Inicio > Ginecología y Obstetricia > Tratamiento no farmacológico de las náuseas y vómitos en el embarazo

Tratamiento no farmacológico de las náuseas y vómitos en el embarazo

Tratamiento no farmacológico de las náuseas y vómitos en el embarazo

Aproximadamente el 85% de las mujeres experimentan náuseas y vómitos durante el embarazo. En la mayoría de los casos las náuseas y los vómitos se resuelven después del primer trimestre del embarazo, pero en algunos casos estos síntomas se prolongan más afectando a la vida diaria de la embarazada. Una minoría de gestantes padece náuseas y vómitos continuados e incoercibles que en ocasiones requiere ingreso hospitalario para su tratamiento. Esto es denominado hiperémesis gravídica.

Autores:

– 1ª Autora responsable de la correspondencia del artículo: Lucia Simón-Melchor.

Profesión: Enfermera especialista en obstetricia y ginecología. Diplomada Universitaria en Enfermería. Diploma de Especialización en accidentes de tráfico. Título de experto en indicación, uso y autorización de medicamentos y productos sanitarios.

Lugar de trabajo: Enfermera especializada en obstetricia y ginecología (matrona) en el Hospital Comunitario de Norwich (Norwich, Reino Unido).

– 2ª Autora: María Luisa Jiménez-Sesma.

Profesión: Diplomada Universitaria en Enfermería. Máster Interuniversitario en Ciencias de la Enfermería. Experto en Gerontología Clínica y Social.

Lugar de trabajo: Enfermera de Atención Continuada del Centro de Atención Primaria de Sector Alcañiz (Alcañiz).

– 3ª Autor: Javier Solano-Castán.

Profesión: Licenciado en Farmacia. Experto en Ortopedia.

Lugar de trabajo: Farmacéutico de Loporzano. Huesca (España).

– 4ª Autora: Alba Simón-Melchor.

Profesión: Diplomada Universitaria en Enfermería. Diploma de Especialización en accidentes de tráfico. Título de experto en indicación, uso y autorización de medicamentos y productos sanitarios.

Lugar de trabajo: Enfermera de Atención Continuada del Centro de Atención Primaria de Calaceite (Alcañiz).

Resumen:

Las náuseas y vómitos en el embarazo forman un síndrome biopsicosocial complejo con una etiología multifactorial. Las principales causas son el aumento de hormonas durante el embarazo como la gonadotropina coriónica humana, los estrógenos, la progesterona y las hormonas tiroideas 1, 21,31. Algunos autores han indicado otros factores causantes cómo la hipoglucemia y las deficiencias de vitaminas B6, B12 y C12, 20,59. Además existen otros factores etiológicos cómo las alteraciones del aparato vestibular del oído, el helicobacter pylori y el desajuste musculo esquelético 15, 24, 53,54.

Las náuseas y vómitos también pueden ser provocadas por el sabor desagradable en la boca que sufren las mujeres embarazadas, en ocasiones metálico, amargo o agrio. Este molesto sabor en la boca es posiblemente debido al desequilibrio de minerales. Los movimientos bruscos y los ruidos intensos también pueden aumentar la intensidad de las náuseas 2,33. Recientemente se ha demostrado que puede existir cierta predisposición genética, una historia familiar de madres con náuseas y vómitos durante el embarazo predisponen a sus hijas a sufrir esta condición 18, 43.

Existen estudios que han demostrado que las aversiones alimentarias asociadas al embarazo pueden ser un mecanismo protector del feto esencialmente disuadiendo a las mujeres de consumir alimentos que contengan microorganismos patógenos y toxinas 7,22. Este artículo tiene como objetivo proporcionar a los profesionales sanitarios y a las mujeres información acerca del manejo no farmacológico de las náuseas y vómitos en el embarazo.

Palabras clave: náusea, hiperémesis gravídica, terapias complementarias, terapia por acupuntura, acupresión, jengibre.

Introducción:

Las náuseas y vómitos del embarazo aparecen durante un periodo corto de tiempo y ceden normalmente entre la semana 12 y 14 del embarazo 34. Algunas mujeres pueden padecer náuseas y vómitos incontrolables durante un periodo largo de la gestación, lo cual es denominado hiperémesis gravídica. Aunque existe una gran cantidad de trabajos de investigación y revisiones bibliográficas acerca de la hiperémesis gravídica, hay una escasez de literatura acerca de las náuseas y vómitos leves o moderados durante el embarazo 7. 21.

Las náuseas y vómitos no consisten sólo simplemente en la sensación de náuseas intercaladas con episodios de vómito, sino que forman un complejo síndrome biopsicosocial afectando de manera diferente a cada mujer embarazada (Ver Tabla 1: Características del síndrome biopsicosocial de náuseas y vómitos del embarazo) 53.

Emocionalmente las mujeres responden de maneras muy diferentes a las náuseas y vómitos. Algunas mujeres pueden sentir resentimiento o enfado, ya sea con ellas mismas o con su pareja u ocasionalmente con el bebé. Otras mujeres sienten preocupación acerca del bienestar del bebé, el riesgo de aborto espontáneo o su capacidad para ser una buena madre. En algunos casos, cuando la condición progresa a hiperémesis gravídica, la mujer puede estar tan gravemente afectada que la finalización del embarazo parece ser la única solución. La escala visual analógica se utiliza para conocer la opinión subjetiva de la madre acerca de las náuseas. Si bien existen otras escalas validadas específicas, estas tienen un enfoque principalmente médico analizando la frecuencia y duración de los síntomas, sin embargo no dan suficiente valor a las repercusiones psicoemocionales y sociales que provocan en la embarazada.

Para el buen manejo de las náuseas y los vómitos es esencial obtener una historia clínica completa que incluya los síntomas físicos, emocionales y factores que hacen que la condición mejore o empeore. Además se debe reflejar información sobre los momentos del día en los que los síntomas mejoran o se agravan. Es esencial considerar los demás síntomas que suelen acompañar a las náuseas y vómitos, tanto para realizar un diagnóstico diferencial como para la selección de estrategias apropiadas de autoayuda o de manejo médico. Los síntomas de acompañamiento pueden incluir estreñimiento, diarrea, flatulencia, distensión abdominal e incomodidad, hipersalivación y dolor de espalda 54.

Objetivos: El objetivo principal de este artículo es explorar una selección de terapias complementarias de uso común y remedios naturales para el manejo de las náuseas y vómitos en el embarazo, como el jengibre, la acupuntura, la acupresión, la estimulación del aparato vestibular y la hipnosis. El objetivo específico es formar a las matronas en estas terapias para que lo puedan transmitir en su ejercicio profesional.

Material y métodos: Se ha realizado una revisión bibliográfica en las bases de datos biomédicas Medline a través de PubMed, PubMed Clinical Queries, Trip Database y La Biblioteca de Cochrane Plus, desde Enero a Noviembre de 2016. Para la búsqueda se han empleado los Descriptores en Ciencias de la Salud (DeCS) náusea, hiperémesis gravídica y terapias complementarias y the Medical Subject Headings (MeSH) nausea, hyperemesis gravidarum and complementary therapies. Se han seleccionado los artículos originales, revisiones y guías de práctica clínica publicados entre 1993 y 2016, en los idiomas castellano, inglés y portugués.

Resultados: La mayoría de las mujeres reconocen que las náuseas y vómitos leves se consideran normales durante el embarazo, sin embargo las náuseas y vómitos incesantes son considerados patológicos. La consulta con el médico de cabecera suele ser valorada como insatisfactoria, ya que a las mujeres se les dice que es normal y se les recomiendan medicamentos antieméticos que reducen los episodios de vómito pero no siempre suprimen las náuseas.

El Colegio de Enfermería y Matronas de Reino Unido recomienda a las matronas asesorar sobre terapias complementarias y remedios naturales, sin embargo en algunas ocasiones las matronas no poseen una formación completa al respecto lo que puede provocar que se dé información inexacta a las mujeres 26,27,41,53,54. En algunos casos cuando las matronas tienen poco interés en la medicina alternativa, su actitud puede ser considerar las terapias complementarias como ineficaces o dirigir a las mujeres a buscar fuentes alternativas de información 16.

Jengibre: Existe una falsa creencia de que las galletas de jengibre alivian las náuseas y vómitos del embarazo, sin embargo en una galleta no hay suficiente jengibre cómo para lograr un efecto terapéutico real, y aunque el aumento de azúcar puede aliviar temporalmente los síntomas esto va seguido de una hipoglucemia que provoca el consecuente retorno de las náuseas.

Diversos estudios publicados recomiendan el uso de la raíz de jengibre cruda como antiemético 11. Otros estudios consultados utilizan la raíz del jengibre fresca o seca, en forma de cápsula, jarabe o té. Las dosis recomendadas varían desde 1 gramo al día en Reino Unido, 2 gramos en Estados Unidos, hasta 3 gramos en China. Las autoridades Danesas por el contrario desaconsejan por completo el uso terapéutico del jengibre durante el embarazo 30,58.

Estudios recientes confirman que el jengibre no disminuye el número de episodios de vómito, sin embargo una dosis por debajo de 1.5 gramos puede reducir las náuseas y no provocar efectos secundarios. El Instituto Nacional para la Excelencia en la Salud ha publicado evidencia científica acerca de la efectividad del jengibre como antiemético 39,57.

Un estudio realizado por Heitman confirmó que no existía evidencia de aumento del riesgo de malformaciones fetales cuando las mujeres usan jengibre durante un período relativamente corto de tiempo 29. Por otro lado, otros estudios describen efectos secundarios del jengibre como acidez estomacal o somnolencia, y en algunos casos, las náuseas y los vómitos son exacerbados en lugar de aliviados 55.

Es importante conocer si la mujer embarazada está tomando medicación crónica como anticoagulantes ya que se sabe que el jengibre tiene efectos anticoagulantes significativos y no debe tomarse simultáneamente con anticoagulantes, ni con fármacos con efectos similares como la aspirina 47,58. Por todo esto se ha aconsejado realizar un estudio de los factores de la coagulación en mujeres que toman cantidades grandes de jengibre durante más de 3 semanas 57. El jengibre también tiene un efecto hipoglucémico y debe ser evitado por las mujeres con diabetes mellitus insulino-dependiente 28.

Como con todos los remedios a base de fitoterapia es esencial identificar sus contraindicaciones y precauciones antes de aconsejarlo a las embarazadas 57. Una alternativa al jengibre es la menta tomada en forma de té. La hierbabuena también ha demostrado ser eficaz para aliviar las náuseas y los vómitos del embarazo, pero debe ser evitado por las personas con enfermedades cardiovasculares por ser un estimulante cardíaco 42.

Estimulación del punto de acupuntura Neiguan y acupresión: Las pulseras de acupuntura son conocidas por su utilidad para aliviar las náuseas y los vómitos del embarazo así como aliviar síntomas de otras enfermedades 6,17,36,48. La acupuntura se basa en el principio de los canales internos que llevan la energía alrededor del cuerpo conectando una parte del cuerpo a otra.

Uno de los puntos de acupuntura es el denominado punto de Neiguan localizado en la parte interna de la muñeca. Los acupuntores insertan agujas en este y otros puntos logrando reducir las náuseas y los vómitos 8. También existen pulseras que estimulan este punto que las mujeres pueden usarlas fácilmente y no están contraindicadas con otros tratamientos.

Estudios específicos acerca del uso de la acupuntura con punta de Neiguan (con agujas) o acupresión (con presión de pulgar o pulseras) han mostrado tener resultados positivos para tratar las náuseas y vómitos del embarazo o incluso para las náuseas post-cesárea 3, 6, 40, 60. La acupresión ha demostrado ser útil para tratar la hiperémesis gravídica. Sin embargo, los autores Puangsricharern y Mahasukhon no encontraron evidencia que justificara que la acupresión auricular (basada en la utilización de pellets magnetizados en el oído) fuera eficaz para la hiperémesis gravídica 45.

Estimulación del aparato vestibular en el oído: La relación neuroanatómica entre el centro de vómito en el cerebro y el mecanismo de equilibrio en el oído puede verse afectada negativamente por los desequilibrios gravitatorios causados ​​por cambios posturales. El posicionamiento inapropiado de la cabeza y el cuello en relación con el cuerpo puede conducir a una sobre estimulación de las dendritas en las neuronas vestibulares, con impulsos transmitidos por el nervio vestíbulo-coclear hasta la médula. La estimulación exagerada del aparato vestibular debido a un movimiento excesivo puede provocar náuseas y vómitos. También es posible que las lesiones o traumatismos anteriores del cuello o de la columna vertebral, junto con los efectos de relajación de la progesterona y la relaxina, puedan conducir a una mayor susceptibilidad a la sobre estimulación del aparato vestibular. Las náuseas y los vómitos del embarazo exacerbados por el movimiento son particularmente problemáticos para las mujeres que las sufren durante los viajes 51.

Los tratamientos que implican la estimulación del aparato vestibular parecen ser particularmente exitosos para las mujeres cuyas náuseas y vómitos son exacerbados por el movimiento 37. Un estudio demostró que la electroestimulación del aparato vestibular realizada a 26 mujeres con hiperémesis gravídica consiguió una gran mejoría en el 89% de los casos 23. La estimulación auditiva del aparato vestibular utilizando una gama de frecuencias específicas, pulsos y tonos, tiene como objetivo interceptar los impulsos entre el intestino y el cerebro y ha demostrado tener un porcentaje de éxito del 90% 37.

Hipnosis: La hipnosis o hipnoterapia es un método muy popular entre las mujeres embarazadas como un medio de preparación para el parto. Sin embargo, la hipnosis también puede ser muy útil durante el embarazo para el manejo de las náuseas y vómitos ya que estos tienen un componente psicológico. El estrés y la ansiedad pueden tener un gran impacto en el progreso y en los resultados del embarazo. Las mujeres con embarazos no planificados, con condiciones socioeconómicas pobres o con pobre apoyo social son más propensas a sufrir náuseas y vómitos graves o prolongados 10,51.

De manera similar, un estudio canadiense realizado por Kramer evidenció que la depresión, el apoyo social y el estatus laboral afectaban a la gravedad de las náuseas y vómitos del embarazo 32. En este estudio se demostró que fumar parecía ser un mecanismo de protección. Aunque no se han llevado a cabo ensayos controlados aleatorios a gran escala que investiguen la eficacia de la hipnoterapia para las náuseas y vómitos del embarazo, existen resultados prometedores para tratamientos individualizados que tratan los determinantes psicosociales los cuales son un factor de riesgo modificable para sufrir nauseas y vómitos 5,37

Discusión: La necesidad de continuar con la vida cotidiana y la preocupación por los posibles efectos nocivos de la medicación antiemética a menudo llevan a las mujeres embarazadas a explorar la amplia gama de terapias complementarias y remedios naturales para controlar las náuseas y vómitos que sufren durante el embarazo. Por ello sería recomendable que las matronas estén informadas acerca del uso de estas terapias complementarias y remedios naturales para así poder aconsejar a las mujeres de manera precisa y exhaustiva.

Conclusiones: La náusea y el vómito del embarazo es un trastorno fisiológico común que afecta a un gran número de mujeres embarazadas. Es importante que tanto las matronas cómo los demás profesionales sanitarios no ignoren o minusvaloren esta condición, sino que apoyen a la madre a través del estudio de sus síntomas y la atención a sus necesidades psicosociales.

Las matronas deben dar consejos integrales sobre cómo manejar esta condición, evitando el tratamiento farmacológico con antieméticos a menos que la mujer esté vomitando con frecuencia o haya progresado a la hiperémesis gravídica. Es también importante recalcar que las matronas se encuentran en una situación idónea para aconsejar a las mujeres acerca de las terapias complementarias como el jengibre, la acupuntura, la acupresión, la estimulación del aparato vestibular y la hipnosis.