El dolor es una sensación subjetiva y en el caso de la infancia se hace más compleja su valoración debido a las dificultades que los niños tienen para comunicarse. La evaluación de su magnitud en pediatría no es fácil, especialmente en los más pequeños, existiendo innumerables tablas y guías para realizarlo. En este artículo se exponen tres tablas, las más consideradas de acuerdo a la edad del paciente pediátrico.