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Manejo sociopsicologico del paciente y su familia en la atencion primaria de Salud
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Autor: Dra. Lourdes María Jaime Valdés
Publicado: 28/02/2008
 

Se realizó un estudio con Intervención Pre Experimental Longitudinal y prospectivo para determinar la efectividad de un entrenamiento para pacientes alcohólicos y su familiares pertenecientes al Centro Comunitario de Salud Mental Policlínico “Martha Abreu”, Santa Clara, desde Mayo  2003 a Noviembre  2004. Se trabajó con los 30 pacientes que integran el Grupo de Ayuda Mutua y sus familiares. Se les aplicaron Cuestionarios Indicadores Diagnósticos  así como otros formularios a pacientes y familias para analizar estilos de vida, funcionamiento familiar, conocimientos antes y después de efectuar la intervención. Se utilizaron técnicas cualitativas directas (interactivas) donde está presente la observación participante y entrevistas cualitativas en la recogida de la información.


Manejo sociopsicologico del paciente y su familia en la atencion primaria de Salud.1

Manejo sociopsicológico del paciente y su familia en la atención primaria de Salud.

 

* Dra. Lourdes María Jaime Valdés

** Dr. Luis Enrique Pérez Guerra.

*** Dra. Marta Alonso Cofiño

**** Lic. Elisa Herrera Cabrera

 

* Especialista de Segundo Grado en MGI. MSC en Psicología de la Salud. Profesor Auxiliar.  ISCM. VC.

** Especialista de Primer Grado en M.G.I. Profesor. Instructor ISCM. VC.

*** Especialista de Primer Grado en Higiene y Epidemiología. MSC en enfermedades Infecciosas. Profesor Asistente ISCM. VC.

**** MsC. Elisa herrera Cabrera

 

Instituto Superior de Ciencias Médicas  Villa Clara Serafín Ruiz De Zárate Ruiz. Santa Clara.

 

Resumen

 

Se realizó un estudio con Intervención Pre Experimental Longitudinal y prospectivo para determinar la efectividad de un entrenamiento para pacientes alcohólicos y su familiares pertenecientes al Centro Comunitario de Salud Mental Policlínico “Martha Abreu”, Santa Clara, desde Mayo  2003 a Noviembre  2004. Se trabajó con los 30 pacientes que integran el Grupo de Ayuda Mutua y sus familiares. Se les aplicaron Cuestionarios Indicadores Diagnósticos  así como otros formularios a pacientes y familias para analizar estilos de vida, funcionamiento familiar, conocimientos antes y después de efectuar la intervención.

 

Se utilizaron técnicas cualitativas directas (interactivas) donde está presente la observación participante y entrevistas cualitativas en la recogida de la información. El efecto del entrenamiento se midió por el cambio de comportamiento y de las características presentes en los participantes haciéndose necesario un diagnóstico final que posibilitó la comparación de antes y después de terminada la intervención.

 

Los estilos de vida causantes de disfunción familiar disminuyeron. Mejoró el comportamiento de pacientes y familiares predominando la ayuda y el apoyo al paciente alcohólico después de efectuada la intervención. Se demostró la efectividad del entrenamiento y la influencia positiva de la familia en la rehabilitación del paciente, evaluándose de Satisfactorio de forma global. Recomendamos propiciar la elevación del nivel teórico de los profesionales de la salud para que apliquen eficazmente el entrenamiento sociopsicológico a otros grupos de pacientes donde se realicen actividades similares.

 

Palabras Clave: Alcoholismo, entrenamiento sociopsicológico, disfunción familiar, comportamiento familiar.

 

Introducción

 

El dios griego Baco, creador del buen vino que acompañaba los momentos alegres y las llamadas “bacanales”, nunca pensó que la adicción a tal bebida pudiera convertirse en una enfermedad, y que a la altura del tercer milenio sus consecuencias dañinas fueran semejantes a las de una plaga, con lamentables consecuencias para el individuo adicto y para la sociedad en general. 1

 

El alcoholismo constituye uno de los problemas que más ha afectado a grupos humanos desde la más remota antigüedad. 2 Las referencias al consumo del alcohol datan de al menos, ocho mil años a.n.e, con el consumo de hidromiel una especie de cerveza hecha de miel fermentada. La influencia del alcohol en las primeras culturas puede inferirse del hecho de que los egipcios, griegos y romanos rindieron todos los tributos ¨a un DIOS del Vino. 3

 

Los romanos llamaban a su vino Elixir Vitae y creían ardientemente que el vino no era solo una panacea, sino también una sustancia que podía prolongar la vida indefinidamente, un trago de la fuente de la juventud. Una referencia de la Biblia dice Alabad a Dios porque ha engendrado las frutas de la tierra y el vino que alegra el corazón del hombre¨. En la Edad Media el consumo de Alcohol se asocia a muchos ritos y ceremonias, nacimientos, bodas, muerte, coronaciones e incluso la firma de tratados, su uso ha continuado en la misma forma hasta el presente. 4

 

El alcoholismo es a nivel mundial la cuarta causa principal de males físicos y psíquicos que sufre el ser humano. 5 La población cubana en su mayoría y aún dentro de límites socialmente permitidos tiene aceptación por el consumo de bebidas alcohólicas en sus distintas variantes y no escapa a la tendencia mundial de incrementar el consumo de éstas. 6 Se ha demostrado que la  apreciación general de la población ante la ingestión de alcohol  favorece, los mitos sobre los reales efectos dañinos del tóxico, 7 y se ha  observado un consuno familiar ó grupal que promueve la necesidad de depender de las bebidas alcohólicas para  divertirse, expresar amor, amistad o aliviar tensiones y que la ingestión de este tipo de sustancia suele justificarse en forma desmedida por la reducción de opciones, para el uso del tiempo libre.8

 

El alcoholismo es responsable de un alto número de años de vida potencialmente perdidos y fuente de sufrimiento de muchas  familias y colectivos. Todos tenemos un importante ¨papel¨ para prevenir y controlar, vale un llamado a la reflexión.6 Pese a que la prevalencia del alcoholismo en Cuba se encuentra entre las más bajas de la región, la proyección preventiva de nuestra Medicina hace que ahora tengamos en cuenta la tendencia mundial al incremento de esta toxicomanía y aprovechemos las potencialidades del equipo de salud para trabajar en esta problemática. La OMS define al Alcoholismo como un trastorno conductual crónico manifestado por repetidas ingestas de alcohol excesivas, respecto a las normas dietéticas y sociales de la comunidad y que acaban interfiriendo en la salud y funciones económicas y sociales del bebedor. 9

 

El concepto de alcoholismo se completa cuando tenemos además en cuenta el criterio determinista, es decir el criterio que se relaciona con la pérdida de libertad ante el alcohol, la incapacidad del paciente para decidir no tomar más o en caso de hacerlo, la incapacidad para decidir hasta cuando tomar. 10

 

Debemos destacar que el alcoholismo es una enfermedad crónica que repercute negativamente en la vida del individuo que la padece tanto desde el punto de vista biológico como psicológico y social y que además es capaz de producir grandes dificultades familiares, escolares, laborales y sociales en general. A pesar de que debido a todas estas consecuencias negativas se trabaja  arduamente en la investigación de fármacos que ayuden a disminuir la afección, debemos subrayar que ningún tipo de tratamiento farmacológico será exitoso si no se aplica el modelo biopsicosocial. 11 En la evaluación del alcoholismo y a partir de criterios anteriores se puede reflejar la clasificación actual del mismo. 12


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Comportamientos normales

Abstinentes

Históricos: Ausencia total del consumo.

Actuales: Ausencia total del consumo de alcohol en los últimos tres meses.

Bebedor Social

Discreto: Consumo reducido de uno o tres tragos en condiciones excepcionales, no más de cinco o seis veces al año. Ausencia de embriaguez.

Moderado: La ingestión es mayor pero sin pasar del equivalente a un ¼ de botella de ron o bebida fuerte o equivalente, no más de 2 veces/semana, puede ocurrir alguna embriaguez ligera con discreta euforia, discreto grado de incoordinación motora que no haga recomendable la conducción de un vehículo. Dicha embriaguez nunca ocurre más de una vez al mes.

 

De superarse estos indicadores de cantidad y frecuencia el sujeto será clasificado como:

Comportamiento Transicional:

Consumo de riesgo: Se cumplen los criterios de cantidad y frecuencia y a veces de etiquetado.

Comportamiento anormal:

Consumo perjudicial: (abuso del alcohol) Se identifica por la presencia de efectos nocivos biológicos, psicológicos o sociales inherentes al consumo de alcohol. Se cumplen criterios de cantidad y frecuencia, criterio de nocividad y frecuentemente de etiquetado.

Dependencia alcohólica: Criterio de cantidad y frecuencia, de nocividad, de esclavitud y etiquetado: sin complicaciones, complicada y en fase terminal.

 

El 70% de la población del mundo consume alcohol en alguna cantidad y de ellos aproximadamente el 10% se convertirá en alcohólicos en el curso de sus vidas. El 4% de la población cubana es alcohólica, lo cual abre las pautas o constituye la antesala al consumo de sustancias prohibidas que embriagan. 8 En la Provincia de Villa Clara y específicamente en el Municipio de Santa Clara que incluye el Policlínico Marta Abreu el Alcoholismo constituye uno de los principales problemas de salud. El alcoholismo tiene gran repercusión en los diferentes planos, social, laboral y familiar y es el responsable de más de la mitad de los actos de violencia hogareña, conflictos familiares, homicidios, accidentes del tránsito y violaciones sexuales. 13 Si no se hacen intervenciones oportunas y adecuadas la alcohol dependencia, con su evolución crónica conduce a la aparición  de complicaciones, invalidez, deterioro e incluso la muerte. 14

 

La lucha contra el alcoholismo es difícil, pero afortunadamente hay ejemplos que demuestran que se puede controlar y que el consumo de alcohol se puede disminuir. 15 Es necesario educar a la familia de los pacientes alcohólicos en el apoyo que se le debe brindar durante su rehabilitación y esto lo podemos lograr mediante el trabajo grupal. De esta forma, motivados por la tendencia actual al manejo ambulatorio de los problemas del alcohol y el uso más frecuente del entrenamiento sociopsicológico con métodos psicológicos de influencia, pretendemos determinar la efectividad de un entrenamiento sociopsicológico para el paciente alcohólico y su familia en la Atención Primaria de Salud, así como identificar la Asociación entre alcoholismo, estilo de vida y disfunción familiar antes y después de efectuada la intervención, precisar diferencias en el comportamiento evolutivo Integral del paciente alcohólico y su familia antes y después del entrenamiento y valorar la influencia de la participación activa y permanente de la familia en la terapia grupal y en la rehabilitación del paciente alcohólico.

 

Consideraciones metodológicas

 

Se realizó un estudio con intervención Pre Experimental Longitudinal y prospectivo para determinar la efectividad de un Entrenamiento sociopsicológico para pacientes alcohólicos dependientes con ó sin complicaciones y sus familiares pertenecientes al Centro Comunitario de Salud Mental del Policlínico Docente “Martha Abreu”, municipio de Santa Clara, Villa Clara  en el período comprendido entre Mayo 2003 a Noviembre 2004.

 

De un universo de 236 pacientes se trabajó con los 30 pacientes que integran el Grupo de Ayuda Mutua (Grupo Estudio), el cual fue formado y entrenado durante todo el año anterior. Se les llenó la ficha para el paciente alcohólico. Posteriormente se les aplicó un Cuestionario de Indicadores Diagnósticos (CID) y el Cuestionario C.A.G.E. Se trabajó con el Grupo de Ayuda Mutua teniendo en cuenta el consentimiento del paciente y su familia y una vez valorado por la consulta multidisciplinaria del Centro Comunitario de Salud Mental del Policlínico Martha Abreu, se les propone una estrategia de tratamiento ambulatorio que combine la Terapia Grupal y la rehabilitación incluyendo la familia y ambos participaron en el entrenamiento.

 

El grupo de estudio (Grupo de Ayuda Mutua) está formado por personas entre 25 y 72 años sin distinción de raza, sexo, escolaridad y ocupación cumplen el criterio de voluntariedad y sistematicidad hacia las terapias, la modalidad  de alcoholismo que presentan el primario, sin complicaciones crónicas estables clínicamente por lo que en el momento del inicio de la investigación se encontraban en fase de desintoxicación. Excluimos del estudio pacientes sin familia con complicaciones psíquicas invalidantes, modalidad de alcoholismo secundario y aquellos que no  desearon la incorporación al entrenamiento.

 

Posteriormente se le aplicó una Encuesta para establecer relaciones entre la categoría diagnóstica y el inicio del hábito tóxico, identificar el funcionamiento familiar antes de efectuar la intervención, así como el comportamiento del paciente en el marco familiar y el apoyo que le brinda su familia para su tratamiento. Se pudo valorar además  en esta encuesta las consecuencias que les ha traído el alcoholismo tanto en el ámbito familiar como en el laboral, económicas, sociales y psicológicas, así como sus conocimientos sobre el tratamiento del alcoholismo.

 

Seguidamente, se le aplicó un cuestionario a la familia de los pacientes  con el cual valoramos conocimientos sobre la enfermedad, sentimientos, emociones, comportamiento ante el problema y voluntariedad para participar en el entrenamiento. Iniciamos el funcionamiento del grupo en el mes de Mayo del 2002 para lo cual dividimos el mismo en dos subgrupos, con una frecuencia semanal los martes y los miércoles cada subgrupo  respectivamente, con una duración aproximada de 60 a 90 minutos, durante 30 sesiones de trabajo. Las primeras 15 sesiones destinadas al trabajo grupal en correspondencia con los objetivos de cada sesión.

 

Los 15 restantes para el trabajo grupal independiente pero bajo la observación de los terapeutas (sesiones de la 16 a la 27). Las últimas (28 – 30) se destinaron al diagnóstico definitivo  de la repercusión de la estrategia aplicada  Se incorporaron técnicas educativas conocidas ya sean de animación, reflexivas ó presentación asociadas a algunos recursos técnicos incorporados para apoyar los objetivos de las terapias grupales.

 


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El efecto de entrenamiento se midió por el cambio de comportamiento y de las características presentes en los participantes por lo que se hizo necesario un diagnóstico final que posibilitó la comparación de “antes y después” de terminada la intervención. Se aplicó además en cada sesión una Guía de observación que posibilitó el seguimiento de los pacientes y sus familiares. Se realizaron además entrevistas cualitativas (focalizadas) a la familia que permitieron prever una serie de temas que serían tratados en la observación participativa.

 

Después de un año de trabajo se les aplicó el cuestionario inicial para comparar y valorar el efecto del entrenamiento en el grupo estudio, los resultados de la intervención, en cuanto al comportamiento evolutivo integral del paciente y su familia, así como para valorar si la participación activa y permanente de la familia en el entrenamiento influyó positivamente en la rehabilitación del paciente. Se recogieron opiniones de los pacientes y familiares acerca del entrenamiento y se les aplicó un cuestionario para valorar el efecto en pacientes y familiares. Esto constituyó el fundamento del sistema diseñado para el entrenamiento sociopsicológico al paciente alcohólico y su familia.


Variables

 

Variable Independiente: Entrenamiento sociopsicológico para el alcohólico y su familia.

Variable Dependiente: Evaluación Integral del paciente y su familia.

 

Métodos Estadísticos

 

  • Prueba de bondad de ajuste con la distribución  de chi – cuadrado para comparar las frecuencias  en una muestra.
  • Prueba t de Student para comparar dos porcientos muestrales de muestras independientes.
  • Se realizó un estudio de correlación y regresión lineal simple, determinando el coeficiente de correlación (r) y la línea de regresión y= a+ bx.
  • Se utilizaron los niveles significativos del  0,05;  0,01 y  0,001 de probabilidad de cometer el error de tipo I, los que llamamos significativos, altamente significativos y muy  altamente significativos respectivamente.

 

Se consideró que existe diferencia estadística a partir de p £ 0,05. Todas las pruebas realizadas fueron de dos colas. Además, se confeccionaron tablas para exponer los resultados.

 

Tablas

 

Tabla 1. Conocimientos y comportamiento del paciente antes de efectuar la intervención.

 

entrenamiento_sociopsicologico_atencion_primaria/comportamiento_paciente

 

Fuente: Datos recogidos de los instrumentos confeccionados. *P<  0,05. ** P < 0,01. *** P< 0,001

 

Tabla 2. Conocimientos y comportamiento familiar antes de efectuar la intervención.

 

entrenamiento_sociopsicologico_atencion_primaria/comportamiento_familiar

 

Fuente: Datos recogidos de los instrumentos confeccionados. * P< 0,05, ** P < 0,01, *** P< 0,001.

 

Tabla 3. Disfunción familiar y estilos de vida de los pacientes antes y después de efectuar la intervención.

 

entrenamiento_sociopsicologico_atencion_primaria/disfuncion_familiar_estilo_vida

 

Fuente: Datos recogidos de los instrumentos confeccionados. Historia clínica familiar. *** p(<0,001), **p(<0,01), *p(<0,05).

 

Tabla 4. Comportamiento evolutivo integral del paciente y su familia antes y después de efectuado el entrenamiento.

 

entrenamiento_sociopsicologico_atencion_primaria/comportamiento_tras_entrenamiento

 

Fuente: Datos recogidos de los instrumentos confeccionados. ** p< 0,01, *** p< 0,001

 


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Tabla 5. Categoría de los participantes según la evaluación realizada en cada encuentro.

 

entrenamiento_sociopsicologico_atencion_primaria/evaluacion_participantes

 

  • Categoría A: (<30) Los encuentros no solucionan los problemas de la familia y el paciente
  • Categoría B: (30 – 39) Los encuentros propician parcialmente el cambio e influyen poco en la rehabilitación del paciente
  • Categoría C: (40 – 50) Los encuentros propician el cambio de conducta de pacientes y familiares, así como el desarrollo evolutivo integral de ambos

 

Fuente: Protocolo de observación del Entrenamiento. Leyenda: r = 0,997, y= 25,581 + 0,726x [tc = 69,330; p< 0,001]    

 

Tabla 6. Opiniones que tienen los participantes sobre el entrenamiento.

 

Las opiniones que tienen pacientes y familiares sobre el Entrenamiento son:

 

La organización del mismo es muy buena, excelente.

El compañerismo y el ambiente social es muy bueno.

Sobrecumplieron  las expectativas.

Lo más significativo es que hemos aprendido a ayudarnos, a querernos a valorarnos más.

El contenido de los temas es variable, dinámico, instructivo, e interesante.

Refieren que sería muy bueno efectuar el entrenamiento en otros grupos donde se realice actividades similares incluyendo la familia.

Aprendimos a conocernos, a comunicarnos, a mejorar la conducta, a querer y ayudar a nuestros familiares.

Refieren poder ayudar a otros alcohólicos y sus familias.

Se sugiere realizar más sesiones con más duración.

 

Al analizar estas opiniones se  puede plantear que todo lo referido por los participantes en el entrenamiento lo evalúan en forma global de Satisfactorio

 

Fuente: Datos recogidos de los instrumentos confeccionados.            

 

Resultados

 

En la Tabla 1 al interrogar a los pacientes con vistas a obtener información sobre los conocimientos y comportamiento de los mismos antes de efectuar la intervención se observa cómo el 100% de los pacientes pertenecen al Grupo de Ayuda Mutua y el 93,3% consideran que la ayuda de su familia pudiera influir positivamente en su tratamiento, el 96,7% refiere que su familiar le molesta con críticas por beber y el 93,3% consideran que su forma de beber está creando dificultades familiares, consideran que la ayuda familiar es deficiente el 70%. Se aplicó una prueba de bondad de ajuste con la distribución de chi cuadrado para comparar los porcentajes entre las respuestas a las interrogantes, encontrándose diferencias muy altamente significativas (p < 0,001) en las respuestas 1, 5, 9 y 10; diferencias altamente significativas (p< 0,01) en la respuesta 8, diferencias significativas (p < 0,05) en la respuesta 7 y no hay significación en las respuestas 2, 3, 4, y 6 (p > 0,05).

 

Al aplicar el cuestionario a la familia antes de efectuar la intervención (Tabla 2) se observa cómo el 100% de los familiares aceptarían ayuda médica para dar solución a su problema y han pensado que su vida pudiera cambiar si su familiar no bebiera, el 96,7% desea ayudar a su familiar alcohólico, así como el 93,3% de los familiares les preocupa que otro miembro de su familia beban y refieren querer a su familiar alcohólico. Se observa además cómo la familia se siente querida por su familiar toxicómano a pesar de que el 70,0% de los familiares refieren sufrir violencia física o de palabra por parte de los mismos, el 76,7% refiere saber qué es el alcoholismo.

 

Al aplicar la prueba de bondad de ajuste con la distribución de chi cuadrado para comparar los porcentajes entre las respuestas a las interrogantes no se encuentran diferencias significativas (p > 0,05) en las respuestas 2, 3, 4, se encuentran diferencias significativas (p < 0,05) en la respuesta 8; diferencias altamente significativas en la respuesta 1 (p < 0,01) y diferencias muy altamente significativas (p< 0,001) en las respuestas 5, 6, 7, 9, 10 y 11.

 

En la tabla 3 se observa cómo existe disfunción familiar en todas las familias de pacientes alcohólicos, dada por los estilos de vida nocivos presentes en este grupo de pacientes antes de efectuar la intervención. Observamos que los estilos de vida causantes de disfunción familiar más frecuentes son: la ingestión diaria de bebidas alcohólicas para un 73,3% seguido por la violencia doméstica en un 70%, así como por la mala utilización del per cápita familiar y la desatención familiar (63,3% y 40,0%) respectivamente.

 

Podemos ver cómo después de efectuada la intervención se hace evidente la disminución de todos los estilos de vida dañinos, vemos cómo el entrenamiento influye en los cambios muy altamente  y altamente significativos mejorando el funcionamiento familiar al disminuir los estilos nocivos que ocasionan disfuncionalidad (alteraciones de la dinámica familiar originadas por la toxicomanía). Según la prueba t de Student después de efectuada la intervención se encuentran diferencias muy altamente significativas (p < 0,001) en: ingestión diaria del alcohol y violencia doméstica, diferencias altamente significativas en mala utilización del per cápita familiar (p< 0,01)  y diferencias significativas en desatención y abandono familiar.

 

En la Tabla 4 podemos apreciar el cambio en el comportamiento evolutivo integral del paciente y la familia. Se observa cómo antes de aplicar el entrenamiento existía un predominio del comportamiento inadecuado, tanto para el paciente como para la familia (80,0% y 56,7%) respectivamente. Después de efectuada la intervención existe una mejoría importante, observándose un comportamiento adecuado en mayor número de participantes para una diferencia de 66,7% en el paciente y una diferencia de 36,7% en la familia. Al aplicar la prueba t de Student encontramos diferencias muy altamente significativas en el comportamiento del paciente (p < 0,001) y diferencias altamente significativas (p < 0,01) en el comportamiento evolutivo integral de las familias.

Es importante señalar que en nuestro estudio la observación jugó un papel relevante. Al analizar la Guía de observación para cada encuentro, Tabla 5, pudimos clasificar a los pacientes por categorías según el puntaje obtenido en cada encuentro, Se observa que en las primeros encuentros la mayoría de los pacientes, el 60,7% obtuvo una puntuación de menos de 30 puntos, o sea al inicio los encuentros no solucionan los problemas de la familia y el paciente, los encuentros propician parcialmente el cambio de comportamiento solo en el 39,3% de familias y pacientes (Categoría 30 –39) y no obtienen ningún puntaje en la categoría de 40 – 50, observándose la poca influencia del entrenamiento al inicio del mismo.


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Se observa cómo a medida que fueron aumentando los encuentros fue disminuyendo el puntaje en las categorías menores de 30 y 30 – 39 y aumentando en la categoría 40 – 50, o sea, ya en los encuentros del 16 al 20 el 50% de los participantes se encuentran en esta categoría, mientras que solo el 3,3% de los mismos obtiene un puntaje de < de 30 y el 38,7% se encuentra en la categoría 30 – 39  al final de la intervención (encuentros del 26 al 30), el 86,7% se encuentra en la categoría de 40 – 50, o sea los  encuentros propician el cambio de conducta del paciente y la familia, así como el desarrollo evolutivo integral de ambos, demostrándose la influencia positiva de la familia en la rehabilitación del paciente. Al observar la categoría de menores de 30 (los encuentros no solucionan el problema) no se encuentra ningún participante al final del entrenamiento y solo el 13,3% se encuentra en la categoría de 30 – 39, o sea los encuentros han propiciado parcialmente  el cambio de comportamiento de familiares y pacientes. Al realizar el análisis estadístico el coeficiente de correlación hallado de 0,997 es muy altamente significativo (tc = 69,330; p < 0,001) expresa una relación entre el número de encuentros y el puntaje obtenido que es casi perfecto.

 

En la ecuación de la línea de regresión se observa que el coeficiente de regresión  (b) tiene un valor de 0,726; es decir  que la puntuación aumenta aproximadamente en 0,73 puntos al aumentar un encuentro.  Al analizar las opiniones que tienen los participantes sobre el entrenamiento  (Tabla 6) podemos plantear que todo lo referido por los miembros del grupo lo evalúa de Satisfactorio de forma global.

 

Discusión

 

La mayoría de la bibliografía destaca que el paciente muy pocas veces se considera un alcohólico, por tanto los conocimientos sobre el tratamiento son deficientes, 16, 17 no coincidiendo con nuestros resultados por ser un grupo de ayuda mutua entrenado anteriormente. La mayoría de los pacientes niegan la ayuda de familiares en estudios realizados por otros autores, 16, 18 coincidiendo con nuestro estudio al analizar las respuestas 7, 8 y 9 donde el paciente se siente rechazado, sin ayuda y criticado por su familia.

 

Algunos autores 19 plantean cómo en familias con consumo de alcohol se presentan con mayor frecuencia dificultades negativas coincidiendo con nuestros resultados. En estudios realizados por García Roldán R y otros autores 20 se constató un predominio de familias antagónicas, hecho bastante preocupante pues precisamente esta toxicomanía constituye una de las entidades que más apoyo requiere y cuando estas personas no lo encuentran, muchas veces tienden a buscarlo en la bebida, creándose un círculo vicioso - soledad – ayuda – familiar; ayuda en el alcohol - depresión – soledad y por ello los que le rodean deben, en algún momento sentirse como él, ponerse en su lugar, entenderlo, única forma en que pudieran reincorporarlo como ser útil a su grupo familiar, sin que ello implique recriminación y rechazo. Se observa cómo en nuestro estudio a pesar del rechazo que refiere sentir el paciente, la familia no se comporta de forma antagónica al estar dispuesta a ayudar al paciente y brindarle su apoyo. Un estudio norteamericano Papanex 1974 suma al alcoholismo como factor de desintegración familiar, coincidiendo con nuestros resultados antes de efectuar el entrenamiento.

 

En estudios realizados por algunos autores 21, 22, 23, 24  se aprecia el cambio de comportamientos de la familia hacia el paciente después de realizado el trabajo grupal con las mismas y cómo esto repercute de forma positiva en el paciente mejorando su conducta y logrando una mejor rehabilitación, pues se hace notable la importancia que se le concede a la ayuda que pudiera recibir de su familia y amigos más cercanos no alcohólicos. En estudios realizados por García Roldán 20 se aprecia el predominio de familias que no apoyan al paciente en su rehabilitación, prevaleciendo en ellas la recriminación y rechazo hacia sus familiares alcohólicos no coincidiendo con nuestros resultados.

 

Podemos juzgar la importancia de este trabajo porque los resultados son compatibles en diferentes pruebas y testimonios importantes y pertinentes. Existen pruebas de que el tratamiento ambulatorio del alcohólico puede ser tan beneficioso como el tratamiento intrahospitalario. Según Wilson Cooley “El resultado del tratamiento  del alcohólico es más probable que sea influido  por el contenido de las intervenciones que por el marco en que se ofrece”, lo que coincide con nosotros, destacando la influencia positiva que ha ejercido la familia en nuestros resultados.

 

Conclusiones

 

En todas las familias se encuentra presente la disfunción familiar dada por los estilos de vida nocivos de los pacientes alcohólicos antes de efectuar la intervención, como son: Ingesta diaria de bebidas alcohólicas, violencia doméstica, mala utilización del per cápita familiar y desatención familiar, disminuyendo éstas después de efectuar el entrenamiento. El comportamiento evolutivo integral de la familia y el paciente es inadecuado antes de efectuar el entrenamiento, mejorando notablemente después de efectuada la misma. La mayoría de los participantes  del grupo estudio consideran que la participación activa y permanente de la familia en la terapia grupal ha influido positivamente en la rehabilitación, disminuyendo o erradicando el hábito, consideran que el entrenamiento ha influido en el cambio de conducta suyo y de su familia.

 

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