Comportamiento Clinico – Epidemiologico del Pterigion Recidivante
Autor: Dr. Gerardo Rodríguez Lemus | Publicado:  9/05/2011 | Oftalmologia , Articulos | |
Comportamiento clinico – epidemiologico del pterigion recidivante .3

Domínguez González en Isla de La Palma se obtuvo una asociación estadísticamente significativa entre el número de casos de pterigion operados y el sexo femenino, explican esta diferencia con la mayoría de los estudios, porque en su medio las mujeres deciden operarse por motivos estéticos con más frecuencia que los hombres y estos esperan más a criterios clínicos.(16)

En nuestro estudio el predominio del sexo masculino se explica básicamente porque la totalidad de los pacientes con ocupación laboral de riesgo son del sexo masculino, los cuales se encuentran vinculados en forma directa a funciones que implican exposición a los rayos ultravioletas.

La mujer se encuentra vincula de forma más específica en procesos industriales que se realizan bajo techo y sin exposición a agentes químicos o físicos descritos como causantes de la aparición de la recidiva.

A pesar de las condiciones ambientales comunes para ambos sexos, teniendo en cuenta el área donde residen, los hombres indudablemente tienen una exposición adicional a agentes físicos causantes de la enfermedad, tengamos en cuenta que la actividad de la construcción es una de las labores más duras tanto por el medio de peligro en que se desarrolla como por la actividad en sí misma, que requiere un esfuerzo físico alto para lograr resultados positivos y largos periodos de trabajo en dependencia de la magnitud de la obra.

La condición de género impone al sexo masculino de forma históricamente determinada, los mayores esfuerzos físicos y el principal sustento de la economía familiar. Aunque en este sentido, internacionalmente la mujer ha ganado espacio y algunos de estos roles ya rompen concepciones antiguas,

Destaquemos, además del aspecto esfuerzo físico, que el papel de la mujer como eje de la familia en la crianza de los hijos se mantiene canonizado a través del tiempo, continúa siendo más frecuentemente encontrada la imagen del hombre buscando el sostén económico y la mujer esperando en casa junto a sus hijos, de ahí que sea casi imposible encontrar una mujer en alta mar durante días lejos de sus hijos.

Teniendo en cuenta los aspectos señalados se justifica el predominio del sexo masculino en pacientes con recidiva relacionado con la ocupación laboral de riesgo.

Ibáñez Hernández, destacan en su estudio realizado en enero 2006 en Guadalajara, Jalisco, reporto que la recidiva más temprana fue a los cuatro semanas en un taxista y un trabajador de la construcción y la más tardía a los cinco meses en una ama de casa lo cual sucede en nuestro trabajo.(17)

Chávez Pardo en Camagüey, encontró que predominaron los pacientes que realizaban labores agrícolas, seguidos de los pacientes que trabajaban en cocinas (expuestos al calor). (13)

Díaz Alfonso en Cienfuegos muestra que la relación existente entre la ocupación de los pacientes y la exposición a agentes irritantes externos puede contribuir a la aparición y desarrollo de la enfermedad. Entre los agentes físicos referidos estaban las radiaciones solares, el polvo, el viento y el calor. Agentes a los que también se encuentran expuestos el grupo 1 de nuestro estudio. (14)

Durkin SR, afirman que el mayor riesgo de recidiva esta en profesionales donde el trabajador se expone frecuentemente al sol, el polvo, y calores excesivos, entre otros factores y en profesiones como labradores, albañiles, marineros, choferes. Profesiones que están presentes en nuestro estudio y se afectan de igual forma. (18)

Otros estudios muestran la ocupación laboral como factor de riesgo para el pterigion. Por lo que coincidimos con estos, debido a que una mayor exposición a radiaciones ultravioletas y a altas temperaturas afecta a las células madres del limbo, provocando la ruptura de la barrera límbica normal y la degeneración de la membrana Bowman y de la superficie estromal lo cual favorece la aparición de neovascularización en la córnea. (7)

El mayor cambio en pterigion recidivante es la elastodisplasia y la elastodistrofia en el tejido conectivo subepitelial, muchas son las técnicas y terapias asociadas que se han utilizado para prevenir la recurrencia, pero no podemos pasar por alto que el trauma quirúrgico también constituye un factor determinante en la recurrencia, debido a la liberación del factor del factor neoformador lo que constituye un estimulo para la neovascularización y la recurrencia.

Díaz Alfonso en Cienfuegos, demuestra la eficacia de la autoplastia tanto para pterigion primario y recurrente, donde disminuyo la recidiva hasta un 11 por ciento. (14)

Eugarrios Largaespada en Nicaragua plantea que la autoplastia conjuntival fue solamente causa del 24 por ciento de recidiva y recomendó realizar con mayor frecuencia, especialmente en pacientes menores de 40 años. (19)

Ibáñez Hernández, encontró recidivas en el 11 por ciento de recidivas a la vez concluyo que la técnica de uso de la membrana amniótica ofrece prácticamente las mismas ventajas que el autoinjerto. (17)

Tamayo MD, Sánchez A, Bito C, exponen que en caso de recidiva practican la escisión del pterigion y reconstrucción anatómica utilizando autoinjerto conjuntival, con lo que han obtenido resultados alentadores entre un 11 y 24 por ciento de disminución en la recidiva. (20)

Comparando los índices de recurrencia en nuestra investigación y los llevados a cabo en otras regiones podemos concluir que la recidiva varía de 1.6 al 36 por ciento, lo que aun no está claro es el porqué de la variación en estos valores, pero lo que podemos demostrar, que uno de los factores determinante es la técnica quirúrgica a emplear en cada caso en particular, recomendando el uso de la autoplastia conjuntival con mayor frecuencia y en grupos etarios de 20 – 40 años de edad.

CONCLUSIONES

 El grupo de edad más afectado por la recidiva fue el de 30 – 39 años, del sexo masculino.
 La ocupación laboral de constructor constituye un posible factor de riesgo en la aparición de la recidiva.
 La técnica quirúrgica de autoplastia conjuntival fue la de mejores resultados.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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2. Rodríguez Fernández R. El sol y la polución pueden causar pterigion y catarata. Abril 2008, http://www.saludactual.cl.ecuador.
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6. Kanski Jack J. Oftalmología Clínica 6ª Edición .España. Editorial Elsevier, 2008; 4: 82 – 84.
7. Staack T, Kenyon KR, Serrano F. Conjuntival autograft for primary and recurrent pterygia: Surgical Technique and problem management Cornea. 2001; 10: 196 – 202.
8. Stangogiannis Druya E, Martínez M. Trasplante de membrana amniótica o autoinjerto conjuntival en pterigion nasal recidivantes. Hospital Universitario de caracas. Revista Oftalmológica de Venezuela, 2004; 60 (4).
9. Haro HE. Aspectos etiológicos y clínicos del pterigion. Revista Peruana de Oftalmología, 2003; 4: 27 – 37.
10. Mackenzie FD, Hirst LW. Risk analysis in the development of pterygia. Ophthalmology 2006; 99: 1056 – 1061.
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13. Chávez Pardo Iris; Raúl Sanz Pérez. Resultados en el tratamiento quirúrgico del pterigion primario y recidivante. Arch Médico de Camagüey. 2004; 10 (4).
14. Díaz Alfonso, Leonor R. Estudio comparativo de 2 técnicas quirúrgicas para la cirugía del pterigion primario. Hospital Universitario Dr. Gustavo Aldereguia Lima. Revista Cubana Oftalmol. 2000; 13(2):84-92.
15. Aragonés B. Estudio prospectivo de trasplante conjuntival con células límbicas o sin ellas, en el pterigion primario. Rev. Cub. de Oftalmol. [Acceso: 29 febrero 2006]. 2006; 9 (2) http://scielo.sld.cu/scielo.sci.
16. Domínguez González, JJ. Epidemiología del pterigion quirúrgico en la Isla de La Palma. Arch. Soc. Canaria Oftalmología. 2002 [Acceso:]. 2002;(13):47-54. Disponible en: http://www.dialnet.unirioja.es
17. Ibàñez Hernández MA, Ramos Espinosa Karina. Cirugía de pterigion: Membrana amniótica vs Autoinjerto de conjuntiva. Revista Mexicana de Oftalmologia; Enero – Febrero 2006; 80 (1): 9 – 11.
18. Durkin SR, Abhary S. The prevalence, severity and risk factors for pterygium in central Myanmar. The Meiktila Eye Study. Br J Ophthalmol. 2008 January; 92 (2) : 9 -25.
19. Eugarrios Largaespada FM. Recurrencia del pterigion postquirúrgico en el grupo etario de 20 a 80 años. Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua. Enero – Diciembre 2007.
20. Tamayo MD, Sánchez A, Bito C. Efectividad de la mitomicina C intraoperatoria en el pterigion recidivante. Universidad Complutense de Madrid. Pag 115 – 118. http:www.ucm.es.


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