La intervención de los equipos móviles de urgencias en la conducta auto lesiva debe ir dirigida, en primer lugar a garantizar la seguridad del equipo y del paciente, para pasar a continuación a evaluar la conducta suicida, los factores que la determinan y la estrategia terapéutica a seguir. La desorganización y el caos suele ser lo que predomine, siendo la intervención de los equipos sanitarios muy variable en función de la situación.