El tumor fibroso solitario (TFS) es un tumor poco frecuente del tejido blando y mayoritariamente de comportamiento clínico benigno, sin embargo están descritos tumores malignos diagnosticados a través de recidiva local o con metástasis a distancia. Típicamente la localización pleural es la más frecuente (Klemperer y Rabin en 1931) y más raramente en partes blandas, aunque actualmente se acepta la posibilidad de que estas neoplasias se puedan desarrollar virtualmente en todos los departamentos anatómicos. El tratamiento es siempre la extirpación quirúrgica y seguimiento a largo plazo. El factor más representativo de recurrencia local es la invasión de márgenes.