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Fractura Supracondilea. aspectos conceptuales.
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Autor: Dr. Marvin Flores Valda
Publicado: 3/05/2006
 


Las fracturas del codo son, por excelencia, las fracturas de la infancia. Estudios estadísticos realizados por BURNS han revelado que de cada 100 fracturas de todas las clases encontradas en niños de menos de 10 años cerca de unas 10 son del extremo inferior del húmero.


INTRODUCCION. ETIOLOGIA Y PATOGENIA.
1.- INTRODUCCION.-

Las fracturas del codo son, por excelencia, las fracturas de la infancia, estudios estadísticos realizados por BURNS han revelado que de cada 100 fracturas de todas las clases encontradas en niños de menos de 10 años cerca de unas 10 son del extremo inferior del húmero.

Variados autores han contribuído al conocimiento preciso de esta fractura, ya que la misma tiene características que hacen considerarla interesante:

1.- La frecuencia de las caídas sobre el codo.

2.- La fragilidad de la extremidad humeral inferior que está en vías de osificación en los niños.

3.- Los efectos de la fractura ósea sobre la articulación, que puede quedar comprometida a causa de la desviación de un fragmento.

4.- La osificación de un colgajo periróstico desprendido.

5.- La anquilosis fibrosa.

Reza una sentencia clásica “una fractura de codo no puede tratada convenientemente sin una radiografía previa” concepto enunciado por KOCHER y BROCA.

De entre las variadas formas de fractura que se encuentran en esta zona, una es la que predomina por orden de frecuencia sobre las demás y es la que toma nuestra atención en este articulo., misma que es frecuente entre los cuatro y quince años y se presenta en una variada forma de grados: desde una fisura sin desplazamiento hasta la separación completa del segmento inferior.

2.- ETIOLOGIA Y PATOGENIA.-

Las particularidades de esta fractura son mejor comprendidas analizando el proceso de osificación de la epífisis inferior del húmero. Esta es cartilaginosa hasta la mitaddel segundo año, momento a partir del cual aparece en el cartílago el núcleo de osificación, que adquiere precozmente un rápido desarrollo.

Explicado en las palabras de FARABEUF, nos dice: “…..invade el labio externo de la tróclea y se detiene, adelgazándose en el fondo de la garganta, donde espera, durante diez años o más la aparición y la unión de la placa ósea que se desarrollará en la masa cartilaginosa del labio y de la vertiente interna de la tróclea….”. Es así que la fragilidad de la epífisis inferior explica el porqué del recorrido oblícuo hacia abajo y hacia el eje del miembro.

En cuantoa la lesión, esta puede deberse ya sea a un choque directo o un choque indirecto transmitidos a los extremos articulares.

Según OLIVARES toda lesión que recae en un hueso fijo por uno de sus extremos determina que la línea de fractura empiece por la convexidad y que se desvíe luego y de manera sucesiva a la parte inmóvil del hueso, siguiendo un trayecto arqueado.

Los mecanismos de choque determinan ya sea una presión transmitida o una presión directa sobre el punto afectado. En el caso de la primera, el miembro está en posición de extensión, es decir, en la caída el niño lleva la mano hacia delante y el choque es recibido por la palma de la mano y se transmite a la extremidad inferior del húmero, que quiebra en un punto débil haciendo que este se rompa por encima de los cóndilos. En el segundo caso, el miembro está en flexión y el choque impacta sobre la cara posterior del codo – directamente sobre el olécranon – rompiendo el hueso por encima de loscóndilos y empujándolo hacia atrás y adelante formando con la diáfisis un ángulo en vértice posterior.


3.- CLASIFICACION.-

Establecida ya la línea de fractura, que está un poco por encima del punto más ancho del codo y de la línea epifisaria principal de la extremidad inferior del húmero, en lo que algunos llaman el cuello quirúrgicopasamos a describir las variedades clínicas.

A la manera CLASICA tenemos dos variedades:

1.- Supracondílea por extensión

La más frecuente y que lleva al desplazamiento posterior del fragmento inferior del húmero.

2.- Supracondílea por flexión

Es rara pero más frecuente en los adultos que en los niños y lleva al desplazamiento anterior de la epífisis humeral. Esta también llamada fractura de Chutro – Posadas

La supracondílea por extensión tiene una línea de rotura oblícua hacia abajo y adelante estando el fragmento inferior cortado a bisel a expensas de su cara anterior y arrastrado por el tríceps hacia arriba y atrás similar ala posición de luxación del codo hacia atrás y con la que debe hacerse el diagnóstico diferencial.

Se trata comúnmente de caídas desde cierta altura – un árbol- que obliga a tomar una posición defensiva en extensión forzada llevando el codo a una extensión más allá de los 180 grados.

Otro mecanismo que la causaría y menos frecuente son las fracturas por caídas sobre la mano y el codo doblado en ángulo recto y en este caso los huesos del antebrazo chocan bruscamente sobre la extremidad inferior del húmero y lo rompen por el denominado “esfuerzo cortante puro”.

La supracondílea por flexión de KOCHER es más rara y en la que el fragmento superior, la diáfisis, esta cortada a bisel a expensas de su cara anterior y dirigida hacia atrás. Este desplazamiento no esmuy grande ya que se le opone la fuerte tensión del tríceps que determina una concavidad del codo hacia delante y que se percibe como una exageraciónde la curvatura normal.

Se produce por las caídas hacia atrás sobre el vértice del codo con lo que el fragmento pequeño se desplaza hacia delante.

Esta variedad tiene menos complicaciones que se consideran más adelante.

Desde el punto de vista anatomopatológico, se toma en cuenta la posición de la línea de la fractura.

Se toma como referencia a la línea epifisaria y según su proximidad o lejanía a esta tenemos:

1.- Tipo bajo o paraepifisario.

Es la más frecuente de encontrar y el trazo está a 1 cm. del punto más ancho del codo.

2.- Tipo alto o metafisario.

El trazo está a más de 3 cm. de la línea epifisaria en la zona de tránsito con la diáfisis del húmero.

La dirección de la línea de la fractura en uno y otro caso dependerá del mecanismo de producción de la fractura. Así en las producidas por hiperextensión la línea sigue el trayecto antes descrito y en aquellas causadas por un esfuerzo cortante es casi perpendicular al eje del hueso.

Según BAUMANN que considera en grado de desplazamiento.

1.-Tipo I o Fractura supracondilea no desplazada.

2.- Tipo II o fractura moderadamente desplazada

3.- Tipo III o fractura con desplazamiento importante de los fragmentos.


CLINICA.
4.- CLINICA.-

Los síntomas son los de una fuerte contusión articular que produce de inmediato un gran edema del codo que dificulta la exploración ocultando las prominencias pero no llega a enmascarar el aspecto típico de estas fracturas.

La región del codo siempre está ensanchada en el sentido antero posterior y el contorno posterior hace una saliente pronunciada.

La sensibilidad está aumentada y el antebrazo está flexionado sobre el brazo y sostenido por la otra mano posición conocida como de DESAULT que se verifica en los traumas recientes y tiene una angulación de 30- 40 grados que no es apta para la función, por ser incompleta y dolorosa.

El dolor que surge luego del trauma, tiene tres orígenes establecidos que son:

1.- Dolor de orígen óseo.

Debido sobre todo al periostio y la médula ósea esta última tanto del espacio medular como el que está dentro de las areolas de tejido esponjoso.

El resto de la estructura ósea es apenas doloroso por su escasa inervación y con LERICHE sabemos que es posible una intervención directa solo con anestesia local a los tejidos blandos circunvecinos.

2.- Dolor de orígen muscular.

Que según TRIAS se debe a dos causas:

-Trastornos metabólicos en el sitio fracturado
-La contractura muscular refleja (hipertonismo)

3.- Dolor de orígen vasomotor.

-Cuando un hueso es intensa y prologadamente estimulado ya sea mecánica o químicamente esta excitación llega al cerebro que genera una respuesta liso motora excesiva traducida en una contractura en el músculo estriado y en el liso las modificaciones circulatorias.

Esto ocasiona tres resultados: sensibilidad aumentada, dolor y cambios titulares.

Cuando el fragmento inferior es desplazado hacia atrás es común su confusión con una luxación de codo hacia atrás, por esto se han establecido signos distintivos para diferenciarlas una de otra:

1.- Se siente por delante en el pliegue del codo una ancha paleta que formas el fragmento humeral de forma irregular y de arista más aguda que la prominencia roma y redondeada de la luxación.
2.- La saliente del olécranon que está recubierta por piel fruncida en extensión es visible por detrás en las luxaciones , además visto de perfil y sumada a esta saliente un antebrazo corto también guía al diagnostico de una luxación, pero si estas deformaciones no son reductibles guía hacia una fractura supracondílea.
3.- La línea epicondiloepitrocleoolecranenana que en una fractura supracondílea esta en una misma línea transversal cuando el codo esta en extensión y en la parte posterior. Dicha línea también se conoce como línea transversal de MALGAIGNE por unos y por otros como línea de HUETER.
4.- En la luxación posterior el olécranon asciende por encima de la línea biepicondílea visible cuando el codo está en flexión y en su parte posterior formando el triangulo de NELATON.
5.- Se percibe la crepitación cuando se extiende o se gira el antebrazo.
6.- Midiendo el brazo desde al acromion a la epitroclea constatamos que esta acortado en las luxaciones.
7.- La inspección del pliegue de flexión poco visible en extensión pero marcado por la equimosis lineal transversal de KIRMISSON en la fractura supracondílea y que dibuja una raya transversal de un negro violeta en lacara anterior del pliegue del codo.
8.- Si después de realizada la reducción y se muestra inestable la articulación comprometida y no se mantiene en suposición acortándose en cuanto cesa la extensión nos encontramos ante una fractura supracondílea.

Los síntomas de la fractura de CHUTRO-POSADAS son menos identificables, entre estos tenemos: codo ensanchado en sentido antero posterior pero no esta deformado, no tiene movilidad normal ni se presentan las complicaciones de las fracturas por extensión. El edema y el hinchazón son moderados pasan ciertas veces inadvertidas por el medico y encontradas por casualidad después de un examen radiológico.

4.-Evaluación y reconocimiento del paciente.-

Con BALLINGERtenemos cuatro criterios básicosa seguir en cualquier codo traumatizado:

1.- Revisar la integridad de la piel.
2.- Evaluar el estado neurovascular.
3.- Inmovilizar la extremidad, manteniendo la posición existente, no debiendo ser flexionado ni extendido.
4.- Obtener proyecciones antero posterior y lateral.

A diferencia de otras partes de las extremidades podemos enderezar la extremidad sin estar seguros del proceso traumático que se nos presenta y así evitar con esolas complicaciones.

No esta recomendada para la inmovilización el empleo de una férula recta inflable ya que esta no debe comprimir el sitio fracturado sino esta deberá adaptarse a la deformidad.

Es recomendable la paliación desde la axila hasta la mano de una férula, manteniendo la angulación y rellenando el espacio entre la férula y el codo con apósitos para drenaje y otros cojines.

Luego en volver suavemente con vendas de gasa sin intentar enderezar dicha zona y elevarla sobre un cojín. También debe evitarse el cabestrillo que flexiona obligadamente el codo y que otros recomiendan utilizar después de la reducción.

No pocos autores recomiendan tomar el pulso en esta etapa – antes de la reducción- pues conesto se tiene una idea más cabal del proceso.

1.- Palpación con el codo en semiextensión.
2.- Palpación con el codo en flexión (generalmente el pulso desaparece)

También se incluye el estudio de los nervios motores con la extensión de la muñeca y los dedos contra la gravedad.

En cuanto a, los nervios estos son afectados por ordende frecuencia primero el cubital, luego el radial y el mediano y las maniobras para evaluarlos son:

Nervio cubital: Separar y juntar los dedos extendidos.
Nervio radial: Extender la muñeca y los dedos.
Nervio mediano: Flexión del índice y oponerle el pulgar.


TRATAMIENTO.
5.- TRATAMIENTO.-

Cuya finalidad es la alineación lo mas competa posible de los fragmentos fracturados.

Se recurre a la reducción manual bajo anestesia general y sujeto a comprobación radiológica.

1.- Extender suavemente el codo y ejercer una potente tracción longitudinal.
(Corregimos el desplazamiento lateral)
2.- Manteniendo la tracción, se fuerza el olécranon hacia delante o presionar la cara anterior del brazo – no la flexura- de adelante hacia atrás.
3.- Paulatina flexión del codo, manteniendo la tracción.
4.- Guiar con la otra mano el fragmento distal humeral con los 8 dedos y con los pulgares presionar la diáfisis.
5.- Traccionar fuertemente el antebrazo en ángulo recto.

Cuando se trate de niños, podemos inmovilizar el miembro flexionado en ángulo agudo y vigilando los dedos del enyesado (coloración, movilidad, dolor escaso o nulo) esta movilización durara no mas de 12 o 15 días para luego comenzar a movilizarla metódicamente y en el caso del niño este lo mueve espontáneamente.

En los adultos, en donde predominan las supracondíleas por hiperflexión, la inmovilización es mejor en extensión y en ocasiones se recurre a la tracción contínua rectilínea.

También en los adultos se considera que estas fracturas son mas de forma conminuta que en los niños.

La reducción es anunciadapor un chasquido muy claro y de una sensación inconfundible de haber desplazado los huesos.

Es reprochable el dejar sin diagnostico y sin tratamiento a estas fracturas pues pronto se hacen imposibles de reducir, con las persistencia del edema y del hematoma que se la añaden que dan lugar a trastornos permanentes en la articulación del codo.

Algunos autores recomiendan la posición de flexión extrema del codo, hiperflexión, pero otros toman en cuenta el grado de tumefacción añadido y contraindican la flexión completa que puede perturbar la circulación y la aplican recién pasados dos o tres días del momento de reducción.

En cuanto a los materiales para la inmovilización se emplean las férulas, tubos de yeso y cabestrillo o fronda de collar o manguito por debajo de los vestidos.

Si la maniobra de reducción ha fracasado se impone sobre otros procedimientos, aplicar la tracción de DUNLOP o método deZENNO- BAUMANN Este consiste en la tracción esquelética transolecraneana al cenit y completada con una maniobra de reducción con el brazo en tracción; en este caso no se necesita aplicar la flexión pues basta con la tracción. El tiempo recomendado es de cuatro semanas y después de pasado este, el paciente tiene temor de movilizar el miembro que se encuentra algo rígido; no se debe realizar maniobras bruscas, ni dejarse invadir por la impaciencia y tampoco aplicar masajes a en la zona.

Lo mejor es aplicar calor local y movimientos activos.

Es de suma importancia el observar constantemente al paciente durante los cuatro o cinco primeros días después de la reducción para poder actuar oportunidades ante las complicaciones que surjan sobre todo las inherentes a la circulación.

BASTOS recomienda hacia el final de la primera semana, se reemplace al posito inicial por uno escayolado, hecho este considerado por RIENAU como un error profesional pues a mas de la ventajas que se creería tener con este se comprimiría mas el sitios afectado a pesar de que la tumefacción ya haya disminuido.

Sea de una u otra forma es mejor ir simplificando los apósitos hasta el cabo de un mes el codo quede libre. En los dos o tres meses siguientes el niño encontrará dificultad en los movimientos sobre todo en la extensión completa, pero si la reducción a sido acertada con el tiempo y el ejercicio activo se recuperará.

La movilización pasiva esta contraindicada en estas fracturas pues lleva a una articulación dolorosa, rígida y bloqueada por las neoformaciones periósticas que determinan los movimientos forzados.

En las fracturas abiertas por salida del fragmento, se trataran según lo anteriormente establecido, con especial cuidado de las infecciones de la herida. En ocasiones se hace necesario abrir el foco y aplicar reducción al descubierto, cuya vía de ingreso es por la cara posterior a través del tendón del tríceps.

TRATAMIENTO QUIRURGICO.-

Cuando ya pasaron varios días después de la fractura pueden elegirse dos terapéuticas: primero, la reducción pero con sus consiguientes riesgos de desgarro y rotura de los tejidos; dejar a la evolución que resulta de la movilización activa y espontánea para luego evaluar la funcionalidad del codo. En varias ocasiones la limitación del movimiento se debe a una “nariz diafisaria” que puede extirparse luego y siempre pasados seis meses del accidente.

Luego de esta operación es posible la hiperflexión, actitud en la que fijamos el codo por unas dos semanas.

En los niños e ha recomendado una reducción abierta de las fracturas desplazadas y así evitar las deformidades rotatorias.

El método es la osteosíntsis percútanea con aguas Kirschner introducidas desde el lado radial; indicadas en aquellas fracturas moderadas e importantemente desplazadas (tipos II y III de Baumann.)

Entre las ventajas nombramos:

1.- El poco riesgo de lesionar el nervio cubital ya que las agujas se introducen desde el lado radial.
2.- Se pueden extraer las partes blandas – tanto nervios como vasos- que se encontraban entre los fragmentos.
3.- Se minimizan las alteraciones del crecimiento al utilizar un amplificador de imágenes que nos permite la introducción correcta, evitando los repetidos intentos muchas veces fallidos sino los empleáramos.

Previo a la intervención, se tomaran radiografías tanto en sentido antero-posterior o lateral, el pulso radial y el funcionamiento de los músculos.

El instrumental empleado es. Agujas Kirschner de 1,2 a 1,4 mm. De grosor y el empleo del instrumental básico quirúrgico infantil.

Posición del paciente:

- Decúbito supino
- Colocar un manguito neumático en el brazo.
- Colocar una almohadilla para apoyar el codo del paciente.
- Al preparar el campo quirúrgico se deja expuesta la muñeca para controlar el pulso radial.


TRATAMIENTO 2.

Técnica Quirúrgica.

1.-Reducción provisional de la fractura por tracción longitudinal de la extremidad.
2.- Incisión cutánea dorso radial desde un punto situado a 4 cm. por encima de epicóndilo a otro a 1.5 cm. Debajo de dicho relieve óseo.
3.- Sección de la fascia y penetración entre el tríceps y los extensores.
4.- Disección de las partes blandas hasta alcanzar el periostio.
5.- Palpación del foco de fractura.
6.- Elevación del periostio si este no fue desgarrado y exposición subperióstica de la parte ventral del foco.
7.- Colocación de separadores para proteger el paquete vasculonerviosos.
8.- El ayudante sujeta con una de sus manos el brazo del paciente a la altura del manguito neumática, y con la otra tracciona la extremidad sujetándola por el antebrazo.
9.- El ayudante hace una pronación del antebrazo del paciente y flexiona el codo a 60 grados.
10.- El cirujano aplica sus dedos en el epicóndilo radial y cubital, con la otra mano, introduciendo el índice controla la posición de los fragmentos.
11.- Una vez reducida la fractura, se disminuye la tracción para permitir a la coaptación de los fragmentos.
12.- Manteniendo la reducción, se introduce la primera aguja Kirschner en dirección proximal radial a distal cubital hasta que la aguja se aloje en el pilar medio de la metáfisis humeral. El ángulo de la aguja es de 40 grados en relaciona al eje diafisario y 10 grados en sentido dorsal.
13.- Manteniendo la reducción se introduce la segunda aguja que debe fijarse en un punto por encima de la fisis.

En el postoperatorio, se inmoviliza con una férula de yeso la extremidad intervenida y elevándola durante dos o tres días.

Se debe retirar el drenaje a las 24 horas de la intervención y se requiere un control radiográfico permanente tanto en proyecciones antero posterior y laterales. Los puntos de sutura se retiran al sexto y octavo día y se sustituye la férula por un yeso braquial completo.

Alrededor de la cuarta y sexta semana se pueden retirar las agujas Kirschner en el paciente ambulatorio o ingresado.

Este método utiliza anestesia general e incisiones puntiformes para la extracción y en ningún caso hace la flexo-extensión del codo.

La recuperación se estima en unas cuantas semanas.

RESULTADOS.-

Este método fue utilizado para intervenir quirúrgicamente a 61 pacientes de los cuales cinco presentaron alteraciones del nervio radial, dos del nervio mediano y uno con el nervio cubital (déficit sensitivo)

Las complicaciones fueron:

- Irritación sensitiva del nervio radial.
- Cruce de las agujas a la altura del foco fracturado que llevó a una inestabilidad del mismo
- Deformidad rotatoria dela fractura en el postoperatorio por lo que tuvo que oponérsele de nuevo.
- No hubo ningún caso de infección ni miosotis osificante.

Este método es criticado por LUTZ von LAER de la Universitats-Kinderkliniken und Polikliniken, arguyendo que de un 80 a 90 % de estas intervenciones podrían haberse reducido satisfactoriamente sin necesidad de abrir el foco fracturado y que las posibilidades de daño de los nervios cubital y radial se hubieren evitado.

También encuentraque el resultado estético no es bueno ya quea mas de eliminar el valgo fisiológico, incrementa el varo con una angulación de 10 grados que según FLYNN esta dentro de limites aceptables.

El tratamiento quirúrgico en los niños es todavía discutido en aquellas fracturas con desplazamiento, pero plenamente aceptado en los adultos en los que es el tratamiento deelección.

En ellos el desplazamiento se hace imposible de corregir por el desarrollo de la musculatura, que puede llevar a una rigidez por la inmovilización prolongada.

La reducción abierta, fijación interna y movimiento temprano dan los mejores resultados. Para la fijación se pueden usar tornillos cruzados o clavos roscado cruzadosfijados ya en los pilares medial y lateral , ajustándola con la cortical posterior del hueso.

En las fracturas conminutas, frecuentes en los adultos, se usan placas contorneadas a mano para reconstruir los pilares del húmero.

En las fracturas de tipo CHUTRO- POSADAS hay poco por hacer, pues no perjudican el movimiento del codo, se requiere inmovilización pero considerando siempre una rigidez articular residual.

Al principio inmovilizamos el codo con un manguito y un collar comenzando siempre , lo mas antes posible , los movimientos activos del codo.

El objetivo será siempre la recuperación de la funcionalidad de cada uno de los componentes articulares del codo:

NArticulación humero cubital: Es una trócleo-articulación que se encarga de la flexo-extensión
NArticulación húmero radial. Es una cóndilo-articulación
NArticulación radio-cubital: Es un trocoide

Estas dos últimas se encargan de la prono supinación

En el caso de la primera se debe permitir la flexión con una amplitud de 60 grados.

En el caso de la segunda la prono supinación debe ser de 40 grados.

Ambas son consideradas como las posiciones que permiten una funcionalidad. Muchos indican que el codo rígido en extensión es inútil pues no todos los días se saluda y si la mano esta en supinación solo sirvepara mendigar.


EVOLUCION Y PRONOSTICO. COMPLICACIONES.
6.- EVOLUCION Y PRONÓSTICO.-

Según MOUCHET los resultados a largo plazo de las fracturas supracondíleas sonmalos en la mitad de los casos (limitación de los movimientos en la articulación, isquemia de Volkman). Aun con una buena reducción los callos son voluminosos yson bastante frecuentes las lesiones de los nervios cubital, radial y mediano, es por esto que se deben seguir los consejos de BROCA, es decir, investigar inmediatamente después del accidente traumático y en los días siguientes encontrar alteraciones de la motilidad o de la sensibilidad del antebrazo y en la mano que puede ser un indicio de lo que algunos llaman ESBOZO DE VOLKMANN.

En el consejo de BROCA, nos dice. “….no os comprometáis jamás a restituir el codo de un niño a su forma y su función cuando hayáis colocado un perfecto aparato..”

7.-COMPLICACIONES.-

La secuela mas frecuente es el cubitus varus que alcanza una incidencia de hasta el 50% que se origina de la angulación lunar y la rotación interna del fragmento distal.

Las lesiones de la arteria humeral alcanzan una incidencia de 5-20% por la acción de la extremidad inferior , pero este no se desgarra sino que la lesión en su pared, producto del trauma genera una respuesta espasmódica que llevará a lesiones isquémicas permanentes que desembocan en la contractura isquémica de Volkman.

Las lesiones neurológicas se producen en un 10- 26 % y corresponden al nervio mediano por estiramiento sobre la extremidad inferior del humero; del Nervio cubital por la tracción entre el punto por donde pasa a través del tabique y por donde se introduce a su canal ubicado por debajo de la epitroclea humeral. Puede tener una variedad que se conoce como neuritis cubital tardía.

El nervio radial puede sufrir una parálisis pero esta es rara por una compresión cuando el nervio rodea la región fracturada en la supinación según LORENZ BOHLER.

El osteoma del braquial anterior por la osificación del hematoma contiguo a la fractura, requiere cuidado constante y se debe esperar su evolución a un nódulo intramuscular y cuya extirpación casi nunca es necesaria.

CONTRACTURA ISQUÉMICA DE VOLKMANN.-

Es una retracción cicatrizal de los músculos flexores, quedando los dedos fijos en flexión formando una verdadera garra y cuando se intenta extenderlos ofrecen una resistencia casi absoluta; pero si flexionamos previamente la muñeca pueden ser extendidos y recolocan otra vez en garra cuando se pone la muñeca en extensión.

Según la Sociedad Francesa de Ortopedia y traumatología era causada por el aparato escayolado muy ajustado, conclusión misma a la que llego WOLFORT para luego establecerse que no era la única causa.

Anatomia PatoLÓgica.

Al estudio
microscópico se verifico que los músculos pierden su núcleo y estrías con una creciente fibrosis central y en la periferia hay infiltrados de tejido fibroso compacto.

Al estudio macroscópico el músculo esta en estado irreconociblecomo una masa cicatrizal amarillo parduzco.

GRIFFITHS nos dice: “…..el músculo está amarillo verdoso y rodeado por tejido fibroso compacto y su vientre esta reemplazado por una sustancia forme y homogénea con dificultad al corte….”

Según LERICHE la enfermedad de Volkman es esencialmente un “síndrome de isquemia por traumatismo arterial”.

Fisiopatología.-

Hay una disminución de la circulación sanguínea arterial a los músculos flexores y pronadores debidas a un intenso espasmo de la arteria humeral o al espasmo de las arterias radial o cubital en segundo plano.

El peso del músculo esta aumentado y el plasma filtra hacia el liquido intracelular muscular que lleva al edema muscular.

Clínica.-

La signo-sintomatología tiene 4 características clásicas:

·DOLOR contínuo y que aumenta con la extensión pasiva de los dedos
·PALIDEZ por la afectación de las arterias
·PARALISIS con adormecimiento, parestesias y motilidad disminuida
·FALTA DE PULSO por el edema o hemorragia.

Tratamiento.-

El cuadro evoluciona en menos de seis horas hacia la contractura definitiva y se realizara una descompresión inmediata del antebrazo y en ciertos casos se requerirá una incisión desde arriba del codo, entre el tendón del bíceps pasando por el epicóndilo interno y una curvatura en sentido radial hacia el tendón del pronador redondo.

También recurrimos a la fasciotomía, episiotomía o a la escisión del infarto muscular.


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