La infección de vías urinarias aplica a una amplia variedad de condiciones clínicas que varían desde la bacteriuria asintomática hasta la pielonefritis aguda. Las bacterias más comunes son: Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae, Proteus mirabillis y Morganella morganii. El diagnóstico por laboratorio debe ser con examen general de orina y urocultivo previo al tratamiento con antibiótico. El tratamiento para la infección asintomática no está recomendado.