La Salmonella entérica se encuentra ampliamente distribuida en la naturaleza, donde los más de 2.500 serotipos conocidos se pueden encontrar en el tracto gastrointestinal de una amplia variedad de mamíferos, reptiles, aves e insectos (excepto los serotipos Typhi y Paratyphi que sólo colonizan al ser humano). La infección por Salmonella entérica, consecuencia de la ingesta de alimentos y/o aguas contaminadas, es una de las principales causas de gastroenteritis, pero también pueden producir afectación extraintestinal a muy diversos niveles (bacteriemia, endocarditis, infección del tracto urinario, osteomielitis, artritis, neumonía y empiema, infección del sistema nervioso central, infecciones de tejidos blandos, etc).