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Revisión bibliográfica. Lesiones deportivas del ligamento cruzado anterior. Abordaje terapéutico en el ámbito fisioterápico

Revisión bibliográfica. Lesiones deportivas del ligamento cruzado anterior. Abordaje terapéutico en el ámbito fisioterápico.

INTRODUCCIÓN

El ligamento cruzado anterior (LCA), es una estructura intra-articular que se origina en el cóndilo femoral externo y se inserta a nivel antero-medial en la espina intertibial medial. Su función principal es limitar la traslación anterior de la tibia sobre el fémur, pero contribuye, además, a la estabilización en varo o valgo excesivo y limita la hiperextensión. También se encarga de proporcionar información sensorial sobre la posición articular, movimiento y coordinación del reflejo muscular.

El mecanismo de lesión más frecuente, es la rotación del fémur sobre la tibia fija (pie apoyado) durante un movimiento de valgo excesivo. También es común la hiperextensión de la rodilla aislada o en combinación con rotación interna de la tibia. Últimamente se han observado lesiones durante una caída con flexión forzada de rodilla, por lo que puede considerarse un tercer mecanismo lesional.

Revisión bibliográfica. Lesiones deportivas del ligamento cruzado anterior. Abordaje terapéutico en el ámbito fisioterápico.

Laura Escanilla García. Enfermera.

Carmen Lavilla Villaverde. Enfermera.

EPIDEMIOLOGÍA

La rotura del ligamento cruzado anterior (LCA) representa el 50% de las lesiones ligamentosas de rodilla. Produciéndose el 75% durante las actividades deportivas y afectando en mayor proporción a las mujeres que a los hombres. El fútbol, el béisbol, el baloncesto y el esquí originan el 78% de las lesiones del ligamento cruzado anterior (LCA) en deportistas.

Factores potenciales de riesgo:

–              Ambientales: tipo de superficie de juego, equipo de protección, condiciones meteorológicas y calzado.

–              Anatómicos: alineación de la extremidad inferior, laxitud articular, fuerza muscular, surco intercondíleo y tamaño del ligamento cruzado anterior (LCA).

–              Hormonales: efecto de los estrógenos sobre las propiedades mecánicas del ligamento cruzado anterior (LCA) y mayor riesgo de lesión durante la fase preovulatoria del ciclo menstrual.

–              Biomecánicos: alteración del control neuromuscular que influye en los patrones de movimiento y en las cargas articulares incrementadas.

–              Otros: algunos estudios indican que la fatiga es un factor adicional de riesgo para lesiones sin contacto del ligamento cruzado anterior (LCA).

CLÍNICA

–              Inestabilidad articular: La estabilidad de la articulación se basa en los ligamentos, los meniscos, la congruencia de las superficies articulares y la musculatura. Si se lesionan los ligamentos pueden producirse episodios de hipermovilidad e inestabilidad de la articulación.

–              Alteración propioceptiva: La lesión va a provocar una pérdida sensitivomotora en la rodilla, al perder mecanorreceptores. Aparece una inestabilidad articular y la disminución de la capacidad de detectar la posición y el movimiento de la articulación ante las roturas.

–              Alteración de la activación muscular: La pérdida de mecanorreceptores del ligamento lesionado interrumpe el reflejo músculo-ligamentoso entre el ligamento cruzado anterior (LCA) y el cuádriceps, produciéndose una incapacidad para reclutar activamente un alto umbral de unidades motoras durante las contracciones voluntarias del músculo.

–              Alteración de la fuerza y masa muscular: Tras la lesión se produce un déficit de la fuerza y masa muscular de los músculos del miembro inferior afecto. El vasto interno y el externo son los que se atrofian más rápidamente tras la lesión.

–              Alteración del equilibrio: causado por la alteración de la información de los mecanorreceptores sobre la posición de la articulación, produciéndose una modificación del control neuromuscular al intentar mantener el equilibrio sobre el miembro afectado.

–              Lesiones asociadas: alteraciones en la cinemática articular que favorecen los cambios degenerativos, lesiones meniscales o defectos en el cartílago.

DIAGNOSTICO

–               Anamnesis: recogida de datos a partir de la entrevista clínica.

Antecedentes Personales:

  • Fisiológicos:

–      Ocupación laboral y condiciones del lugar laboral.

–      Aficiones.

–      Alergias.

  • Patológicos:

–      Enfermedades (año, diagnóstico, tratamiento y evolución).

–      Intervenciones quirúrgicas (diagnóstico y evolución).

Historia del problema funcional:

  • Primeros síntomas y fechas: generalmente tras la lesión hay dolor, dificultad durante el movimiento flexo-extensión de la rodilla y sensación de inestabilidad.
  • Evolución cronológica de los síntomas.
  • Molestias Actuales: es frecuente que el dolor vaya disminuyendo conforme pasa el tiempo, pero que persista la inestabilidad.
  • Mecanismo lesional: los pacientes suelen explicar haber sentido un chasquido en el momento de la lesión, seguido de una sensación de luxación y, en la mayor parte de los casos, con una incapacidad para continuar la actividad deportiva.

Anamnesis del dolor:

  • Notas espaciales:

–      Topografía.

–      Extensión.

–      Irradiación.

  • Aspecto cuantitativo:

Intensidad:

–      Dato objetivo.

–      Dato subjetivo:

Escala de la intensidad:

10 – 5 – 0

Máximo dolor –  Dolor moderado – Mínimo dolor

–               Exploración clínica:

Inspección: