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Estudio sobre Técnicas de atención plena y relajación. Una intervención enfermera

Estudio sobre Técnicas de atención plena y relajación. Una intervención enfermera

RESUMEN: La relajación de los pacientes de salud mental es clave para su proceso de recuperación y el personal de Enfermería es el indicado para la práctica de las técnicas meditativas que los pacientes precisen. Se valoran los beneficios del programa de relajación para poner de manifiesto la eficiencia de la práctica grupal y reglada de la meditación, mindfulness y otras técnicas de relajación.

Autores:

Olga López Morón. Diplomada universitaria de Enfermería.

Francisco Ramón Herrera Sánchez. Diplomado universitario de Enfermería.

Isabel González Alabarce. Diplomada universitaria de Enfermería.

PALABRAS CLAVE: meditación, relajación, mindfulness, Enfermería y salud mental.

INTRODUCCIÓN: Se encuentran numerosas definiciones del término “mindfulness” o “atención plena”, con los matices diferenciadores que cada autor aporta a la definición; podemos encontrarlo definido como: “Una forma de atención no elaborativa, que no juzga, centrada en el presente, en la que cada pensamiento, sentimiento o sensación que aparece en el campo atencional es reconocida y aceptada tal como es” (Bishop et al., 2004). Similarmente, para Cardaciotto (2005), la conciencia plena “Es la tendencia a ser consciente de las propias experiencias internas en un contexto de aceptación de esas experiencias sin juzgarlas”. Para Brown y Ryan, (2003)  es “claridad y vividez de la experiencia y del funcionamiento actual que contrasta con los estados de menor conciencia, menos despiertos, del funcionamiento habitual o automático que puede ser crónico en la mayoría de las personas”.

Sin lugar a dudas, el término “Mindfulness” ha emergido recientemente con fuerza en el ámbito anglosajón, de hecho se trata de un concepto que remite a un estado particular de conciencia promovido por las técnicas meditativas orientales desde hace milenios. Lo que hoy se conoce como meditación de la conciencia plena es originariamente una técnica que se practica desde hace 2.500 años en el contexto religioso budista. Varias corrientes de esta tradición (zen, vipassana, etc.) han influido en los autores occidentales que proponen adoptar sus prácticas.

¿Qué elementos integran la conciencia plena?, ¿en cuántos apartados se podría dividir el ente forme de la conciencia plena?; Podríamos decir, que existe gran variabilidad de opiniones al respecto, aunque lo más aceptado sería decir que la conciencia plena está formada por cinco ingredientes: atención al momento presente, apertura a la experiencia, aceptación,  dejar pasar e intención.

  • Atención al momento presente: Consiste en centrarse en el momento presente, en lugar de estar pendiente del pasado (rumiaciones) o del futuro (expectativas, temores y deseos).
  • Apertura a la experiencia: Este componente se refiere a la capacidad de observar la experiencia sin interponer el filtro de las propias creencias.
  • Aceptación: el no juzgar.
  • Dejar pasar: Consiste en no dejarse atrapar por ningún pensamiento, sentimiento, sensación o deseo, en no apegarse ni identificarse con ellos.
  • Intención: se refiere a lo que cada persona persigue cuando practica la conciencia plena.

En la actualidad, y pese a las numerosas controversias existentes, cada vez con más frecuencia se está introduciendo la práctica de la atención plena como una forma de psicoterapia, no innovadora, sino más bien redescubierta.

OBJETIVOS: El objetivo principal es cuantificar los beneficios de la práctica reglada de meditación, mindfulness y otras técnicas de relajación en conciencia plena en los usuarios de salud mental.

Entre los objetivos específicos del programa  podemos encontrar:

  • Aumentar las relaciones interpersonales de los usuarios.
  • Inculcar los conocimientos necesarios para la aplicabilidad de las técnicas de relajación en los momentos de la vida diaria que más lo precisen.
  • Ofrecer un espacio reglado y sistemático dentro del ámbito hospitalario libre de enfermedad, conflictos y psicopatología.
  • Generar un clima social de confianza entre los participantes.
  • Mejorar la percepción física y mental de los usuarios que participan en el estudio.
  • Enseñar la práctica básica del mindfulness para aportar la posibilidad de que integren los beneficios de esta técnica en sus actividades cotidianas.

METODOLOGÍA: El estudio que se desea aplicar es un estudio con diseño observacional, descriptivo y longitudinal; en donde se puedan observar diferentes variables de la exposición a las clases de meditación.

La población de estudio serán 20 usuarios de salud mental. La inclusión de los usuarios en las sesiones de meditación será voluntaria y por indicación de facultativo.

La recogida de datos se hará con unas fichas. En esas fichas que fueron individuales se recogieron la edad, el sexo,  el diagnóstico principal, las variables objetivas y las subjetivas. Como variables objetivas se medirá la frecuencia cardíaca y la tensión arterial de cada participante antes y después de las sesiones de meditación. Como variable subjetiva, y no menos importante, se evaluará la sensación de bienestar con un valor numérico en escala tipo likert desde el 0 al 10; siendo 0 la peor sensación de bienestar y 10 el bienestar máximo. Ambas variables tendrán que ser medidas antes y después de la práctica de mindfulness.

DESARROLLO: Se realizaron 10 sesiones de una hora cada sesión. Previo a cada sesión se registró en cada plantilla las variables de estudio objetivas (tensión arterial y frecuencia cardíaca) y la subjetiva (sensación de bienestar).  Igualmente se registraron las mismas mediciones tras las clases de meditación para el posterior análisis de los datos y la consiguiente extracción de conclusiones.

El grupo de meditación fue sometido a unas premisas previas a la participación en el taller de mindfulness:

  • Voluntariedad.
  • Extremada puntualidad. (si la sesión está empezada, ya no podrán asistir ese día).
  • No control de asistencia. (Si no pueden asistir a la sesión, no es necesario que avisen con anterioridad).
  • Silencio y respeto durante las sesiones.
  • Evitar utilizar el espacio meditativo para consultas relacionadas con los problemas de salud o con la enfermedad.
  • El conductor del taller tampoco podrá utilizar ese espacio para recordad datos clínicos.

CONCLUSIONES:

Se encuentran, tras la valoración de las mediciones de los parámetros subjetivos (sensación de bienestar) que; el 81% de los participantes aumentó su sensación de bienestar tras el ejercicio de la atención plena. El resto de participantes un 13% mantiene su sensación de bienestar tras la práctica y un 6% dice que le empeora el mindfulness. Se puede decir que el 94% de los participantes mejoran o mantienen sus percepciones subjetivas tras la práctica de mindfulness. Cabe destacar que en el 6% de los que no presentaron relajación con la práctica de mindfulness era todos mujeres y su diagnóstico principal fue trastorno límite de la personalidad.

En cuanto a las valoraciones objetivas; se determinó que el nivel cardíaco disminuía en el 86% de los participantes, acompañando este dato a las percepciones subjetivas.

Podemos concluir que la práctica reglada y sistemática de actividades grupales dirigidas al autocontrol emocional y la conciencia plena favorece el bienestar de los pacientes independientemente de la patología asociada, el sexo y la edad que presenten.

BIBLIOGRAFÍA:

Fuente Arias, M., Franco Justo, C., Salvador Granados, M. Efectos de un programa de meditación (mindfulness) en la medida de la alexitimia y las habilidades sociales. Psicothema. 2010 22: 369-375

Germer, C.K. El poder del mindfulness: Libérate de los pensamientos y de las emociones autodestructivas. Barcelona: Paidós; 2011.

Kabat-Zinn, J. Mindfulness-Based Interventions in Context: Past, Present, and Future. Massachusetts: University of Massachusetts Medical School; 2010.

Mañas Mañas, I. Mindfulness (atención plena): la meditación en psicología clínica. Rev. Gaceta de psicología. 2010 50: 13-29.