Tengo cuarenta y cuatro años y me diagnosticaron la enfermedad hace dos años, aunque el primer bultito me salió hace siete u ocho años. Mi situación no es terrible, porque no tengo dolor ni curvatura ni disfunción eréctil, pero, dado que hace dos años me salieron nuevas placas sin que yo recuerde haber practicado el sexo a lo bruto, me he puesto las pilas para intentar en lo posible que la cosa avance. Desde luego, no me voy a quedar con los brazos cruzados. Para un varón, el pito es muy importante, porque sin él no podemos entregarnos a Eros, a quien estamos llamados.
Os recomiendo encarecidamente esta página: http://www.peyroniesforum.net/index.php. Está en inglés, pero en ella la gente no se dedica solo a lamentarse, sino a explicar qué están haciendo para curarse y cómo les va con los diferentes tratamientos. He encontrado más franqueza y sinceridad e información sustancial en páginas extranjeras que en las españolas, que, por cierto, son muy pocas.
Después de mirar en foros españoles y estadounidenses, he elaborado mi propio decálogo, unas diez normas vitales que quizá también puedan ayudaros a vosotros. Son diez, porque me he dado cuenta de que esta enfermedad no se puede tratar desde un solo ángulo, sino desde varios. Si uno ataca la enfermedad desde diez sitios distintos, tiene más posibilidades de éxito que si se aferra a un solo tratamiento. Estos diez consejos sirven para aquel que quiera evitar por encima de todo la cirugía.
Estos diez mandamientos se basan en este principio: [b]Todo lo saludable es bueno contra esta enfermedad, porque la vida saludable favorece la circulación y todo lo que favorezca la circulación favorece la erección y todo lo que favorezca la erección favorece un pito sin curvatura y lo bastante fuerte para no dañarse de nuevo durante el coito. Las erecciones frecuentes y fuertes, además, oxigenan el pito y dificultan la fibrosis[/b].
Ahí van:
1. [b]Tratamientos orales[/b]: mi urólogo me recomendó un complejo vitamínico para varones (Androvit, una pastilla al día quince días al mes tres meses seguidos con uno de descanso) y vitamina E (Evitex: dos al día). Y yo, por mi cuenta, como hago deporte, tomo suplementos de deportistas que además son buenos contra el Peyronie: L-Carnitina (dos al día), L-Arginina (4 al día), a veces Ginseng rojo, Gingko Biloba (que es vasodilatador), Propóleo (1mg al día), cloruro de magnesio (2 pastillas al día). Si a la L-Arginina le añadís dos pastillas de Pycnogenol (un extracto de pino), las erecciones nocturnas y diurnas son maravillosas. El Pycnogenol es un antioxidante muy fuerte. A mi edad, conviene desintoxicarse de radicales libres con los antioxidantes, que elevan el tono vital y, por tanto, el pito. Algunos foreros añaden maca, para aumentar la libido, y hierba de la cabra arrecha (Horny Goat Weed), que hace las erecciones más duraderas y consistentes (esta última no la he probado). A veces, por eso del deporte, añado Espirulina y vitamina C.
¡OJO! Todo esto ha de hacerse con descansos. No puede uno estar tomando todo eso a la vez todo el año. Mi recomendación es hacerse un calendario anual.
2. [b]Nutrición[/b]: hay que evitar las grasas, la leche, el azúcar, las harinas refinadas, los alimentos precocinados, el exceso de alcohol, comer a deshora, darse atracones, etc. Y hay que comer verdura, fruta, zumos, frutos secos, carne magra o blanca, pescado. En especial, recomiendo las nueces, el aguacate, los espárragos, la avena, el jenjibre, infusiones, mucha agua. Y, en especial, hay que comprarse una licuadora barata para hacerse zumo de apio, zanahoria y manzana, que a mí al menos me pone cachondo (aunque no sé si será psicológico).
3. [b]Deporte[/b]: hay que combinar los ejercicios cardiovasculares y los de musculación. Los primeros favorecen una buena circulación y los segundos aumentan el volumen de sangre. Ambas cosas favorecen las erecciones. Hay que tener en cuenta que, para la actividad sexual, el cuerpo ha de contar con una energía suplementaria. Si no cuenta con ella, solo tenemos fuerza para sobrevivir, pero no para follar con alegría. Yo, que nunca he hecho deporte en mi vida, llevo un año en el gimnasio y me siento la mar de contento y de fuerte. Lo recomiendo. Ármate de músculos, sin pasarte, y nada o corre. Con tres o cuatro horas semanales basta.
4. [b]Hábitos saludables[/b]: sin obsesionarse, hay que dormir bien, disminuir en lo posible el estrés, beber poco alcohol, una dieta sana, nada de fumar, porque fumar jode la circulación sanguínea. Yo, por desgracia, soy fumador. He intentado mil veces controlar el número de pitillos, pero, como no lo consigo, ya me he puesto fecha para intentar dejarlo para siempre.
5. [b]Masajes[/b]: algunas páginas recomiendan masajes suaves diarios en la zona de las placas. Otras recomiendan estiramientos y ordeñes de esos que se hacen para alargarse el pito, porque eso puede romper las placas y reducir la curvatura (http://www.ehow.com/way_5519431_exercises-improve-peyronies.html). Yo, como no tengo curvatura, me limito a masajearme el pito, lo cual da por cierto mucho gusto, y a untarme de gel de áloe vera enriquecido con vitamina E y varias veces al mes con una crema que me recomendó el urólogo para mantener el pito oxigenado: Thiomucase, algo que usan las mujeres contra la celulitis. Yo me abstendría del ordeñe, porque es fácil hacerse daño, a no ser que el urólogo lo aconseje.
6. [b]Aparatos de vacío[/b]: algunos, para corregir la curvatura, utilizan bombas de vacío, con precaución. Da por lo visto buenos resultados. Yo lo haría si tuviera curvatura y mi urólogo me lo aconseja. En Estados Unidos el doctor Levine las recomienda.
6. [b]Amor[/b]: el amor lo cura casi todo y, si no lo cura, hace más llevadera la vida. Sea tu obsesión el amor, no tu pito. Quien ama es más feliz. Muchas veces creemos que la solución está en la química y en los médicos, cuando, en realidad, es en nuestro corazón donde mana la fuente que nos sacia.
7. [b]Eros[/b]: tener una vida sexual alegre, activa, con cuchicuchi y carantoñas, arrumacos, fantaasía. Que el Peyronie no te prive de ese gran invento de Dios que es Eros.
8. Erecciones frecuentes: hay que morirse con las botas puestas, usando el pito hasta el final. Para eso nos lo pusieron ahí. Todos los días fantasea un poco y que él se levante.
9. [b]Recibir la enfermedad como una bendición[/b]: sé que esto es difícil, pero, en vez de preguntarse por qué a mí me ha tocado esto, es mejor pensar que, gracias a esta enfermedad, está uno descubriendo la vida sana, el amor, una sexualidad más activa aunque en algunos casos no pueda ser exactamente como antes, una nueva perspectiva que nos permita cambiar de nuestra vida lo que estaba mal para convertirnos en una buena persona, en un hombre bueno. A mí me ayuda mucho a esto el ser cristiano, el creer que todo es para bien, aunque yo no lo entienda, el abandonarme en el Autor de las Estrellas.
10. [b]Tener paz, pero sin hacer las paces con la enfermedad[/b]: en la medida de lo posible, no obsesionarse con la enfermedad. Seguir estos consejos como una rutina diaria, sin pensar constantemente en el pito y, a la vez, mantenerse informado de todos los avances médicos que nos puedan ayudar.
Ten fe, compañero de armas, en Dios o en aquello que te sustente
Responder
Citar
Tema anterior
Indice