Tecnología del cuidado humano en la terapia dialítica desde la perspectiva de las estudiantes de la especialización de Enfermería nefrológica.

Vargas Elsa Josefina. Puerta de García Milagro. Hospital Central Universitario.

Dr. Antonio María Pineda Barquisimeto. Venezuela

Universidad Central De Venezuela.

Resumen

El presente estudio tuvo como objetivo Interpretar la Tecnología del cuidado humano en la terapia dialítica desde la perspectiva de las estudiantes de la especialización de enfermería nefrológica de la Universidad Central de Venezuela. Investigación de paradigma postpositivista interpretativo, a las informantes que participaron se les solicitó y explicó que para el presente estudio se requería su consentimiento informado. Posteriormente se le entrevistó con un guión estructurado con seis (06) preguntas de respuesta abierta para su contestación; una vez recogidos, analizados y categorizados, se procede a presentar los resultados que se obtienen de los mismos a través de un diagrama.

El análisis realizado aportó los elementos para construir la interpretación de la Tecnología del cuidado humano en la terapia dialítica desde la perspectiva de las estudiantes de la especialización de enfermería nefrológica y con ello la realización de 6 diagramas sobre las Características personales de la enfermera, los deseos de cuidar en la enfermera, actividades humanas en la relación enfermera y paciente en hemodiálisis, cuidados que debe tener la enfermera par cuidar de si, avances tecnológicos de equipos y materiales para hemodiálisis, e Influencia de la producción de Conocimiento científico en el cuidado del paciente en hemodiálisis. Una vez interpretados los discursos de la informantes se concluye que existe un avance en los equipos y materiales para hemodiálisis, y han disminuido las complicaciones clínicas de los pacientes para mejorar la calidad de vida. Las características personales resaltan el desarrollo humano y en cuanto a la Influencia de la producción de Conocimiento científico en el cuidado del paciente en hemodiálisis reconocen la importancia de que la Enfermería en nefrología investigue, pero falta interés, y el enfoque del conocimiento científico lo relacionaban a la asistencia de talleres, jornadas, seminarios, congresos, que debemos aprovechar las enfermeras para actualizar los conocimientos en hemodiálisis y prestar mejor atención.

Palabras clave: tecnología del cuidado. Enfermería. Nefrología

Introducción

La concepción integral de la enfermería tiene como intención primordial y única, buscar, indagar, y promover el cuidado al enfermo en su dimensión integral. Las acciones prioritarias de enfermería se han encaminado al conocimiento y manejo de la alta tecnología, a los exámenes clínicos y paraclínicos, a la suministración de medicamentos, es decir, nos hemos preocupado por las rutinas del servicio, las que generalmente son normas que tienen más en cuenta el buen funcionamiento del servicio que las propias necesidades del paciente, como: el interesarnos por su angustia, sus temores, por explicarle el procedimiento que se le va a realizar, el contestar sus dudas, y ante todo por brindarle el apoyo psicológico que tanto necesita así lo refiere De la Cerda (2005)

Por otro lado, Escuredo (2003) establece que una de las características de nuestra época es el gran desarrollo tecnológico, en particular en las ciencias de la salud y de la vida. Este hecho, sumado a la hegemonía de ciertos valores de nuestra sociedad, ha propiciado la pérdida de la visión central del hombre en los procesos asistenciales, llegando en ocasiones a situaciones de deshumanización que vulneran la dignidad de las personas. En el ámbito asistencial, a menudo la tecnología y el humanismo se presentan como elementos contrapuestos o incluso excluyentes, cuando en realidad lo que sucede es que ambos son complementarios en la asistencia sanitaria en general y en particular en los cuidados de enfermería. El cuidado según Lorenzini y col (2005) de enfermería evolucionó en la búsqueda de nuevos saberes y quehaceres, en la perspectiva de reafirmar la profesión como ciencia, arte y tecnología

Aceptar la tecnología, según Pfeiffer (2001), es aceptar poner en peligro el futuro, rechazarla es rechazar la historia, el pasado. La exaltación de la responsabilidad del hombre respecto de su futuro que da origen a todo el planteo ético y político de la modernidad, que lo lleva a separarse e independizarse de la divinidad para hacerse dueño de su historia, parece hoy ser un sueño del pasado. Para Ríos (2008), la tecnología tiene tres clases de significado, a saber: la de objetos físicos tales como instrumentos, maquinaria, materia; la de una forma de conocimiento, la cual significa que él es concebido para un objeto a través de nuestro conocimiento de cómo usarlo, repararlo, proyectarlo y producirlo, y en un tercer tipo, como formando parte de un complejo conjunto de actividades humanas.

En cuanto a la Tecnología descrita como blanda, se refiere a saber escuchar a los enfermos. Se convierte en un requisito imprescindible si se desea que se produzca una verdadera comunicación. Se debe prestar atención a lo que desea trasmitir el enfermo, escuchando sus problemas y mostrando verdadero interés por sus dificultades, sus dolores y sus sufrimientos. Cada paciente tiene necesidades diferentes de información por lo que se deberá medir la cantidad, el ritmo, los límites y la forma de la información. La necesidad de conocer la verdad no es la misma en todos los individuos, ni para todos los temas en cualquier momento. El enfermo necesita integrar la información en su mundo. En todo este proceso no se deberá olvidar a la familia, que arrastra sus propios miedos y que los profesionales sanitarios deben saber encauzarlos (Clavé. 2003).

En la actualidad, debido a los avances de la tecnología médica y sus investigaciones, entre otras cosas, la esperanza de vida ha aumentado, con lo que esto conlleva el aumento también de las enfermedades crónicas. Le hemos ganado la batalla a numerosas enfermedades que antiguamente se consideraban incurables y hoy por hoy se han erradicado o son totalmente curables; tal es el caso del área de nefrología en cuanto al trasplante renal y en relación a las terapias dialíticas. Los avances han disminuidos las complicaciones clínicas, tal es el caso de la hemodiálisis, que es una opción terapéutica para el manejo de la enfermedad Renal Crónica Terminal (ERCT), que sustituye parcialmente las funciones excretoras del riñón y que tiene como finalidad restablecer las concentraciones de agua y solutos que no pueden ser mantenidas por dicho órgano. En la terapia, refiere Valderrábano, se hace uso principalmente de los siguientes elementos: Máquina de hemodiálisis. Dializador (membrana). Soluciones de diálisis (concentrados y agua). Para obtener resultados favorables, la hemodiálisis utiliza una membrana semipermeable que permite el paso de agua y solutos hasta un cierto peso molecular, impidiendo la transferencia de células y proteínas de la sangre (principios de depuración). Utilizando el proceso de la ultrafiltración, se ejerce una presión transmembrana para reducir el volumen extracelular (eliminación de agua). Todos estos procesos son supervisados electrónicamente y de forma constante por la máquina de hemodiálisis, que adicionalmente cuenta con monitores de la presión de sangre (arterial y venosa) y la presión del dializador en sesiones de tres veces a la semana y un promedio de 4 horas por tratamiento. Dentro de los últimos avances tecnológicos, en Venezuela se dispone de tecnología de punta incrementa la flexibilidad, la prescripción individualizada y la seguridad para el paciente durante la sesión de hemodiálisis.

Según Menezo, (2005), se debe profundizar en el acercamiento humano a estos pacientes, que demandan prioritariamente atención, cariño y compañía, por encima de los avances tecnológicos que, sin dudar de su importancia, quedan en un segundo plano.