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Etiología, diagnóstico y tratamiento del síndrome de ardor bucal. Caso clínico

Etiología, diagnóstico y tratamiento del síndrome de ardor bucal. Caso clínico

El Síndrome de Ardor Bucal es una entidad patológica caracterizada por la presencia de síntomas crónicos de ardor o dolor en la mucosa bucal clínicamente normal. Aunque la lengua es la localización más importante, también afecta a los labios, el paladar y la mucosa yugal e incluso la garganta y el suelo de la boca. El Síndrome de Ardor bucal (SBA) afecta principalmente a mujeres peri y postmenopáusicas. Su causa es desconocida, pero su relación con una compleja asociación de factores biológicos y psicológicos hace suponer una etiología multifactorial. La etiopatogenia es incierta.

Etiología, diagnóstico y tratamiento del síndrome de ardor bucal. Caso clínico

Leticia Marchena Rodríguez. Máster en Salud Pública Oral. Universidad de Sevilla

Humberto Amaru Maraví Cecilia. Máster en Medicina Bucal. Universidad de Sevilla.

Enrique Antonio Ortega. Médico de Familia de Atención Primaria del Centro de Salud del Torrejón (Huelva).

RESUMEN

Es necesario establecer el diagnóstico diferencial con respecto a lesiones que ocasionan ardor en la cavidad bucal como liquen plano, lengua geográfica, candidiasis, etc.

El término “Síndrome” se debe a que muchas veces el dolor bucal va asociado a otros síntomas como xerostomía, parestesia oral, alteración del gusto, dolor de cabeza, insomnio y dolor en la articulación temporomandibular. Es necesario para su diagnóstico realizar una completa historia clínica de todas las enfermedades y medicamentos que toma el paciente para poder tratar este Síndrome de una manera multidisciplinar.

PALABRAS CLAVE

Síndrome de boca ardiente, glosodinia, estomatodinia, diagnóstico, tratamiento.

INTRODUCCIÓN

El Síndrome de Ardor bucal es una patología compleja que se caracteriza por la manifestación de síntomas de quemazón, escozor, ardor, picor o dolor en la cavidad bucal y labios, estando la mucosa clínicamente normal. (1,2)

El Síndrome de Ardor Bucal o estamatodinia, glosodinia, glosopirosis u estomatopirosis es un síntoma que refieren muchos pacientes, sobre todo mujeres, a partir de la edad media de la vida. En ocasiones se puede atribuir a situaciones concretas, más o menos identificables (lengua geográfica, liquen plano oral, candidiasis, ulceraciones, etc.) pero otras veces no se evidencia ninguna causa concreta. (3,4)

Es un trastorno de dolor orofacial crónico, generalmente sin la compañía de lesiones mucosas u otros signos clínicos de enfermedad orgánica. (5)

El síndrome de Ardor Bucal se clasifica en 2 formas clínicas: Síndrome de Ardor Bucal Primario y Síndrome de Ardor Bucal Secundario.

El Síndrome de Ardor Bucal Primario es de etiopatogenia desconocida y se cree que tiene un origen neuropático. Presenta una condición “dolorosa” crónica, caracterizada por sensación de quemazón en cualquier parte de la mucosa, sin hallazgos clínicos ni causa aparente. Esta sensación de quemazón, en cualquier parte de la mucosa oral; a veces es difícil de describir; cuya localización más frecuente es en lengua; sobre todo punta y laterales, también paladar, mucosa labial y con menos frecuencia en rebordes alveolares, mucosas yugales y orofaringe. Se asocia también con disgeusia y existe una predisposición a padecerla paciente aquejados de ansiedad-depresión.

El Síndrome de Ardor Bucal Primario se clasifica en 3 tipos:

  1. Se despierta mejor por la mañana y empeora a lo largo del día.
  2. Presenta sintomatología desde las primeras horas del día.
  • Días alternos.

El Síndrome de Ardor Bucal Secundario está descrito como relacionado con Candidiasis, Liquen Plano Oral, etc por lo que se trata como una entidad distinta. (6)

Según Scala, el Síndrome de Ardor Bucal Primario es esencial o idiopático, en la que las causas orgánicas local y sistémicas no pueden ser identificadas, se sugiere patrones neuropatológicos central y periférico. El Síndrome de Ardor Bucal Secundario está causado por factores locales, sistémicos y psicológicos. (7)

La lengua es la región bucal más frecuentemente implicada, razón por la cual se identifica también esta condición como glosodinia o glosopirosis. Aunque su etiología no está clara, se suele acompañar de sensación subjetiva de boca seca, su causa suele ser polimedicación, de trastornos del gusto y pueden existir estados de ansiedad y depresión concomitante (4,8)

La sensación de quemazón o ardor puede existir por sí sola, simultánea o alternativamente puede haber otros trastornos de percepción bucal, como son: picor o prurito, aspereza “pastosidad” o adhesividad, disfagia (dificultad deglutoria), escozor o quemazón, irritación en las papilas linguales (sobre todo foliadas y de la punta), sabor metálico y otras disgeusia como; sensación de mal aliento, intolerancia de las prótesis móviles, intolerancia a las restauraciones de odontología conservadora… (3,9)

El paciente con boca ardiente no atribuible a causa conocida tienen asociados factores que puedan considerarse favorecedores de un trastornos de la percepción de la mucosa oral. Entre estos factores de forma local, podrían alterar la percepción de la mucosa oral, se encuentran los siguientes:

  • El hábito tabáquico, en todas sus formas.
  • Fumar marihuana y derivados
  • Ingesta habitual de bebidas alcohólicas
  • Tomar productos con elevada proporción de cafeína (café y bebida de cola) y otros excitantes.
  • Emplear colutorios y elixires con contenido alcohólico, con detergentes fuertes.
  • La ingesta habitual de alimentos muy calientes.
  • La ingesta habitual de alimentos muy condimentados y sazonados.
  • La ingesta de alimentos ácidos fuertes.
  • La existencia de reflujo gastroesofágico y vómitos frecuentes.
  • Hábitos parafuncionales (mordisqueo lingual, labial, yugal)

Los factores sistémicos más frecuentemente asociados a la boca ardiente y que podrían alterar la percepción de la mucosa son:

  • Trastornos endocrinos y metabólicos (menopausia, patología