Promoción de la salud en cáncer de piel tipo melanoma

Introducción

Melanoma es un tipo de cáncer de piel de los más severos, pudiendo causar en su estado más avanzado daño en órganos internos, agravando la situación, la ventaja que encontramos en este tipo de cáncer es que al desarrollarse en la superficie (piel), podemos detectarlo a tiempo al ser evidentes sus manifestaciones. Por ello es importante detectarlo de manera prematura para solucionarlo e informar de cómo prevenirlo.

Melanoma es un tumor formado por células productoras de melanina, llamadas melanocitos que se convierten en células malignas, creando el cáncer de piel.

Promoción de la salud en cáncer de piel tipo melanoma

Autores

– Estrella Alba García Gavilán (DUE en Servicio Andaluz de Salud)

– Ángela Gavilán López (DUE en Servicio Andaluz de Salud)

– Miguel Ángel Gavilán López (DUE en HU Reina Sofía de Córdoba)

Los melanocitos son las células encargadas de producir la melanina de la piel, responsables de proporcionar el color de la piel, cabello y del iris del ojo. A su vez la melanina actúa en el cuerpo a modo de barrera contra la acción de los rayos ultravioleta (UV), para evitar que la radiación solar penetre de manera dañina en los tejidos. A mayor exposición solar mayor producción de melanina.

Los lunares (nevus), las pecas y las manchas oscuras en la piel aparecen cuando los melanocitos crecen en grupo, y suelen ser benignos, aunque no siempre lo son. Por ello hay que conocer muy bien nuestros lunares y pecas, y estar alerta de cualquier cambio en el aspecto (como su tamaño, forma o color), un lunar concreto que es distinto a los demás o sensación inusual de cualquier área de nuestra piel, debemos de chequearla para detectar a tiempo un posible melanoma.

El melanoma se puede desarrollar en hombres y mujeres a cualquier edad, se suele dar en la edad adulta aunque cada vez están existiendo más casos de jóvenes que padecen melanoma.

Metodología

Se ha llevado a cabo una búsqueda y revisión bibliográfica acerca de “Promoción de la salud en cáncer de piel, tipo melanoma” en las principales bases de datos y en los siguientes metabuscadores: Google académico y The Cochrane Library.

Palabras clave

Cáncer de piel, melanoma, prevención.

Como detectar de manera precoz un melanoma

La regla ABCDE es uno de los métodos usados para detectar señales de un posible melanoma y así poder acudir al dermatólogo para tratarlo, estas son los signos de alarma a tener en cuenta:

Asimetría:Cuando una de las mitades del nevus no se corresponde con la otra mitad.
Borde: Los lunares benignos normalmente tiene los bordes regulares.Cuando los bordes presentan irregularidades, son desiguales, dentados o mal definidos es mala señal.
Color:el color no es uniforme, presenta más de dos tonos distintos, presenta sombras de color marrón, negras, rosadas, rojizas, azules o blancas.
Diámetro:si el lunar mide más de 6 mm de ancho.
Evolución: Este es el factor más importante a tener en cuenta, cualquier cambio enel tamaño, la forma, el color, picor, sangrado…cualquier variación del lunar, es señal de alerta y debemos consultar a nuestro dermatólogo.

Causas

No existe una causa en concreto se suele deber a varios factores, aunque está claro que el mayor problema al que nos exponemos son las radiaciones ultravioletas. Un exceso de estas radiaciones desde la infancia es determinante para causar un posible melanoma en el futuro.

También existen una serie de factores que aumentan el riesgo de padecer un melanoma, las personas que poseen uno o varios de estos factores tienen más riesgos de desarrollarlo.

Tener la piel y el cabello muy claros, rubios o pelirrojos, con los ojos de color claro.
Presencia de nevus atípicos.
Las personas con mayor número de nevus tienen más probabilidad.
Presencia de nevus congénitos
Personas con una piel muy sensible.
Factores hereditarios, tener antecedentes familiares de melanoma o nevus atípicos. . La herencia juega un papel importante en el desarrollo de melanomas “melanoma familiar”.
Haber sufrido quemaduras severas por radiación solar, sobre todo durante la infancia, ya que la piel se dice que tiene memoria.
Exponerse a un exceso de rayos ultravioleta (sol, UVB, UVA) de manera prolongada aunque tu piel este ya bronceada.
Las personas en situación de inmunodepresión.
Las personas que ya se han visto afectadas por un melanoma corren el riesgo de desarrollar nuevos melanomas.

Como evitar un posible melanoma

El sol y la radiación ultravioleta son los principales factores de riesgo para desarrollar un melanoma, por ello toda la prevención irá dirigida a recomendaciones a la hora de exponerse a los rayos solares.

Las personas que ya han desarrollado un melanoma a lo largo de su vida deben seguir con mayor hincapié las recomendaciones para proteger la piel, ya que corren un mayor riesgo de desarrollar nuevos tumores.

La aplicación de un factor de protección solar alto es fundamental a la hora de proteger nuestra piel, debemos aplicarlo un tiempo antes de exponernos al sol para que le dé tiempo a la piel a absorberlo, aplicarlo frecuentemente durante las horas que estemos tomando el sol y también es importante aplicarlo de nuevo después de cada baño.
Evitar las horas de mayor intensidad solar, se debe evitar la exposición solar entre las 12h y las 16h sobre todo en los meses de verano.
la exposición al sol debe ser de manera progresiva, no podemos pretender broncearnos en un día o dos, porque de esta manera solo conseguirás una quemadura solar con las consecuencias que eso conlleva.
Proteger a los niños sobre todo a los bebes, ya que su piel es muy sensible, siempre hay que aplicar protección solar aun en las horas de menor radiación, y protegerlos de la exposición solar directa con sombrilla, gorros e incluso con ropa puesta en los niños de piel y cabellos claros. De esta manera evitaremos insolaciones y quemaduras solares desde la infancia, ya que hay que recordar que la piel tiene memoria y va acumulando, con la posible consecuencia de desarrollar melanoma en la edad adulta.
Debemos aplicar protección solar no solo en meses de verano, sino siempre que nos exponemos al sol, incuso en invierno.
Usar protección solar cuando damos paseos en bicicleta, senderismos o incluso para estar en la terraza de un bar… cualquier actividad al aire libre o cualquier trabajo que desarrollamos al que estemos expuestos.
No hay que bajar la guardia ante factores que aminoren la sensación de calor. Un error muy común es exponernos por tiempo prolongado o sin protección solar al no notar la sensación de calor ya sea porque son meses invernales o porque el clima este nublado….La radiación solar afecta en días nublados, en la nieve, en los días de viento que refrescan la piel…Por ello siempre hay que estar alerta y protegernos.
Después de cada baño debemos secar nuestra piel y volver a aplicar la protección aunque esta sea resistente al agua.
Evitar el uso de lámparas de rayos UVA, contribuyen a la aparición de melanomas y aceleran el envejecimiento de la piel.

Pero sobre todo lo más importante a tener en cuenta es revisar nuestra piel cada año, para detectar cambios en ella y consultar con un dermatólogo.

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