Es un medicamento muy agresivo con el hígado. Para aminorar sus efectos hepatotóxicos toma una infusión de boldo y cardo mariano a partes iguales, dos o tres veces al día. Cuando tuve que tratarme de la tuberculosis me quitaba la ictericia incipiente.

Cuando mi padre tuvo problemas de vesícula (que también afectan a la función hepática) tomó la misma infusión y mejoró mucho los parámetros de la función hepática sólo con eso, ya que no tomaba ninguna mediacación.