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Control de calidad sobre infección nosocomial en una unidad de Medicina Intensiva

Control de calidad  sobre infección nosocomial en una unidad de Medicina Intensiva

La infecciones nosocomiales son muy frecuentes en las Unidades de Cuidados Intensivos, donde se diagnostican entre la cuarta y quinta parte de todas las infecciones nosocomiales del hospital. La puesta en  marcha de sistemas de vigilancia ayuda a conocer la tasa de estas infecciones así como los cambios en los patrones de sensibilidad-resistencia de los agentes patógenos endémicos en cada UCI.

Control de calidad  sobre infección nosocomial en una unidad de Medicina Intensiva

Mónica Zamora Elson, Doctora en Medicina. Especialista en Medicina Intensiva Hospital Universitario Arnau de Vilanova. Lleida.

Susana Zamora Elson, grado de Enfermería.

Palabras clave: infección nosocomial, UCI, sistemas de vigilancia

Resumen:

Se realizó un estudio observacional prospectivo en el Hospital San Jorge de Huesca donde de incluyeron 94 pacientes en el año 2010 y se observó la evolución de las tasas de infecciones nosocomiales desde el año 2008 hasta el 2011. Todos estos datos se compararon los del registro nacional ENVIN-UCI.

Las cifras de APACHE II (13,66±7,79), mortalidad (11,70%) y  estancia media (8,02±9,02) fueron similares a las nacionales. En la UCI de Huesca hay menos pacientes con sonda vesical (75% frente a 65%) y pacientes con ventilación mecánica (44% frente a 30%) que la media nacional, justificado por el mayor número de pacientes coronarios ingresados (28,72% frente a un 22,11% a nivel nacional).

La tasa general de incidencia de infecciones adquiridas intraUCI es de 15,96 infecciones por cada 100 pacientes ingresados en UCI (11,85% a nivel nacional), siendo más frecuentes las infecciones respiratorias (46,67%), seguidas de las urinarias (33,3%), bacteriemias primarias (13,33%), bacteriemia secundaria a infección de otro foco (6,67%) y bacteriemia secundaria a infección por catéter (6,8%). El germen asilado con más frecuencia fue el Enterococo faecium (26,09%).

Tras la implantación del este proyecto de control y seguimiento de la infección nosocomial se logró reducir la tasa de bacteriemia relacionada con catéter de forma significativa y las tasas de infección urinaria relacionadas con sonda uretral. También se disminuyó la tasa de neumonía asociada a ventilación mecánica, aunque siguió siendo más alta que a nivel nacional.

INTRODUCCIÓN

En las Unidades de Cuidados Intensivos se diagnostican entre la cuarta y la quinta parte de todas las infecciones nosocomiales del hospital. La mayoría de las infecciones detectadas en las UCI se relacionan con la utilización de dispositivos que alteran las barreras defensivas naturales y favorecen la transmisión cruzada de los agentes patógenos.

En ocasiones las infecciones se presentan en forma de brotes epidémicos, cuyos orígenes son las presencia de reservorios inanimados (ventiladores mecánicos, nebulizadores, sistemas de monitorización…)  y/o portadores crónicos entre los trabajadores sanitarios (1).

En las UCI también se observa la aparición de microorganismos patógenos con elevados patrones de resistencia, asociados a la presencia de numerosos factores que facilitan la multirresistencia.

La información obtenida con los sistemas de vigilancia va a facilitar al personal del hospital el conocimiento de la evolución de las tasas de estas infecciones, así como los cambios en los patrones de sensibilidad-resistencia de los agentes patógenos endémicos de cada UCI (2).

La comparación secuencial de las tasas de infección nosocomial en cada UCI permite realizar una valoración de la calidad asistencial, introducir medidas de corrección y evaluar las medidas empleadas para su control (3).

OBJETIVO

Conocer las tasas de infecciones nosocomiales, así como conocer los factores de riesgo asociados y los microorganismos prevalentes y la evolución de su resistencia en el Hospital San Jorge de Huesca desde el año 2008 hasta el año 2011.

MATERIAL Y MÉTODOS

Se diseño un cuestionario en el que se recogen los siguientes datos: edad, sexo, causa de ingreso, factores de riesgo de infección, para cada paciente se recoge día de colocación y días de mantenimiento de catéter, intubación y sonda urinaria, asimismo para cada una de las manipulaciones se recoge todos los factores que están demostrados en la literatura disminuyen la incidencia de infección (en vías centrales: utilización de vía subclavia, lavado de manos, técnica estéril, cubrir completamente paciente, cuidados de mantenimiento del catéter, en ventilación mecánica: cama a 30ª, aspiración cerrada..).

En los pacientes ingresados más de 24 horas se rellena diariamente una hoja de objetivos diarios que consta de tres apartados: uno para neumonía asociada a ventilación, otro para infección urinaria y otro para bacteriemia por catéter.

Estos datos son recogidos por enfermeras y auxiliares.

En todos los pacientes estudiados se recogen variables demográficas, patología de base, instrumentaciones  realizadas (intubación y ventilación mecánica, sondaje uretral, catéteres venosos centrales y arteriales), estancia hospitalaria preUCI y en UCI.

Los enfermos se clasifican de acuerdo a su patología de base en coronarios, médicos, quirúrgicos y traumáticos.

La gravedad de los pacientes ha sido valorada por el sistema APACHE II (Acute Physiology and Chronic Health Evaluation) (4).

La mortalidad cruda se define como aquella que se produce en UCI por cualquier motivo.

Las infecciones nosocomiales son diagnosticadas por médicos intensivistas y documentadas como tal en la historia clínica de los pacientes. Las NAVM se consideran precoces si aparecen en los primeros 7 días de ingreso en UCI y tardías si aparecen tras más de 7 días de ingreso en UCI.

Para el seguimiento de multirresistencia se han definido marcadores de resistencia para cada microorganismo. Para el cálculo de porcentaje de resistencia se ha incluido en el numerador el número de cepas con el patrón de resistencia evaluado y en el denominador el número total de cepas identificadas en las infecciones de los pacientes incluidos en el estudio.

Los factores de riesgo para cada infección se han calculado de forma global para todos los enfermos ingresados durante el periodo de vigilancia según los criterios utilizados en el Nacional Nosocomial Infections Surveillance Systen (NNIS) (5). Para ello se han contabilizado diariamente los pacientes con ventilación mecánica, sonda uretral y catéteres venosos centrales. Se han calculado para cada uno el ratio de utilización, definido como el cociente entre el número de días de utilización de cada instrumentación y los días de riesgo (días de estancia)

Para cada una de las infecciones estudiadas se han estimado la Incidencia acumulada (IA) y la densidad de incidencia (DI). LA IA se calcula dividiendo el número de infecciones por el total de pacientes que cumplían los criterios de inclusión y se expresa en porcentajes.

La DI se calcula dividiendo el número de infecciones por el total de estancias o por el total de días de exposición al factor de riesgo. Se expresa como el número de infecciones por 1000 días de exposición (6).

La recogida de datos se ha realizado utilizando la aplicación informática ENVIN-UCI desarrollada en la base de datos Access 97. El programa dispone de sistemas de seguridad que obligan a cumplimentar las variables definidas como básicas e impiden la introducción de datos ilógicos.

El nivel de significación estadística ha sido el 5% (p menor de 0,05)

Nuestros datos los hemos comparado con los del registro ENVIN a nivel nacional (7).

RESULTADOS

Se han estudiado 94  pacientes durante el año 2010, de los cuales el 56,26% son hombres. En cuanto a la enfermedad de base presentamos una distribución similar al a de nivel nacional con 28,72% de pacientes coronarios en comparación a 22,11% a nivel nacional.

El APACHE (13,66+/- 7,79), la mortalidad (11,70%) y la estancia media (8,02+/-9,02) similar a las cifras nacionales.

En nuestra UCI hay menos pacientes con sonda (75% frente al 65% en nuestro hospital) y pacientes ventilados (44% frente al 30% en nuestro hospital) que la media nacional por el mayor número de pacientes coronarios. Tenemos similares catéteres venosos centrales y depuración extrarenal.