En el estudio de las teorías curriculares, el currículo crítico es el que de manera más acertada se identifica con la universidad en su misión transformadora y reproductora de la realidad. Cada día se requiere que los espacios universitarios capaciten a sus estudiantes con herramientas necesarias e indispensables en la resolución de los múltiples problemas que se presentan, no sólo en las aulas, sino en las comunidades donde se desenvuelven en su día a día. En este sentido, los profesores necesitan investigar acerca de la manera cómo se puede trabajar de manera dialógica, consensuada, participativa y democrática en la construcción de estrategias para la enseñanza así como el aprendizaje, de manera que se desarrolle un ambiente colaborativo además significativo en la construcción del conocimiento como una experiencia viva.