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Metrorragias en el primer trimestre del embarazo

Metrorragias en el primer trimestre del embarazo

RESUMEN

Las metrorragias durante el primer trimestre de gestación son una causa habitual por las que las mujeres embarazadas acuden a un centro hospitalario.

Están relacionadas con distintas patologías obstétricas que conllevan un seguimiento de la gestación, así como unos cuidados durante el embarazo.

Metrorragias en el primer trimestre del embarazo

María Soraya Collado Villaverde. Diplomada Universitaria en Enfermería. Enfermera del Servicio de Quirófano del Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza).

Cristina Alonso Lorente. Diplomada Universitaria en Enfermería. Diploma de especialización en accidentes de tráfico: Emergencias, reanimación y transporte sanitario. Enfermera del Servicio de Quirófano del Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza).

PALABRAS CLAVE: Metrorragia, gestación, primer trimestre y causas.

INTRODUCCIÓN:

El embarazo se desarrolla a lo largo de 40 semanas. A su vez se divide en tres trimestres: primero (semana 0 a 13), segundo (semana 13 a 27) y tercero (semana 28 a parto).

A lo largo del primer trimestre puede haber metrorragias que, en algunas ocasiones, terminan con la pérdida del feto. Las causas que con más frecuencia producen estas pérdidas son fundamentalmente: mola hidatiforme, aborto, embarazo extrauterino y hematomas uterinos. (1)

Algunas mujeres tienen pequeños sangrados durante la implantación del embrión.

Y otras embarazadas tienen pequeños sangrados espontáneos que coinciden con la fecha en que tendría que bajarles el periodo. Por eso, algunas mujeres tardan en enterarse de que están embarazadas.

DESARROLLO:

Un 20 o 30% de las mujeres embarazadas tiene una hemorragia en el embarazo. (2)

A lo largo del primer trimestre puede darse un sangrado vaginal como consecuencia de:

– IMPLANTACIÓN DEL EMBRIÓN:

Entre la semana 4 y 6 el óvulo fecundado se implanta en el útero y puede ocasionar un pequeño sangrado de color marrón o rosáceo que dura uno o dos días. A veces puede ir acompañado de un ligero dolor. (2) Este sangrado es debido a que el trofoblasto se introduce en los vasos del útero.

– MOLA HIDATIFORME:

Es una gestación sin embrión en la que hay una degeneración de la placenta. Se trata de una neoplasia benigna (coriocarcinoma) donde las vellosidades coriónicas se transforman en unas vesículas que asemejan racimos de uva. Puede ocurrir algún caso en el que solamente se degenere una parte de la placenta e incluso haya embrión, pero no llegaría a término, sino que acabaría en aborto. (3)

Esta complicación se diagnostica en 1/1000 embarazos. En el momento de su diagnóstico se procede a realizar una extirpación de la mola en quirófano bajo anestesia general con la realización de un legrado. (3)

No se conocen bien las causas, pero se cree que está relacionado con dietas bajas en proteínas carotenos y ácido fólico.

Hay más incidencia en mujeres que han presentado un embarazo molar previo, en mujeres jóvenes, menores de 20 años y en mayores de 40 años.

– ABORTO ESPONTANEO:

Es la pérdida del feto de manera espontánea. Se produce un sangrado vaginal, suele de color rojo brillante o pardo, escaso, puede ser intermitente, indoloro o acompañado de un leve dolor hipogástrico, antes de la semana 22 de gestación. (4)

 En la mayoría de los casos no se saben las causas del aborto. En ocasiones porque se desconoce la causa, o bien porque su origen pueden ser varias a la vez.

Causas del aborto: malformaciones fetales, malformaciones uterinas, anomalías en la placenta o en la implantación de ésta, infecciones maternas (toxoplasmosis, listeria…), alteraciones hormonales, etc.

Suele suceder en un 30-40% de los embarazos.

Cuando los abortos son incompletos y no se expulsa el embrión o se hace en parte, se precisa realizar un legrado uterino en el quirófano bajo anestesia general con fines hemostáticos y evacuatorios.

– EMBARAZO ECTÓPICO:

Es un embarazo efectuado fuera de la cavidad uterina. El óvulo fecundado puede alojarse a nivel tubárico (infundibular, ampular, ístmica, e intersticial), en el ovario, en el ligamento ancho, en la cavidad abdominal o en el cuello del útero. (5)

Causas: malformaciones, infección, tumores o inflamación en las trompas, uso del DIU,…

Se puede resolver de manera espontánea absorbiéndose el huevo por sí mismo o precisar de cirugía para extirpar la trompa donde esté alojado el embrión.

– HEMATOMA UTERINO:

Es una acumulación de sangre en la cavidad uterina. Puede hacer sangrar durante las primeras semanas de gestación. Generalmente se recomienda reposo hasta que el hematoma se va reabsorbiendo y cesa el sangrado. (6)

Cuando hay una metrorragia en el primer trimestre del embarazo se realiza una prueba de embarazo, una exploración tanto abdominal como ginecológica y un análisis de la Hormona Gonadotropina Coriónica (subunidad Beta-HCG) y una ecografía. (2)

CONCLUSIÓN:

La metrorragia durante el embarazo es todo sangrado vaginal en cualquier momento del desarrollo de la gestación.

Ante una metrorragia durante la gestación, las mujeres embarazadas deberán acudir a un centro hospitalario para poder descartar cualquier patología obstétrica como la mola hidatiforme, aborto, embarazo extrauterino y hematomas uterinos.

BIBLIOGRAFÍA

(1) Forte SM, Rodríguez IE, Simbrón CJV. METRORRAGIAS DEL PRIMER TRIMESTRE. OBSTETRICIA AVANZADA: 28.

(2) Román SM. Hemorragias del primer trimestre del embarazo. Jano: Medicina y humanidades 2006(1631):48.

(3) Lage PR, Suárez AV, Rodríguez MA. Metrorragia de primer trimestre. Cuadernos de atención primaria 2012;18(4):332.

(4) Gutiérrez García S. Evolución gestacional de las metrorragias del primer trimestre. 2012.

(5) Moya Toneut C, Pino Pérez FV, Borges Fernández R, Aguiar Delgado R, Olano Trujillo Y, Espinosa Fuentes ML. Comportamiento del embarazo ectópico. Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología 2013;39(3):236-248.

(6) Sananes N, Boisrame T, Langer B. Hematoma retroplacentario. EMC-Ginecología-Obstetricia 2012;48(4):1-12.