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Shock hipovolémico. Intervenciones de Enfermería

Shock hipovolémico. Intervenciones de Enfermería

RESUMEN:

Un shock hipovolémico es una afección de emergencia en la cual la pérdida grave de sangre o líquido hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo. Este tipo de shock puede hacer que muchos órganos dejen de funcionar. El objetivo de nuestro trabajo es proporcionar la información adecuada al personal de Enfermería para así poder proporcionar al paciente los cuidados necesarios de una forma rápida y eficaz.

AUTORES:

  1. Ana Hermosín Alcalde DUE. Centro de diálisis Playas de Cartaya
  2. Elena Pereira Jiménez. DUE. Interclinik
  3. Irene Calviño García Grado en Enfermería. Clínica los Naranjos Huelva

 

PALABRAS CLAVES: Shock hipovolémico, hipovolemia, intervenciones de Enfermería-

INTRODUCCIÓN:

El término hipovolemia significa disminución del volumen, en este caso, sanguíneo. La hemorragia es la causa más común por la que un individuo puede caer en hipovolemia y luego en choque, ya que disminuye la presión arterial media de llenado del corazón por una disminución del retorno venoso. Debido a esto, el gasto cardíaco, es decir, la cantidad de sangre que sale del corazón por cada minuto, cae por debajo de los niveles normales. Es de notarse que la hemorragia puede producir todos los grados del choque desde la disminución mínima del gasto cardíaco hasta la supresión casi completa del mismo.

Se sabe que a una persona se le puede extraer hasta un 10% del volumen sanguíneo sin efectos importantes sobre la presión sanguínea ni el gasto cardíaco. Sin embargo, la pérdida mayor de un 20% del volumen normal de sangre causa un choque hipovolémico.​ Cuanto mayor y más rápida sea la pérdida de sangre, más severos serán los síntomas.

Un shock hipovolémico es una afección de emergencia en la cual la pérdida grave de sangre o líquido hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo. Este tipo de shock puede hacer que muchos órganos dejen de funcionar.

CAUSAS:

La pérdida de aproximadamente una quinta parte o más del volumen normal de sangre en el cuerpo causa un shock hipovolémico.

La pérdida de sangre puede deberse a:

  • Sangrado de las heridas
  • Sangrado de otras lesiones
  • Sangrado interno, como en el caso de una hemorragia del tracto gastrointestinal

La cantidad de sangre circulante en el cuerpo puede disminuir cuando se pierde demasiada cantidad de otros líquidos corporales, lo cual puede deberse a:

  • Quemaduras
  • Diarrea
  • Transpiración excesiva
  • Vómitos

SÍNTOMAS:

Es de vital importancia establecer el diagnóstico de shock en su fase inicial para evitar el desarrollo del daño tisular

. Los signos y síntomas precoces son:

  • Pulso débil y rápido.
  • Palidez y frialdad de piel y mucosas como consecuencia de la vasoconstricción del lecho vascular. Se realiza el test de relleno capilar en pulpejo de los dedos o lecho ungueal midiendo el tiempo en segundos que tarda el lecho capilar en rellenarse tras ser comprimido, considerándose normal cuando éste se produce en menos de tres segundos.
  • Tensión arterial: no es de utilidad para un diagnóstico precoz, ya que para poder objetivar una caída de tensión arterial es necesario que haya existido una pérdida de sangre superior al 20% del volumen circulante.
  • Taquipnea.
  • Hipoperfusión de órganos.

Los síntomas pueden incluir:

  • Ansiedad o agitación
  • Piel fría y pegajosa
  • Confusión
  • Disminución o ausencia de gasto urinario
  • Debilidad general
  • Sudoración, piel húmeda
  • Pérdida del conocimiento

Cuanto mayor y más rápida sea la pérdida de sangre, más graves serán los síntomas del choque.

CUIDADOS DE ENFERMERÍA:

  • Asegurar la permeabilidad de la vía aérea:
  • Garantizar que el enfermo ventile correctamente y que reciba oxígeno a concentraciones superiores al 35%, por mascarilla o a través del tubo endotraqueal.
  • Si no existe pulso, deberán iniciarse las maniobras de soporte vital básico y avanzado Io antes posible.

Una vez asegurada la vía aérea y la ventilación eficaz, el objetivo es restaurar la circulación, controlando las hemorragias y reponiendo los déficits de volumen plasmático.

  • Control de la hemorragia:

Externa

  • Presión directa sobre el punto de sangrado.
  • El uso del TNAS (Traje Neumático Antishock) es discutido; se aplica en presencia de fracturas de extremidades inferiores y pelvis, siendo útil como medio de inmovilización. Son contraindicaciones para su empleo el edema pulmonar, sospecha de rotura diafragmática y la insuficiencia ventricular izquierda.
  • Medidas de última elección son la aplicación de un torniquete o pinzamiento para ligadura vascular, reservándose estas últimas para caso de extremidades con amputaciones traumáticas, que de otro modo sangrarían incontroladamente.
  • Intervención quirúrgica.

Interna

  • TNAS (Traje Neumático Antishock).
  • Intervención quirúrgica.
  • Lavado salino en hemorragias del tracto gastrointestinal superior.
  • Reposición del volumen intravascular con la pérdida específica de líquido:

Seleccionar el tipo de fluidos y sus combinaciones más adecuadas:

– Soluciones salinas equilibradas (cristaloides): Ringer lactato y suero salino. Es de elección el suero fisiológico ya que el Ringer lactato es hiperosmolar con respecto al plasma.

– Soluciones salinas hipertónicas.

– Coloides: plasma, albúmina…

  • Colocación de una sonda vesical, útil para valorar la perfusión renal.
  • Introducción de una sonda nasogástrica, para prevenir las aspiraciones o valorar la presencia de sangre.
  • Diuresis horaria: es un buen indicador de la reposición adecuada de volumen al ser un reflejo del flujo sanguíneo renal.

CONCLUSIONES:

La precocidad en el tratamiento es fundamental para mejorar el pronóstico y la resolución del shock hipovolémico. El personal de Enfermería debe ser conocedor de las causas y síntomas de este tipo de emergencias ya que consideramos fundamental la rapidez y la eficacia con la que se actúe para la mejor resolución. Consideramos relevante el conocimiento de los cuidados para poder proporcionarlos al paciente con la mayor calidad.

BIBLIOGRAFÍA:

  1. Bequer E, Águila PC. Shock hipovolémico. En: Caballero A, Bequer E, Santos LA, Domínguez M, López M, et al. Terapia Intensiva. 2da ed. Santa Clara: Ciencias Médicas; 2000. p. 56755702.
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