A lo largo de la historia la manera de definir, obtener y/o mejorar la salud ha evolucionado influida por el entorno cultural, político y social de cada momento, lo mismo ocurre con el concepto educación; en México, el análisis de estos conceptos evidencia rezagos y por ende la inequidad en el servicio a la comunidad. Propuestas, planes y programas surgen y desaparecen de la misma manera. Autores refieren que para lograr niveles óptimos de salud haría falta distribuir los recursos económicos de modo más equitativo y promover la educación.