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Cuidados de Enfermería en la realización de paracentesis en pacientes cirróticos

Cuidados de Enfermería en la realización de paracentesis en pacientes cirróticos

Llamamos ascitis al acúmulo de líquido en la cavidad abdominal, en la zona que rodea a los órganos. La ascitis es un signo muy común en pacientes cirróticos y normalmente se desarrolla al fallar el hígado.

AUTORES: José Luis Rafeles Marcen1, Eugenio Alfaro Martínez1, María Dolores Salto López1,2

  1. Diplomado/a universitario en Enfermería. Enfermero en Servicio Aragonés de

Salud.

  1. Enfermera especialista en salud mental. Enfermera en Servicio Aragonés de Salud

No existe conflicto de intereses entre los autores.

Palabras clave: Enfermería, cuidados, cirrosis, digestivo, paracentesis.

Autor principal: José Luis Rafeles Marcen.

INTRODUCCION

Llamamos ascitis al acúmulo de líquido en la cavidad abdominal, en la zona que rodea a los órganos. La ascitis es un signo muy común en pacientes cirróticos y normalmente se desarrolla al fallar el hígado. Habitualmente, la aparición de la ascitis nos va a indicar una enfermedad del hígado ya en una etapa avanzada y las personas deben ser remitidas al servicio de digestivo que les corresponda para valorar un trasplante de hepático.

La cirrosis hepática cuando aparece es ya irreversible, por lo que la consideraremos como una enfermedad crónica del hígado, en la que la forma del hígado es modificada y se convierte en un tejido incapaz de realizar las funciones propias del órgano sano.

Las causas más habituales de la cirrosis hepática son la hepatitis C crónica y el consumo inadecuado de alcohol. Otras causas también habituales son otras hepatitis víricas, como la hepatitis B, enfermedades autoinmunes o enfermedad grasa no alcohólica.

En esta enfermedad, tendremos menor cantidad de células hepáticas y por eso, se deja de realizar con normalidad la síntesis de proteínas, producción de bilis, eliminación de sustancias tóxicas y la defensa contra patógenos externos.

La circulación de la sangre por el hígado también se ve afectada, produciéndose hipertensión portal, que va a ser la que produzca un aumento en el tamaño del bazo; esta esplenomegalia va a afectar a las tres series sanguíneas, ya que aumentará la destrucción de plaquetas, hematíes y glóbulos blancos.

Las varices esofágicas también aparecen como consecuencia de esta hipertensión portal, son venas dilatadas que hacen peligrar la vida del paciente por riesgo de rotura y sangrado grave.

Ante un paciente cirrótico en el que aparece ascitis, nos va a hacer sospechar en una descompensación de su enfermedad.

Además de la ascitis y aparición de varices esofágicas, esta descompensación, puede tener otros síntomas y signos como la encefalopatía hepática, infecciones recurrentes y la aparición de tumores malignos en el hígado.

La ascitis se va a manifestar con un notable aumento en el perímetro abdominal y en el peso del paciente, es muy común, la aparición de disnea de mínimo esfuerzo o incluso en reposo. También es acompañada en muchos casos, de edemas en extremidades inferiores y zonas de declive e incluso aparecen hernias umbilicales.

Otra de las complicaciones graves de los pacientes con ascitis, es la infección del líquido ascítico (peritonitis bacteriana espontánea), cuyos signos/síntomas más característicos, van a ser el dolor abdominal y la fiebre.

TERAPIA

El tratamiento de la cirrosis va a ir dirigido a minimizar las complicaciones y retrasar en la medida de lo posible, necesidad de un trasplante; como primera medida se hará dieta sin sal, fármacos diuréticos y prohibición absoluta de ingesta de alcohol.

Una manera habitual de controlar si las medidas son efectivas, es controlar el peso diariamente, ya que si aumenta nos va a indicar un acúmulo de líquido en abdomen, y tendremos que valorar la necesidad de vaciar el líquido acumulado en el peritoneo mediante punciones de forma periódica, lo que se denomina paracentesis evacuadora.

TECNICA DE PARACENTESIS

Esta técnica consiste en la punción abdominal que tiene como finalidad evacuar líquido de la cavidad peritoneal, ya sea con objetivo diagnóstico o terapéutico.

Tendremos que vigilar que el paciente no tenga una alteración grave de la coagulación, que es la única contraindicación absoluta para hacer la punción.

En la paracentesis diagnóstica la finalidad es saber si realmente hay líquido acumulado y cuáles son sus características analíticas, y poder descartar infección.

En la evacuadora, lo normal es extraer la mayor cantidad de líquido abdominal para paliar los síntomas que este acúmulo produce.

PROCEDIMIENTO

  1. PREVIO A LA TECNICA

PREPARACION DEL PACIENTE

  • Antes de la punción, explicamos al paciente la técnica que le va a realizar el personal facultativo, resolvemos sus dudas y comprobamos que  tenemos en la historia clínica consentimiento informado firmado
  • Comprobaremos alergias
  • Comprobaremos que la analítica de coagulación sea reciente y adecuada
  • Intentaremos que el paciente tenga la vejiga vacía antes del procedimiento, para evitar lesiones.
  • Mediremos peso, perímetro abdominal y constantes como TA, FC y temperatura.
  • Daremos apoyo al paciente para que esté lo más tranquilo posible, procurando que permanezca inmóvil durante la punción para evitar lesiones.
  • Mantenemos la intimidad del paciente.
  • Ayudaremos al paciente a colocarse en la posición ideal: decúbito supino ligeramente inclinado al lado izquierdo.

PREPARACION DEL MATERIAL

  • Guantes estériles
  • Guantes no estériles
  • Protector de cama
  • Paño estéril
  • Povidona yodada
  • Esparadrapo,
  • Gasas estériles,
  • Jeringas de 10 y 20 ml
  • Anestésico local sin adrenalina
  • Agujas IM e IV
  • Trócar de punción o catéteres de vía periférica de 14-16G
  • Apósito
  • En caso de paracentesis diagnóstica, frascos de hemocultivos, bioquímica y citología
  • Contenedor para materia punzante
  • En caso de paracentesis evacuadora kit estéril con contenedor para evacuar líquido

  1. DURANTE LA TECNICA

  1. Lavado de manos y colocación de guantes no estériles
  2. Insistir al paciente en su adecuada colocación y necesidad de estar inmóvil
  3. Ayudar a preparar campo estéril, colocando el material necesario
  4. Asistir al facultativo que realiza la punción
  5. Vigilancia de la velocidad de salida del líquido ascítico y cuáles son sus características
  6. Conectar el sistema de evacuación y fijar el sistema en el abdomen

  1. TRAS LA TECNICA

  1. Retirada del catéter, desechándolo en el contenedor adecuado
  2. Colocación de apósito en punto de inserción del catéter
  3. Medir volumen y características de color, turbiedad o presencia de sangre del líquido drenado
  4. Recoger material, desechando el líquido ascítico en contenedor adecuado
  5. Lavado de manos
  6. Toma de constantes
  7. Registro de enfermería
  8. Vigilar aparición de efectos secundarios: hemorragia, perforación, salida de líquido ascítico por el punto de punción o incluso shock hipovolémico

BIBLIOGRAFIA

1.AMERICAN COLLEGE OF GASTROENTEROLOGY: Ascitis: Un problema común en personas cn cirrosis. Naga P. Chalasani, MD, FACG y Raj K. Vuppalanchi, MD, Indiana University School of Medicine, Indianapolis, IN – Publicado en enero de 2006. Actualizado en julio de 2013.

2.Gil Ibáñez M.P., Barbado CANO a., Julián Jiménez A. Técnicas invasivas en urgencias. En: Julián Jiménez A. Manual de protocolos y actuación en urgencias. Complejo hospitalario de Toledo. Bayer HealthCare 2000, p:47-62 2.

3.Abadía de Barbará C y Guarner F. Diagnóstico y tratamiento de la ascitis. http://www.prous.com/digest/protocolos/view_protocolo.asp?id_protocolo=14 Técnicas de Urgencias Libro electrónico de Temas de Urgencia

4.Repiso Ortega A, Sánchez Ruano J.J. Ascitis. En: Julián Jiménez A. Manual de protocolos y actuación en urgencias. Complejo hospitalario de Toledo. 2000, p: 245- 250.

  1. García Gil D., editor. Paracentesis abdominal. En: Manual de urgencias. Cádiz. RocheFarma 2000, p:1018-1019.