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Cuidados de Enfermería en la pericardiocentesis

Cuidados de Enfermería en la pericardiocentesis

La pericardiocentesis consiste en la evacuación, mediante punción, del líquido acumulado en el saco pericárdico para aliviar la compresión del miocardio y aumentar el gasto cardiaco.

Está indicado en:

  • Extracción de muestras para identificar y confirmar la etiología del derrame.
  • Taponamiento cardíaco.

Cuidados de Enfermería en la pericardiocentesis

  1. Emilia- Ferrer-López. Diplomada universitaria en Enfermería. Hospital Universitario Miguel Servet. Cardiología. Pº Isabel la Católica s/n. Zaragoza. España.
  2. Raquel-Murillo-Salvador. Diplomada Universitaria en Enfermería. Hospital Universitario Miguel Servet. Tocología. Pº Isabel la Católica s/n. Zaragoza. España.
  3. Azahara- Carbonel-Tabuenca. Diplomada Universitaria en Enfermería. Sector III. Centro Salud María de Huerva. Carretera de Valencia s/n. Zaragoza. España
  4. Beatriz-Martinez-Arteaga. Diplomada Universitaria en Enfermería. Hospital Universitario Miguel Servet. Neumología. Pº Isabel la Católica s/n. Zaragoza. España.
  5. Laura-Tajada-Artal. Diplomada Universitaria en Enfermería. Hospital Universitario Miguel Servet. Urgencias. Pº Isabel la Católica s/n. Zaragoza. España.
  6. Javier-Pueyo-Val. Licenciado en Medicina. Medicina Familiar y Comunitaria. 061 Aragón. UME 1. Pº Isabel la Católica s/n. Zaragoza. España.
  7. Patricia-Mora-Rangil. Licenciado en Medicina. MIR Cuidados Intensivos. Hospital Universitario Miguel Servet. Pº Isabel la Católica s/n. España.

RESUMEN

El personal de Enfermería tiene un papel importante en el cuidado directo del paciente al ser un procedimiento de alto riesgo cuyas complicaciones pueden ser graves.

El objetivo de este trabajo es dar a conocer unos cuidados de calidad aplicando la terminología propia de Enfermería; previa al procedimiento, durante la pericardiocentesis y los cuidados posteriores.

Para ello nos hemos basado en una amplia revisión bibliográfica y consulta a profesionales y expertos en la materia.

Palabras Clave: derrame pericárdico, taponamiento cardíaco, pericardiocentesis, plan de cuidados.

INTRODUCCIÓN

El pericardio es la membrana serosa que rodea al corazón. Está formado por una capa interna que se adhiere íntimamente a la superficie de la víscera cardíaca, pericardio visceral, esta hoja se refleja y forma el pericardio parietal. Entre ambas hojas existe una cavidad que contiene una discreta cantidad de líquido, alrededor de 15-50 cc, líquido, claro y translúcido. Por tanto en condiciones normales el saco pericárdico es un espacio virtual.

La acumulación de más de 50 ml de líquido se define como derrame pericárdico.

El pericardio cumple tres funciones principales:

– Actúa de ligamento, limitando los desplazamientos del corazón, fijándolo anatómicamente.

– Recubre el corazón reduciendo la fricción externa debido a los movimientos cardíacos y reforzando las porciones más finas del miocardio. Además, constituye una barrera frente a la inflamación procedente de estructuras contiguas y es asiento de importantes mecanismos de defensa inmunológica, por poseer cierta actividad fibrinolítica.

– Función mecánica: envuelve al corazón en una cubierta relativamente inelástica y llena de líquido. De esta forma, impide la dilatación cardíaca aguda y mantiene la distensibilidad ventricular normal y las relaciones de presión/volumen adecuadas.

El pericardio puede verse afectado por agentes infecciosos, físicos, traumáticos, inflamatorios o de forma secundaria a procesos metabólicos o enfermedades sistémicas.

La aparición de clínica relacionada con el derrame pericárdico, signos de bajo gasto cardiaco como pueden ser la disnea o datos de inestabilidad hemodinámica (hipotensión arterial, ingurgitación yugular…) dependerá de la cuantía del derrame pericárdico y del tiempo de instauración, así volúmenes de 100 ml de manera aguda pueden producir aumento de las presiones cardíacas con disfunción diastólica, provocando severas alteraciones clínico-hemodinámicas, y volúmenes de 500 ml instaurados de manera crónica pueden ser bien tolerados puesto que no producen compromiso hemodinámico.

Signos y síntomas del derrame pericárdico o taponamiento cardiaco:

  • Dolor retroesternal y precordial izquierdo, puede irradiarse hacia cuello y hombro, suele aumentar en supino, con la tos, con la inspiración profunda o con la deglución y mejora en sedestación.
  • Roce pericárdico. Se ausculta en un 60-85% de los casos. Es el signo patognomónico de pericarditis aguda, aumentando con la inspiración.
  • Pulso paradójico, descenso de la TAS (tensión arterial sistólica) mayor o igual a 10mmHg o más durante la inspiración.
  • En el paciente con taponamiento encontraremos hipotensión arterial por shock obstructivo (disminuye el volumen minuto, disminuye el gasto cardiaco. El gasto cardiaco junto a las resistencias vasculares sistémicas, son los determinantes de la tensión arterial) y taquicardia (mecanismo compensador que se produce para mejorar parcialmente el gasto cardiaco).

Otros signos y síntomas:

  • Disfagia, por compresión del esófago.
  • Tos, por compresión de un bronquio o tráquea.
  • Disnea, por situación de bajo gasto.
  • Hipo, por compresión nervio frénico.
  • Taquicardia
  • Distensión venosa yugular.
  • Diminución de los ruidos cardíacos.
  • Hipotensión.
  • Afonía, por compresión nervio laríngeo recurrente.
  • Inquietud
  • Ansiedad
  • Palidez
  • Cianosis
  • Taquipnea
  • Shock cardiogénico.
  • Oliguria
  • Bajo gasto cardíaco
  • Diaforesis

DEFINICIÓN

La pericardiocentesis consiste en la punción y evacuación del líquido acumulado en el saco pericárdico para aliviar la compresión del miocardio y aumentar el gasto cardíaco. La mejor ruta de acceso es la subxifoidea, pues evita lesiones de las arterias coronarias, pericárdicas y mamaria interna. En casos de taponamiento cardiaco grave, es un procedimiento que se realiza como primera opción y de manera urgente. Se trata de una técnica sencilla, de gran eficacia en manos expertas, pero con potenciales y graves complicaciones.