (médicos, psicólogos, pedagogos, biólogos), han propuesto conceptos que intentan definir la sexualidad humana. S. Freud en su obra “La moral sexual cultural y la nerviosidad moderna”, escrita en 1908, decía que “lo sexual no puede reducirse a lo genital y aunque es en parte endógeno y genético, no constituye un dispositivo ya establecido previamente; se va estableciendo a lo largo de la historia individual, cambia de aparatos y fines (zonas erógenas), y recibe una influencia exógena del universo fantástico de los padres (la educación-interacción con los padres-fantasías conscientes e inconscientes): en psicoanálisis se le encuentra en forma de deseos”.

El sexólogo Lázaro Sirlin en su Diccionario Sexológico expresa: “sexualidad es todo aquello que trata de las diferencias de los sexos”.

Por su parte, el médico sexólogo uruguayo Flores Colombino considera que la “sexualidad es un sistema de conductas o comportamientos de fuente instintiva e intelectiva, con una finalidad reproductiva (función reproductiva) y placentera (función erótica), al servicio de la comunicación y la trascendencia, que se descarga en un objeto sexual a través del coito o sus sustitutos y condicionado en su expresión por las pautas culturales y morales de cada época y lugar”.

Se puede continuar ofreciendo conceptos dados por estudiosos, quienes desde sus concepciones científicas han brindado sus definiciones acerca de la sexualidad humana y que constituyeron en sus momentos, importantes e interesantes aportes. Pero, es imprescindible, antes de ofrecer una definición sobre lo que se entiende por sexualidad, tener claro que cuando se habla de sexualidad humana está referida a un hecho humano, es decir, inherente a una persona con características biológicas, psicológicas y socioculturales, con una historia de vida personal, familiar, social y con un desarrollo específico de su personalidad. Por lo que existe coincidencia con la profesora Anameli Monroy (México) cuando dice que la sexualidad humana “son características biológicas, psicológicas y socioculturales que nos permiten comprender al mundo y vivirlo a través de nuestro ser como hombres y mujeres. Es una parte de nuestra personalidad e identidad y una de las necesidades humanas que se expresa a través del cuerpo, es elemento básico de la feminidad o masculinidad, de la autoimagen, de la autoconciencia, del desarrollo personal. Estimula las necesidades de establecer relaciones interpersonales significativas con otros”.

Se puede apreciar cómo se puede desglosar el mencionado concepto, teniendo en cuenta las dimensiones fundamentales que señala (biológica, psicológica y sociocultural).

Dimensión biológica.

A la base biológica de la sexualidad se le domina sexo biológico, que es el conjunto de características anatómicas y fisiológicas que diferencian a los seres humanos en femeninos y masculinos. El sexo biológico incluye el sexo cromosómico, el sexo gonadal y el sexo genital.

La dimensión biológica de la sexualidad, no sólo controla en gran medida el desarrollo sexual, desde la concepción hasta el nacimiento, sino también la aptitud para procrear después de la pubertad, así como el deseo sexual.

Dimensión psico-social

Una vez que nace el ser humano con sus órganos genitales diferenciados, se le da un sexo de asignación: niño o niña (hombre o mujer), se le asigna nombre, tipo de ropitas, juguetes, etc., antes de que el niño o niña tomen conciencia de su identidad sexual. El nacer niño o niña establece cuáles son las expectativas de la familia y la sociedad en relación con el futuro papel sexual del recién nacido, de forma tal que se va estableciendo el sexo social: toda una serie de estímulos ambientales e influencias educativas que irán moldeando su conducta hacia un comportamiento de tipo femenino o masculino que determina poco a poco el sexo psicológico (sentirse hombre o mujer) y su expresión social (actuar como ello).

Algunos educadores como el profesor Félix López afirman que “hacia la edad de 2 ó 3 años, los niños toman conciencia de su identidad sexual (auto clasificarse como niño o niña) y simultáneamente comienzan un proceso de aprendizaje e interiorización de las funciones que la sociedad considera propias del niño o la niña (conducta de género). Así, se entiende que la identidad sexual pasa por el aspecto psicológico (sentirse hombre o mujer) y manifestarlo externamente a través del papel de género (comportamiento y funciones propias de uno y otro sexo).

Componente cultural

Es preciso decir, además, que las diferentes culturas y sociedades asignan actividades y formas de comportamientos específicos a los hombres y las mujeres, por lo que la sexualidad, debido a su dimensión social y de asignación tiene un importante componente cultural. En otras palabras, no es lo mismo ser hombre o mujer, en el Medio Oriente, en el Occidente, en Asia, Europa, etc. Llegado a este punto se puede expresar que se es hombre o mujer, no sólo porque se tenga genitales masculinos o femeninos, o cuerpos femeninos o masculinos, sino porque además se ha nacido en una sociedad que trasmite formas de comportamientos específicos según el sexo biológico y de acuerdo con la cultura a la que pertenece, lo que va nutriendo la psiquis, haciendo sentir a cada hombre o mujer, y de esta forma se va formando la identidad sexual. (44)

Sexualidad en la adolescencia.

La adolescencia es una etapa del desarrollo del ser humano con características muy especiales, donde la sexualidad alcanza su máximo valor, se convierte en el centro de inquietudes e intereses. (7)

Los impulsos sexuales le plantean al adolescente qué hacer con ellos, deben aprender a comportarse en la esfera sexual al modo que estila su generación. De la solución adecuada a este problema dependerá la obtención de una firme identidad sexual y evidenciará la existencia de una correcta educación sexual (8,9)

La sexualidad no sólo engloba la conducta sexual, sino también el interés por el sexo y las fantasías, la orientación sexual, las actitudes hacia el sexo y su relación con las emociones y la conciencia de los roles definidos socialmente.


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Esta incluye las características biológicas, psicológicas y socioculturales que le permitirán comprender a ese adolescente, tan lleno de incertidumbre, esta nueva condición hasta entonces desconocida aunque presente y en formación desde su origen como ser humano. (13)

Educación de la sexualidad.

Cada cultura y sociedad regulan las conductas sexuales de formas diferentes a través de la familia, las costumbres, la escuela, los grupos de amigos, los medios de comunicación y las leyes. De esta forma es que se lleva a cabo la educación de la sexualidad: la manera de tratar a los niños y niñas según su sexo, los ejemplos de relación de pareja que viven en sus familias; la forma en que los padres aceptan su identidad sexual puede ser percibido por los hijos, cómo se responde a las preguntas relacionadas con la sexualidad.

En la familia, primer grupo social al cual pertenece el ser humano, se adquieren los valores básicos acerca de la sexualidad, se aprende qué es lo bueno y qué es lo malo, lo socialmente aceptable, los “roles” sexuales, los patrones culturales.

La escuela también va forjando modelos y normas de conductas sexuales, la manera en que se organizan los juegos, la manera en que se traten los temas relativos a la sexualidad humana, el ejemplo de los maestros.

Los grupos de amigos es donde muchas veces se canaliza toda una serie de dudas e interrogantes que no son abordados abiertamente en el seno de la familia o la escuela, así como que constituyen modelos de referencia e imitación de conductas sexuales.

Los medios de comunicación trasmiten estereotipos de belleza, normas y valores que también constituyen elementos de referencia para imitar e interiorizar.

El profesor Félix López afirma que la educación de la sexualidad constituye un “proceso de comunicación que trascurre en un intercambio directo o indirecto de conocimientos y actitudes sobre el hecho sexual humano. (…) Es la educación de las relaciones sociales en la vida cotidiana y para la vida cotidiana. Toda conducta sexual tiene consecuencias biológicas, psicológicas y sociales, las cuales tienen una estrecha relación con la salud integral del individuo”. (44)

Relaciones Sexuales Precoces

En los últimos tiempos se observa cómo las primeras manifestaciones sexuales ocurren en edades cada vez más tempranas, en correspondencia con la maduración biológica, que en las últimas décadas -después de la década del 30- ha disminuido también, lo que parece estar relacionado, entre otras razones, con el mejoramiento del modo de vida del hombre, que implica que se amplíe el periodo fecundado de la mujer.

En contraste con este proceso de disminución de la edad de la maduración sexual, encontramos que el período de formación cultural y profesional se prolonga debido a las exigencias que demanda el desarrollo científico-técnico, lo que hace más lento el proceso de madurez psíquica y social. Quiere esto decir que el despertar de la sexualidad ocurre en una persona aún no preparada integralmente para comprenderla ni ejercerla, pero obligada a asumirla como un componente de su desarrollo (Peláez M., 1996). (45)

El comienzo precoz de la actividad sexual va en aumento, particularmente para los varones. Los adolescentes, tanto varones como niñas, que tienen actividad sexual, suelen comenzar con escasos conocimientos sobre la sexualidad, la salud reproductiva, las prácticas sexuales menos riesgosas o sus derechos individuales a negarse y abstenerse de la actividad sexual. (25)

Los adolescentes son sexualmente activos antes del matrimonio, realidad creciente debido a factores asociados, como la maduración sexual temprana, el retraso de la edad en que se contrae matrimonio, el urbanismo, la influencia de los medios de comunicación, el desempleo y la baja escolaridad. (21)

Se calcula que a la edad de 20 años las/los adolescentes de la región de América Latina y el Caribe han iniciado una vida sexual activa, independientemente de su estado civil. En Colombia, el porcentaje de mujeres de 15 a 19 años que han tenido relaciones sexuales es 29.6%, o sea que una de cada tres mujeres ha tenido relaciones sexuales en la adolescencia. (6)

Un tercio de los adolescentes se inician sin prevención, es por ello que los mismos necesitan confrontar con los adultos que los rodean a fin de crecer y desarrollarse autónomamente. El rol de la familia es fundamental en el desarrollo sexual y si bien hablar de sexualidad no siempre es fácil, o aparece como tema tabú, puede surgir más de un riesgo. En aspectos referidos a la sexualidad la consulta en la adolescencia temprana está en general motivada por inquietudes de los padres. (13)

La pubertad y la adolescencia son etapas difíciles para los chicos tanto como para sus padres. Rebeldía y desafíos son arduos de sobrellevar sin una buena comunicación y en general la decisión de tener relaciones sexuales, los adolescentes la toman sin consultar con los adultos. (26-28)

Mucho se ha hablado de la pertinencia o no de la educación sexual. Sus detractores aducen que el efecto de ésta estimula las prácticas sexuales tempranas; sin embargo, no hay ninguna comprobación que lo confirme; por el contrario, sí hay evidencias científicas de que a mejor preparación de los jóvenes para asumir con responsabilidad y conocimiento su sexualidad, menos efectos negativos tendrán.

La educación sexual debe formar parte del conjunto de aspectos que integran la formación multifacético de las nuevas generaciones. El amor no es una cualidad innata, se adquiere y desarrolla en el transcurso de la vida. Es importante que todo el sistema de influencias que recibe el adolescente estimule y propicie el amor en sus diferentes manifestaciones: amor a la patria, a la familia, al maestro, a los amigos y a la pareja.

El afán de ser adultos y el deseo de comprobar la capacidad reproductiva, interpretada como virtud indispensable para demostrar la nueva condición de mujer u hombre, conducen al adolescente a incursionar con descuidos en el fascinante mundo de la nueva sexualidad. (Castro EM., 1995). Algunas de las consecuencias negativas de estas actitudes han motivado investigaciones en diferentes partes del mundo. El embarazo en la adolescencia, el aborto, la maternidad temprana y las enfermedades de transmisión sexual son las que suscitan mayores preocupaciones. (45)

Embarazo en la adolescencia

Una de las consecuencias de inadecuada educación de la sexualidad lo constituyen precisamente los embarazos en las edades de 10 y los 14 años y entre los 15 y los 20 años, pues muchos adolescentes llegan a sus primeras relaciones sexuales íntimas “por curiosidad”, “porque todos lo hacen”, “por impulso sexual”, sin estar preparados, no sólo para concebir un embarazo, sino para disfrutar de forma plena, placentera y responsable de este intercambio amoroso humano. (44)

Se ha descrito un mecanismo común que podría explicar diversas enfermedades propias del embarazo que muestran mayor frecuencia en adolescentes, como son la hipertensión arterial materna, prematuridad, retardo del crecimiento intrauterino, y el desprendimiento prematuro de la placenta. Se ha postulado un fallo en los mecanismos fisiológicos de adaptación circulatoria al embarazo, denominado síndrome de mala adaptación circulatoria, cuyas manifestaciones clínicas diversas pueden presentarse por separado o asociadas entre sí en la madre y el feto, o en uno de ellos.

La iniciativa de la Maternidad Segura y los programas específicos que en la última década han centrado su atención en la prevención del embarazo adolescente, han ahondado en los problemas que de éste devienen para la salud de la adolescente y de su hijo/hija y documentado la incidencia de los mismos en la región. (23)

Sin embargo, aunque casi siempre se mencionan otros factores concomitantes, hace falta insistir en el hecho de que los mencionados riesgos biológicos no actúan aisladamente, sino asociados con factores psicosociales, económicos, políticos, estructurales y de género. De hecho el embarazo en la adolescencia no puede ser considerado solamente como un problema biológico.

Es evidente que, aun reconociendo la desventaja física de las adolescentes para llevar a cabo la gestación y dar a luz, si el embarazo fuese un acontecimiento deseado y vivido en buenas condiciones, es decir con una calidad durante el embarazo, el parto, el puerperio y el primer año de vida del hijo/hija antecedidos por una buena nutrición, salud y desarrollo de la adolescente, los riesgos y consecuencias para la salud física de ésta y de su hijo disminuirán al máximo. Contrario sensu, la pobreza, la desnutrición, el abandono de la escuela, el embarazo no deseado, la expulsión del hogar, la falta de acceso al cuidado prenatal y la ignorancia del proceso reproductivo (factores antecedentes al embarazo) potencian los riesgos biológicos para la adolescente. La vulnerabilidad es entonces, variable de acuerdo con la condición de vida y de género de la adolescente. (29)


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Podríamos decir, entonces, que los riesgos para la salud física de la adolescente embarazada, e incluso para la sobrevivencia y salud de su hijo, son prevenibles.

El embarazo en la adolescencia compromete el disfrute de una vida digna y puede hacerla profundamente infeliz. La maternidad temprana impide o limita las oportunidades de estudio o el éxito educativo de las adolescentes. (30-31)

Quizá podamos afirmar que para una gran parte de las adolescentes el embarazo no es una opción, sino una falta de opciones. Una falta de opciones de desarrollo personal en todos los sentidos, aunque muchas de ellas consideren que su embarazo es deseado.

Muchos adolescentes comienzan a tener relaciones sexuales sin haber recibido información exacta sobre la sexualidad y la salud de la reproducción. Esta falta de información es, en la actualidad, la responsable de la alta incidencia de embarazos no planificados y de enfermedades de transmisión sexual que se presentan en los adolescentes. (24)

Estudios realizados demuestran la estrecha relación entre el mayor nivel de educación e información sexual de los adolescentes y menor riesgo de maternidad precoz. Esta crea una desventaja para el hijo desde todos los puntos de vista, derivada de la inmadurez emocional de la madre, posibles limitaciones socioeconómicas por la frustración de su desarrollo profesional, y toda la carga afectiva de un hijo posiblemente no deseado. (45)

Para lograr buenos resultados en la prevención de los embarazos no deseados en la adolescencia, se hace imprescindible una educación sexual correcta y adecuada. El buen asesoramiento ayudará a los adolescentes a realizar una correcta elección del método anticonceptivo que deberá utilizar cuando inicien su vida sexual.

Infecciones de Transmisión Sexual.

La actual epidemia de Infección de Transmisión Sexual (ITS) es la mayor amenaza para la salud de los adolescentes. Esto incluye el riesgo de infertilidad, cáncer y muerte. Las infecciones de transmisión sexual (ITS) representan la más diseminada y devastadora enfermedad que enfrentan los jóvenes en nuestros días. (14)

La distribución global de las infecciones de transmisión sexual (ITS) las convierte en una difícil situación de salud a nivel mundial. La OMS estima que anualmente se producen un promedio de 262 millones de casos nuevos de enfermos por estas entidades. Las infecciones de transmisión sexual (ITS) constituyen una importante causa de morbilidad oculta por estar relacionadas con la conducta de cada individuo, con frecuencia están rodeadas de mitos y tabúes motivos por los cuales las personas muy pocas veces consultan al personal de salud a tiempo refiriendo sus molestias, lo que ocasiona complicaciones que pueden llegar a ser graves. Las infecciones de transmisión sexual (ITS) y las infecciones del aparato genital son especialmente frecuentes entre las jóvenes. (17)

Los adolescentes constituyen el grupo de población con mayor riesgo de presentar Infección de Transmisión Sexual lo cual está dado fundamentalmente por sus conductas sexuales, aunque algunos de los factores de riesgo son atribuibles a sus características biológicas.

Se conoce que las células de la vagina y el cérvix son más susceptibles a la infección en la niña y la joven; estas células y el medio vaginal van a sufrir cambios durante la adolescencia, que hacen que al final de ésta exista una mayor resistencia a las infecciones. Por eso, las adolescentes sobre todo en los estadios más precoces, tienen mayor riesgo de contraer una infección de transmisión sexual (ITS) que una mujer adulta, cuando tiene relaciones sexuales con un hombre infectado. (23)

Independientemente de lo antes expuesto, el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual (ITS) durante la adolescencia está relacionado fundamentalmente con las conductas sexuales riesgosas. Los adolescentes son más propensos a correr riesgos sexuales sin tomar en consideración sus posibles secuelas a largo plazo. Por lo general, se consideran inmunes e invulnerables y niegan los riesgos, mientras otros no consideran la posibilidad real de que su pareja esté infectada. Incluso, ante la presencia de los síntomas existe una fuerte tendencia a negar la enfermedad y dilatar la consulta médica y el tratamiento.

La situación actual epidémica de las infecciones de transmisión sexual (ITS), combinado con las actitudes y conductas de los adolescentes en las esferas sexuales, convierten esta situación en una bomba de tiempo. Esto sólo puede combatirse con un incremento en la información a los jóvenes sobre estas enfermedades; mientras más preparados estén, mejor podrán reconocer estos riesgos. Cuando ellos logren reconocer y aceptar los riesgos que afrontan al tener actividad sexual sin protección, comenzarán a valorar y practicar relaciones sexuales protegidas. (32)

Para la prevención de las Infecciones de Transmisión Sexual en la actualidad se preconiza la práctica del sexo seguro; sin embargo, lo real es que el único sexo seguro es la práctica de la abstinencia sexual y algunos adolescentes serán capaces de aceptar la abstinencia cuando se les explique las ventajas de retardar el inicio de su vida sexual.

Si el trabajo educativo e informativo se realiza de una manera correcta, sistemática y por etapas, se logrará que al menos el 50% de los adolescentes pospongan por un período que oscila entre 2 a 3 años el inicio de su actividad sexual, en comparación con lo que sucede cuando esta educación no se brinda o se hace sin cumplir los requerimientos necesarios.

Cuando no se logra que los adolescentes acepten la abstinencia sexual, debemos tratar al menos que adopten métodos preventivos y conductas sexuales que reduzcan el riesgo de infección, entre los que se distinguen el uso sistemático del condón masculino o femenino, limitar el número de parejas sexuales, practicar la fidelidad mutua así como controlar sistemáticamente la aparición de síntomas y signos sugestivos de infección de transmisión sexual (ITS) tanto en sí mismo como en sus parejas. (33)

El Dr. Flores Colombino señala entre los factores favorecedores al contagio de las infecciones de transmisión sexual (ITS): a “los papeles otorgados a la juventud, con desritualización de las instancias de cortejo y galanteo, así como el noviazgo, facilitan las relaciones sexuales prematrimoniales en marcos apresurados e informales. La precocidad de las relaciones sexuales ha alcanzado niveles cercanos de comienzo a los de la pubertad y aún antes de ella, para varones y mujeres”.

Social y culturalmente se han producido cambios en torno a la conducta sexual, lo cual es mucho más permisiva y tolerante, sin embargo, la sexualidad sigue siendo un tema abordado inadecuadamente, por lo que la ignorancia en torno al mismo persiste, así como los riesgos que en algunos casos aumentan.

Otro factor lo constituye el debatido tema de la promiscuidad, muy vinculado con los factores psicológicos y de comportamiento. Según Kilby: “El número en la incidencia de infecciones de transmisión sexual (ITS) es paralelo al incremento en el número de encuentros sexuales fortuitos.

Resulta interesante la tesis relativa a la propia higiene sexual que enuncia el ya mencionado doctor Flores Colombino, y que se refiere al hecho de que durante las relaciones sexuales se ponen en contacto zonas corporales con flora microbiana diferente. Por ejemplo, hacer énfasis en las normas higiénicas que no se deben dejar de tener en cuenta, como no pasar, sin estricta higiene previa, del coito anal al vaginal, el cual en ocasiones se practica eyaculando en la vagina. Esto nunca debe hacerse, dice el doctor Flores Colombino y añade: “No podemos imaginar el conflicto ecológico infeccioso que se puede provocar”.

Por lo que resulta importante poseer información y educación sexual adecuada que permita regular la conducta sexual de forma consciente, responsable y protegida, evitar los cambios frecuentes de pareja y de carácter fortuito e informal, así como mantener una adecuada higiene sexual. (44)

Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA)

Desde los inicios de la epidemia VIH/SIDA en 1980, los especialistas comenzaron a realizar estudios, proponer teorías sobre el VIH. Aunque resulta bastante amplio el conocimiento acumulado sobre el tema en un periodo de dos décadas, aún no está lo suficientemente generalizado, como para que la familia, la escuela y especialmente los adolescentes, tengan las nociones básicas sobre la epidemiología, prevención, qué hacer ante una persona que vive con VIH o con SIDA. (12,22)

Los jóvenes suelen carecer de la información, los conocimientos prácticos y los servicios que necesitan para protegerse a sí mismo contra la infección por el VIH. La provisión de estos elementos tiene importancia crucial para contrarrestar la epidemia. Según se estima, cada día unos 6.000 jóvenes se infectan con el VIH/SIDA -uno cada 14 segundos- y la mayoría de ellos son jóvenes mujeres.


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Según los últimos estimados ONU-SIDA/OMS durante el 2003, se estimaba que 5 millones de nuevas infecciones en el mundo y fallecieron este mismo año alrededor de tres millones, de estos 2,5 millones son adultos y jóvenes de 15 a 24 años de edad, es decir, un tercio de la cantidad total de personas que viven con el VIH/SIDA en todo el mundo. De ellos, sólo unos pocos tienen conocimiento de su propia reacción serológica positiva al VIH. Según se estima, en América Latina y el Caribe hay 560.000 jóvenes que viven con el VIH/SIDA (31%, mujeres). Unos pocos países caribeños tienen algunas de las más graves epidemias fuera de África y al menos un 2% de sus jóvenes mujeres están infectadas. En América Latina el virus se ha propagado principalmente entre hombres que tienen actividad sexual con otros hombres, pero está alcanzando otras poblaciones, entre ellas jóvenes mujeres.

Cuba aunque con una situación epidemiológica diferente, no escapa de esta epidemia, hasta el 31 de diciembre del 2003 se habían detectado 5257 personas infectadas por el VIH, predominando los hombres con un 29,3%, afectando con mayor frecuencia las provincias de Ciudad de La Habana, Villa Clara y Pinar del Río. (34, 35, 36)

Resultan aún insuficientes las campañas masivas de educación. Los métodos empleados, especialmente con los adolescentes, deberán adaptarse a las características de esta etapa, en la que se sienten invulnerables, por lo que adoptan conductas que ponen en riesgo su salud.

Finalmente se puede decir que toda conducta humana relacionada con la sexualidad debe ser abordada con un enfoque integral del ser humano. Conocer las costumbres, hábitos, tradiciones, mitos y creencias de los pacientes, nos ayudará a emprender una labor de educación y orientación a partir de vivencias y realidades individuales, familiares y sociales del ser humano. (44)

Salud reproductiva. Métodos anticonceptivos.

Definición de Salud reproductiva

En la última Conferencia Mundial de Población y Desarrollo, celebrada en el Cairo, Egipto, en el mes de mayo de 1994, los países participantes, incluyendo a Cuba, defendieron el criterio de que: “la salud reproductiva”, se refiere a asegurar que el individuo sea capaz de tener una vida sexual responsable, satisfactoria y libre de riesgo, con la capacidad de reproducirse, y la libertad de decidir cuándo y con qué frecuencia hacerlo. En esta última afirmación está implícito el derecho del hombre y la mujer a recibir información y a tener acceso efectivo y aceptable, a un costo razonable y libre de riesgos a los métodos de control de la fecundidad de su elección. Así como el derecho a acceder a servicios adecuados de salud que permitirán a la mujer tener un embarazo y partos seguros, y a la pareja la oportunidad de tener hijos sanos.

Como se puede apreciar en las afirmaciones anteriores, se habla no sólo de la importancia de ofrecer información y educación relativa a los métodos de control de la fecundidad, sino que dichas afirmaciones van dirigidas tanto a hombres como a mujeres.

Si se es capaz de ofrecer información y educación oportunas en relación con los métodos de control de la natalidad, así como brindar los servicios de salud adecuados, es que se puede decir que la planificación familiar es la decisión libre, consciente y voluntaria de las parejas para determinar el número de hijos y el espaciamiento entre ello”. (44)

Métodos Anticonceptivos.

Aunque no existen razones biomédicas para contraindicar ningún anticonceptivo, sólo por razones de edad deben tomarse en consideración otros elementos, como son: la información básica sobre la sexualidad, las características del ciclo menstrual, las dificultades de comunicación, inexperiencia sexual, embarazos anteriores y la presión de los compañeros y el medio familiar. (23)

Otros autores señalan que no sólo deben conocerse los diferentes tipos de métodos de control de la natalidad, su eficacia y posibles reacciones secundarias, sino saber cómo y a quién deben ser considerados éstos métodos; conocer el estado de salud, la edad de la paciente y tener en cuenta el tipo de relación de pareja (estable o no), números de hijos, etc. (44)

Adolescencia. Método más adecuado.

Muchos especialistas consideran que el método más adecuado para la adolescencia lo constituye precisamente el condón o preservativo, pues los intrauterinos, a pesar de que existen diseños pequeños para las adolescentes, no son recomendables en general en mujeres jóvenes y nulíparas. Teniendo en cuenta las características del ciclo ovulatorio de las adolescentes, tampoco las píldoras son las más recomendadas. Sin embargo, para el uso del condón o preservativo se necesita constancia, disciplina y responsabilidad, cualidades que se encuentran en ajuste y desarrollo durante esta etapa de la vida del ser humano.

Abortos.

Aunque los anticonceptivos influyen en el descenso de la fecundidad, otros métodos también la regulan. Las tasas de abortos son altas en los países que los reportan, sobre todo en las mujeres menores de 20 años; en otros existen subregistros, pues son ilegales. Las complicaciones de la interrupción de embarazo son muchas y pueden dejar secuelas como: perforaciones, infecciones, infertilidad, secundaria y hasta la muerte materna, la más grave de todas, además de otras; el riesgo de que aparezcan aumentan con el tiempo de embarazo, sobre todo en países donde el aborto es clandestino, muchas veces se realiza sin garantizar todas las condiciones de asepsia y de calificación del personal. (39-43)

Alrededor de 2 millones de adolescentes son sometidas anualmente a un aborto en los países en desarrollo, casi siempre en condiciones de riesgos, y se ha informado que cada una de cada tres mujeres que acuden al hospital solicitando asistencia por complicaciones de un aborto son menores de 20 años. Cuba presenta una situación similar con la diferencia de que en nuestro país el aborto se realiza en condiciones adecuadas y por personal calificado. (23)

Programas Educativos

Durante la infancia deben tratarse contenidos en los programas escolares, que permitan elaborar conceptos y poner en claro valores con respecto al cuerpo humano, la función social, la maternidad, la paternidad, la familia, la niñez, la adolescencia y la vida adulta, de forma tal que el niño, el púber y el adolescente, durante su proceso evolutivo, participen en las experiencias de aprendizaje; de esta forma, desarrollan su autonomía que les permiten ser responsables frente a sí mismos y a la sociedad. Como se sabe, las actitudes y valores que intervienen en el comportamiento reproductivo, tienen origen y relación con las vivencias y mensajes recogidos antes del inicio de esta etapa. (1)

La educación sobre la sexualidad, el asesoramiento y los servicios especiales para jóvenes pueden facilitar a éstos los conocimientos teóricos y prácticos que necesitan para establecer una relación responsable y protegerse -y proteger a otros u otras- de las consecuencias de una actividad sexual peligrosa. Estos servicios orientados a los adolescentes tienen precisamente por objeto ayudarles a evitar relaciones sexuales prematuras, a prepararse para una paternidad responsable, a establecer una relación sexual basada en la confianza y el respeto mutuos y a protegerse contra los embarazos y las enfermedades cuando se decidan a iniciar la actividad sexual. Los programas deberán facilitar información, consejos y servicios a los adolescentes con carácter confidencial, evitando cualquier juicio de valor. Los enfoques más eficaces se basan en que los jóvenes participen a fondo en la planificación, ejecución y evaluación de los programas que les están destinados. (37- 39).

Diseño Metodológico

Se realizó una Intervención Educativa sobre aspectos de la Sexualidad en adolescentes pertenecientes al Consultorio Médico # 42 del Policlínico Universitario “Hermanos Martínez Tamayo”, municipio Baracoa, provincia Guantánamo, en el período comprendido desde enero a noviembre del 2006.

El universo de estudio estuvo constituido por el 100% (191) de los adolescentes pertenecientes a dicho consultorio. La muestra estuvo integrada por 40 adolescentes que se seleccionaron a través de un muestreo aleatorio simple: se le asignó un número diferente a cada elemento del universo y se seleccionaron los que integraron la muestra por medio de una tabla de números aleatorios (Anexo # 1).

Criterios de inclusión

Aptitud física y mental para participar en la investigación.
Consentimiento informado para participar en la investigación (Anexo # 2).


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Criterios de exclusión

Presentar 2 o más ausencias a los encuentros.
No completar el período de estudio.

Etapa Diagnóstica

Los datos se obtuvieron a través de la aplicación de un cuestionario anónimo que los participantes llenaron de forma escrita, previa prueba de pilotaje para comprobar la calidad de confección del instrumento. Mediante el cual se determinó el nivel de conocimiento de los adolescentes con respecto a:

Relaciones Sexuales precoces.
Embarazo en la adolescencia.
Infecciones de Transmisión Sexual.
Salud reproductiva. “Métodos Anticonceptivos.

Operacionalización de las Variables

En el cuestionario se tuvieron en cuenta las variables: edad, sexo, ocupación, para caracterizar al grupo de adolescentes estudiado.

Edad: Expresada según años cumplidos. Se ubicaron los adolescentes en tres grupos etáreos, que representan las diferentes etapas de la adolescencia: temprana, media y final, por los cambios que tienen lugar en esta etapa y teniendo en cuenta los criterios del Programa de Salud Integral de la Niñez y Adolescencia, se agruparon en los siguientes intervalos:

10-14 años
15-17 años
18-19 años

Sexo: Expresado según el sexo genético de pertenencia.

Femenino
Masculino

Ocupación: Según la labor que realizan.

Estudiante
Trabajador
Ama de casa
Desocupado

El cuestionario (Anexo # 3) fue aplicado por la autora, lo que garantizó la posibilidad de esclarecer los diferentes términos que aparecen en él y obtener datos precisos.

Clave de puntuación del cuestionario:

Estuvo constituido por 6 preguntas, con contenido a evaluar las preguntas 2, 3, 4, 5 y 6. Cada una de ellas tuvo un valor de 5 puntos, otorgándosele un punto a cada inciso correcto, estableciendo la siguiente escala cualitativa que se aplicó antes y después del estudio, lo que permitió finalmente seleccionar el total de encuestados que respondieron correcta o incorrectamente cada pregunta del cuestionario; ello facilitó evaluar el nivel de conocimiento antes y después de la intervención.

Escala cualitativa

Correcto: 3 a 5 puntos
Incorrecto: Menos de 3 puntos

Total final de puntos del cuestionario:

Se efectuó la sumatoria de todos los puntos obtenidos, estableciendo una evaluación de:

Bueno: 22 a 25 puntos.
Regular: 18 a 21 puntos.
Malo: menos de 18 puntos.

Clave de respuestas:

Pregunta 2: Se consideró correcta cuando señalaba verdadero en los incisos a), b), d), y e) y señalaba falso en el inciso c).

Pregunta 3: Se consideró correcta cuando respondía SI en cada uno de los incisos.

Pregunta 4: Se consideró correcta cuando marcaban con una X los incisos a), b), y e).

Pregunta 5: Se consideró correcta cuando señalaban con una X los incisos b), c) y e).

Pregunta 6: Se consideró correcta cuando respondió SI en los incisos a) y d) y NO en los incisos b), c) y e).

Etapa de Intervención

De acuerdo a los resultados obtenidos se elaboró un programa educativo (Anexo #4) que abordó diferentes aspectos de la sexualidad.

Se procedió a formar dos subgrupos con 20 miembros cada uno para propiciar una mejor interacción entre los participantes.

Con cada grupo se realizaron 8 encuentros con una frecuencia semanal (sábados en la sesión de la tarde) y una duración de 45 minutos cada uno. En cada sesión se aplicaron técnicas grupales para orientar a la reflexión de los esquemas valorativos personales y sociales a través de inductores que propician la evocación de experiencias significativas fundamentalmente en el área de la Educación Sexual.

La sesión final, comprendió también una técnica de cierre o despedida, que concatenó la mayor parte de las vivencias y aprehensiones del grupo.

Etapa Evaluativa

Se aplicó nuevamente el cuestionario inicial, y se constató las modificaciones en el conocimiento con respecto al tema tratado, a través del procesamiento y la síntesis de los datos.

Consideraciones éticas

Para la puesta en práctica de esta investigación se tuvieron en cuenta los principios de la Bioética Médica: respecto a las personas, beneficencia, no maleficencia, autonomía y justicia. A todos los adolescentes, seleccionados de forma aleatoria y a sus padres, la autora en el consultorio médico, les brindó una explicación detallada sobre la investigación, sus fines y los beneficios que con el estudio se tendrían. Se les informó sobre el derecho que tenían de participar o no en la investigación y se recogió por escrito el consentimiento informado en caso de aceptar. Se verificó a través de preguntas de comprobación si comprendieron la información. Se les aseguró la confidencialidad de los datos, cuya custodia sería responsabilidad de la autora, quien utilizaría los resultados, conjuntamente con el tutor y asesores, únicamente con fines científicos.

Técnicas y Procedimientos

Técnica de recolección del dato primario:

A partir de la aplicación del cuestionario inicial, se recogió la información necesaria para el estudio, instrumento que se aplicó nuevamente después de la etapa de intervención como test final y así se completó la recogida de datos para el estudio.


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .7

Técnica de procesamiento y análisis de la información:

El procesamiento de la información se realizó a través del método micro computarizado. Se creó una base de datos utilizando el sistema Epinfo 2002 versión 6.0, utilizándose el porcentaje como medida resumen y el porcentaje de variación como medida de comparación mediante la fórmula: 

educacion_sexualidad_adolescencia/porcentaje_de_variacion 

Finalmente los resultados fueron representados en tablas de contingencia estadística de doble entrada. Las diferencias estadísticas de las variables categóricas se analizaron mediante la prueba de McNemar.

La discusión de los resultados y su interpretación se realizó mediante un minucioso trabajo de mesa con el tutor y revisado por los asesores, teniendo como base los elementos encontrados en la revisión bibliográfica, extraída de las publicaciones nacionales y extranjeras, obtenidas por Internet, entre otras fuentes actualizadas que se acotaron según las normas de Vancouver. Con estos datos se realizaron comparaciones que permitieron arribar a conclusiones y hacer recomendaciones al respecto.

Resultados

Al analizar la distribución de los adolescentes según grupo de edades y sexo (Tabla 1) se encontró que por grupos de edades, el grupo de 15-17 años fue el de mayor frecuencia con 22 adolescente para el 55% del total, seguido por los que estaban comprendidos en las edades de 10-14 años en que se encontraron 12 adolescente para un 30%. Por sexo prevaleció el femenino con 28 adolescentes, para un 70% del total, coincidiendo además con el grupo de edad predominante 16 para un 40%.

En la Tabla 2 se puede observar la distribución de los adolescentes según la ocupación y su relación con el nivel de conocimiento al inicio del estudio, encontrándose que 19 de los adolescentes eran estudiantes para un 48%, seguidos de los trabajadores con 8 casos para un 20%, 7 casos o sea, el 17% eran amas de casa y el resto de los adolescentes 6 estaban desocupados para el 15% del total.

El 52% de los adolescentes poseía un conocimiento malo sobre educación sexual, seguida por el 33% con conocimiento regular y el 15% fue evaluado como bueno. Al relacionar ambas variables se constató que son precisamente los estudiantes con un 25% los que poseían de forma mayoritaria déficit de conocimientos, seguidos de las amas de casa con un 12% del total.

Antes de la intervención el 65% de los jóvenes consideró sobre las Relaciones Sexuales Precoces que éstas constituían una prueba de amor entre la pareja, el 62% no reconoce la posibilidad de traumatismos ginecológicos, el 57% desconoce el riesgo del embarazo no deseado y el 47% desestima la posibilidad de contraer una infección de transmisión sexual (ITS). El 70% respondió que ello podía condicionar un grave problema familiar.

Después de la intervención se aprecia un incremento significativo (p<0,05) en el nivel de respuestas correctas en todos ítems aplicados, a pesar de que se observa que en esta etapa del estudio el 20% sigue considerando que estas relaciones sexuales precoces son una prueba de amor entre las parejas y el 12% no la considera un problema familiar de importancia, tal y como se muestra en la Tabla # 3.

Al evaluar los conocimientos acerca del Embarazo en la Adolescencia (Tabla # 4), antes de la Intervención, el 88% de los encuestados respondió incorrectamente el inciso que evalúa el riesgo que este trae para la vida de la madre y el feto, el 75% no reconoce el problema que le ocasiona a la madre y al padre y no ve las limitaciones para la calidad de vida de estos adolescentes y 72% desconoce que el embarazo en esta etapa es causa de enfermedad, muerte en la madre y bajo peso del futuro niño. Los índices de conocimientos adquiridos después de la intervención son significativos (p<0,05), mostrando porciento de variación notablemente alto en los ítems a), b), y e). El porciento de variación promedio del test que evaluó embarazo en la adolescencia es superior a 292.

Según nuestros resultados expuestos en la Tabla # 5 antes de la intervención, el porcentaje promedio de respuestas incorrectas sobre el tema de Infecciones de Transmisión Sexual fue del 71% y las mayores dificultades se presentaron en los ítems c) con 88% de errores, el d) con 77% y el e) con 75%, después de la intervención educativa pudimos observar que el porciento de variación en ellos fue alto especialmente en los ítems c)= 500, d)=266 y e)= 250.

Cuando determinamos los conocimientos de los encuestados sobre el VIH/SIDA (Tabla # 6) antes de la intervención pudimos comprobar que el 76% respondieron incorrectamente; donde el mayor por ciento de errores se les señalan a los ítems a) (90%), d) (83%) y c) (80%). Después de la intervención los estudiantes alcanzaron un alto promedio de respuestas correctas 84%; resultados significativos (p<0,05) para esta serie, de igual forma el porciento de variación es alto en estos tres ítems: a) = 450, d) = 342, c) = 337.

En lo que respecta al conocimiento de los adolescentes sobre Métodos Anticonceptivos, resultados que se reflejan en la Tabla # 7, antes de la intervención identificamos que el 26% respondían correctamente y después de la intervención educativa el conocimiento alcanzó el 79% entre todos los encuestados, observándose un porciento de variación promedio para el test de 249 y una p< 0.05 lo que evidencia resultados significativos. El mayor porciento de errores al inicio del estudio estuvo presente en los ítems c) (88%), d) (77%) y e) (75%).

Los adolescentes mostraron, previo a la intervención, de manera general un déficit en los conocimientos acerca de los aspectos tratados con solo 27% de respuestas correctas, siendo los temas del VIH-SIDA (83%), infecciones de transmisión sexual (ITS) (77%) y Métodos Anticonceptivos (75%) en los que se constató mayor desconocimiento; encontramos una variación significativa (p<0,05) después de la intervención, donde se alcanzó un promedio de respuestas correctas del 80%, para un porciento de variación de 216. Tabla # 8.

Análisis y discusión

El sexo femenino tuvo mayor participación en nuestro estudio. Estos resultados coinciden con otros estudios nacionales realizados, los que señalan que son precisamente las femeninas mayoritarias en la población en general. Fueron predominantes además en las edades comprendidas en la etapa media de la adolescencia.

Esto reviste gran importancia por ser esta etapa fundamental en la vida; donde se concluye lo principal de la formación de la personalidad, lo que hace que se deba prestar atención a las particularidades psicológicas, sociales, igualdad de género y comportamiento sexual.

En nuestro país las/los adolescentes por igual tienen acceso a la educación, a la vivienda, trabajo, a la salud integral, sexual y reproductiva. Existe un reconocimiento a su identidad así como preocupación por sus necesidades. Es meritorio señalar que gran parte de las necesidades de los adolescentes en estos momentos está relacionada con su salud sexual. Ya que tienden a ver el inicio de las relaciones sexuales como una competencia que les ayuda a afirmar su identidad y les da status en sus grupos de pares. (1, 23)

Nuestros resultados difieren con estudios realizados en países de Centroamérica y el Caribe donde los adolescentes son ignorados, malentendidos e incluso estigmatizados a pesar de tener ellos un peso numérico altamente significativo en la población, ascendiendo a más de 148 millones. Viven en serias condiciones de pobreza, con déficit social, estableciéndose diferencias de edad y sexo, favoreciendo a los varones en recibir la atención escolar, pero a la vez los más conducidos prematuramente hacia la autonomía e independencia y con ello a la práctica de Relaciones Sexuales Precoces. (6,21).

Se plantea que el abandono escolar favorece el inicio precoz de actividad sexual. Afortunadamente los estudiantes fueron el grupo predominante en el estudio, el que estuvo dirigido a una etapa de la vida donde la actividad escolar es prioritaria en nuestro país. Les siguen en orden de frecuencia los trabajadores, lo que resulta llamativo, pues la actividad laboral pura no es característica de estas edades. Nótese además que un grupo significativo de ellos eran amas de casa y desocupados, elemento que llama la atención, por constituir grupos de riesgo en los que las conductas sexuales no se sustentan sobre bases sólidas forjadas con orientación sexual adecuada, además están en desventaja con el resto de los jóvenes vinculados a la vida estudiantil donde se establecen y ponen en práctica programas de salud sexual y reproductiva.


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Es importante considerar que existía desconocimiento sobre Educación Sexual en nuestros encuestados al inicio del estudio independientemente de su ocupación y después de la intervención los estudiantes y los trabajadores adquieren mayor nivel de conocimientos. Resultados similares a estos se encontraron en estudios realizados en el ámbito nacional. (43).

Nuestros resultados difieren de los encontrados por otros autores de Centroamérica donde el sustrato social y educacional es muy diferente al nuestro, carentes de soporte de este tipo y donde la educación no tiene el alcance necesario para llegar a todos las esferas de la sociedad. (10, 14,16)

La primera relación sexual cada vez ocurre en estadios de la vida más tempranos. Lo cual se asocia a un mayor riesgo de embarazos y de contraer infecciones de transmisión sexual invalidantes en no pocas ocasiones para la futura vida sexual y reproductiva del adolescente y que pueden llevar hasta la muerte como en el caso del SIDA, además el inicio de las relaciones sexuales precoces trae otro problema aparejado que consiste en que aumentan el número de compañeros sexuales. (25).

Resulta llamativo cómo nuestros adolescentes aun manifiestan rasgos de machismo y a pesar de la educación que reciben desde edades tempranas, persiste desconocimiento de las consecuencias negativas desde el punto de vista biológico, psicológico y social, de las Relaciones Sexuales Precoces. Como dato positivo señalemos que la mayoría de los adolescentes reconoce que estas relaciones sexuales condicionan un grave problema familiar, lo que puede estar vinculado con el papel preponderante que juega la familia en la educación de los hijos.

Después de la intervención se aprecia un incremento significativo (p<0,05) en el nivel de respuestas correctas en todos ítems aplicados, ello en correspondencia con un buen nivel de captación de los temas impartidos. Nuestro estudio demuestra la necesidad de seguir educando sobre la sexualidad, ya que a mayor conocimiento sobre el tema se retrasa el inicio de las relaciones sexuales. Diversos autores han demostrado los beneficios de la educación sexual para retrasar la edad de inicio de actividad sexual, evitar conductas de riesgo y fomentar el uso de anticonceptivos en los adolescentes que ya están sexualmente activos (4, 7, 8, 9).

En estudios cubanos acerca de las concepciones de los jóvenes sobre el matrimonio y la elección de la pareja se reflejó la aceptación de las relaciones prematrimoniales, un grado de información insuficiente sobre el tema así como actitudes inadecuadas hacia la anticoncepción, relaciones sexuales y la fidelidad. (20, 21)

Estos resultados difieren de los encontrados en estudios realizados en otros países como Haití, Guatemala y Honduras donde los adolescentes no reconocen en su mayoría el grave problema que puede causar a su familia el tener relaciones sexuales en edades temprana de la vida, ya que por lo general viven en familias disfuncionales con ambiente familiar de tensión, desequilibrio, pobre desempeño de roles y sus padres no se comunican con ellos e incluso en ocasiones lo estimulan abandonar el hogar para mejoras de vida y por consiguiente comienzan a tener relaciones como medio de subsistir. (26, 27,28)

Al evaluar los conocimientos acerca del Embarazo en la Adolescencia, apreciamos de manera general el desconocimiento de los adolescentes en relación a los aspectos explorados antes de la intervención. Estos resultados son realmente alarmantes ya que era evidente que ignoraban que el embarazo y la maternidad tempranas limitan o impiden las oportunidades de estudio, el éxito educativo, la salud de la adolescente embarazada, comprometen la capacidad económica para su subsistencia propia y la de sus hijos y se trunca o interrumpe el proyecto de vida. Por otra parte podemos plantear que después de la intervención, el nivel de conocimiento adquirido por los encuestados fue aceptable.

Cuba se encuentra entre las naciones con una baja tasa global de fecundidad. Sin embargo, nos hallamos entre las naciones con elevada tasa de fecundidad y proporción de nacimientos en mujeres adolescentes, con cifras del 16%. Las complicaciones y la morbilidad y mortalidad perinatales de estas gestantes se verán incrementadas en cualquier estadística consultada.

Nuestros resultados resultan similares a otros estudios realizados en Centroamérica pero con la diferencia que el grado de desinformación en estos fue mayor, sumado a la inexistencia en la mayoría de estos países de servicio de calidad en salud sexual y reproductiva, adecuada para los adolescentes y accesible a todos. (29)

Todos coinciden en que la actividad sexual de los adolescentes no va aparejada con información y educación científica oportuna en temas de sexualidad y salud reproductiva, en los derechos y responsabilidades correlativas, a la falta de educación. Estudios realizados en cuatro países de América Latina se comprobó que entre 10% y 14% de los embarazos entre mujeres jóvenes que nunca habían estado casadas terminaban en aborto; en otros cuatro países, los porcentajes eran iguales a la mitad. En los pocos países de Asia donde se han realizado estudios se comprobaron pautas diversas. (32, 33) En Kazajstán, donde históricamente se ha aceptado que se recurra al aborto en caso de embarazo no deseado, las tasas siguen siendo altas, de un 45%; en cambio, en Filipinas, el aborto es relativamente raro (7%) y predominan los alumbramientos después del matrimonio. (34)

Al reflejar los conocimientos que sobre las Infecciones de Transmisión Sexual, tenían nuestros encuestados, antes y después de la Intervención Educativa, nos percatamos que nuestros adolescentes presentaban déficit de conocimientos en algunos de los aspectos evaluados relacionado con la pobre preparación mostrada. Después de la intervención mostraron una buena captación de los conocimientos impartidos. Pensamos que nuestros resultados guardan relación con las dificultades manifiestas de los adolescentes para solicitar información sobre las infecciones de transmisión sexual (ITS), en su mayoría se avergüenzan al hablar sobre el tema ya sea con sus profesores, familiares, e incluso con su pareja sexual.

Estudios realizados en Cuba encontraron resultados muy similares a los nuestros sobre este tema, lo que obedece al nivel educacional existente en nuestro medio. (21, 22, 23). Por ejemplo en un estudio realizado en Ciudad de La Habana, se encontró un desconocimiento acerca del tema pero en menor medida, lo que creemos está relacionado con el mayor nivel socioeconómico y cultural que presenta dicho territorio; no obstante en ambos estudios se destaca la necesidad de incrementar el conocimiento al respecto. (16)

El impacto creciente que tiene la infección de transmisión sexual (ITS) en la salud de los adolescentes, y la conexión que existe entre este grupo de enfermedades y la prevención de la infección por el VIH, son dos elementos de enorme importancia para que sean consideradas un problema prioritario de nuestros tiempos. (17)

No obstante queremos señalar que aún así, existen puntos oscuros demostrados en nuestro estudio, en los cuales hay que insistir, si tenemos en cuenta que los adolescentes con frecuencia muestran desconocimiento y prácticas de conductas riesgosas en sus relaciones sexuales que los exponen a una mayor posibilidad de contagio.

Después de la intervención los adolescentes alcanzaron un alto promedio de respuestas correctas en el tema referido al VIH/SIDA, resultado significativo (p<0.05) para esta serie, lo que se explica por la motivación que despertó en ellos el abordaje de esta enfermedad, así como la situación epidemiológica en Cuba y en el resto del mundo, sin dejar de mencionar el papel rector que están jugando los medios de difusión masiva.

Investigaciones a nivel internacional sobre todo en países subdesarrollados, han demostrado que la mitad de los jóvenes tienen conceptos erróneos acerca de la manera en que se transmite el VIH. (28)

Según Chacón en Ciudad de La Habana (36) las personas que manifiestan mayor riesgo son las que reciben información por un número mayor de fuentes: 4 veces más información por las vías informales (amigos, fiestas y discotecas), 3 veces más por los medios masivos de comunicación y 2 veces más por los agentes de la salud pública, que las personas con práctica sexuales de menor riesgo; pudiera existir contradicciones entre los mensajes que reciben por las vías informales y los que son transmitidos por los agentes de la salud pública. Es posible que los mensajes de comunicación social, al ser estandarizados no den respuestas a todas las necesidades de información por lo que quizás estos tengan la sensación de poseer toda la información necesaria y desestimen otras fuentes educativas. (36,37)

Al estudiar los conocimientos que sobre Educación Sexual tenían los adolescentes fue necesario investigar acerca de los Métodos Anticonceptivos por la importancia que guardan en la Salud Reproductiva, lo que implica que las personas puedan llevar una vida sexual segura y satisfactoria y que tengan la capacidad de reproducirse y la libertad de decidir al respecto, cuándo y con qué frecuencia. En el caso de los adolescentes y jóvenes es necesario que entiendan que el uso de los Métodos de Planificación Familiar o Métodos Anticonceptivos han contribuido a que mujeres en todo el mundo eviten 400 millones de embarazos no deseados. Además muchos de estos métodos reportan beneficios para la salud; por ejemplo, los condones evitan la transmisión sexual de varias enfermedades entre ellas el VIH-SIDA. (29)


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .9

En nuestra serie predominaron los adolescentes con bajo nivel de conocimiento acerca de los Métodos Anticonceptivos, resultados que guardan relación con la complejidad del tema y a que se ha comprobado que los adolescentes reciben mayor información sobre otro temas de Educación Sexual como son el embarazo y sus consecuencia, así como las relaciones sexuales precoces. Son precisamente los adolescentes tardíos los que buscan orientación sobre métodos anticonceptivos y acuden al médico o al ginecólogo (14, 17), esta puede ser la razón por la que en nuestro estudio fueron precisamente los adolescentes de la etapa media los que presentaron mayor desconocimiento sobre este tema. Después de la intervención educativa se elevó el nivel de conocimiento, pero es necesario señalar que el 21% de nuestros adolescentes aun presentan necesidades de aprendizaje sobre este tema.

Los datos que se muestran en nuestro estudio previo a la intervención, difieren de estudios realizados en España, donde se comprobó que los adolescentes tenían elevados conocimientos sobre este tema, consideramos que ello obedece a que en este país se han implementado programas educativos, así como al elevado nivel sociocultural que caracteriza a dicha población. (30) Los resultados posteriores a la Intervención son respaldados por estudios realizados en México en los que se demostró que existía desconocimiento (antes de aplicar la intervención) de las mismas respecto a los métodos de anticoncepción y su utilidad, modificándose el resultado posterior a la aplicación de la intervención educativa. (31)

Como resultados finales de la Intervención Educativa, podemos afirmar que, los adolescentes mostraron, previo a la intervención, de manera general un déficit en los conocimientos acerca de los aspectos tratados, siendo los temas del VIH-SIDA, Infecciones de Transmisión Sexual y Métodos Anticonceptivos en los que se constató mayor desconocimiento; lográndose una variación significativa (p<0,05), después de la intervención. Queda demostrado que la intervención educativa sobre Educación Sexual incrementó el nivel de información y conocimiento en adolescentes.

Conclusiones

La Intervención Educativa aplicada incrementó el nivel de información y conocimiento sobre sexualidad de los adolescentes, quienes constituyen un grupo especial a considerar, desempeñando un papel fundamental la Educación Sexual como parte de su educación integral.

Recomendaciones

Abordar el tema de la Sexualidad en etapas tempranas de la vida, involucrando a los jóvenes, padres, profesores y líderes comunitarios a fin de intervenir oportunamente.

Dirigir las actividades educativas de promoción y prevención de salud sexual no sólo a brindar información sobre los riesgos de la sexualidad, sino también a inculcar valores, formas adecuadas de conductas y transformar mitos, creencias y prejuicios en conductas saludables, protegidas y responsables.

Realizar investigaciones que evalúen actitudes hacia la vida sexual así como impacto de los programas de intervención educativa sobre sexualidad.

Anexo 1

NÚMEROS ALEATORIOS PARA SELECCIÓN DE LA MUESTRA 

educacion_sexualidad_adolescencia/numeros_aleatorios_muestra

Anexo # 2

Modelo de consentimiento informado

Yo: _________________________________ adolescente y/o padre perteneciente al CMF # 42 del Policlínico Universitario “Hermanos Martínez Tamayo” de Baracoa-Guantánamo, estoy dispuesto(a) a participar en la investigación relacionada con el conocimiento sobre Educación Sexual, luego de habérseme explicado los objetivos de la investigación y solicitado mi cooperación.

Firma ¬¬¬¬____________

Anexo # 3. Cuestionario

Fecha: __________

Tu participación es muy útil. Necesitamos que respondas cada una de las preguntas cuidadosamente después de leerlas y según tu criterio personal.

1. Datos Generales:

a. Edad.

10 - 14 años [ ]
15 - 17 años [ ]
18 - 19 años [ ]

b. Sexo:

Femenino [ ]
Masculino [ ]

c. Ocupación:

Estudiante [ ]
Trabajador [ ]
Ama de casa [ ]
Desocupado [ ]

De las afirmaciones que a continuación te presentamos responde Verdadero (V) o Falso (F) según corresponda.

Las relaciones sexuales precoces pueden ser causa de un embarazo no deseado ____
Las relaciones sexuales precoces incrementan el riesgo de traumatismos ginecológicos en la mujer ____
Las relaciones sexuales precoces son una prueba del amor entre la pareja____
Las relaciones sexuales precoces constituyen un grave problema familiar____
Las relaciones sexuales precoces pueden ser causa de infecciones de transmisión sexual ____

3. Acerca del embarazo en la adolescencia, responda SI o NO:

Cuando una adolescente se embaraza trae riesgos para la vida de ella y la de su hijo____
El embarazo en la adolescencia constituye un problema familiar para la futura madre y padre____
Un embarazo en la adolescencia puede producir anemia y riesgo de prematuridad ____
El embarazo en la adolescencia es causa de deserción escolar____
Si una adolescencia se embaraza puede tener complicaciones en el parto_____

4. En relación con las enfermedades de transmisión sexual, marque con una X las afirmaciones que considere correctas:

a) ____ Las infecciones de transmisión sexual (ITS) son causantes de complicaciones como la enfermedad pélvica inflamatoria en la mujer, estrechez uretral en el hombre, infertilidad, cáncer cervical y cáncer de pene.


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .10

b) ____La forma principal de transmisión es por las relaciones sexuales con penetración vaginal, anal u oral, sin protección.
c) ____ Las mujeres con infecciones de transmisión sexual (ITS) frecuentemente presentan síntomas.
d) ____ A pesar de tener síntomas de infecciones de transmisión sexual (ITS) puedes seguir teniendo relaciones sexuales.
e) ____ Las infecciones de transmisión sexual (ITS) facilita la transmisión del VIH de una persona a otra.

5. Con relación al VIH-SIDA, marque con una X las oraciones correctas:

____ El VIH- SIDA solo se presenta en los homosexuales.

____ La vía de transmisión de esta enfermedad fundamentalmente es a través de relaciones sexuales desprotegida.

____ El contacto con lágrimas, sudor, saliva, orina y heces fecales no constituye un modo de transmisión del VIH – SIDA.

____ El SIDA es una infección de transmisión sexual (ITS) de causa curable.

____ El resultado NEGATIVO en el examen de sangre no siempre descarta la presencia de SIDA.

Sobre los métodos anticonceptivos responda SI O NO.

_____El coito interrumpido no es una forma de anticoncepción 100 porciento segura.

_____Usar Condón significa falta de confianza en la pareja.

_____El uso de hormonas inyectables constituye anticoncepción permanente.

_____Los anticonceptivos intrauterinos pueden producir hemorragias vaginales.

_____El método ideal para los adolescentes son las tabletas anticonceptivas.


Anexo # 4. Estrategia de Intervención

Encuentro # 1: “Presentación y Expectativas”.

Objetivos:

Crear empatía.
Presentación y explicación del programa educativo.
Propiciar la interacción de los estudiantes, y obtener sugerencias para el curso.

Actividades:

Primeramente se presentará todo el grupo, con una técnica de presentación: La Flor: cada participante con una flor en la mano dirá su nombre y se la entregará al compañero(a) de al lado para que haga lo mismo.

Se presenta el coordinador y se les explica las intenciones del programa educativo y se precisan que expectativas tienen los adolescentes con respecto a la educación sexual.

Aplicación del cuestionario.

Encuentro # 2: “Introducción a la Sexualidad”.

Objetivos:

Señalar como funciona nuestra sexualidad. Definición
Explicar los órganos sexuales masculinos y femeninos internos y externos, sus diferencias.
Precisar las fases de la respuesta sexual humana.

Actividades:

Introducción: Se realizará una ronda de comentarios sobre lo discutido en la reunión anterior.

Actividad principal: Se realizarán preguntas y diálogos para introducir el tema de la sexualidad. Posteriormente se presentará una breve exposición sobre el tema acompañada de material gráfico.

Cierre: Breve resumen de lo aprendido en la actividad y se complementará con una dinámica de grupo para reafirmar los conocimientos.

4. Se puntualizará el próximo encuentro.

Encuentro # 3: “Relaciones sexuales en la adolescencia.”

Objetivo:

Reflexionar acerca de la primera relación sexual. Riesgos de la precocidad en las relaciones sexuales.

Actividades:

Introducción: Se realizará una Lluvia de Ideas para que ellos expongan lo que piensan de las relaciones sexuales en la adolescencia.

Actividad principal: Se desarrollará un taller sobre las Relaciones Precoces en la Adolescencia.

Cierre: Se realizará la técnica de lo positivo y lo negativo que estos consideraron sobre el encuentro.

Encuentro # 4: “Embarazo en la adolescencia.”

Objetivos:

Profundizar acerca del embarazo en la adolescencia.
Explicar los peligros y complicaciones.

Actividades:

Introducción: Realizar un breve comentario sobre lo discutido en la reunión anterior.

Actividad principal: Se realizará una conferencia donde se expliquen los riesgos del embarazo en la adolescencia, sus complicaciones y la repercusión social y familiar que esto implica.

Cierre: Se realizará un breve resumen de lo aprendido por unos de los estudiantes y se complementará con una dramatización por parte de los estudiantes de un caso problema.

Se puntualizará el próximo encuentro.

Encuentro # 5: “Infecciones de Transmisión Sexual”

Objetivos:

Diferenciar las infecciones de transmisión sexual por sus particularidades.
Determinar las vías de transmisión así como comportamientos que influyen sobre la transmisión.
Abordar las complicaciones de las infecciones de transmisión sexual (ITS)
Precisar las formas de prevención.


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .11

Actividades:

Introducción: Realizar una lluvia de ideas acerca de las infecciones de transmisión sexual (ITS) que conocen los estudiantes.

Actividad principal: Se realizará un taller para abordar el tema en cuestión.

Cierre: Se organizarán grupos y se les pedirá que respondan las tarjetas con situaciones problemas.

Encuentro # 6: “VIH-SIDA”.

Objetivos:

Ampliar en los aspectos epidemiológicos fundamentales de esta enfermedad.
Profundizar en la forma de transmisión, diagnostico y prevención.
Precisar las vías o prácticas sexuales por las que no se transmite el VIH.

Actividades:

Introducción: Realizar una dinámica de grupo acerca de lo que conocen acerca del VIH- SIDA.

Actividad Principal: Se realizará una conferencia donde se aborden los siguientes temas: breve historia del VIH-SIDA, concepto, sistema Inmunológico, cómo actúa el virus del SIDA, cómo se trasmite, la transmisión sexual y otras, detección del virus, formas de prevención, informaciones generales.

Cierre: Realizar un dramatizado, acerca de una paciente VIH-SIDA en la sociedad.

Se puntualizará el próximo encuentro.

Encuentro # 7: Salud reproductiva. “Métodos Anticonceptivos”.

Objetivos:

Definir la salud reproductiva.
Describir los principales métodos anticonceptivos y sus complicaciones.
Reflexionar acerca de cuál debe ser el más utilizado por los adolescentes.

Actividades:

Introducción: Técnica de animación el regalo de la alegría, cada participante, le regala a su compañero un mensaje positivo, y luego se dan a conocer en el grupo.

Actividad principal: Se llevará a cabo una clase práctica donde se presentarán los diferentes tipos de métodos anticonceptivos, cómo se usan, las principales complicaciones de cada uno, y se enfatizará en el anticonceptivo ideal para la adolescencia (condón).

Cierre.

Se puntualizará el próximo encuentro.

Reunión # 8: “Evaluación y cierre”.

Objetivos:

Integrar los temas abordados y valorar lo trascendental del trabajo grupal.

Evaluar lo aprendido.

Actividades:

1. Introducción. Sentados en círculo, los adolescentes expresarán brevemente cómo se sintieron en la reunión anterior.

2. Actividad principal: Se dividirá el grupo en dos y se hará un debate, sobre todo lo aprendido en el Taller.

3. Cierre.

4. Evaluación. Se procede a volver a aplicar el cuestionario antes-después.

Anexo # 5

Planilla de Vaciamiento

No.____

Edad:

10 - 14 años ___
15 - 17 años ___
18 - 19 años ___

Sexo:

Femenino ___
Masculino ___

Ocupación:

Estudiante ___
Trabajador ___
Ama de casa ___
Desocupado ___

Calificación de las respuestas: 

educacion_sexualidad_adolescencia/distribucion_edad_sexo

Pregunta 2:

Incorrecta ___
Correcta ___

Pregunta 3:

Incorrecta ___
Correcta ___

Pregunta 4:

Incorrecta ___
Correcta ___


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .12

Pregunta 5:

Incorrecta ___
Correcta ___

Pregunta 6:

Incorrecta ___
Correcta ___

Nivel de conocimiento:

Bueno___
Regular___
Malo___


Anexo # 6. Tablas

Tabla # 2: Adolescentes según ocupación y nivel de conocimiento sobre Sexualidad. Antes de la intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/relacion_conocimiento_ocupacion

Fuente: Cuestionario

Tabla # 3: Conocimiento de los adolescentes sobre relaciones sexuales precoz. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/relaciones_sexuales_precoces

Fuente: Cuestionario n = 40

Tabla # 4: Conocimiento de los adolescentes sobre embarazo en la adolescencia. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/conocimiento_embarazo_adolescencia

Fuente: Cuestionario p< 0,05 % Variación 292 n = 40

Tabla # 5: Conocimiento de los adolescentes sobre Enfermedades de Transmisión Sexual. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/infecciones_transmision_sexual

Fuente: Cuestionario. n = 40 Valor de p < 0.05

% de Variación Promedio: 244.% de Variación: c)= 500% d)=266% e)= 250%

Tabla # 6: Conocimiento de los adolescentes sobre VIH-SIDA. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/conocimiento_vih_sida

Fuente: Cuestionario n = 40

% de Variación: a) = 450% d) = 342% c) = 337%)

Tabla # 7: Conocimiento de los adolescentes sobre métodos anticonceptivos. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/conocimiento_metodos_anticonceptivos

Fuente: Cuestionario n = 40 % Variación 249%


Sexualidad en la adolescencia. Intervencion educativa .13

Tabla # 8: Evaluación por preguntas del conocimiento de los adolescentes sobre Sexualidad. Antes y después de la Intervención. Policlínico Universitario. Baracoa. 2006 

educacion_sexualidad_adolescencia/resumen_conocimientos_sexualidad

Fuente: Cuestionario N = 40 p< 0,05 % Variación 216%


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