La piel de la vulva de origen ectodérmico puede ser asiento de cualquier enfermedad dermatológica como es el liquen escleroatrófico. Esta es una enfermedad inflamatoria crónica cutánea benigna de origen desconocido. Es más frecuente en mujeres que en varones, su localización más frecuente es genital con un 85% a 98% de los casos, aunque puede afectar además áreas extragenitales solas o asociadas a estas; (2) entre ellas las más frecuentes son: tronco (debajo de las mamas y parte inferior del abdomen) y cuello.