La Diabetes es un problema de salud pública a nivel mundial, es una de las enfermedades con mayor impacto socio-sanitario, no solo por su alta prevalencia y su crecimiento alarmante, sino también por las complicaciones crónicas; su elevada tasa de mortalidad, el aumento de factores predisponentes y desconocimiento de sus factores de riesgo (Akter, Rahman, Abe, & Sultana, 2014).