Inicio > Cirugía General y del aparato digestivo > Absceso hepático piógeno multiloculado de origen primario

Absceso hepático piógeno multiloculado de origen primario

Absceso hepático piógeno multiloculado de origen primario

Resumen:

Presentamos el caso de una mujer de 44 años con un absceso hepático piógeno multiloculado, en la que el único factor predisponente para el desarrollo del mismo fue la presencia de diabetes mellitus, y que fue tratada con drenaje percutáneo y antibioterapia, presentado una buena evolución.

Absceso hepático piógeno multiloculado de origen primario

Pablo Demelo Rodríguez (1), Jorge del Toro Cervera (2)

(1)           Residente IV. Departamento de Medicina Interna. Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Madrid, España.

(2)           Jefe de Sección. Departamento de Medicina Interna. Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Madrid, España.

Palabras clave: absceso hepático piógeno, drenaje percutáneo, diabetes mellitus.

Key words: pyogenic liver abscess, percutaneous drainage, diabetes mellitus.

Summary:

We report the case of a 44 year old woman with a multiloculated pyogenic liver abscess, in which the only predisposing factor for its development was the presence of diabetes mellitus. She was treated with percutaneous drainage and antibiotics, and presented a good evolution.

INTRODUCCIÓN

El absceso hepático piógeno es una entidad clínica con una mortalidad elevada, cuyas condiciones predisponentes más habituales son la presencia de patología hepatobiliar o pancreática, diabetes mellitus, alcoholismo o procedimientos quirúrgicos abdominales (1,2).

CASO CLÍNICO

Presentamos el caso de una paciente de 44 años, fumadora y bebedora moderada, sin otra patología médica previa. Acudió a Urgencias por un cuadro de malestar general de una semana de evolución, con escalofríos.

En la anamnesis dirigida, relataba polidipsia, poliuria y pérdida de peso de meses de evolución.

En la exploración física, la paciente presentaba fiebre de 40ºC, taquicardia a 110 lpm, ligera deshidratación cutánea y mucosa, con hepatomegalia palpable a unos 4 cm del reborde costal, sin otros hallazgos relevantes.

Se objetivó glucemia de 219 mg/dl, anemia normocítica normocrómica (hemoglobina 10,1 gr/dl), leucocitosis (12×109/l) con neutrofilia, patrón de colestasis disociada (aspártico-amino-transferasa 77UI/l, alanino-amino-transferasa 115UI/l, gamma-glutamil-transpeptidasa 215UI/l, fosfatasa alcalina 242UI/l, bilirrubina total 0,3mg/dl) y proteína C reactiva elevada (22,48 mg/L). Se realizó ecografía abdominal, que mostró masa hepática de 12×65 mm, heterogénea, de predominio hipoecoico, inespecífica ecográficamente (Figura 1). Tras extraer hemocultivos, la paciente ingresó en nuestro servicio con tratamiento antibiótico empírico con meropenem.

ecografia-abdominal-absceso-hepatico
Ecografía abdominal. Absceso hepático

Pie de figura 1: Ecografía abdominal. Masa de 12×65 mm en parénquima hepático (línea punteada azul), de predominio hipoecoico.

Se llevó a cabo tomografía computarizada (TC) abdominal, que mostró múltiples colecciones abigarradas de paredes hipercaptantes, algunas con gas en su interior, compatibles con un absceso hepático multiloculado (Figura 2). Guiado por TC, se llevó a cabo drenaje percutáneo del absceso con colocación de catéter, obteniéndose 100 cc de material purulento. A pesar de dicho drenaje, la fiebre persistió tras 6 días. Una nueva TC abdominal demostró la persistencia de algunas de las lesiones hepáticas ya descritas, por lo que se decidió realizar nuevo drenaje percutáneo y colocación de catéter.

TAC-abdominal-absceso
TAC abdominal. Absceso

Pie de figura 2: TC abdominal con contraste. Absceso hepático multiloculado. Se observan múltiples colecciones irregulares, con paredes hipercaptantes (flechas blancas), algunas con presencia de gas en su interior.

En hemocultivos obtenidos durante su ingreso se aislaron Streptococcus viridans y Streptococcus pneumoniae. En el cultivo de la muestra de drenaje se aisló Streptococcus anginosus. Una búsqueda exhaustiva en nuestra paciente, que incluyó colonoscopia, gastroduodenoscopia, ecocardiograma transesofágico y exploración orodental completa, no mostró foco primario de infección.