Por desgracia, según los estudios, un alto porcentaje de las personas que sufren malos tratos en la infancia, repiten esos malos tratos cuando se hacen adultos. La explicación está en que hay una imitación de modelos de conducta cuando no se tienen al alcance otras posibles soluciones a los conflictos. "Me siento atacado" (ya sea un ataque real o figurado), y reacciono ante ese ataque de la única manera que encuentro accesible en mi repertorio de conductas.

En tu familia hay un problema importante: cuando toda una familia padece malos tratos quedan secuelas que, si no se manejan adecuadamente, provocan que se pueda volver a repetir el ciclo de violencia en el futuro.

Si nadie me enseña a controlar mi ira y mi frustración reacciono como he aprendido a hacerlo: a puñetazos.

Eso no puede ser motivo o excusa para no reaccionar. Si los demás no hacen nada por cambiar, debes alejarte de ellos o aprender a ponerles límites. Si no puedes sola acude a un profesional que te enseñe a manejar conflictos y, sobre todo, a ser más asertiva.

Nadie tiene que padecer una vida en el infierno en nombre de la familia.

Si necesitas volver a la consulta de tu psicólogo ponte de nuevo en contacto con él. No puedes permitir que el sentimiento de culpabilidad ante la idea de alejarte de tu familia te impida llevar la vida que cualquiera se merece. Tienes derecho a tomar las decisiones que consideres más adecuadas para tí. Llevar una vida sometida por los sentimientos de culpa te condena a no ser feliz.

Si deseas ponerte en contacto conmigo puedes hacerlo enviándome un mensaje privado.

Y recuerda "mirar por tu bien", al menos, tanto como miras por el bien de los demás.

Un abrazo,

Rosana Pereira Davila
Tess-on, Psicología y Formación
Haztúa, Psicología Positiva
_________________________

Rosana Pereira Davila
www.haztua.com