La Medicina española a principios del siglo XIX estaba mucho más próxima a la practicada en el siglo XVIII. La asistencia sanitaria era privada, estando los hospitales encargados de la atención a los pobres 1. Estos sufrieron un gran cambio hacia la función médico-asistencial motivado por el nuevo concepto de “beneficencia” que introdujo la Ilustración, sustituyendo al de “caridad”, entendiéndose que la asistencia sanitaria era un derecho universal y el Estado tenía que asumirlo.