La crianza biológica trata sobre la relación de la mamá con el bebé y la lactancia. Incluye abrazos, mimos, contacto piel con piel, contacto visual madre-hijo, posicionamiento. Amamantar en posición semi-reclinada beneficia a la madre y al bebé, y estimula comportamientos de alimentación innatos para el lactante. Hasta 20 reflejos que el bebé humano pone en marcha para agarrarse espontáneamente al pecho. Éstos se desarrollan durante la vida intrauterina, y están presentes en los bebés sanos y a término.