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Estructura de la Superficie Ocular

Estructura de la Superficie Ocular

Resumen:

La superficie ocular, la glándula lagrimal principal y las accesorias, las glándulas de Meibomio, las células caliciformes, los párpados y la inervación que los interconectan (V y VII pares craneales) constituyen una unidad anatómica funcional llamada Unidad Funcional Lagrimal (UFL).

Entendemos como superficie ocular en sentido estricto a la conformada por la córnea, el limbo esclero-corneal y la conjuntiva. Estas estructuras están recubiertas por un epitelio estratificado, escamoso, no queratinizado, y tienen como una de sus funciones proteger el medio intraocular y proporcionar una correcta visión. Están en íntima relación con la película lagrimal: si la película lagrimal es inestable, escasa o cualitativamente anormal, la superficie ocular se verá afectada y viceversa.

Blasco-Martínez, Alejandro1; Del Prado-Sanz, Eduardo2; Cameo-Gracia, Beatriz1; Soriano-Pina, Diana1; Pérez-Velilla, Javier1; Clemente-Urraca, Sara1; Mateo-Orobia, Antonio3

1: Graduado Óptico-Optometrista. Universidad de Zaragoza

2: FEA Oftalmología. HU Royo Villanova. Zaragoza

3: FEA Oftalmología. HU Miguel Servet. Zaragoza

 

Palabras clave:

Superficie ocular; cornea; limbo; conjuntiva; lágrima; película lagrimal

La superficie ocular, la glándula lagrimal principal y las accesorias, las glándulas de Meibomio, las células caliciformes, los párpados y la inervación que los interconectan (V y VII pares craneales) constituyen una unidad anatómica funcional llamada Unidad Funcional Lagrimal (UFL).1

Entendemos como superficie ocular en sentido estricto a la conformada por la córnea, el limbo esclero-corneal y la conjuntiva, de las que se hablará más adelante. Estas estructuras están recubiertas por un epitelio estratificado, escamoso, no queratinizado, y tienen como una de sus funciones proteger el medio intraocular y proporcionar una correcta visión. Están en íntima relación con la película lagrimal: si la película lagrimal es inestable, escasa o cualitativamente anormal, la superficie ocular se verá afectada y viceversa.2

1.1) Película lagrimal

Una buena agudeza visual e integridad del epitelio de la superficie ocular exige la presencia de una película lagrimal continua y de calidad sobre la superficie del globo ocular expuesta al medio. El volumen de líquido lagrimal es de alrededor de 5 a 10 μl, con velocidad de secreción normal de alrededor de 1-2 μl/min. La glándula lagrimal principal produce alrededor del 95% de esta secreción, y las células caliciformes, glándulas de Meibomio y glándulas accesorias producen el resto. La captación de oxígeno a través de la película lagrimal es esencial para el metabolismo normal de la córnea. La lágrima cumple las siguientes funciones:

Óptica: mantiene una superficie corneal ópticamente uniforme.

Mecánica: lubricación y lavado de restos celulares y sustancias extrañas de la córnea y el saco conjuntival.

Nutricional para la córnea.

Antibacteriana.3

La película lagrimal, tiene una estructura bilaminar: por una parte, la capa lipídica (en contacto con el aire y con función antievaporativa), y por otra el gel mucino-acuoso.2

1.1.1) Capa lipídica

Localizada en contacto con el aire, se forma en su mayoría a partir de las secreciones oleosas de las glándulas de Meibomio, pero también por las glándulas sebáceas accesorias de Zeis y Moll. El espesor de esta capa varía en función del ancho de la hendidura palpebral y oscila entre 0,1 y 0,2μm. Las aberturas de las glándulas de Meibomio se distribuyen a lo largo del borde palpebral, inmediatamente por detrás de los folículos de las pestañas. Tienen gran importancia los lípidos polares y los ésteres de colesterol. Esta capa externa lipídica tiene las siguientes funciones principales:

Reduce la velocidad de evaporación de la capa mucino-acuosa subyacente.

Aumenta la tensión superficial y ayuda a la estabilidad vertical de la película lagrimal, de manera que las lágrimas no se derramen por el borde palpebral inferior.

Lubrica los párpados mientras éstos se deslizan sobre la superficie del globo ocular.2, 3

1.1.2) Capa mucino-acuosa

Esta capa mucino-acuosa representa casi el espesor total de la lágrima: entre 6,5 y 10μm. El componente acuoso es secretado por la glándula lagrimal principal y por las accesorias de Krause y de Wolfring. La parte mucínica es producida en las células caliciformes de la conjuntiva (o células de Globet), las criptas de Henle, glándulas de Manz y también, aunque en menor medida, en las glándulas lagrimales.3

Las glándulas lagrimales principales y accesorias también secretan, de manera refleja y basal, sustancias antimicrobianas como lisozima, lactoferrina y lipoglicanos. La inmunoglobulina A (IgA), el anticuerpo más numeroso en la lágrima, es producida por las células plasmáticas en cooperación con las glándulas lagrimales y tejidos linfoides conjuntivales.4

Las mucinas son glucoproteínas hidrofílicas con carbohidratos pesados asociados, que son importantes para prevenir la adhesión e infección microbiana.5 Se han descrito más de 21 genes productores de mucinas que se dividen en dos tipos:

Mucinas secretoras (MUC2 y MUC5AC), producidas por las células caliciformes de la conjuntiva, que se encuentran disueltas en el gel mucino-acuoso con concentración mayor en la proximidad del epitelio de la superficie ocular.

Mucinas transmembrana (MUC1, 4 y 16), de alto peso molecular, con largas estructuras filamentosas, que constituyen el glucocálix de los epitelios corneal y conjuntival.2, 4-6

También en esa fase mucino-acuosa, se encuentran disueltas sustancias de gran importancia para la salud epitelial: vitaminas A y C, EGF, TGF-, etc. Por ejemplo, la deficiencia de vitamina A puede causar ojo seco (xeroftalmia) debido a que es esencial para el desarrollo de las células caliciformes en las membranas mucosas y la expresión de las mucinas del glucocálix.

1.2) Conjuntiva

La conjuntiva es la primera línea de defensa de los tejidos oculares, en contra de patógenos microbianos y no microbianos. Tiene un epitelio estratificado no queratinizado columnar (2-5 capas), una capa adenoide y una última capa fibrosa más profunda.

La conjuntiva se puede dividir anatómicamente en tres regiones: bulbar (recubre el globo ocular), tarsal o palpebral (reviste la parte interna de los párpados) y fórnix o fondo de saco (pliegues de transición entre conjuntiva tarsal y bulbar).

Como ya se ha comentado anteriormente, el epitelio conjuntival contiene células caliciformes (o células de Globet) secretoras de mucina, con mayor densidad en la porción nasal.2, 4, 7

Las células madre conjuntivales o “Stem Cells”, células con altas capacidades de diferenciación necesarias para la renovación del epitelio, se encuentran en su mayoría en los fórnices, pero también se ha propuesto su presencia en la conjuntiva bulbar, tarsal y la unión muco-cutánea del borde palpebral.2, 7

1.3) Limbo esclero-corneal

El limbo, con sus más de 10 capas, es la zona de transición entre la córnea y la esclera. Al igual que en la conjuntiva, están presentes las “Stem Cells” en las llamadas empalizadas de Vogt. Estas células están constantemente renovando las células descamadas del epitelio corneal.2, 7

1.4) Córnea

La córnea tiene una importante función tanto refractiva como de barrera frente a infecciones. Posee 5 capas diferenciadas, más una recientemente descubierta.

Epitelio: primera línea de defensa, en contacto con la película lagrimal, cuyo espesor total aproximado es de 50m. Se trata de un epitelio estratificado no queratinizado con abundantes desmosomas y expresando queratinas, compuesto por 5 capas celulares. Existen tres tipos de células epiteliales, de más externas a más internas: las células epiteliales superficiales, las células aladas y las células basales. No posee células caliciformes y las células basales son derivadas de las Stem Cells del limbo. Además, el epitelio garantiza la transparencia corneal poseyendo funciones anti-angiogénicas, ya que la córnea debe ser avascular. La inervación corneal es muy importante para la salud de la unidad anatómica funcional, cuyas terminaciones se van adentrando en el espesor corneal desde el epitelio.

Membrana de Bowman: no tiene estructura. Está compuesta por finas microfibras de colágeno tipo I, III, V y VI.

Estroma: representa el 90% del volumen total de la córnea, aproximadamente 450μm de espesor, con terminaciones nerviosas de tamaño variable, queratocitos de diferente morfología y fibras de colágeno tipo I y V dispuestas de manera muy ordenada para contribuir a la transparencia. Los proteoglicanos de esta capa contribuyen a la función estructural de la córnea.

Membrana de Dua: recientemente conocida, es una fuerte capa acelular pre membrana de Descemet, compuesta de 5 a 8 finos haces de colágeno altamente comprimido tipo I y VI.

Membrana de Descemet: como la de Bowman, no tiene estructuras. Está formada por filamentos muy finos de colágeno tipo IV dispuestos en un patrón muy regular.

Endotelio: es una monocapa de células que ayudan a mantener la transparencia corneal no sólo por su función de barrera, sino también por su función de bomba iónica. También provee de nutrientes procedentes del humor acuoso a las demás capas de la córnea.2, 5

La superficie ocular se va a ver lesionada por múltiples agentes etiológicos: infecciones, traumatismos, alergia, toxicidad, etc. En cuanto a los mecanismos fisiopatológicos de las enfermedades de la superficie ocular hemos de tener en cuenta: la inestabilidad de la película lagrimal, la hiperosmolaridad, la inflamación, la apoptosis, las alteraciones de la inervación y parpadeo y la disminución del aclaramiento de la lágrima.2

Bibliografía:

  1. Lemp MA, Baudouin C, Baum J, Dogru M, Foulks GN, Kinoshita S, et al. Definición y clasificación de la Enfermedad del ojo seco: Informe del Subcomité de definición y clasificación del Taller internacional sobre ojo seco. The Ocular Surface. 2007; 5(2):75-92.
  2. Benítez-Del-Castillo-Sánchez JM, Díaz-Valle D, Gris-Castellón Ó, Rodríguez-Ares MT, Rodríguez-Prats JL, García-Delpech S. Superficie Ocular y Córnea Número 1 [Internet]. 1a ed. Barcelona: Editorial Glosa SL;2008[actualizado Ene Jun 2008; citado 15 Jun 2016]. Disponible en: http://www.angelini.es/superficie-ocular-y-cornea-pdf/Superficie_ocular_y_cornea_1.pdf
  3. Garg A. Fisiopatología de la película lagrimal. En: Garg A, Sheppard JD, Donnenfeld ED, Meyer D, Mehta CK, directores. Ojo seco y otros trastornos de la superficie ocular: Diagnóstico y tratamiento en Xerodacriología. 1a ed. Argentina: Editorial médica panamericana;2008. p. 2-28.
  4. Kimura S, Kishimoto A, Mutoh M, Takahashi-Iwanaga H, Iwanaga T. GP2-expressing cells in the conjunctiva and tear ducts of mice: identification of a novel type of cells in the squamous stratified epithelium. Biomed Research International. 2015; 36(4):263-272.
  5. Bolaños-Jiménez R, Navas A, López-Lizárraga EP, March-De-Ribot F, Peña A, Graue-Hernández EO, et al. Ocular Surface as Barrier of Innate Immunity. The Open Ophthalmology Journal. 2015;9:49-55.
  6. Mauris J, Mantelli F, Woodward AM, Cao Z, Bertozzi CR, Panjwani N, et al. Modulation of Ocular Surface Glycocalyx Barrier Function by a Galectin-3 N-terminal Deletion Mutant and Membrane-Anchored Synthetic Glycopolymers. PLoS One. 2013;8(8):1-8.
  7. Ramos T, Scott D, Ahmad S. An Update on Ocular Surface Epithelial Stem Cells: Cornea and Conjunctiva. Stem Cells International. 2015;2015:1-7.