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Enfermería en la educación sanitaria a pacientes portadores de catéter vesical

Enfermería en la educación sanitaria a pacientes portadores de catéter vesical

El uso del catéter vesical está muy extendido dentro y fuera del ámbito hospitalario. Actualmente, entre el 15 y el 25% de los pacientes atendidos en hospitales de agudos (y más del 85% de los atendidos en unidades de cuidados intensivos) son portadores de sonda urinaria. En concreto, el estudio EPINE-EPPS 2016 recoge que un 19,01% de los pacientes hospitalizados son portadores de catéter urinario.

Enfermería en la educación sanitaria a pacientes portadores de catéter vesical

AUTORES

Verónica Esperanza Arjona Prieto.

Máster en Enfermería Oftalmológica por la Universidad de Valladolid. Diplomada en Enfermería por la Universidad de Granada.

Sergio Ruiz de la Hermosa Carrascosa.

Máster en Enfermería Oftalmológica por la Universidad de Valladolid. Diplomado de Enfermería por la Universidad de Valencia.

Paula Lorente del Pozo.

Máster en Enfermería Oftalmológica por la Universidad de Valladolid. Diplomada en Enfermería por la Universidad de Valencia.

Carmen Peinado Antón.

Máster en Enfermería Oftalmológica por la Universidad de Valladolid. Diplomada en Enfermería por la Universidad de Granada.

Almudena Domínguez Pérez.

Experto en Enfermería en Urgencias y Emergencias por la Universidad de Madrid. Diplomada en Enfermería por la Universidad de La Laguna.

Raquel Domingo López.

Graduada en Enfermería por la E.U.E de Teruel, Universidad de Zaragoza.

RESUMEN

El catéter urinario está muy extendido en la población actual, lo cual nos lleva a ser conscientes de que los pacientes necesitan una información clara sobre qué es, en qué consiste, qué cuidados precisa, etc., en general una educación sanitaria adecuada, la cual ha de llevar a cabo el personal de Enfermería, que no sólo está entrenado para la colocación, retirada y cuidados del catéter, sino que es totalmente responsable de educar al paciente en sus cuidados básicos. La educación sanitaria es la clave de un correcto mantenimiento de este dispositivo externo.

Palabras clave: Enfermería, educación sanitaria, catéter vesical, cuidados, habilidades, confianza.

INTRODUCCIÓN

La prevalencia de pacientes con sonda urinaria en la comunidad se ha estimado entre el 0,02 y el 0,07%, porcentaje que aumenta al 4% en la población anciana asistida, hasta el 20% de internos en residencias geriátricas, siendo superior al 35% si existe incontinencia urinaria asociada.

Además, en nuestro país se estima una incidencia de 12 a 20 nuevos lesionados medulares por año, de los cuales el 15% lleva sonda urinaria 5 años después del accidente, y una proporción importante utiliza la cateterización intermitente. Por último, un porcentaje desconocido de pacientes ambulatorios son portadores transitorios de catéter vesical.

Los profesionales de Enfermería están entrenados para la colocación y mantenimiento del catéter urinario, pero también constituyen una pieza clave en la educación sanitaria de estos pacientes, que perciben su vida diaria alterada por causa de este dispositivo externo.

Además de las técnicas propias de la profesión, la enfermera es la encargada de proporcionar los conocimientos necesarios y solventar las dudas del paciente con respecto a este dispositivo. Un adiestramiento eficaz del paciente es básico para que adquiera los conocimientos y habilidades necesarios para un mantenimiento del catéter urinario adecuado. También se encargan de reconsiderar diariamente la posibilidad de prescindir de la sonda, contribuyendo así a una retirada precoz y oportuna de los catéteres vesicales.

A continuación aparecen los conceptos básicos para educar y conseguir una buena adaptación del paciente portador de catéter vesical:

INFORMACIÓN GENERAL SOBRE EL CATÉTER VESICAL ¿QUÉ ES Y PARA QUÉ SIRVE?

  • Definición:

El sondaje vesical consiste en la introducción de una sonda por la uretra hasta la vejiga, con el fin de establecer una vía de drenaje desde la vejiga al exterior. La sonda se conecta a una bolsa de colección donde irá recogiéndose la orina drenada.

  • Indicaciones y contraindicaciones:

La finalidad de esta técnica es una de las siguientes, dependiendo de cada caso:

  • Conseguir orina estéril para su posterior análisis en laboratorio.
  • Medir la cantidad de orina residual (cantidad de orina que permanece en la vejiga después de miccionar).
  • Vaciar la vejiga antes de una intervención que implica los órganos adyacentes, como el recto o la vagina, para prevenir una lesión inadvertida de la vejiga.
  • En casos de retención urinaria (estado en el que un individuo presenta un vaciamiento incompleto de la vejiga).
  • Realización de lavados vesicales.
  • Exploración de vías urinarias.
  • Realizar un balance de líquidos exhaustivo.
  • Paciente en estado de sedación profunda/ parálisis.
  • En casos de Grado III ó IV de úlceras de piel.

En las siguientes circunstancias estaría contraindicado colocar un catéter urinario:

  • Incontinencia urinaria (reeducación vesical como medida prioritaria, uso de colectores).
  • Prostatitis aguda.
  • Lesiones uretrales.
  • Traumatismos uretrales.

CARACTERÍSTICAS DE LA SONDA ¿CÓMO ES EL CATÉTER QUE SE INTRODUCE?

Los catéteres urinarios se fabrican con polímeros naturales o sintéticos, de los cuales los más utilizados son de látex siliconado (sondas blandas) o de silicona pura (sondas más rígidas). En los pacientes alérgicos al látex está indicada la sonda de silicona pura.

También existen sondas de poliuretano (sondas rígidas), utilizadas primordialmente en: sondaje intermitente así como en situaciones que requieren un sondaje aislado (administración de medicamentos, autosondajes, sondaje evacuador, exploraciones radiológicas, etc.)

Según el sexo/ edad/ tamaño del paciente se elige un calibre de sonda u otro; siempre se usa el catéter con menor calibre posible para el máximo confort del paciente.

También se tiene en cuenta la situación urológica (estrechez de la uretra, coágulos, etc.) Dependiendo de la finalidad del sondaje se elegirá un tipo u otro de sonda la sonda; también su extremo será de una forma u otra (punta roma, en pico, etc.).

CARACTERÍSTICAS DE LA BOLSA ¿CÓMO ES LA BOLSA CONECTADA AL CATÉTER?

Existen dos tipos de bolsa:

  • Bolsa de pierna: Capacidad de 750 ml. Recomendada durante el día. Se trata de una bolsa pequeña, que se coloca debajo de la ropa y se ajusta a la pierna mediante una cinta. De esta manera se pueden realizar las actividades de la vida diaria con total normalidad.
  • Bolsa de noche: Capacidad de 2000 ml. Recomendada para pacientes encamados y también para pacientes autónomos durante la noche, dada su mayor capacidad. La bolsa debe ir sujeta a la cama mediante un gancho para evitar tirones.

DURACIÓN DEL SONDAJE ¿CUÁNTO TIEMPO SE HA DE LLEVAR COLOCADA?

El tiempo que se tarda en colocar un catéter urinario es tan sólo de unos minutos. Depende de ciertos factores como la destreza del personal y la colaboración del paciente. El periodo durante el cual se ha de llevar el catéter depende de la finalidad del mismo, conforme a ello hay tres tipos:

  • Cateterismo intermitente: Sondaje que se realiza una media de 3 a 4 veces al día. La frecuencia del sondaje depende del volumen de orina diario y la capacidad de la vejiga. El facultativo junto con el personal de Enfermería determinan el número de sondajes necesarios. Está indicado en ciertas patologías vesicales (vejiga neurógena, disinergia vesico-esfinteriana).
  • Cateterismo temporal: Cateterismo que dura menos de 30 días. Está indicado ante determinadas intervenciones quirúrgicas, toma de muestras, exploración, control de diuresis, etc.
  • Cateterismo permanente: Cateterismo que se alarga en el tiempo más de 30 días. Está indicado en pacientes en situación grave o parálisis, control de incontinencia urinaria, cicatrización de las vías urinarias tras cirugías, etc.