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Intervención de enfermería en la prueba broncoscopia

Intervención de enfermería en la prueba  broncoscopia

La broncoscopia es una prueba que sirve para visualizar las vías aéreas  y se puede realizar para diagnosticar o con fines terapéuticos.

AUTORES:

    Penélope Vargas De Los Santos. ENFERMERA. (ANSALUD ONUBA S.L).

    Leticia Rivera Moreno. ENFERMERA. (COMPLEJO HOSPITALARIO JUAN RAMON JIMENEZ).

    Margarita Mª Barragán Gutiérrez. ENFERMERA. COMPLEJO HOSPITALARIO JUAN RAMON JIMENEZ)

  1. INTRODUCCIÓN.

  Se realiza con un aparato llamado fibrobroncoscopio. Existen dos tipos de broncoscopio: rígido y flexible, este último es el más utilizado.

  1. PROCEDIMIENTO.

    El broncoscopio se introduce a través de la boca o nariz, la tráquea y pulmones. Sólo se precisa anestesia local. Normalmente la prueba es bien tolerada y una vez concluida el paciente se puede marchar a casa sino se presenta ninguna complicación.

  1. PRINCIPALES CONTRAINDICACIONES.
  • Pacientes con hipercapnia y disnea grave que no admiten la suspensión del flujo alto de oxígeno. Aunque la broncoscopia se puede realizar a través de una mascarilla especial de oxígeno o un tubo endotraqueal de manera que el paciente pueda recibir el oxígeno.
  • Estenosis traqueal grave puede dificultar el paso del broncoscopio.
  1. COMPLICACIONES.

   Entre las posibles complicaciones encontramos: Fiebre, hipoxemia, laringoespasmo, broncoespasmos, neumotórax, aspiración, etc.

  1. CUIDADOS

    ANTES DE LA PRUEBA.

  • Estar en ayunas de ocho horas ni consumir alcohol 24 horas antes.
  • Es preciso acudir acompañado ya que no se aconseja conducir después de la prueba.
  • Si padece alergia a medicamento o toma anticoagulantes debe comunicárselo al médico.
  • Debe firma el consentimiento informado, explicar el procedimiento y resolver todas las dudas para que el paciente este tranquilo.
  • Informar que tras la prueba debe seguir unas dos horas más sin comer, debido a la anestesia local que puede disminuir el reflejo de deglución.
  • Administrar medicación previa al procedimiento.

    DURANTE LA PRUEBA.

  • Colocar al paciente en decúbito supino.
  • Tener preparado el carro de parada.
  • Administrar oxigeno vía nasal con una cánula.
  • Mantener al paciente monitorizado: pulsioximetría, electro.

   DESPUÉS DE LA PRUEBA.

  • Controlar las constantes vitales.
  • Comprobar tolerancia a líquidos, 2 o 3 horas tras intervención, cuando el paciente recupere el reflejo nauseoso.
  • Observar si el paciente presenta signos de disnea o falta de aire, ya que puede ser signo de edema o espasmos laríngeos.
  • Anotar cualquier incidencia y registrar las constantes, medicación administrada, etc.
  • Avisar al médico ante cualquier complicación.
  • Para aliviar las molestias de garganta, recomendar al paciente chupar hielos, chupar pastillas, hacer gárgaras con agua tibia con sal, o tomar fármacos analgésicos prescritos.
  • Aconsejar que si presenta fiebre, dificultar respiratoria acudir al médico.