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Rehabilitación de la Osteoporosis en Atención Primaria

Rehabilitación de la Osteoporosis en Atención Primaria

Resumen

La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por la disminución de la densidad ósea, los huesos son frágiles. Hay más porosidad en el tejido oseo y como consecuencia es más propenso a las fracturas. Cualquier persona puede desarrollar la enfermedad, pero es más frecuente en mujeres adultas. Desde Atención Primaria se pueden realizar campañas de Educación para la Salud fomentando hábitos saludables y charlas individualizadas con el fisioterapeuta.

Autor: Lidia Pou Perez. Diplomada en Fisioterapia

Palabras clave: osteoporosis, atención primaria, rehabilitación, prevención, fractura de cadera.

Introducción

La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por la fragilidad ósea. En la Conferencia Internacional de Atención Primaria de Salud, reunida en Alma-Ata el 12 de septiembre de 1978, se expresó la necesidad de una acción urgente por parte de todos los gobiernos y profesionales sanitarios para proteger y promover la salud de todas las personas.

El lugar idóneo de tratamiento es desde Atención Primaria, donde se pueden organizar campañas para fomentar hábitos saludables, así como charlas individualizadas. Si un paciente presenta manifestaciones clínicas producidas por repetidas fracturas y los hallazgos radiológicos junto a la densitometría (medición de la masa ósea), lo ratifican, será un candidato para el estudio precoz de la osteoporosis en el Centro de Salud.

Al valorar los diferentes factores de riesgo, se obtienen unos parámetros para poder evaluar al paciente, los más importantes son:

  • Factores genéticos.
  • Estilos de vida y nutrición.
  • Patologías que afectan al metabolismo óseo.
  • Baja densidad ósea.
  • Déficit de hormonas sexuales.
  • Tratamiento farmacológico crónico.

El objetivo principal de la rehabilitación es minimizar el dolor asociado por las repetidas fracturas, y realizar cambios en sus hábitos diarios para mejorar su calidad de vida.

Consulta de Atención Primaria:

El fisioterapeuta en la consulta de Atención Primaria puede optimizar el estado de salud del paciente desde la perspectiva nutricional, la práctica del ejercicio físico, aumentando la fuerza muscular y mejorando el equilibrio postural. Mediante la educación para la salud, se forjan unos hábitos saludables que mejoran su estado físico y mental. El tratamiento se inicia con consultas individualizadas, en las cuales se tratan diversos temas para ayudar al paciente entre los que se encuentran:

  • Explicación de los alimentos que debe incluir y excluir en su dieta. Observar las necesidades nutricionales de la persona y adaptarlas a las calorías que necesita teniendo en cuenta su actividad diaria, en función de su peso y su talla. Se le explica que una dieta es equilibrada cuando respeta las necesidades nutricionales que necesita el organismo, en función de la cantidad de principios inmediatos y de la variedad de alimentos apropiados que ingiera. Se motiva al paciente con una dieta acorde a sus hábitos alimenticios, modificándola con alimentos ricos en calcio y en vitamina D. Si el paciente tiene sobrepeso, se le indica que la pérdida de peso es de ayuda para conseguir que la presión ejercida sobre sus articulaciones mejore.
  • Realizar ejercicio físico diario de forma moderada y al principio controlado por el fisioterapeuta, le permite eliminar grasas si lo necesita, mejorar la capacidad respiratoria, aumentar el desarrollo muscular y el rendimiento físico. Aprender a respirar adecuadamente y controlar la postura. La práctica del ejercicio de forma correcta es una actividad que mantiene una higiene postural. Son muchas las actividades que se pueden realizar: ejercicios aeróbicos de bajo impacto como andar, correr, natación, yoga, chi kung (esta técnica se relaciona con la respiración, mente y ejercicio físico) pero de forma suave (siempre guiados y pautados por el fisioterapeuta).

Esta indicado hacer ejercicio al aire libre, porque el cuerpo humano produce vitamina D, cuando la piel se expone al sol. Esta vitamina ayuda al cuerpo a absorber el calcio y el fósforo que son dos minerales imprescindibles para la formación normal de los huesos. El déficit de esta vitamina puede producir la osteoporosis.

  • Se explica cómo vivir en un entorno más seguro, las precauciones que debe aprender para evitar las caídas: usar dispositivos de apoyo como un bastón o un andador, si es necesario por la edad, o bien por incapacidad de deambular correctamente; no usar tacones altos ni zapatos que resbalen; recoger las habitaciones para no tropezar con nada; instalar varias luces en las habitaciones, así como mantener las zonas de escaleras bien iluminadas y con pasamanos; tener una linterna en la mesita de su habitación; instalar pasamanos en el baño cerca de la bañera, de la ducha y del inodoro; usar dispositivos antideslizantes en la ducha o la bañera; evitar llevar pesos, trasladar grandes cargas supone un lastre para las articulaciones. Para evitarlo se recomienda utilizar instrumentos que ayuden a equilibrar el peso en ambas extremidades, de esta manera, la carga estará repartida y no repercutirá negativamente en el cuerpo.

Para todo ello necesitamos la colaboración del paciente y familia, a los que se les informa cómo prevenir las caídas, identificar los posibles factores que puedan desencadenarlas, repercusiones, reconocimiento precoz de fracturas (edema, equimosis, crepitación), entre otras. Enseñar una correcta movilización, deambulación, desplazamientos y aseo de la persona. Proporcionar información de las empresas que montan todos los dispositivos mencionados, en caso de que sea necesario.

Tener malos hábitos como el tabaco o el alcohol, son factores determinantes en la aparición de caídas, y, por tanto, esto puede desencadenar en posibles lesiones. Se pregunta por la rutina en relación a estos dos hábitos tóxicos y se le informa de las desventajas que esto ocasiona en su enfermedad. El alcohol interfiere en la capacidad del organismo a absorber el calcio y los fumadores presentan niveles inferiores de vitamina D. Se puede realizar un test para conocer la dependencia al tabaco (Test de Fagerstrom) y al alcohol (Test Audit), y a partir de ahí, iniciar una serie de consultas, en las cuales se irá comunicando al paciente las distintas alternativas que tiene para conseguir dejar estos hábitos.

Tratamiento

Antes de iniciar el tratamiento, se explica la importancia de mantener un nivel de actividad física adecuado, que promueva una buena salud ósea y contrarreste las secuelas del desajuste en los mecanismos de regulación de calcio, y en especial, en mujeres con pérdida de estrógenos. Si la salud le impide realizar ejercicio intenso, se aconseja paseos, y si es posible al aire libre. La importancia de realizar ejercicio de la forma adecuada beneficia a su estado físico. El profesional debe observar cómo realiza los ejercicios para corregir posibles fallos en la ejecución. Después de una semana aproximadamente, se programa de nuevo una segunda cita en la consulta del Fisioterapeuta, el cual explica el tratamiento a seguir para evitar hipercifosis e hiperlordosis, ya sea en bipedestación, sedestación o en decúbito.

Antes de empezar con la serie de ejercicios pautados en esta segunda cita, el paciente debe practicar la respiración diafragmática de tal manera que aumente la oxigenación en el organismo, ventilando los pulmones y activando el sistema nervioso. Realizándolo de la siguiente forma:

Tumbado en una superficie y con una mano apoyada en el pecho y la otra sobre el abdomen, coger aire por la nariz y observar que la mano del abdomen sube hacia arriba. Al expulsarlo por la boca muy despacio, notar como su abdomen se contrae gradualmente hasta volver a la posición inicial.

Mantener una postura corporal correcta, ayuda a tener la columna vertebral sana, junto con las vértebras, ligamentos, músculos y discos intervertebrales que ayudan a estabilizar la columna, permitiendo que el cuerpo realice los movimientos. Se coloca al paciente delante de un espejo de esta forma es capaz de observar sus fallos en su estructura de forma visual, pudiendo corregir fallos posturales, y consiguiendo educar en una buena higiene postural.

Se comienza con ejercicios isométricos que ayuden a fortalecer la musculatura: sentado en una silla, con la espalda recta y bien alineado en 90º, el tiempo de ejecución puede ser con repeticiones de los ejercicios con rutinas de 5 hasta llegar a 10. Éste es el mismo en los siguientes ejercicios:

  • Apoyar con las palmas de las manos sobre la frente. Empujar la cabeza sin moverla hacia las manos.
  • Mismo ejercicio, pero con las manos detrás de la cabeza.
  • Colocar mano derecha contra el lado derecho de la cabeza y empujar con la cabeza hacia la palma de la mano, sin dejar que se mueva.
  • Mismo ejercicio, pero hacia el lado izquierdo.
  • Colocar la mano derecha contra el costado derecho por encima del ojo y empujar como si quisiera llegar al hombro, sin mover la cabeza.
  • Mismo ejercicio, hacia el lado izquierdo.

Tumbado en una superficie plana, ejecutar otra serie de ejercicios, con la zona lumbar pegada al suelo, descansando entre series:

  • Decúbito supino, piernas flexionadas, hacer presión con el abdomen y glúteos a la vez, observar como sus crestas iliacas ascienden, mantener durante cuatro segundos y volver a la posición inicial.
  • En la misma posición, doblar la pierna derecha y llevarla hacia el pecho, y volver a la posición inicial. Lo mismo con la pierna izquierda, y finalizar llevándose las dos piernas flexionadas al pecho, abrazándolas.
  • Seguir en la posición anterior, flexionar las piernas en posición de silla y los brazos protegiendo su columna cervical, alternando intentar acercarse a la rodilla, despacio y sin forzar.
  • Piernas flexionas apoyadas en el suelo, brazos protegiendo cervicales, intentar levantar su cintura escapular.
  • Piernas flexionas apoyadas en el suelo, brazos a los lados del cuerpo, levantar la cadera, arqueando un poco la espalda, mantener dos segundos y volver a la posición inicial.
  • En decúbito prono, apoyando las manos en el suelo y las rodillas flexionadas, llevar el cuerpo hacia adelante y hacia atrás, despacio. Finalizando la serie de ejercicios con la respiración.

 

Conclusión

Desde Atención Primaria se pueden conseguir grandes resultados mediante el trabajo continuado con pacientes, tanto a nivel de educación para la salud, cómo del trabajo diario a nivel físico. Esto a su vez generaría una disminución de las listas de pacientes con posibles caídas en Atención Especializada.

El trato personalizado del fisioterapeuta de su centro de salud, proporciona al paciente y familiares apoyo emocional y psicológico, motivación y empatía, que son los pilares fundamentales para conseguir la adherencia al tratamiento (farmacológico y no farmacológico) de las personas con osteoporosis. La evidencia demuestra que la base fundamental para tener un equilibrio postural adecuado en la osteoporosis es una buena alimentación y práctica de ejercicio físico.

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