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Afectación neurológica en paciente con anatomía vascular congénita

vasculares de una malformación arteriovenosa cerebral (MAV), tiene también significativas limitaciones. La sobreproyección de las venas de drenaje sobre las nutricias arteriales puede oscurecer la visualización de pequeñas arterias nutricias y pequeños aneurismas relacionados con el flujo, especialmente aquellos próximos a los nidos. Frecuentemente, la angioarquitectura intranidal no se reconoce en forma precisa, e importantes características como seudoaneurismas o fístulas arteriovenosas directas pueden no detectarse en los estudios angiográficos selectivos.

Además, a causa de diferentes condiciones hemodinámicas en diferentes partes (compartimientos) de una malformación arteriovenosa cerebral (MAV), algunas pequeñas venas accesorias de drenaje pueden no ser completamente visualizadas. De esta forma, la exploración angiográfica superselectiva de las malformaciones arteriovenosas (MAV) es mandatoria para un detallado y preciso relevamiento angioarquitectónico, así como para el planeamiento del tratamiento. Desafortunadamente, los sistemas clasificatorios y de graduación empleados en forma usual, así como los datos estadísticos disponibles respecto de la angioarquitectura y las características vasculares de las malformaciones arteriovenosas (MAV) del cerebro, se basan en valores angiográficos selectivos y difieren de datos similares derivados de los estudios angiográficos superselectivos.

La angiografía superselectiva se realiza con microcatéteres de rigidez variable que se introducen coaxialmente a través del catéter angiográfico estándar.

Se usan dos tipos:

1) Microcatéteres controlados: como los catéteres Tracker, que avanzan en el interior de la circulación cerebral y son guiados hacia las arterias nutricias deseadas con la ayuda de filamentos microguía. La punta de estos catéteres puede también reformarse para facilitar la cateterización de las ramas anguladas agudas.

2) Microcatéteres guiados por flujo: se dispone de dos tipos, denominados Minitorque y microcatéter Magic. Estos microcatéteres tienen puntas radioopacas ligeramente dilatadas que los dotan de un cierto grado de guía de flujo.

La angiografía venosa superselectiva a través de un abordaje venoso transfemoral se realiza también en casos seleccionados, con el uso de los microcatéteres previamente descriptos. Esto permite el estudio selectivo de las venas de drenaje individuales y de los territorios venosos específicos del cerebro. La exploración angiográfica superselectiva de una malformación arteriovenosa cerebral (MAV) proporciona la siguiente información:

  • Segmentos distales de las arterias nutricias (anatómica, geométrica, hemodinámica).
  • Unión arterionidal.
  • Determinación detallada del nido (compartimientos, fístulas arteriovenosas intranidales, porciones plexiformes, ectasias intranidales).
  • Unión venonidal.
  • Segmentos proximales de las venas de drenaje.

CONCLUSIONES

Nuestro caso clínico demuestra que la presencia de una malformación cerebral vascular fue diagnosticada después de la realización de una infiltración, realizada anteriormente por el mismo especialista. La incidencia de encontrar una malformación durante una infiltración es muy baja, por la dificultad de realizar la punción directamente al vaso anómalo.

Las infiltraciones se deben realizar después de la realización de un estudio radiológico, para evitar complicaciones tan importantes como la ruptura del vaso anómalo o adyacente o producir lesiones neurológicas graves.

La infiltración cervical es un tratamiento que se realiza con anestesia local y de forma ambulante. Suele tardarse 5 o 10 minutos en realizarse y después el paciente permanece en observación un tiempo prudencial (15-20 minutos) antes de irse a casa por su propio pie.

No obstante existen complicaciones no solo en ausencia de malformaciones vasculares.

CONCLUSIONS

Our clinical case shows that the presence of a cerebral vascular malformation was diagnosed after the completion of an infiltration, made previously by the same specialist. The incidence of finding a malformation during an infiltration is very low, because of the difficulty to puncture directly to the abnormal vessel. Injections should be performed after a radiological study, in order to avoid complications such as rupture of abnormal or adjacent vessel or cause serious neurological injury. Cervical infiltration is a treatment that is performed with local anesthesia and itinerant way. It usually take 5-10 minutes to complete and then the patient remains on observation a prudential time (15-20 minutes) before going home by his own foot. There are complications not only in the absence of vascular malformations.

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