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Efectividad de la homeopatía en el inicio del trabajo de parto

Efectividad de la homeopatía en el inicio del trabajo de parto

 En España, las tendencias de consumo de terapias alternativas o complementarias están en aumento. La homeopatía es una de esas terapias cuya evaluación con criterios de medicina basada en la evidencia se ha iniciado en los últimos años.

Objetivo: Se ha realizado una revisión bibliográfica  en las principales bases de datos acerca de la evidencia disponible sobre la efectividad de la administración de productos homeopáticos al final de la gestación como método de inducción al parto.

Palabras clave: gestación, homeopatía, gestación prolongada, inducción, trabajo de parto, terapias alternativas.

  1. ANTECEDENTES, ESTADO ACTUAL DEL TEMA

TERAPIAS ALTERNATIVAS

La medicina complementaria o alternativa (CAM) abarca un sinfín de procedimientos o prácticas terapéuticas que no son usadas de manera habitual por los profesionales de la salud (medicina convencional)1. Debido a esta gran variedad de terapias y también a su heterogeneidad, el consenso respecto a su definición se hace difícil2:

El grupo Cochrane describe las medicinas complementarias y alternativas como:

Un amplio ámbito de recursos curativos que abarca los sistemas de salud, las modalidades y prácticas con sus correspondientes teorías y creencias, que no son las del sistema de salud políticamente predominante en una sociedad o cultura en particular en un determinado periodo histórico3.

Según la OMS la medicina tradicional incluye:

Diversidad de prácticas sanitarias, enfoques, conocimientos y creencias, incluyendo medicinas basadas en plantas, animales y/o minerales; terapias espirituales; técnicas manuales; y ejercicios, aplicados individualmente o en combinación para mantener el bienestar, así como tratar, diagnosticar o prevenir enfermedades. Es un término amplio utilizado para referirse tanto a los sistemas de medicina tradicional (como por ejemplo, la medicina tradicional china, el Ayurveda hindú y la medicina unani árabe), como a las diversas formas de medicina indígena. Incluye terapias con medicación, si implican el uso de medicinas a base de hierbas, partes de animales y/o minerales, y terapias sin medicación, como la acupuntura, las terapias manuales y las terapias espirituales4.

El National Center for Complementary and Alternative Medicine (NCCAM) de los EEUU de América señala que:

La medicina complementaria y alternativa es un conjunto diverso de sistemas, prácticas y productos médicos y de atención de la salud que no se considera actualmente parte de la medicina convencional. Considera como medicina complementaria la que se utiliza conjuntamente con la medicina convencional, mientras que la medicina alternativa es la que se emplea en lugar de la medicina convencional5.

En España en el año 2012 un grupo de trabajo integrado por expertos del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, del Instituto de Salud Carlos III, del Ministerio de Educación y de las Comunidades Autónomas redactaron un informe de análisis de la situación de las Terapias Alternativas en nuestro país e identificaron 139 técnicas o terapias que clasificaron, utilizando una modificación de la clasificación en cinco áreas del National Center for Complementary and Alternative Medicine (NCCAM) de los EEUU de América2:

  1. Sistemas integrales o completos (homeopatía, medicina naturista, naturopatía, medicina tradicional china, acupuntura, ayurveda).
  2. Prácticas biológicas (fitoterapia, terapia nutricional, tratamientos con suplementos nutricionales y vitaminas).
  3. Prácticas de manipulación y basadas en el cuerpo (osteopatía, quiropraxia, quiromasaje, drenaje linfático, reflexología, shiatsu, sotai, aromaterapia).
  4. Técnicas de la mente y el cuerpo (yoga, meditación, kinesiología, hipnoterapia, sofronización, musicoterapia, arteterapia y otras).
  5. Técnicas sobre la base de la energía (Qi-Gong o Chi-kung, Reiki, terapia floral, terapia biomanética o con campos magnéticos).

La utilización de la medicina complementaria o alternativa a nivel mundial tiene una variabilidad considerable1. Así pues, los porcentajes de personas que afirman haber utilizado este tipo de medicina al menos una vez, fluctúan desde un 80% en África, un 70% en Canadá, 49% en Francia, 46% en Australia, 42% en Estados Unidos, 40% en China, 31% en Bélgica, y 18% en Holanda1.

Centrándonos en la homeopatía, actualmente se utiliza en más de 80 países, principalmente en Europa6. Además se estima que hay unos 248000 médicos especializados en homeopatía y muchos más que utilizan este método terapéutico frecuentemente o de forma habitual. Se calcula que más de 300 millones de personas confían en él6.

1.2 SITUACIÓN EN ESPAÑA

En España, las tendencias de consumo de terapias alternativas o complementarias van en aumento. En concreto sobre la homeopatía, se calcula que más de 10.000 médicos la utilizan, principalmente médicos homeópatas, pero también especialistas de distintas ramas (alergólogos, ginecólogos, pediatras, dermatólogos, etc.) integran la homeopatía en sus tratamientos, tanto en sus consultas privadas como en el Sistema Nacional de Salud6.

En la Encuesta Nacional de Salud de 2003, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), no se hacía referencia al consumo de terapias alternativas en general7. Sin embargo, en la Encuesta Nacional de Salud de 2006, ya se tiene en cuenta como variable de estudio, debido al aumento tanto del consumo como de la demanda de estas terapias8.

Según la última Encuesta Nacional de Salud publicada, 676.700 personas (un 1,47%) visitaron a un homeópata en los últimos doce meses, 405.000 (un 0,88%) a un acupuntor, 459.100 (un 1 %) a un naturópata y 643.900 (un 1,4%) a otro profesional de medicina alternativa. Esto quiere decir que en los 12 meses previos a la encuesta más de dos millones de españoles habían visitado a un profesional de la medicina alternativa9.

Además se observan grandes diferencias con respecto al sexo, las mujeres adultas (entre 15 y 64 años) utilizaron la homeopatía en mayor proporción que los hombres del mismo grupo de edad, 323.900 mujeres frente a 126.400 hombres9.

En cuanto al nivel socioeconómico, los grupos que, con diferencia, más acuden a un homeópata son los 3 más altos (Directores/as y gerentes de establecimientos, profesionales tradicionalmente asociados a diplomaturas universitarias y otros profesionales de apoyo técnico, deportistas y artistas y las ocupaciones intermedias y trabajadores/as por cuenta propia)9. Lo mismo ocurre con el nivel de estudios, los que más acuden son las personas con estudios universitarios, seguidos de los que tienen estudios secundarios9.

La Encuesta Nacional de Salud de 2011-2012 también incluye un apartado sobre consumo de productos de medicina alternativa, en el que se incluyen los productos homeopáticos, que fueron consumidos por un total de 502400 personas9. El grupo más numeroso fue el de las mujeres entre 25 y 64 años, con un total de 241.200 personas9.

La situación en Euskadi es similar a la del resto de España. Según la Encuesta de Salud del País Vasco (ESCAV) del año 2013, un 2% de la población vasca ha realizado una consulta con un homeópata/acupuntor, superando de nuevo las mujeres a los hombres10.

1.3 ¿QUÉ ES LA HOMEOPATÍA?

La homeopatía o medicina homeopática es un sistema terapéutico integral, originario de Europa y que se basa en un enfoque holístico de la curación2,11,13. El término «homeopatía» deriva del griego Homoios (similar) y Pathos (sufrimiento, enfermedad). La medicina homeopática se basa en el principio de similitud y la premisa de «lo similar cura lo similar» (en latín: similia similibus curentur). Se fundamenta en estimular al sistema inmunitario y la propia capacidad de curación del organismo2,11,13.

La homeopatía tal y como la conocemos en la actualidad fue desarrollada por el médico alemán Samuel Hahnemann (1755-1843)2,11. En 1810, Hahnemann edita su obra fundamental el «Organon de la Medicina Racional» en el que describe la Ley de la Similitud (ley que tiene origen en Hipócrates) basada en el axioma de que “lo similar se cura con lo similar”, lo que significa que11,12:

– Toda sustancia activa farmacológicamente, provoca en el individuo sano y sensible un conjunto de síntomas característicos de dicha sustancia.

– Todo individuo enfermo presenta un conjunto de síntomas que caracterizan a su enfermedad.

– La curación se puede obtener mediante la administración de una pequeña cantidad de la sustancia cuyos efectos sean similares a los de la enfermedad.

El principio de la homeopatía es fortalecer el sistema inmunitario natural del paciente., y se fundamenta en que la sustancia homeopática actúa como catalizador, estimulando al organismo y sus funciones curativas para alcanzar un estado de equilibrio y aliviar los síntomas, llevando al cuerpo a su propia curación11,13,14.

Existen varias teorías que tratan de explicar los posibles mecanismos de acción de la medicina homeopática pero hasta la fecha ninguna ha sido científicamente demostrada2,15. A pesar de esto, en la mayoría de los países occidentales, entre ellos España, la autorización, registro y dispensación de estos medicamentos están regulados por las mismas normas que afectan todos los medicamentos de uso humano2.

El modo de administración de la medicina homeopática se centra en suministrar al paciente una dosis infinitesimal de una o varias sustancias naturales derivadas de vegetales, minerales o animales13. Esta sustancia, en dosis mayores, produciría en una persona sana los mismos síntomas que los de una persona enferma. Pero, aplicado en dosis homeopáticas en la persona enferma actúa estimulando o ayudando al sistema inmunológico a equilibrar el organismo13. Los síntomas de una enfermedad son el desequilibrio de la capacidad natural del organismo para protegerse, y son los que se tienen en cuanta a la hora de elegir un remedio u otro13. La diferencia con las sustancias alopáticas  es que las homeopáticas no actúan de forma directa sobre los síntomas, sino indirectamente a través del sistema de defensas11.

En la actualidad, para llegar a producir el medicamento homeopático final, la sustancia natural es sometida primero a un proceso de trituración y dilución con alcohol de 70º, obteniendo la tintura madre13. Esta tintura se somete después  a un proceso de dilución repetida, dando lugar a distintos grados de dilución o potencias13. Por ejemplo, un remedio con una potencia 5CH indica 5 pasos de dilución y una potencia 9DH indica 9 pasos de dilución. Por tanto, la potencia es inversamente proporcional a la dilución13. Una vez tenemos la sustancia con la dilución deseada se “impregna” en pequeños gránulos de sacarosa y lactosa que generalmente se administran por vía sublingual14.

Uno de los motivos de la controversia existente sobre la homeopatía, es debida a este proceso de dilución12. Algunos científicos señalan al efecto placebo como responsable único de los efectos clínicos de la homeopatía, ya que el medicamento final puede contener muy pocas o ninguna molécula del principio activo original12,13.