Los factores de riesgo no modificables que prevalecieron fueron la edad mayor de 60 años y el sexo masculino, los modificables estuvieron relacionados con el hábito de fumar y la obesidad, así como los antecedentes patológicos personales de hipertensión arterial y dislipidemias. Los síntomas más frecuentes que aquejaron los pacientes fueron el dolor precordial opresivo retroesternal, la sudoración y la palidez.