La cirugía es el último paso si nada funciona y, desde luego, no es la única salida.
Antes hay mucho que poder hacer, desde tracción del pene, suplementos y otros tratamientos que se han hablado aquí, inyecciones, ondas de choque...
La cirugía tiene riesgos y, además, si la enfermedad no se ha estabilizado puede llevarte a necesitar una segunda cirugía.
No conozco el caso de tu marido, pero sí que lo último es lo último, la cirugía.
Mucha suerte!!