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Hepatitis A en el medio laboral

Hepatitis A en el medio laboral

RESUMEN:

La hepatitis A es una enfermedad infecciosa que se puede asociar a determinados puestos de trabajos y condiciones laborales. Si realizamos una revisión del comportamiento de la enfermedad tanto en su forma de trasmisión como en su comportamiento epidemiológico en nuestro país, podemos llegar a la conclusión que teniendo en la actualidad una vacuna contra la hepatitis A efectiva y de bajo coste y riesgo, debemos insistir en la recomendación de nuestros trabajadores de la vacunación preventiva al personal con riesgo laboral de contagio y trasmisión pudiendo mejorar no solo la salud laboral de nuestro trabajadores, sino también la salud de la población en general donde se encuentran inmersos.

Hepatitis A en el medio laboral

Autores:

Damián Muñoz Simarro

Agustín Míguez Burgos

DUE. Especialista en Enfermería del trabajo

ANTECEDENTES-OBJETIVOS:

La hepatitis A es una enfermedad inflamatoria del hígado de origen infeccioso producida por un virus (VHA) que se replica en el hígado y se elimina por heces. Es una enfermedad de distribución universal que generalmente es autolimitada y se suele manifestar con síntomas en más del 50% de los casos en el adulto; con molestias digestivas, fiebre, malestar general, anorexia, ictericia y vómitos y que pueden durar entre dos semanas y varios meses. En cambio en los niños menores de 6 años se presenta cuadro sintomáticos por debajo del 10% de los casos (por lo que constituyen una importante fuente de infección para el adulto).

La recuperación total de este proceso infeccioso puede durar entre 6 y 12 meses, apareciendo anticuerpos de tipo IgG contra el virus de la hepatitis A (VHA), que confieren inmunidad duradera y generalmente perpetúa.

La Hepatitis A no cronifica, aunque en raras ocasiones (0,01%) puede dar lugar a una hepatitis fulminante aguda. En ocasiones, pueden aparecer recurrencias y complicaciones como artralgias, pancreatitis, vasculitis o glomerulonefritis.

Esta patología tiene una baja morbilidad en la edad infantil como ya hemos comentado y la gravedad de la misma aumenta con la edad, con la existencia de patologías hepáticas previas y/ o la gestación, llegando a obtener una mortalidad mayor en adultos por encima de 40 años.

La forma de transmisión del virus está relacionada con su eliminación a través de las heces y su huésped natural que es el ser humano, por tanto su transmisión es fundamentalmente oro-fecal, ya sea de forma directa o asociada a la ingesta de aguas o alimentos contaminados. Existen otros modos de transmisión menos frecuentes, como puede ser el contacto con sangre o prácticas sexuales.

La Hepatitis A es por lo general una enfermedad muy asociada al desarrollo socioeconómico y los hábitos higiénicos de una población, por tanto, determinados trabajadores y sus comportamientos durante la práctica laboral, puede convertirlos no solo en receptores de esta infección sino en trasmisores y huéspedes de la misma.

DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA-MATERIAL Y MÉTODOS:

La Hepatitis A es la más frecuente de las hepatitis virales, como hemos dicho es de distribución mundial y asociada al nivel de desarrollo de cada país.

En España, epidemiológicamente se ha modificado su comportamiento coincidiendo con el desarrollo industrial y urbanístico y la mejora de las condiciones higiénico-sanitarias (la tasa de incidencia notificada ha oscilado entre 1,57 por 100.000 en 2002 y 5,97 por 100.000 en 2009), pasando en las últimas décadas de tener a más del 80% de la población menor de 40 años inmunizada, a la situación actual, donde se estima que más del 65% de los menores de 40 años no tienen inmunidad y por tanto existe un alto porcentaje de susceptibilidad a la infección en esta población, margen de edad donde la población es trabajadora y que sabemos que esta patología puede generar mayores costes tanto en salud, como socioeconómicos e incapacidad laboral. En España la Hepatitis A es de declaración obligatoria de manera individualizada desde 1997.

Los trabajadores que podemos considerar con riesgo ocupacional serían:

Los trabajadores que manipulen aguas residuales, alimentos y hemoderivados, trabajadores de instituciones asistenciales como guarderías, geriátricos, hospitales, centros de discapacitados, trabajadores de ayuda a domicilio, limpieza y lavandería, así como, trabajadores que su práctica les obliga a viajar a zonas de alta o media endemicidad o que se desplazan a zonas rurales o con condiciones higiénico sanitarias deficientes.

Las formulas y medidas preventivas para el control de esta enfermedad en la población trabajadora expuestas la basamos en varios puntos:

– Formación y educación sanitaria del trabajador. (Siendo especialmente importante el lavado cuidadoso de las manos).

– Uso de Equipos de Protección Individual (EPIs).

– Mejoras de las condiciones higiénicas en el trabajo.

– La Vacunación frente a la Hepatitis A.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN:

Es más que evidente, que las vacunas son una de las medidas más eficaces con las que contamos los trabajadores de la salud para el control de una enfermedad y para mejorar las condiciones de salud de una población.

Desde el punto de vista de la eficiencia como intervención preventiva, las vacunas han demostrado igualmente, una alta rentabilidad contrastada contra una gran variedad de patologías.

Si nos centramos en la Vacuna contra la Hepatitis A, podemos decir que son preparados del virus de la Hepatitis A inactivados con formaldehido, que cuenta con una alta seguridad y eficacia.