Cae la máscara

Posted by: Anonimo

Cae la máscara - 05/12/17 08:39 AM

Por favor, lean la opinión del "Cliente de Amazon" sobre este libro:

https://www.amazon.es/El-Sue%C3%B1o-Nicol%C3%A1s-Padres-Hijos/dp/8415750412/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1512462992&sr=8-1&keywords=ere%C3%B1o+sue%C3%B1o

¡Gracias!
Posted by: albertolopez

Re: Cae la máscara - 29/07/20 10:35 AM

Gracias por compartir!
Posted by: Tuabdominoplasti

Re: Cae la máscara - 29/07/20 11:18 AM

interesante reflexión
Posted by: Anonimo

Re: Cae la máscara - 11/08/23 10:42 AM

La opinión del "Cliente de Amazon" sobre el libro
https://www.amazon.es/El-Sue%C3%B1o-Nicol%C3%A1s-Padres-Hijos/dp/8415750412/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1512462992&sr=8-1&keywords=ere%C3%B1o+sue%C3%B1o
es literalmente ésta:

Ignacio Ereño Iribarren fue compañero mío de estudios en el Colegio Nuestra Señora del Recuerdo, de los curas jesuitas, un auténtico vivero de cachorros de las élites del PP. Por el simple hecho de que yo era un chico "diferente", este señor (por llamarlo de alguna manera), junto con otros de su misma calaña que se las daban de supermachos y que son de ésos que para sentirse importantes necesitan humillar a los débiles (su amigote y colaborador Alejandro Zunzunegui Ruano era todo un adicto a esta repelente costumbre), se dedicó a practicar conmigo, con verdadera saña, esa actividad que afortunadamente despierta hoy una gran alarma social: el "bullying" o acoso escolar. Repetidamente me hizo objeto, en público, de humillaciones verbales y agresiones físicas. Esto estuvo ocurriendo durante cuatro cursos escolares, entre mis 14 y mis 18 años de edad. Como resultado, he tenido a lo largo de mi vida numerosos problemas psíquicos, he realizado varios intentos de suicidio y padezco dolorosísimos dolores psicosomáticos crónicos. Mi familia ha tenido que gastarse, sin mucho éxito, un dineral en tratamientos para intentar curarme; y no somos gente acaudalada en absoluto. Debido a las angustias, mi padre entró en una espiral de alcoholismo que lo dejó demente senil e impedido físicamente, y mi madre murió de cáncer en ambos pulmones. Este señor (por llamarlo de alguna manera, repito) disfruta de un altísimo cargo en la entidad médica SANITAS (en latín, salud), y le han permitido publicar un libro ("El sueño de Nicolás", burdo, ñoño y sensiblero) sobre la necesidad del amor y la ilusión en la infancia. En fin, no es extraño que, así, España vaya como va.