Inicio > Endocrinología y Nutrición > La alimentación en estudiantes de educación media superior pública

La alimentación en estudiantes de educación media superior pública

La alimentación en estudiantes de educación media superior pública

El presente trabajo tiene como propósito, identificar los hábitos de alimentación de los estudiantes de educación media superior pública, de la ciudad de México, para tal fin se elabora un cuestionario de 45 preguntas cerradas…

Enrique Cerón Ferrer*

Daniela Itzel Cerón González**

*Candidato a doctor, Profesor-investigador Universidad Autónoma Metropolita-Unidad Xochimilco, Departamento de Política y Cultura, Calzada del Hueso 1100, colonia Villa Quietud, Delegación Coyoacán, código postal 04960, (responsable)

**Maestra, Nutrición y Nutrición Deportiva Profesora Escuela de Dietetica y Nutrición,ISSSTE, Ciudad de México,

Resumen: El presente trabajo tiene como propósito, identificar los hábitos de alimentación de los estudiantes de educación media superior pública, de la ciudad de México, para tal fin se elabora un cuestionario de 45 preguntas cerradas, que abarcan diferentes aspectos de la alimentación de los estudiantes, el instrumento de análisis es contestado por N=500 estudiantes contando con un Alfa de Conbrach del .98, del turno matutino, de los semestres primero, tercero y quinto.

Palabras Clave: alimentación, estudiantes, educación media superior pública.

Abstract: The purpose of this work is to identify the eating habits of public upper secondary education students in Mexico City, for this purpose a questionnaire of 45 closed questions is elaborated, covering different aspects of student feeding, the analysis instrument is answered by N=500 students with a Conbrach Alpha of .98, of the morning shift, of the first, third and fifth semesters.

Keywords: food, students, public upper secondary education.

Objetivo de la investigación: identificar los hábitos de alimentación de los estudiantes, de educación media superior, de una universidad pública de la ciudad de México.

Metodología.

 Estudio transversal, exploratorio, muestra de 500 estudiantes, turno matutino, semestres primero, tercero y quinto, año escolar 2017-2018, instrumento de análisis, cuestionario de 45 preguntas cerradas, el cual abarca diversos aspectos de la alimentación de los estudiantes, con un Alfa de Conbrach  del .98.

El cuestionario se enfoca a diferentes aspectos de la alimentación: características generales, desayuna a diario, cuantas veces se alimenta al día, consume pastelería y galletas, tiempo que transcurre entre cada alimentación, se ejercita cotidianamente, entre otras preguntas. En el procesamiento de la información se utilizó el programa computacional SPSS (Paquete Estadístico para las Ciencias Sociales) versión 21; se elaboró la base de datos correspondientes para obtener las frecuencias y observar su comportamiento. Las tablas y gráficas fueron realizadas en la herramienta Excel de Microsoft Office.

Datos generales

Como lo muestra la gráfica, contestó la pregunta, en mayor número el sexo femenino 57.8%, se aplica el cuestionario a estudiantes del primero, tercero y quinto semestre, periodo escolar 2017-2018, ver gráficas 1, 2 y 3. (Al final del artículo)

Las edades representativas oscilan entre 15 y 17 años, corresponde al primer semestre (15 años) 22.1%, 29.2%, tercero (16 años) y por último quinto (17 años) 42.2%, siendo éste último grupo de edades, el más representativo. (Al final del artículo)

Los alumnos que contestaron el cuestionario, se ubican cursando sus estudios en el siguiente orden: 13.5% en el primer semestre, 38.4% el tercero y los estudiantes que están próximos a egresar a los estudios superiores 48.1%. (Al final del artículo)

Características de alimentación

La capacidad económica de la familia, se relacionada con el poder adquisitivo de productos que  satisfacen sus necesidades de alimentación o de cualquier otro tipo, en el caso del desayuno, contar en casa con los productos, en cantidad y calidad, para satisfacer a las mismas, si se cuenta con el recurso económico suficiente, se adquieren los productos, de lo contrario éstos difícilmente se pueden comprar, 43.5% de los estudiantes, desayunan en casa antes de realizar sus actividades cotidianas, el desayuno es fundamental, para la realización de las actividades diarias del ser humano, “Los problemas relacionados con la malnutrición son cada vez más frecuentes y de difícil solución. Una parte importante de la población mundial sufre alguna patología relacionada con malnutrición por exceso o por defecto. La situación es un serio obstáculo para el desarrollo de las naciones. Sus consecuencias, sufridas por los individuos y afrontadas por los sistemas sanitarios, tienen su origen en una variedad de factores socioeconómicos, políticos, productivos y sanitarios”.,[1] 15.6% de los encuestados, salen de casa sin probar alimentos, lo que incide en el desarrollo de sus actividades escolares, ver gráfica 4. (Al final del artículo)

Lo recomendable, desde el punto de vista de los profesionales de la salud y nutrición, es ingerir alimentos al menos tres veces al día, teniendo como referencia el “plato del bien comer”, que permite contar con la energía necesaria para llevar a cabo las actividades cotidianas, 44.8% realizan tres comidas al día, por consiguiente tendrán la fuerza para realizar sus actividades escolares diarias, lo cual se verá reflejado en su desempeño escolar, ver gráfica 5. (Al final del artículo)

Como ya se señaló, el desayuno es fundamental para el ser humano, ya que a partir de éste, se obtiene las calorías y la energía necesaria para desarrollar las actividades del día, en el caso de los estudiantes, el desayuno permite contar, con los nutrientes fundamentales y desplegar las actividades académicas. Si no se realiza el desayuno, antes de llegar a la escuela, el desempeño escolar se puede ver mermado, por eso es fundamental en la vida del estudiante la ingesta alimentaria, 45.5% de los alumnos lo realizan antes de ir a la escuela y cuentan con la energía requerida para el estudio, 8.5% no desayuna antes de partir para el colegio, ver gráfica 6. (Al final del artículo).

El hábito de alimentación de los alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades, no refiere las colaciones entre comidas, un porcentaje mínimo del 5.2% de estudiantes la realiza. Es importante generar una cultura de alimentación saludable, entre los estudiantes, hay que proporcionar información sobre el “plato del bien comer” y sus beneficios, ya que si cuentan con el referente de alimentación adecuada y balanceada, se estará incidiendo en la disminución de la obesidad y diabetes, “Respecto a la dieta, los objetivos básicos de las políticas para lograr un peso normal y un equilibrio en la ecuación energética individual se centrarían en limitar el consumo de grasas como forma de obtención de energía; la sustitución del consumo de grasas saturadas y trans por el de grasas insaturadas (de mejor calidad); aumentar el consumo de hortalizas, frutas y legumbres; reducir la ingesta de sal y sustituirla por el de sal yodada; incentivar el consumo de frutos secos y cereales y disminuir el consumo de azúcares simples.”,[2] ver gráficas 7 y 8. (Al final del artículo)

En el sector estudiantil analizado, es mínima la cultura de alimentación saludable, balanceada y nutritiva, 16.2% indica que realiza una colación nutritiva. Hay que generar hábitos de nutrición saludables, en los escolares, para que en un futuro el país cuente con una población sana,” Es necesario considerar que el consumo alimenticio en México se encuentra inmerso dentro de múltiples factores, por ello, el disponer de un acceso apropiado a ciertos alimentos no necesariamente es el reflejo de una buena nutrición, cada día se generan cambios en los hábitos alimenticios: alimentos que originalmente se consumían en las localidades con altos contenidos nutricionales, sobre todo en vegetales, han sido desbancados por productos que se consiguen en tienditas locales o supermercados” [3].  (Al final del artículo)

Forma parte de nuestra cultura de alimentación, la ingesta de pan dulce, pan salado y galletas, que se consumen por la mañana y/o por la noche,  el estudiante desde el nivel básico hasta el profesional, acostumbra llevar lunch a su escuela, que ingiere en el recreo o en su tiempo libre,  se  prepara en casa para consumirlo en su centro escolar, en la mayoría de las ocasiones, se incluyen productos de harina y azúcares, el estudiantado tiene el hábito de consumir “algo de sabor dulce”, 37.9% de los encuestados indican que consumen, pastelería o galletas, (sumatoria de los parámetros siempre y casi siempre), 1.7% señala que no lo consume, siendo el porcentaje mínimo de encuestados.

Existe en el país una tradición culinaria hacia la elaboración y consumo de azúcares, lo que se refleja en su dispendio: en casa, escuela, el trabajo, la demanda de los mismos es de consideración, 54.1% de los encuetados responde que los consumen (sumatoria de los parámetros siempre y casi siempre), 1.2% no consume azúcares. La ingesta en exceso de azúcares, conlleva que se desarrolle la diabetes, la enfermedad se presenta en edades muy tempranas en nuestra población estudiantil, “Los alimentos que aportan el mayor contenido energético en la dieta de los mexicanos por excelencia siguen siendo el maíz, seguido por el azúcar y siete productos más que junto con los otro dos aportan el 75.8 % del suministro energético alimentario; cabe destacar la escasa participación del frijol (alimento que en otros tiempos representaba un alimento fundamental en la dieta mexicana)”[4] ver gráficas 9 y 10. (Al final del artículo)

“Las prácticas relacionadas con la alimentación de los adolescentes han sufrido cambios en los últimos tiempos, con una tendencia hacia lo no saludable, que consiste en el incremento del consumo de gaseosas, meriendas, comidas rápidas y azúcares, y por una disminución del consumo de frutas, verduras, leche y leguminosas.”[5] Un porcentaje del 12.3% de los alumnos consideran que cuidan su alimentación, al no contar con una cultura de alimentación saludable, la ingesta de productos la realizará, sin considerar el impacto de la misma en su salud (obesidad, diabetes, hipertensión, etc.) y al paso del tiempo cuando sea adulto, su calidad de vida no será la adecuada, ver gráfica 11. (Al final del artículo)

Actividad Física

Al sumar los referentes: siempre (18.2%) y casi siempre (18.8%), se tiene como resultado que el 37% de los alumnos realizan ejercicio al día, al menos 30 minutos, lo cual incide en su salud postergando enfermedades: cardiovasculares, obesidad, diabetes, por mencionar algunas. Así como también el ejercicio permite un desarrollo muscular, que se relaciona con el sistema óseo, 34.4% de los estudiantes no hacen ejercicio (resultado de considerar casi nunca y nunca) lo que impacta en su salud, ya que se pueden convertir en potenciales candidatos a padecer; obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares por ser individuos sedentarios. Casi la mitad de los encuestados 49.3%, (suma de los parámetros siempre y casi siempre) cotidianamente llevan a cabo actividad física programada, lo cual incide en su salud y calidad de vida, siendo una persona sana y con menos posibilidad que se enferme.

29.3% no realiza actividad física (sumatoria de referentes casi nunca y nunca,) ejercicio programado, son sedentarios, con todo lo que ello implica para la salud, es necesario definir e implementar estrategias para el sector estudiantil, con el objetivo que se elimine o disminuya, en el mejor de los casos, el porcentaje de alumnos que no llevan a cabo ninguna actividad física y que a mediano o largo plazo se ve mermada su salud.

Si no realiza ejercicio y permanece sentado más de seis horas al día, las situaciones de sobre peso, obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, estarán presentes en la vida de los alumnos del plantel, siendo personas con enfermedades que necesitan apoyo médico desde una temprana edad, con todas las limitantes que esto conlleva, la institución tiene que definir estrategias y mejorar la infraestructura deportiva, enfocadas a incentivar a los estudiantes a realizar ejercicio y dejar de ser personas sedentarias, “Respecto a la actividad física, el objetivo es fomentar mayores niveles de actividad física entre los individuos a lo largo de todo el ciclo vital. Los beneficios de la actividad física difieren de acuerdo al tiempo que se le dedique a la realización de la misma, pero se sugiere que con al menos treinta minutos de dedicación diaria, es posible reducir las probabilidades de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes, cáncer de colon y de mama, al mismo tiempo que permite obtener un desarrollo muscular que sostenga adecuadamente el sistema óseo.”[6], ver gráficas 12, 13 y 14. (Al final del artículo)

Consideraciones Finales

Ante el fenómeno de la globalización y su impacto en la sociedad, la cultura y la forma de alimentación, se va modificando y se adquiriere otras costumbres, que al  paso del tiempo se manifiesta en enfermedades propias de la actualidad: diabetes, hipertensión, obesidad, por mencionar algunas.

En el estudio que se realiza con estudiantes de educación media superior, se observa que, independientemente del semestre que cursan, no cuentan con una cultura de alimentación sana, y por lo  tanto, enfermedades que en antaño se presentaban en adultos y/o ancianos, se están desarrollando en los niños y adolescentes. Aunado también a la falta de una alimentación sana, el alumnado no ingiere sus tres alimentos al día, lo que incide en el desempeño escolar de los mismos.

La alimentación tiene que ser sana y equilibrada, como se recomienda en el “plato del bien comer”, la forma de alimentación es importante, de lo contrario no se contará con las defensas que necesita el cuerpo para estar sana medicamente y al paso del tiempo puede repercutir en sobrepeso y obesidad, diabetes, hipertensión, entre otras,

El ejercicio como apoyo o complemento para tener una vida sana que contribuya a disminuir las enfermedades, señaladas anteriormente .ya que permanecer sentado mucho tiempo y ser una persona sedentaria repercute en la salud.

Hay que definir programas para que el estudiantado conozca, la manera recomendada para que se pueda alimentar, el estado y las escuelas se deben involucrarse en mayor medida, en la definición de estrategias y programas relacionados a la alimentación y el ejercicio en los estudiantes, ya que los video juegos impactan en las actividades deportivas y forma de alimentación, el costo de tener una población enferma, incide en altos costos en el sector salud, económico y social.

La-alimentacion-en-estudiantes-2019

Bibliografía 

Alvarado Lagunas Elías, Luyando Cuevas José Raúl. (2013) Alimentos saludables: la percepción de los jóvenes adolescentes en Monterrey, Nuevo León, Revista Estudios Sociales, volumen 21, número 41, ene-jun, México.

Jornada Nacional de la Alimentación Adecuada 2017, (2017) Secretaría de Educación Publica, CONALEP, México.

Mussini Micaela, Temporelli Karina L. (2013) Obesidad: un desafío para las políticas públicas, Revista Estudios Sociales, volumen 21, número 41, ene-jun, México.

Osorio-Murillo Olga, Amaya-Rey María Consuelo del Pilar. (2011) La alimentación de los adolescentes: el lugar y la compañía determinan las prácticas alimentarias, Aquichan, año 11, volumen 11, número 2, pág. 199-216, Colombia.

Servin Rodas María del Carmen, (2013) Nutrición Básica y Aplicada, Universidad Nacional Autónoma de México, México.

Soria Sánchez Graciela, Palacio Muñoz Víctor Herminio. (2014) El escenario actual de la alimentación en México, Revista Textos & Contextos (Porto Alegre), volumen 13, número 1, pág. 128 – 142, enero –junio, Brasil.

[1] Mussini Micaela, Temporelli Karina L. Obesidad: un desafío para las políticas públicas, Revista Estudios Sociales, vol.21, no.41, ene./jun, p169,  México,  2013.

[2] Ibidem, p. 169. . Mussini Micaela, Temporelli Karina L. Obesidad: un desafío para las políticas públicas, Revista Estudios Sociales, vol.21, no.41, ene./jun, p169,  México,  2013.

[3] Soria Sánchez Graciela, Palacio Muñoz Víctor Herminio, El escenario actual de la alimentación en México, Revista Textos & Contextos (Porto Alegre), v. 13, n. 1, p. 135, jan –jun, Brasil, 2014.

[4] Soria Sánchez Graciela, Palacio Muñoz Víctor Herminio, El escenario actual de la alimentación en México, Revista Textos & Contextos (Porto Alegre), v. 13, n. 1, p. 135, jan –jun, Brasil, 2014.

[5] Osorio-Murillo Olga, Amaya-Rey María Consuelo del Pilar.  La alimentación de los adolescentes: el lugar y la compañía determinan las prácticas alimentarias, Aquichan, año 11, vol. 11, No.2, p. 201, Colombia, 2011.

[6] Ibidem, p. 169. Mussini Micaela, Temporelli Karina L. Obesidad: un desafío para las políticas públicas, Revista Estudios Sociales, vol.21, no.41, ene./jun, p169,  México,  2013.