yHola amiga, también vivo en Ecuador y al igual que tú me hicieron la histerectomía. Tampoco pude tener hijos y es lo que más deseaba. Tenía un novio en ese entonces que al enterarse de mi situación me abandonó y ahora está con otra. Al principio fue muy duro para mí aceptar mi nueva realidad y renegué de los designios de Dios para mí. Ya han pasado varios meses y aún la tristeza me embarga. Pero sé que Dios tiene para nosotras las que hemos pasado por esto un propósito y en algún momento llegará la recompensa y la felicidad a nuestras vidas. Gracias por tu testimonio me reconforta saber que no estamos solas.