La obesidad infantil es una enfermedad cuya importancia radica en que se considera un factor de riesgo de enfermedades crónicas no trasmisibles en la edad adulta, como hipertensión arterial, enfermedad cardiovascular, dislipemias, diabetes mellitus tipo 2 y algunos formas de cánceres. La causa más frecuente es la primaria, a diferencia de la obesidad secundaria, que tiene un porcentaje del 5% y se relaciona principalmente a dismorfias, talla baja o retardo mental.