Estas lesiones ocasionan problemas a las mujeres como dispareunia, incontinencias de diversos tipos (urinaria/fecal) y dolor en periné que perdura tras el parto.
Disminuyendo la calidad de vida de la mujer en el posparto física y psicosocialmente.
La matrona de atención primaria informa a la gestante sobre el masaje perineal como práctica recomendada para prevenir el trauma obstétrico.