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Percepción y Satisfacción de Estudiantes de Licenciatura en las Prácticas de Enfermería Comunitaria

Percepción y Satisfacción de Estudiantes de Licenciatura en las Prácticas de Enfermería Comunitaria

Objetivo. Conocer el grado de satisfacción de los estudiantes de enfermería en las prácticas profesionales comunitarias, para identificar satisfactores, dificultades y potencialidades en cuanto a su planeación, desarrollo y logro de objetivos.

DCF. Guillermina García Madrid, MCE. Mónica García Castilla, ME. Jorge Antonio Ramos Vázquez. Benemérita Universidad Autónoma de Puebla/Facultad de Enfermería.

Introducción. En el ámbito de la enfermería comunitaria es bien conocido que los estudiantes tienen un mejor aprendizaje cuando la práctica se realiza en escenarios reales en donde al integrar la docencia-servicio-investigación en la identificación, limitación y/ o solución de problemas de salud de la población, adquieren competencias cognitivas, procedimentales y actitudinales sobre el cuidado preventivo.

Metodología. Estudio descriptivo correlacional, transversal realizado en 479 estudiantes de diversos cuatrimestres a quienes se les aplicó un Cuestionario de Evaluación y Satisfacción en la Práctica.

Resultados. El 8.8% (42) fueron hombres y el 91.2% (437) mujeres, la edad promedio fue de 21 años. El 41.1% (216) manifestó que la planeación de la práctica fue muy satisfactoria en cuanto a tiempo, horario y lugar, el 36.5% (175) satisfactoria y el 18.3% (88) poco satisfactoria. El 44.9% (215) expreso que hubo correlación entre lo aprendido en el aula y las intervenciones realizadas en la práctica, el 50.9% (244) que en la mayoría pero no en todas y el 4.1% (20) que no había relación alguna.

El 61.0% (292) exteriorizó que la práctica genera la construcción del conocimiento de manera significativa y competencias para el desarrollo profesional, el 37.4% (179) que lo hace de manera regular y el 1.6% (8) que no.

Conclusión. La satisfacción de los estudiantes en la práctica de enfermería comunitaria depende de las expectativas generadas por el docente en el aula y por el contexto en el que éstas se realicen. Palabras clave: Satisfacción, estudiantes, enfermería, práctica comunitaria.

Introducción

Actualmente un indicador que mide la calidad de la educación y que refleja la eficiencia y eficacia de los modelos académicos en las instituciones educativas es la satisfacción de los estudiantes respecto a la enseñanza – aprendizaje, concepto subjetivo resultado de un proceso que se inicia en el sujeto, y termina en él mismo, pues se refiere a algo o alguien en relación a lo que quiere, espera, o desea y cuyo resultado es la obtención de un conocimiento, competencia, habilidad o destreza 1,2,3.

En el ámbito de la disciplina de enfermería, es bien conocido que los estudiantes construyen mejores competencias cognitivas instrumentales, interpersonales y sistémicas, cuando el aprendizaje integra la docencia – servicio- investigación, es decir cuando los conocimientos adquiridos en las aulas se replican en la práctica profesional 4,5,6. Sin embargo, este proceso suele sumir muchas veces a los estudiantes en una vivencia de estrés, angustia y confusión, debido a la inseguridad en el conocimiento, falta de coherencia de la teoría con la práctica, carencia de habilidades y destrezas para realizar los procedimientos, poco tiempo de práctica profesional, tipo de práctica a realizar, errónea programación o rotación en los servicios o comunidades y expectativas de los estudiantes; pero sobre todo de la orientación, asesoría y enseñanza incidental de los docentes 7,8.

Ante esta realidad, desde el punto de vista pedagógico se trata de que siempre exista coherencia entre los conocimientos teóricos adquiridos en el aula y la práctica del ejercicio profesional con el fin de no generar situaciones de conflicto en los estudiantes y evitar que se de en ellos lo que algunos autores llaman el «shock de la realidad», provocado por la disonancia entre cómo se cree que deberían ser las cosas y cómo son en realidad 6, pues aunado a ello, el desarrollo de la práctica profesional de enfermería comunitaria, comúnmente genera en los estudiantes situaciones de conflicto, dado que estos deben de salir a campo para interaccionar con los individuos, familias y comunidades de forma directa en diferentes contextos culturales, planear, organizar y ejecutar planes, programas, proyectos e intervenciones de cuidado preventivo y  valorar y entender una gran variedad de situaciones o problemáticas de salud a las que deben dar respuesta de forma inmediata, utilizando medios y estrategias a su alcance y contextualizando el cuidado.

Estudiosos de esta temática 7, trataron de conocer cuáles son las expectativas de los alumnos antes de realizar las prácticas de enfermería comunitaria, obtuvieron que en la mayoría sus expectativas se centran en aprender técnicas y procedimientos y conocer el trabajo que se realiza dentro de los centros de salud, pero desconocen cuáles son las competencias del trabajo de campo en los hogares y en las comunidades. Por otro lado, Betancur y González 11, al estudiar la satisfacción de estudiantes en las Prácticas Clínicas y Comunitarias encontraron que en relación al grado de satisfacción en las prácticas comunitarias un 53.8% se manifestó como satisfecho, el 43.1% medianamente satisfecho y un 3.1% insatisfecho. En cuanto a la orientación y sensibilización que se dio en la práctica comunitaria un 62.5% manifestó un déficit en la orientación sobre la situación epidemiológica del área que se trabaja. En relación a los campos seleccionados para el desarrollo de las prácticas señalaron que la mayoría de estos permiten el cumplimiento de los objetivos de aprendizaje en ambas prácticas, sin embargo, que en la práctica comunitaria existen condiciones de accesibilidad, seguridad y disponibilidad de los grupos que se dan por la selección previa que las docentes realizan durante el proceso de planeación con el fin de disminuir al máximo los riesgos de seguridad personal para los estudiantes. En este sentido puede inferirse que aun cuando existen sectores de la población con grandes necesidades de intervención, se descartan como sitios de trabajo debido a la inseguridad o peligrosidad de las zonas.

Por otro lado resultados de estudios realizados en países europeos y Estados Unidos, plantean que las prácticas de enfermería, deben partir de una coordinación sólida entre las autoridades de las escuelas, las jefaturas de enfermería de los centros asistenciales y el personal operativo, el cual tendría una triple responsabilidad: asistencial, docente e investigativa.