La Psicología es poseedora de profundas afiliaciones con una gran familia de ciencias con las cuales estableció y ha mantenido relaciones muy fuertes tanto en el plano teórico como es, el caso de la Psicología pura y, en el plano práctico, el caso de la Psicología aplicada.
La Medicina no escapa a este parentesco y es innegable que para ella también se abren posibilidades de apoyo en diferentes ramas del conocimiento social y psicológico.