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Conocimiento y hábito sobre bebidas alcohólicas, en estudiantes universitarios

Conocimiento y hábito sobre bebidas alcohólicas, en estudiantes universitarios

En años recientes se ha incrementado el consumo de alcohol en nuestra sociedad, los estudiantes no son ajenos a esta situación, el trabajo que aquí se presenta, persigue identificar el conocimiento y la usanza de las bebidas alcohólicas a nivel educativo superior. 

Enrique Cerón Ferrer *

Elizabeth Verde Flota ** 

*Candidato a doctor, Profesor-investigador Universidad Autónoma Metropolita-Unidad Xochimilco, Departamento de Política y Cultura, Calzada del Hueso 1100, colonia Villa Quietud, Delegación Coyoacán, Código Postal 04960.

**Maestra, Profesora-investigadora. Universidad Autónoma Metropolitana -Unidad Xochimilco, Departamento de Atención a  la Salud, Calzada del Hueso 1100, colonia Villa Quietud, Delegación Coyoacán, Código Postal 04960.

Resumen

En años recientes se ha incrementado el consumo de alcohol en nuestra sociedad, los estudiantes no son ajenos a esta situación, el trabajo que aquí se presenta, persigue identificar el conocimiento y la usanza de las bebidas alcohólicas a nivel educativo superior.  El trabajo de campo se realiza en una universidad pública de la ciudad de México.

Palabras clave: estudiantes, universitarios nivel superior, bebidas alcohólicas

Summary

In recent years, the consumption of alcohol in our society has increased, students are no stranger to this situation, the work presented here seeks to identify the knowledge and use of alcoholic beverages at a higher educational level. Field work is carried out in a public university in Mexico City.

Key words: students, university students, alcoholic beverages.

Introducción

En años recientes se ha incrementado el consumo de alcohol en nuestra sociedad, los estudiantes no son ajenos a esta situación, el trabajo persigue identificar el conocimiento y la usanza de las bebidas alcohólicas a nivel educativo superior.  El trabajo de campo se realiza en una universidad pública de la ciudad de México, los estudiantes realizan sus estudios a nivel de licenciatura y han cursado más de la mitad de los mismos, el cuestionario es contestado por alumnos de las carreras de Ciencias Sociales y Humanidades,” El rápido desarrollo de nuestras sociedades conlleva la aparición de una serie de problemas que vulneran la estabilidad de las familias y las comunidades, limitando la capacidad de las personas. Tal es el caso del uso de sustancias psicoactivas. El consumo del alcohol, de solventes inhalables, de productos de tabaco y de drogas ilegales representa un complejo fenómeno originado por un amplio entramado de factores de riesgo cuyo abordaje requiere de información epidemiológica veraz y actualizada”[1]

Objetivo de la investigación

El propósito de la investigación es identificar el conocimiento y hábito que tienen los estudiantes sobre alcoholismo.

Metodología

Investigación cuantitativa, descriptiva y exploratoria. La población en estudio fue de 300 estudiantes de educación superior pública, de la Ciudad de México, los criterios de inclusión son: referentes personales, conocimiento de bebidas alcohólicas, consumo y frecuencia de las mismas, así como la opinión sobre el tema del alcoholismo. Diseño de muestreo aleatorio por conveniencia, se utilizó como instrumento de análisis un cuestionario de 30 preguntas cerradas, con un Alfa de Conbrach del .98, el procesamiento de la información fue a través del programa computacional Paquete Estadístico para las Ciencias Sociales (SPSS), versión 21, las tablas y gráficas fueron realizadas en Excel de Microsoft Office.

Referentes Personales

Los estudiantes que contestaron el instrumento de análisis se encuentran cursando segundo, tercero y cuarto año de sus estudios, el porcentaje representativo 36.3%, se ubica en el último año de su carrera, cabe señalar que en esta Universidad los estudios se cursan por trimestre, a diferencia de otras institucuines educativas que sus planes de estudios son semestrales o anuales, ver gráficas 1, 2 y 3. (Al final del artículo)

El 75.3% de los estudiantes cuenta con una edad que oscila entre 21 a 25 años, la misma corresponde a que su estancia en la Universidad tiene ya algunos años, 10.4% tiene entre 26 y 30 y 6.5% más de 30 años, hablamos de una población estudiantil eminentemente joven.

El porcentaje de respuesta representativo es del 57.1% que corresponde al sexo masculino, las carreas del área de ciencias sociales, son demandadas en mayor proporción por los hombres, corresponde a las mujeres el 42.9%.

Más de una cuarta parte 27.3% de los encuestados trabaja, el ingreso salarial familiar en la actualidad es insuficiente para la satisfacción de las necesidades de todos los integrantes de la familia, motivo por el cual el estudiante se incorpora al mercado de trabajo y realizar una doble actividad, estudiar y trabajar, por otra parte, el poder adquisitivo de nuestra moneda ha disminuido, lo que origina adquirir menos productos, con la misma cantidad de dinero, hay que trabajar más obteniendo un salario insuficiente, ver gráfica 4. (Al final del artículo)

90.9% de los estudiantes son solteros, la época que les toca vivir a los jóvenes es complicada, la globalización implica una crisis económica a nivel mundial, que afecta a todas las naciones, la situación económica implica un salario poco favorable para satisfacer todo tipo de necesidades familiares, lo que implica que los jóvenes piensen muchas veces casarse, debido a  la situación de crisis económica permanente que transita el país, ver gráfica 5. (Al final del artículo)

Los estudiantes encuestados en su gran mayoría 74%, viven en familia, “son hijos de familia”, expresión muy mexicana, que se interpreta como dependencia económica y vivir con los padres, los hijos dejan la casa familiar a mayor edad, 10.4% vive con familiares y 6.5% con su cónyuge, ver gráfica 6.  (Al final del artículo)

Conocimiento y hábito de bebidas alcohólicas

Un porcentaje de 97.4% de los estudiantes, indican conocer algún tipo de bebida alcohólica, en nuestra sociedad es común la plática, en casa y la escuela, sobre bebidas alcohólicas y su consumo, la sociedad misma incide en la población, en la ingesta de bebidas (como bebedor social), esta forma parte de nuestra cultura.

El conocimiento sobre bebidas alcohólicas es amplio por parte de los estudiantes encuestados, lo que implica que tienen acceso a información sobre las mismas, 93.6% indica que conoce alguna bebida alcohólica, no es complicado adquirir este tipo de productos, ya sea en tiendas, supermercados, tiendas de conveniencia, entre otros lugares.

Debido a la facilidad para adquirirlas, el consumo de estas sea incrementado en nuestra población y por ende en el sector estudiantil, ver gráficas 7 y 8. (Al final del artículo)

Un porcentaje de consideración 97.4% ha consumido alguna bebida alcohólica, la ingesta de cerveza es la  más representativa con un 55.8%, ésta es la más barata, de ahí que su consumo se vea incrementado, el tequila también ha disminuido su precio ya que han aparecido en el mercado diversas presentaciones y embotelladoras, en últimas fechas aparece en el mercado el Mezcal, bebida típica de nuestro país, principalmente en el estado de Oaxaca y se ha generalizado su consumo, por su bajo costo y amplia variedad de presentaciones, “ Los estudios en la población escolar han permitido ver anticipadamente diversos fenómenos que posteriormente se hacen evidentes en la población general. Sin considerar al tabaco y al alcohol, fue la primera droga de uso hasta principios de los 1980’s cuando los inhalables pasan a ocupar un lugar preponderante, preferencia que cambia nuevamente hacia principios de los 1990’s cuando la mariguana recupera su primer lugar en la preferencia de la población, mismo que ha mantenido desde entonces.”[2]

Las demás bebidas son producidas en su mayoría fuera del país y su precio es mayor, de ahí que su demanda disminuya, llama la atención que 83.1% de los encuestados consumen bebidas alcohólicas, cualquiera que sea la bebida de su preferencia, es un porcentaje de llamar la atención, lo que puede generar una situación apremiante en un corto tiempo y a futuro contar con una población enferma, ver gráficas 9 y 10. (Al final del artículo)

En la mayor parte de las ocasiones 57.1%  ingieren bebidas alcohólicas fuera del seno familiar, lo llevan a cabo con los amigos, ya que son un referente importante en la vida de los seres humanos, con los mismos se transitan buena parte de las experiencias que se viven, se está con ellos buena parte de nuestro tiempo, por éstas razones, la convivencia cotidiana lleva a experimentar nuevas acciones y una de ellas es el consumo de éste tipo de bebidas, 19.5% lo realiza con familiares en reuniones o fiestas, en un tercer porcentaje se lleva a cabo con los papás. “Dentro de estos patrones adquieren una mayor importancia los asociados a las pautas de consumo de la adolescencia y juventud, que va aumentando, tanto en número de bebidas adquiridas, como en el de su graduación alcohólica”. [3]

La convivencia en el 54.5% de las ocasiones puede ser social, familiar o con los amigos, siendo ésta la principal razón por la que los encuestados señalan consumen bebidas, 26% lo realiza por el agrado de consumirlas, esto se puede interpretar que le satisface su consumo y en un tiempo  no lejano, se pueda convertir en alcohólico, “En la medida que el alcohol proporciona a los jóvenes una serie de efectos o consecuencias positivas, y el joven los interpreta como un beneficio, dichos efectos se convierten en motivos de consumo. La juventud, como regla general, no asocia el consumo de alcohol con los problemas que de él pueden derivarse, ellos esperan del alcohol cambios positivos globales (facilitador de expresividad emocional, desinhibidor y potenciador de las relaciones sociales, etc.), y a la vez no creen que dicha sustancia tenga consecuencias negativas, influyendo considerablemente en un mayor consumo durante el fin de semana, donde las relaciones interpersonales se intensifican. Por eso anticipar los «efectos positivos» y no las verdaderas consecuencias negativas, conlleva a que se produzca un mayor consumo social”,[4] lo que puede traducirse con el paso del tiempo en una enfermedad, es aquí donde hay que definir estrategias encaminadas a que este porcentaje de estudiantes no adquieran la adicción, ver gráficas 11, 12 y 13. (Al final del artículo)

Las personas que cotidianamente conviven con los estudiantes, identifican que 67.5% consumen bebidas alcohólicas, la ingesta de alcohol se observa como algo normal y aceptado por todos los integrantes de la sociedad, ver gráfica 14. (Al final del artículo)

Aunque el estudiante cuenta con el referente que el consumo de alcohol es nocivo para la salud y puede terminar como una enfermedad, continúa ingiriendo este tipo de bebidas, los amigos en primera instancia inciden en que lo siga haciendo, en segunda la sociedad, como “bebedor social”, que está permitido y avalado socialmente, ver gráfica 15. (Al final del artículo)

Conclusiones

En la convivencia cotidiana de los encuestados, el consumo de bebidas alcohólicas es habitual, lo que se refleja en nuestra cultura social, en la mayor parte de las reuniones sociales no pueden faltar las bebidas que contiene alcohol. Los amigos son un referente sobresaliente, en la experiencia que se va adquiriendo a lo largo de la vida y en este caso, para experimentar en el consumo del alcohol. Un porcentaje de consideración 97.4% ha consumido alguna bebida alcohólica, la ingesta de cerveza es la más representativa con un 55.8%, de las bebidas.

El porcentaje de estudiantes que consumen bebidas alcohólicas, es considerable, lo que puede generar una situación apremiante a corto tiempo, y a futuro tener una población enferma, aunque el estudiante está consciente que el consumo de bebidas alcohólicas no es bueno para la salud y  puede terminar como una enfermedad.

Al paso del tiempo se puede convertir en una adicción, que implice incrementar el gasto hospitalario para este tipo de pacientes, “Orientar las actuaciones en el nivel educativo cuestionando y delimitando los efectos positivos del alcohol, que es el conjunto de creencias más desarrollado. Se debe partir de una información realista, que sitúe en su término más justo los «efectos reforzantes» del alcohol, pero que también muestre sus límites. Además existen una serie de creencias erróneas respecto al alcohol (aumento de la potencia sexual, modo de combatir el frío, o como utilidad terapéutica), transmitidas de generación en generación que necesitan ser desmontadas.” [5]

La situación económica por la que atraviesa el país, desde hace varios años, impacta el sector estudiantil, ya que el recurso económico con que cuenta, solo puede adquirir la bebida más económica, la cerveza, lo que permite siempre ingerir bebidas alcohólicas y terminar en una enfermedad.

El Estado tiene que definir estrategias, políticas de salud, encaminadas a disminuir su consumo, con la participación de la familia, escuela, instituciones privadas y gubernamentales, de esta manera puede incidir en la disminución o erradicación de su consumo. “Diseñar programas de educación, en los que se incida no sobre los efectos negativos del consumo alcohólico, sino sobre los efectos positivos del no consumo, este pequeño matiz, haría que las medidas tuvieran una mejor acogida general y una mayor eficacia”.[6]

Alcoholismo-en-universitarios-2019

Referencias Bibliográficas

Chávez, J; Villatoro, J; Robles, L; Bustos, M; Moreno, M; Oliva, N; Fregoso, D; Gómez, G; Medina-Mora, ME; paredes, A. (2013). Encuesta escolar sobre adicciones en el Estado de Jalisco 2012. Consejo Estatal contra las Adicciones de Jalisco, Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz. México.

Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes 2014 (2015). Reporte de Droga, Primera edición, Secretaría de Salud, México.

Informe sobre la Situación del Consumo de Drogas en México (2019). Secretaría de Salud Comisión Nacional contra las Adicciones.

Mendoza S A, Moreno M, Ramos L. (2018). Eventos potencialmente traumáticos y sintomatología postraumática asociada con el consumo de alcohol en hombres y mujeres estudiantes de bachillerato. Revista Internacional de Investigación en Adicciones 4(1), 12-24, México.

Montero F A, Cruz A A, Tiburcio M, García-González J. (2018). Percepción de estudiantes de bachillerato sobre contenidos relacionados con el consumo de alcohol y marihuana en las redes sociales. Ciencia UAT 13(1), 50-64, México.

Organización de los Estados Americanos OEA, Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (2015). Informe sobre uso de drogas en las Américas, Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, México.

Referencias Electrónicas

http://www.alumnosonline.com/notas/alcoholismo-jovenes.html.

[1] Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes 2014: Reporte de Droga,  Secretaría de Salud, p. iii, 2015,  México.

[2] Ibídem, p. iv.

[3] Alumnosonline, p.1, com/notas/alcoholismo-jovenes.html, consultado el 15 de octubre.

[4] Ibidem, p.1.

[5] Ibídem, p. 3.

[6] Ibídem, p. 3.